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Ƹ̴Ӂ̴Ʒ
EL CAMINO A CASA
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—¿Por qué hacemos esto?
—Es... —Sasha se llevó una papa a la boca mientras trataba de contestar la pregunta de su pequeña hija— simplemente una costumbre —balbuceó con la boca llena—. Pregúntale a Armin.
El chico rubio se sentó en la banca de enfrente, lejos de ellas y el toldo.
Jean y Marco ya habían levantado la vieja carpa ahora unida a otros retazos de tela, los costados quedaban abiertos para que el aire libre se filtrara dentro. Ambos descansaban sobre el pasto seco de la colina, por los gestos y expresiones de Jean de seguro hablaban sobre algo importante.
Pronto vendría Reiner junto con sus hermanos.
Armin giró los ojos en dirección al camino que conducía hasta la colina, ahí estaba, con un vestido blanco y chaqueta negra. Mikasa caminaba lentamente. Armin oprimió el libro entre las manos dejando que este se cerrará, había olvidado poner un marcapasos, le costaría trabajo recordar el capítulo y no valía la pena recordarlo hasta mañana.
Anochecía.
Se quitó los anteojos guardándolos en la bolsita de tela azul. Repasó mentalmente no haber olvidado nada para la cena de esa noche, tenían los fuegos artificiales guardados en una caja bajo llave, lejos de los niños de Connie y las camas de dormir apiladas en un rincón de la carpa. Hoy prometía ser una noche estrellada y fría, Marco junto con Jean terminaba de arreglar su pequeña charla y si no estaba equivocado se levantarían en este instante para encaminarse hacia el centro de la colina donde Sasha y la niña discutían sobre la posesión de una fuente de bocadillos picados.
Eso mismo paso.
Satisfecho, Armin estiró los brazos luego de mantenerlos en la misma posición durante horas.
—Armin.
La pelinegra llegó hasta ahí con una pila de cobertores en las manos. Sus ojos lejanos lo observaron con detenimiento, sonrió cuando le fue devuelto el saludo. Abajo otra tiendas parecidas eran iluminadas por faroles de aceite colgados en las entradas y poco a poco a medida que terminaban de ocultarse los últimos rayos de sol el lugar quedó iluminado por las pequeñas tiendas y cientos de luciérnagas que migrarían antes del amanecer.
—Asaremos castañas en tanto Reiner vuelve con la carga.
Jean dejó de sonreír bobamente cuando el viejo y achacoso perro de Marco salió corriendo con la comida de Sasha.
—Es el plan perfecto para alguien perfecto. No para ti Armin —trataba de lucirse con el celular en la mano—. Llamaré a Reiner y a la emo, tardan demasiado.
—No empezaremos hasta las diez de la noche, Jean.
—Connie dijo que vendría luego del trabajo —se entrometió Sasha.
—Desde que le creció el pelo…
—Asaremos castañas —lo interrumpió Mikasa golpeando los cobertores que traía sobre la mesa alquilada para la ocasión siempre lo hemos hecho así.
—De acuerdo —Jean se prestó solicito con ellla—. D-déjame ayudarte.
Marco los vio alejarse y sonrió tristemente.
—¿Se lo dirás esta noche? —Armin se sentó junto a él.
—El que.
—Has estado esperando años para confesarle tus sentimientos a Jean.
—Creo que esperaré otro año —contestó—. No es como si fuéramos a separarnos...
—Jean irá a trabajar lejos de aquí, continua creyendo que no logrará nada en este pequeño pueblo de turistas —se acercaron a la fogata—. Puedo decirte que este es nuestro último año juntos.
Marco buscó la bolsa de castañas y abrió una para pasársela a Armin.
—¿Dónde quedó el "estaremos esperándote"? —dijo— Jean siempre dice que va a largarse pero Mikasa no lo deja, para ella es sagrado que todos nos encontremos en este mismo sitio cada año.
—A veces es difícil hacer lo correcto —el rubio tardó un rato en contestar—. Yo encontré un buen lugar en la universidad de Sthones
Marco se quedó callado sintiendo el crepitar del fuego con más fuerza que nunca.
