Solo escucho el soplar del viento. El pastizal se dejaba llevar por la corriente del aire igual que el agua en la playa. Siempre despierto aquí, sola y sin nadie a mi lado. Paso el rato tratando de no pensar en nada pues me gusta la paz y no la quiero dejar.

Después ya no lo soporte y entonces decido levantarme. Lo detesto pues mis cacos siempre encuentran este lugar bastante cómodo. Cuando lo hago jamás se me ocurre levantarme para volar, encuentro placida la idea de solo caminar por el gran campo abierto. No pasa mucho para que el ambiente a mi alrededor cambie. De un momento a otro me encuentro en el medio de un hermoso y perfecto amanecer, tan solo para adentrarme en un profundo delicado anochecer boreal.

El cielo esta repletó de nuevas e increíbles estrellas que no conozco. El cielo parece más un mural entintado con los colores más sensibles y nobles que conozco. Toda esa belleza resalta aún más con el brillar de las estrellas, cada una es tan fuerte y resplandeciente como la luna en sí.

No alcanza a apreciar el firmamento, no me es posible. Un amanecer naranja empieza a tomar el lugar de la oscuridad, pero jamás es el sol, no, son las estrellas fugases más fuertes y potentes que pudieran existir. Una lluvia atiborra por completo al cielo, individualmente tienen una esplendidez sumamente fuerte, juntas estas ráfagas siempre son capaces de cumplir con la labor de un solo gigante fogoso.

-Increíble-

-¡INCREÍBLE!-

Justo a tiempo, siempre salgo de mi asombro cuando esa voz grita en conmoción.

-hm-

Es una familia, una extensa y muy extraña familia de creaturas de las que jamás había visto en mi vida.

-Mira mama-

Una docena de niños rodea a quien es la única criatura mayor de todos ellos y también por lo que escucho de ellos, su madre.

-¡JAJAJAJA!-

Cuando los veo ahí, felices, un sentimiento de nostalgia invade mi pecho cuando entonces yo misma recuerdo mis propios buenos momentos de la infancia. Yo disfrutando con mi madre, mi padre y mi. . . yo y. . . y mi. . . hermana.

-¿hm?- aquella criaturita, la más apegada a su madre voltea y mira a mi dirección –tú-

-hm. . .-

-Diminuta-

-que. . .-

-¡DIMINUTA!-

-¡AHH!-

Retrocedo debido al miedo. Mi costado choca con un frio y plano muro plata.

-¡¿Qué?!-

No me deja de sorprender, todo vuelve a cambiar otra vez.

-¡¿Dónde estoy?!-

-¡Sabes muy bien lo que debes hacer!-

Alguien justo por encima de mí le grita a algún otro. Yo volteo y desde ese punto bajo veo a seres bizarros de dos pies discutir por algún asunto del cual no creo ser experta. . . Amor.

-¿Por qué?. . . ¡¿POR QUÉ?! ¡DIME PORQUE!-

Creo fue alguna clase de ser femenino quien le gritaba a otro, este siendo un ser masculino.

-hm. . .– trato de tomar mejor ángulo pero. . .

( ( (¡SLAAAP!) ) )

La criatura masculina pronto le respondió a la femenina con un fuerte bofetón en el rostro. Fue un golpe tan fuerte, que no pude mirar sino antes verme forzada a cubrir mis oídos y colocarme junto al muro de nuevo debido a la turbiedad del potente eco.

-Hm-

-Ah. . .-

Eso había sido demasiado. Volteó y entonces veo que a poca distancia de mí se encuentran el enorme grupo de niños de hace apenas unos minutos. No lo podía creer, tal escena pasando por encima de nosotros, justo en frente de todos ellos estaban realizando todo eso aquellos dos adultos.

-mamá, papá. . .hm- uno de ellos mencionó

Mi piel se puso pálida, esto simplemente se sentía mal.

-por. . .por, ¿Por qué lo haces?- escuche a la madre decir débilmente -¿Por qué?-

El padre solo la miro con indignación, ¿Cómo si fuera una imprudencia o alguna clase de desestimación el hablarle de esa manera? Cielos.

-¡Hm!- volteó indignado

Ella decidió presionar -¡DIME!-

Ella lo volvió a desafiar, entonces, él de nueva cuenta. . .

