-¡Wow, enserio me la regalas!- dijo Miguel Ángel a Leo.

- Claro ya no la voy a usar, aparte creo que ya no sirve.

Le había regalada una vieja cámara de video. Era una tarde tranquila en la guarida y las cuatro tortugas estaban limpiando ya que en un rato Abril y Casey iban a ir a la guarida para ver una película y comer pizza, todos ayudaban excepto Raphael, él estaba leyendo un cómic viejo.

- No importa, le diré a Donnie que la repare.

- Genial Leo, acabas de arruinarnos la vida dándole esa cosa a Mickey.- dijo Raphael sin despegar la vista del cómic.

- ¡Si funciona!- empezó a grabar.

En ese momento entró Donnie muy feliz con una caja de chocolates y flores.

- Chicos, tengo buenas noticias, hoy le voy a decir a Abril lo que siento por ella.

- ¡Felicidades hermano!- dijeron Leo.

- No tienes oportunidad con ella, ya supérala lo suyo nunca va a ser.- dijo Raphael ya irritado. No le molestaba la idea de que su hermano se enamorara pero la idea que creyera que tenía oportunidad con Abril era totalmente estúpida.

- No le hagas caso Donnie, está celoso porque él estará solo para toda su vida.- dijo Mickey

- Yo no estoy celoso, sólo digo que lo de ustedes nunca va a funcionar.

- ¿Por qué?- preguntó Donnie y sabía que se arrepentiría de la respuesta.

- No creo que haga falta recordártelo.

- Ya basta, los dos. Donnie, todo irá bien contigo y Abril, y Raph, deja de molestar.

- Oye, yo sólo quería ayudar a que habrá los ojos.

- Me dejas grabarlo con mi cámara nueva

- Hola chicos.

Era Abril, Donnie rápidamente escondió los regalos. Todos se le quedaron viendo muy nerviosos, esperando que no haya visto ni escuchado nada.

- ¿Qué pasa? ¿Tengo algo en la cara?

- Para nada Abril, oye ¿quieres ir a mi laboratorio? Hay algo que quiero decirte.- dijo Donnie

- Claro, sólo déjame ir a ver a Splinter, quiere hablar conmigo.-Dijo Abril

- ¿Dónde está Casey?- preguntó Leonardo.

- Le dijeron de último momento que tenía que ir a ver a sus abuelos a New Jersey, por eso no pudo venir, creo que va a quedarse allá un mes, por las vacaciones.

"Demonios", pensó Raphael, "ahora Casey me va a dejar aquí solo por todo un mes, él era el único con el que podía desahogarse. Ya tenía todo un verano planeado con él, habíamos hecho muchos planes juntos y ahora me ha dejado solo"

Pensó tanto en eso que no se había dado cuenta de que Abril ya había entrado en el laboratorio con Donnie. Le estaba enseñando un nuevo invento que no era tan nuevo como decía, estaba empezando a sudar de los nervios y preparando las flores para la sorpresa.

- Que interesante, ¿había algo que querías decirme?

- Sí, emm… quería decirte que…- una especie de alarma empezó a sonar en el laboratorio. Era el comunicador Krang. Donnie estaba enojado porque había sido interrumpido.

- ¿Qué pasa Donnie? Creímos oír el comunicador Krang.- dijo Leo mientras todos entraban al laboratorio incluyendo a Splinter.

- No es nada, debe ser una falsa alarma. Abril quería decirte que…- fue interrumpido.

- Nunca hay falsas alarmas, Donatello.- dijo Splinter.

- Sensei tiene razón, hay que ir a investigar.- enojado, Donatello aceptó. Todo el equipo se preparaba para salir cuando Abril se ofreció para ir a ayudar.

- Para nada Abril, es muy peligroso.- dijo Leonardo ya preparado para ir.

- Pero…- antes de poder terminar la frase los cuatro hermanos desaparecieron en la oscuridad de las alcantarillas.

Iban brincando por las azoteas de Nueva York bajo la luz de la luna, mientras Miguel Ángel llevaba su cámara le pregunta a su hermano:

-Y… ¿cómo te fue con Abril?

- No pude decirle nada porque el maldito comunicador empezó a sonar.

- Te lo dije, el universo no quiere que estén juntos.- dijo Raphael.

- Silencio, creo que oí algo.- dijo Leonardo y en efecto, una nave Krang invisible pasaba por encima de ello s. En cuanto pasó empezaron a bajar Krangdroides y la pele a empezó.

Donnie logró enviar la nave fuera de la ciudad mientras sus hermanos peleaban. En ese momento un Krang iba a atacar a Mickey que estaba grabando cuando alguien lo salva.

- ¿Estás bien?- preguntó Abril.

- ¡Abril!, ¿qué haces aquí? Te dijimos que no podías venir.- dijo Raphael mientras le cortaba la cabeza a un Krang.

- No podía quedarme en la guarida sin hacer nada.

No pasó mucho tiempo para que terminaran de destruir robots y Abril había sido de mucha ayuda.

- ¿Te encuentras bien?- preguntó Donnie a Abril.

- Sí, no te preocupes por mí.

- Bien hecho chicos, denme esos tres- las chocaron- Tú también Abril, ven…- se acercó demasiado a ella y estuvo a punto de caer de la azotea.

-Cuidado Mickey.- le dijo ella ya cansada y Mickey no dejaba de grabar. En ese momento le dio la espalda a Abril para felicitar a sus hermanos pero en el momento en que abrió sus brazos y golpeó a Abril y ésta cayó.

Sus hermanos sólo se le quedaron viendo aterrados y empezaron a bajar. Buscaron desesperados hasta que Raph la encontró en un contenedor de basura.

- Aquí está. Creo que todavía respira.

- Hay que llevarla a la guarida para revisarla.- dijo Leo y después de eso la sacaron y la llevaron a casa.

Ya en la guarida Donnie la llevó al laboratorio donde la revisó para ver que no tuviera nada malo y al parecer no, sólo estaba noqueada por el gran golpe que tenía en la cabeza-

- ¿Qué te pasa Mickey? ¿Estás loco o qué?- preguntó Donnie gritando

- No es mi culpa, ella estaba muy cerca de la orilla.

- No importa Donnie, sólo hay que esperar a que despierte.- le dijo Leo.

- Si es que despierta.- dijo Raphael en modo burlón- voy a comer algo pizza que sobró en la concina ¿alguien quiere?

- No yo voy a jugar videojuegos.- le dijo Mickey.

- Jugaré contigo, no tengo nada que hacer.- le respondió Leo.

- Tengo que cuidar a Abril, pero también tengo que arreglar el Tortu-móvil, creo que haré eso.- dijo Donnie.

- Muy bien, más pizza para mí.- dijo Raphael y todos salieron dejando a Abril sola en el laboratorio.