Owari no seraph NO me pertenece.
Shinya es bonito.
Muy muuuuuy
Aunque claro, también era un pesado idiota que le jodia y se burlaba de él cada que podía, Shinya decía que lo molestaba pero con cariño, igual, así había sido siempre más o menos desde que lo conoció. Una puta molestia, una puta molestia de ojos bonitos, y eso lo hacía más llevadero piensa Guren.
A Guren le había costado trabajo admitirlo, porque 'bonito' no era el adjetivo con el que hubiera querido describir a Shinya, pero le quedaba. Shinya tenía el cabello largo y recto, y era muy suave y sedoso, también tenía una nariz bonita y respingada con un par de pómulos sobre salientes que le hacían ver atractivo, más de lo que debería probablemente, y bueno, sus ojos, Shinya tenía los ojos más bonitos que Guren había visto. Azules, pero un azul que parecía ser único
Y Shinya podía ser todo lo molesto y desesperante del mundo, (eso, en palabras de Guren, claro) pero era la persona molesta y desesperante en la que Guren más confiaba y eso en sí, ya significaba mucho para Shinya.
Guren ni siquiera recuerda porque se habían hecho amigos en primer lugar.
Solo sabía le daba gusto que así fuera, y lo que tener cerca su molesta presencia significaba, porque así era como ellos dos funcionaban, y si Shinya molesta a Guren, Guren molesta a Shinya también.
-Y... ¿Cómo se ve?- preguntó con una sonrisita el peli blanco mientras se levantaba la camisa. Se había tatuado un tigre blanco en el costado derecho. Y Guren podía agregar a la lista que Shinya también era increíblemente sexy
Más sin embargo lo único que hizo fue suspirar y negar con la cabeza
-Es horroroso al igual que tú, y toda tu personalidad- decía el peli negro mientras terminaba por quitarle la camisa a Shinya y le atraía a él sujetándole de la cintura. Shinya murmuraba entre leves risitas que era un grosero
Porque Shinya es bonito y Guren lo sabía perfectamente, aunque no lo admitiera en voz alta y en vez de eso dijera una mentira.
Tenia INMENSAS ganas de escribir GureShin y pues, aquí estoy
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