( ( (¡POOOW!) ) )

Sorprendente, no fue lo que esperaba, superó lo que tenía en mente.

La madre de los niños en esta ocasión no se pudo mantener en sus pies, termino en el suelo a un metro de distancia del alcance de su marido, con la cabeza en el suelo completamente humillada en frente de sus hijos quienes solo abrieron los ojos en total y completó asombro.

-oh, por mis padres- esperen -¿Qué acabo de decir?-

Me dije a mi misma "¿Por qué de un momento a otro me siento así por criaturas que no conozco?" esa no era quien era yo. De ningún modo podía sentir alguna clase de compasión por esas criaturas. . .necesitaba saber dónde era que me encontraba. Observe a mi alrededor, ese lugar era alguna clase de palacio, más abierto y claro que el mío.

-¿Por qué?- escuche de nuevo

No pude evitar ignorar las palabras de la matriarca de ese lugar desapercibidas, sus voces eran fuertes y claras como la mía o la del resto de mi familia.

Su mirado no se mostró contento con la insistencia de su esposa -¡Hm, basta ya!-

La señora comenzó a ponerse de pie, su mirada aun en el suelo, ella comenzó a repetir una y otra vez la misma pregunta.

-¡¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué?!-

-mamá. . .-

Los niños seguían mirando bastante asustados.

-ah. . .- yo solo pude pensar en algo –Déjalo ya tonta, dale un descanso-

No por qué, pero tuve el presentimiento de que alguien a mi lado me estaba observando en ese momento.

-¡DIME ¿POR QUÉ ME MENTISTE?! ¡DIMELO! ¡¿POR QUÉ ME TRAICIONAS?!-

Los niños comenzaban a liberar sus lágrimas.

-Basta- dijo el señor

El marido camino hacia donde su esposa estaba sometida en tristeza. Se detuvo cuando estaba justo a su costado, su mirada llena de repudio y enojo.

-¡Tú ya no me importas!-

( ( (¡POOOW!) ) )

-¡Nada!-

( ( (¡SLAAAP!) ) )

-¡Por, eso!-

( ( (¡POOOW!) ) )

No lo negaré, fui susceptible a ese terrible y horrible momento a abuso. No encontré la fuerza para mirar.

( ( (¡SLAAAP!) ) )

Más mi impresión no había llegado a su límite, cuando me di cuenta de que los niños estaban viendo sin parpadear las acciones que estaban tomando lugar. Yo solo pude negar con la cabeza.

-no. . .-

( ( (¡POOOW!) ) )

-no lo hagan. . .-

-( ( (¡SLAAAP!) ) )

-no miren-

( ( (¡PPOOOOOOOWW!) ) )

Los golpes pararon.

Hubo un gran silencio inquietante en el cuarto. Los niños, los adultos o yo no nos atrevimos a decir algo en lo absoluto. Había sido una completa locura que había excedido los límites de la estabilidad. Dolor físico y dolor mental son cosas que solo hasta mis puntos más extremos acudo. . . cielos, ¿Qué era lo que me estaba pasando? No me estaba sitiando como yo misma.

-hm- me rasque la sien de la frente, solo quería que acabara todo

-mamá- dijo alguien

-¿hm?-

-¿mamá?-

Percibí una mala señal cuando uno de los pequeños puso los ojos más profundos y sorprendidos que había visto jamás en toda mi existencia. Ese asombro me dio una sensación de frio en la espina dorsal como nunca. Volteé hacia donde los adultos y efectivamente ahí estaba. La madre en el suelo, el padre viéndole más que una insignificante desgracia de criatura a sus pies, reveló que de entre sus prendas de vestir ella poseía un brillante y punzante cristal de oxidana verde.

-No tengo derecho- dijo en lugar de volver a preguntar por una respuesta que era más que obvia para todos –No lo tengo. . .-

-Hm, bien dicho-

No dudo que esas palabras le hayan dado satisfacción, después de todo él era el ser superior de la situación.

-no- dije yo

Tonto fue el creer que todo había acabado ahí, él decidió voltearse y darle la espalda a su esposa. La sonrisa que le vi poner me hizo entender que él creía ya tener la victoria en la bolsa. Su esposa tan solo lo volteó a ver, con furia y deseos de muerte reflejados en sus ojos, la oportunidad se le había hecho ya presente.

