Saint Seiya no me pertenece. Todos los personajes son creación de Masami Kurumada y Megumu Okada. Esta historia solo tiene fines recreacionales.


Cronos le dio el poder para asesinar dioses.

Con la oportuna intervención del Dios del tiempo, años atrás, había podido acabar con un gran obstáculo para sus planes, a pesar del tropiezo que significó la desaparición de la bebé Atenea. Debía buscarla, sí, pero…

¿Qué importaba ahora? A estas alturas, aún debía ser una niña pequeña, ignorante de su verdadera identidad; ignorante de su poder.

Él tenía todo a su favor, incluso el gran poder de los Titanes.

Él podía…no; era SEGURO que gobernaría por encima de todos los dioses.

Sonrió cuando ese último pensamiento pasó por su mente. El primer paso fue sentarse en el sillón del Patriarca, y pronto regiría la tierra que Atenea debía proteger. Luego, iría por los mares que controlaba Poseidón, le seguirían las profundidades de los abismos del Hades y los cielos gobernados por el Gran Zéus.

Incluso iría más allá.

Su máscara ocultaba la gran sonrisa que adornaba su rostro. Pasó la punta de la lengua por sobre su labio inferior lentamente, como si pudiera sentir el sabor de sus planes, imaginando el día en que todo fuera controlado por su mano. Su deseo casi lujurioso de poder y su ambición no conocían límites ni rivales; y porque es el asesino de Dioses, estaba por encima incluso del Rey Titán.

Si tan solo pudiera acabar con la conciencia de su "otra cara" de forma permanente…

¿Que el cielo es el límite?

El cielo solo era el comienzo.