—Sus sueños comparados con nuestra promesa son más grandes.
Normalmente nunca lo vio tan molesto, normalmente Marco era el mediador y el santo de todos ellos.
—¿Pelea de pareja?
Un rubio fornido entró en la carpa junto con un moreno alto acompañado por una rubia de ojos serios.
—Asamos castañas —excusó Armin.
Reiner fue hasta el rincón para darle a Sasha las cestas. Annie prefirió tomar asiento cerca de Armin y calentarse las manos.
En ese momento entraron Jean y Mikasa con el resto de las cosas y la caja de fuegos artificiales. Jean se entrometió entre Bertholdt para quitarle dos tiras de castañas y entregarle una a la pelinegra.
Marco tiró las suyas dentro del asador, enojado.
—Saldré un momento.
Afuera, silbó llamando al perro, lo hizo otra vez y pudo distinguir su figura corriendo hacia él.
No venía solo, movía la cola de un lado a otro ladrando quedamente.
—¿Que sucede? —se inclinó para acariciarle el lomo—. Guarda silencio.
Hizo caso omiso poniéndose frente a su dueño sin dejar de gruñir y ladrar.
Marco se apoyó sobre la cerca que conducía el oscuro camino.
Un hombre venía. Era más bajo que él, con un sobretodo negro que resaltaba su piel blanca. Los ojos rasgados del hombre y su expresión estoica lo sorprendieron.
—Marco —Armin salió de la carpa— será mejor que...¿Marco?
—Alguien viene.
—Es Connie.
Negó.
—No. Son dos. No me di cuenta antes.
Armin miró hacia el camino, vio al hombre y a otro detrás caminando lentamente. El último llevaba un abrigo café y parecía nervioso. El hombre de negro salió de las sombras poniéndose de pie y los vio fijamente. Primero al perro, luego a Marco y a él.
Parecía reconocerlos pero ellos no. Les dio la espalda para atraer a la segunda persona hacia la luz.
Su brazo se estiró tenía las manos enguantadas y sus dedos se cerraron en torno a la desnuda mano de su acompañante. Le susurró algo con cariño y este respondió afirmativamente.
En ese momento Armin sintió como todo el aire le jugaba una mala pasada y huía de sus pulmones. Abrió los ojos sorprendido por aquella presencia pero negándose a creer que fuera real.
Tuvo que retroceder dos pasos para no venirse abajo.
El perro fue el primero en acercarse al extraño. Olfateó sus ropas y movió la cola. Incluso él podía reconocerlo después de tanto tiempo.
—Eren —Marco se adelantó, expectante— ¿Eren?
El aludido levantó la vista dejando de acariciar la cabeza del perro. Sus ojos verdes reflejaban un brillo especial, era el mismo. Como si no hubieran pasado quince años desde la última vez que lo vieron.
Fue interrumpido por una explosión, un brillo fue volando había el cielo causando un ruido ensordecedor para estallar en miles de estrellas luminosas que murieron al caer. Alguien gritó algo dentro de la carpa, era Jean que regañaba a Reiner por su imprudencia. Más voces se escucharon.
Eren sonrió, realmente no habían cambiado.
Levi arqueó una ceja con molestia, odiaba el alboroto.
—Son ellos —le dijo Eren tocándole el hombro.
La expresión del hombre de ojos grises cambio de la molestia a una más delicada, todo en él parecía suavizarse en cuanto trataba con Eren. Una imperceptible sonrisa le cruzó la cara cuando ambos entrelazaron sus manos, Levi no pensaba soltarlo aunque una bola de humanos chillando el nombre de Eren se le viniera encima.
Armin sintió como la gravedad se lo llevaba hacia abajo obligándolo a ponerse de cuclillas. En cambio, Marco corrió dentro de la tienda.
—Eren… —volvió a repetir el rubio con la garganta desafinada antes de abalanzarse sobre ellos.
—Lo lamento —le dijo el castaño— tardé un poco pero…cumplí mi promesa. Lo lamento.