-. . .no-

Tan pronto ella se levantó, yo me volteé rápido hacia los niños y los cubrí con toda la extremidad que poseía mi cuerpo.

( (¡FLEEESSH!) )

-¡No miren!- yo les dije cerrando los ojos

Sentí el rose de una delicada extremidad tocar mi mentón de una manera suave condolerte.

-SSSHH, tranquila Ya todo se arruino- me murmuro al oído, tonta-

-¡AHH!-

Me aparte de su alcance tan pronto escuche sus temibles y frías.

-ah-

Pensé en encontrarme con una terrible y singular figura como en mi caminata del atardecer, pero mis ojos fueron recibidos por un escenario completamente diferente al de antes. Ya no me encontraba en un palacio de ninguna tipo. Estaba en el medio del exterior, el viento soplaba con fuerza y las tinieblas eran dueñas del lugar. Tomaría poco para darme cuenta de la compañía que tenía.

-todos están molestos-

-¡Hm!-

Volteé y ahí estaban de nueva cuenta ellos, los niños de hace un momento.

-Oh, cielos niños-

Me corazón se llenó de alivio, ellos estaban sanos y a salvo. Me volteé por completo y por pura necesidad me incliné hacia ellos. La verdad no sé qué se adueñó de mí, pero una necesidad inocente me obligaba a darles un cariño a esos niños, simplemente sucedió que me les acerque y con mis extremidades emplumadas yo los abrasé.

-¿hm?-

No sentí nada.

-¡ah!-

Mi inocencia solo me trajo terror y también desilusión. Los pobres no podían tocarme ni yo a ellos.

-Pero. . .-

Mi ser no pudo interactuar con ellos en lo más mínimo, por eso mi abrazo no fue más que un espejismo sencillo de ignorar. Comprensible ya que lo pienso, pero en aquel momento solo pude retirarme a rastras por el suelo debido a miedo que me provocó tal suceso.

.no, no, no puede ser, yo, yo. . .yo-

-Estamos todos acabados- dijo una voz a mis espaldas –todos-

-¿Ah?-

Volteé y ahí estaba dándome la espalda y a los demás una niña. No cualquiera, por aquella voz que poseía, mi mente se aterró aún más, era la misma que me había gritado y también. . . ¿acariciado y dicho aquellas palabras?

-Papa traía la luz, pero él ya no está aquí- dijo en un tono lúgubre –Ahora, Todos odian a mamá y nadie la va a querer jamás-

-¿Qué?- yo no entendía, pero aun a pesar de que no me oían pregunté

-Por eso mismo ya nadie tampoco nos querrán, todos nos van a odiar-

Sus palabras tuvieron un fuerte efecto en los otros. Yo solo los miré y aprecié su aspecto.

-¿Qué?. . . ¿Qué son?-

Nunca había visto algo así. Eran bípedos como un minotauro, pero de piel sencilla y limpia de cualquier excesivo cabello en la piel como yo o cualquier otro poni. Su piel me recordaba más a las reptiles o anfibios de los pantanos por lo brillante que eran los multicolores que tenía su al igual que como sus ojos, algunos más brillantes que otros. Su vestimenta les cubría medio cuerpo, del centro hacia abajo, igual que como algunas tribus que conozco de la tierra cebra, claro que estos usaban algunos cuantos adornos de oro, me recordaban a. . .

-¡Hm!- uno de ellos de nueva cuenta atravesó mi cuerpo igual que como lo haría un fantasma -¡Cielos!-

-No, no es cierto, ¿Cómo puedes decir eso?- le dijo de manera desafiante

-Sí, si lo es- le respondió sin dignarle una mirada

-¡No!-

El jovencito no pareció aceptar las palabras de aquella otra figura femenina, sus lágrimas revelaban una frustración enorme ante la situación y dudo mucho que el pesimismo le deprimiera, no, parecía más como si el terrible sabor de boca le causara enfado.

-¡No es verdad!-

Se le aproximó a la chiquilla queriendo tomarla por la espalda y forzarla a mirarle de frente. Cuando la jovencita dio la vuelta, sus alargados cabellos bloqueando el contacto visual, ella a rápida velocidad le arrojó un fuerte golpe a la mejilla de su hermano inmediatamente seguido de un desagradable rasguño en la otra mejilla.

-¡Hm!- todos se sorprendieron

-¡AAAH!-

El niño se apartó instantáneamente pero su hermana fue quien entonces se le aproximó. Su terrible furia fue desatada y el pobre pequeño seria víctima de ella.

¡SLASH!

¡POW!

SLASH!

¡POW!

¡SLASH!

El chico no pudo evitar ninguna de las acciones de su hermana, perdió el equilibrio y desde ahí ella continuó con el castigo. Los demás quisieron intervenir gritando por el fin de las acciones de ella o en asistencia para su hermano, pero todos esos intentos no resultaron ser una buena idea. Tan pronto como los demás pusieron una mano sobe ella su hermana no dudó en responder de la misma manera con ellos.

-¡AH!-

-OYE. . ¡HM!-

-¡AAH!-

Yo me llevé las manos a la boca, viendo tal despliegue de salvajismo en un infante fue demasiada impresión para mí, jamás lo imaginaria si sobre todo se trataba de una simple cría. Tan pronto alguien intentaba alejarse, ella los tomaba y a la fuerza los traía de vuelta para recibir más castigo. A sus hermanas les jalaba el pelo para después darles en la cara con rasguños o golpes en los oídos. Sus hermanos fueron víctimas de rasguños en las manos y golpes directos al pecho. No importaba su tamaño, cada golpe dado sonaba tan fuerte como los de un adulto grande y maduro.

-Por mis padres. . .- yo dije

La conmoción ya no duraría mucho. No muy lejos los pasos de los adultos se hacían escuchar, al fin alguien comprensible con quienes se podría razonar.

-¡Deténganse!-

Otra gran sorpresa que recibí, fue el ver a criaturas de aun más compleja figura que las de los niños. De diferentes tamos y estaturas una criaturas de colorida igual que de extraña apariencia llegaron a la escena. Si no hubiera sabido mejor, en ese entonces los hubiera confundido con otras criaturas de la discordia, pero por los visto con los niños asumí que eran de diferente clase a la de los sirvientes del caos.

-¡Dijimos que se detengan!-

Ellos detuvieron la pelea. La joven aun intentó luchar pero los adultos era muchos más. La joven intentó luchar pero fue detenida y sometida. Sus hermanos fueron apartados y llevado por otro adulto a otro lugar.

-¿hm?-

Pronto todo se volvió oscuridad profunda en la cual yo me vi rodeada. Supuse que eso significaría que terminaría en otra parte.

-Tu crimen, no pasara de largo- dijo una voz

-¿Qué?-

-No disculpo a tu esposo por su traición a tu matrimonió, la deslealtad en si es terrible y deshonrosa por su propia cuenta-

-¿Qué dicen?-

-Pero tampoco me puedo permitir pasar por alto acción respuesta ante su traición a ti, lamentablemente él era necesario para nosotros-

Aquellas palabras tenían un cierto sentido para mí, tal vez, tenía que ver con aquel abuso que vi hace poco. Entonces me di cuenta, yo estaba mirando hacia lado equivocado.

-ah- volteé

Ahí estaba ella, en el centro de una fuerte luz blanca, la madre de los niños.

-valla. . .- mi impresión no dejaba un momento tranquila

Ella estaba de rodillas, la mirada baja, sus prendas rasgadas y cadenas sujetándole al piso. No me tomó mucho entender que estaba en el medio de un juicio, mucho menos cuando vi las sombras de imponentes figuras delante y por encima de mí.

-Lo, lo. . .lo sé- dijo la enjuiciada por primera vez

La figura principal asintió con la cabeza.

-Sin él, los cometas ya no volaran, y en la oscuridad nuestra tierra no puede vivir-

Comprendí que lo primero que vi cuando llegue a estos extraños parajes había sido de verdad un día de campo familiar.

-Y Ninguno de nosotros puede hacer mucho para remplazarlo, poca es nuestra fuerza para generar tanta y poderosa luz para todos, a menos no sin dejar desatendidas nuestra otra obligación principal-

-Ni mencionar nuestro trabajo como gobernantes- dijo una figura que estaba a su lado

-Oh, él hecho de que sigue siendo un crimen asesinar a otra criatura viva de nuestra altura así como así-

Ella solo se inclinó más, su frente casi tocaba el suelo.