—¿Quién es él? —gimoteó Armin todavía colgado de los hombros del ojiverde.
Eren no titubeó.
—Él es mi esposo.
Levi torció la boca con sarcasmo. Eren siempre fue así, le gustaba tomar la iniciativa en todo.
—Tus mentiras podrían cumplirse —le advirtió en voz baja.
La tienda se abrió y más personas salieron de ella, Mikasa fue la primera en advertir la presencia de Eren, no lo creería hasta tocarlo con sus propias manos, dio varios pasos al frente y Armin se hizo a un lado. Primero el rostro luego los hombros desde donde se sostuvo para abrazarlo con más fuerza de la necesaria.
—Eren...Eren...
Lo demás se acercaron, sin poder creerlo.
Levi sintió que el agarre de Eren se hacía cada vez más dificultoso y lo soltó.
Tuvo que dejarlo ir.
El perro se sentó a su lado y Levi los vio a todos formando aquella odiosa bola de abrazos.
Eso debía ser una familia.
Su trabajo estaba hecho.
Había encontrado el camino a casa para Eren, para hacerlo feliz. Todo el tiempo junto a él fue preciado y hoy había llegado a su final. A decir verdad, temía quedarse junto a él, con todos aquellos extraños…
Ese fue su plan desde un principio, mientras lo bombardearan con preguntas, mientras se integrara a su familia, él desaparecería como la espuma…
Pero a segundos de cumplir su objetivo no logró mover ni un solo músculo para dar marcha atrás.
Eren se separó como pudo al ver la expresión de su cara.
Sorprendido trató de atraerlo hacia sí.
Ese era Eren. Lo envolvía con sus miles de manos invisibles anclándolo en un solo lugar para que no dejarlo a la deriva.
Tan adentro que dejarlo era prácticamente imposible.
Al igual que en esos otros mocosos, imposible de olvidar.
—No pretendes dejarme ¿cierto?
Levi suspiró pero fue interrumpido por la pelinegra que lo miraba desafiante.
—¿Y tú quién eres?
Ambas orbes grises chocaron con desafío y eso fue suficiente para romper parte de un plan bien estructurado. Posesivamente, Levi se aferró a Eren por la cintura dejándole bien en claro a la mocosa cuál era su territorio.
Las acciones no bastaban, , trató de ser corto y breve confesando aquello en voz alta, luego Eren se sonrojaría y se lo reprocharía más tarde pero por hora este era su momento y él supo aprovecharlo muy bien.
—Su esposo —respondió dejándolos a todos más sorprendidos de lo que ya estaban.
FIN
Quizá prefieran quedarse con el epílogo anterior, este capítulo extra no resultó ser una viñeta :v pero lo escribí más que todo para mí.
No quería dejar nada abierto dentro de la trama,como el doble final que tenía. En el capítulo 8, Levi golpea a Eren contra el suelo y de alguna forma algunas personas entendieron que lo había asesinado y todo lo demas fue un sueño...de lo que nunca fue. Juzgue usted mismo...ok no Por eso escribí este extra que no es tan importante, Amor de perro finalizó con 8 capítulos.
Muchas gracias por sus review y por haberme seguido. Las quiero mucho, agradecimiento a: (En orden alfabético, mamus -saca lentes negros y se los pone- )
AcosadoraKawaii
Akane Miyazaki
AkumaBlackMalfoy
AlgoLindo
Alpheler Cos
Ame8910 (El fic está dedicado a ti babu )
Amry Marques
Anto13
AzuzuSan
CapichiPichi
Charly Land
ChrisNovx
Cotota
DreamIsCute
Ed'Reus
Edrielle04
Ekaterina Envy
Elevenright
Emilda
Fran-Shi
Gabo99
GabyBlue98C
Gala117
Gatita598
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Harumita TAESNK
Isi Dixon de Mellark
LadyAniMangaXD
Light Lady 07
Linna M. Utsukushi
Lucy Sasaki
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Merce Edelstein
Mickeylove14
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