-Pudiste habernos dicho algo, pudiste habernos clamado por la ayuda y pudiste haberlo detenido, sin la necesidad de matarlo- comentó otro más

-Pero no hiciste eso- dijo uno último

-Lo. . .sé, pero. . . la furia se apoderó de mí, yo solo. . . yo solo-

-De habernos conjurado, cualquiera de Nosotros te hubiéramos protegido-

La señora levantó la mirada y su expresión parecía estar llena de completo asombro.

-De nuevo. No te culpamos por el dolor que sentiste, pero por tus acciones que ahora deben tener un castigo y una solución para esta terrible situación-

-Hemos pensado que, tal vez disponiendo de tu libertad y de tus hijos, sería una buena solución-

Ella los miró con terror en los ojos.

-Pero, pero, pero ellos, ellos. . .- las palabras no podían salir de su garganta

-Ellos son solo niños, lo sabemos. . .-

-Pero tu esposo no transmitió el conocimiento de sus responsabilidades o pensó en nadie para un posible remplazó antes de morir, así que sus poderes no tendrán remplazó hasta quien sabe cuándo y siendo aún unos niños, todos ellos siguen siendo sus hijos-

-Tal vez alguno de ellos pueda tomar el cargo de su padre-

-¡Pero jamás han utilizado sus podres, solo juegan y se divierten aprendiendo cuál sea que es su destino, no pueden simplemente forzarlos!-

-Temó que no tienen otra opción-

-¡Pero no son tan fuertes aun!-

-Ya lo hablamos, cada uno de nosotros se turnara para vigilar sus acciones, tú por el otro lado dejaras todos tus caros y les apoyaras con tus propias fuerzas-

-¿Ya pensaron que pasaría si acaso ellos no pueden?-

Los jueces no dijeron nada, solo reinó el silenció.

-hm. . . No, no por favor, no me digan que. . . ustedes serían capaces de hacerles eso. . .-

El sujeto que estaba sentado en el medio decidió inhalar, escuché la fuerza llegar a sus pulmones solo para después sentir una fuerte corriente siendo exhalada de él, tan fuerte que mi melena casi quedo hecha un desastre.

-Considéralo, ellos tienen dos opciones- dijo él -Pueden pasar toda una vida entera en unión con el mundo, O, puedan pasar. . .-

El sujeto a la derecha terminó la oración del otro a su izquierda.

-Una vida entera luchando por rescatar el honor familiar que sus padres les arrebataron por culpa del desamor y odio-

-Solo hasta que alguien pueda remplazar los dones de tu difunto esposo- dijo otro de manera más tranquila

-Podríamos tomar el camino fácil, sabes que podemos ponerle un fin a este terrible mal entendido. . .-

-Y a sus consecuencias- volvió a interrumpir el sujeto abrupto

-pero- retomó el sujeto del medio -Creo que ya hemos tenido suficientes perdidas-

-Dinos por favor. . . ¿Qué decides?-

-ellos, ellos. . . ellos, no tendrán infancia- ella respondió -Niños forzados a entrar en la vida dura de los dioses antes de tiempo-

Yo alcé mi ceja en ese momento. ¿Acaso ella había dicho. . .?

-Por favor. . . considéralo-

-Antes de que se nos cabe la paciencia-

Intenté acercarme para verles bien la cara a todos esos sujetos, la pobre hembra era casi idéntica que sus crías pero, esos otros sujetos eran totalmente diferentes por lo que sus sombras me permitan distinguir. Mientras me acercaba la pobre parecía estar en una pelea interna mientras tomaba una decisión.

-Yo. . .yo. . . yo. . . yo. . .-

Estaba cerca de poderles mirar bien, cuando otra vez todo cambió.

-¿ah?-

La oscuridad que antes rodeaba a todas las cosas desapareció y en su lugar un par de cometas iluminaron los cielos.

-pero. . . ¿Qué?-

Era unos cuantos claro, a diferencia de los que había visto antes estos no eran tantos, ni tan fuertes o tan grandes como los anteriormente.

-¿Qué pasa aquí?- dije yo

. . .

Terminará en el siguiente capítulo, debido a lo prolongado que se tornó esto.