Lo se, tarde mucho, pero tuve mis razones, y ahora que por fin soy libre trabajare en el fin que vengo pregunando después de complacer a mis fans de RinxLen a quienes he dejado abandonados por hacer fics Naruhina…

Advertencia: No se, creo que si tienen corazón débil como el mio lloraran.

Capítulo final: Un destino juntos

Había pasado tanto tiempo desde que se conocieron que Naruto no podía contar las horas que había pasado a lado de Hinata, el había visto como la tierna niña que había tirado al suelo en su primer día de clases se había convertido en una hermosa chica, sus cabellos que antes eran cortos habían crecido de forma considerable igual que el resto de su cuerpo, tenía una figura de infarto, pero eso era lo último en lo que el rubio se había fijado, lo que más había llamado su atención durante años eran sus hermoso ojos perlas, parecían 2 resplandecientes lunas en las que él sin evitarlo se había perdido.

Si, desde el primer momento en que sus orbes azules se fijaron en la peliazul su mundo había cambiado por completo, el impulso de protegerla cuidarla y quererla no se hizo esperar más allá de los primeros días en lo que se volvieron amigos.

-¡Hinata-chan se casa conmigo cuando seamos grandes!-solía decirle él a todos los chicos que se acercaban a su amiga pues quería marcar territorios antes de que algún otro niño quisiera adueñarse de su futura esposa, pero Hinata solo reía diciéndole que era muy gracioso.

No iba a mentir, eso le hacía sentirse un poco mal, pero por ningún motivo eso lo desanimaba, por alguna razón sentía que muchas más cosas así le esperaban y tendría que superarlas si realmente quería estar al lado de Hinata, todo valdría la pena si en el futuro ambos podían estar juntos tal y como él lo soñaba, de cierta forma se sentía obsesionado con ella, no podía entender el porqué de la necesidad que tenia de estar con ella y tenerle fe ciega.

Tan solo eran unos niños, así que Naruto pensó que tal vez aquello se le pasaría rápido pese a lo anormal que era soñarse de grande casado Hinata y con muchos hijos, por el momento le gustaba la relación que ambos tenían, ella era demasiado tímida como para hablarle a alguien, le costaba hacer amigos a diferencia de él que solo hacerlos de manera muy rápida, aunque para ser sinceros el no necesitaba a nadie más que a Hinata, por eso él tampoco solía hacer muchos amigos, tenía muy pocos y ni a ellos los dejaba acercarse a Hinata, no le hacía falta ahuyentar a los demás niños ya que la mayoría la creían una niña oscura y rarita, eso estaba bien para él, pero no faltaba el que quedara cautivado por la naturaleza de la Hyuga con una pequeña interacción y él tenía que alejarlos.

Si, Namikase Naruto era un niño muy egoísta, pero solo cuando se trataba de Hinata, pensar que otros se le acercaran y tomaran parte de la amabilidad que la peliazul destilaba lo hacía rabiar y esa sobre reacción de su parte al querer manipular todo lo referente a su amiga comenzaba a asustarlo, pero como siempre, Hinata no se daba cuenta, después de todo ojos que no ven, corazón que no siente y la ojiperla creció con un único y mejor amigo, al menos hasta la secundaria.

Entonces paso, su Hinata conoció a un tipo que más tarde se convertiría en su peor enemigo y eterno rival por el amor de la Hyuga, Toneri Otsutsuki, un alumno de intercambio de en la secundaria llegó con el fin de hacerse amigo de Hinata, la peliazul llamó la atención del albino de inmediato y se podría decir que cayó bajo sus encantos a primera vista tal y como Naruto lo había hecho.

En tan solo un descuido las murallas del castillo que Naruto custodiaba cual feroz dragón fueron infiltradas por el Otsutsuki que había logrado llegar a rescatar a la princesa del dominio que él ejercía sobre ella y el rubio no pudo hacer más que ver como el albino impulsaba a la Hyuga a ser más sociable.

Una vez que se había hecho el primer contacto entre Toneri y Hinata estos se habían vuelto más frecuentes antes de ser descubiertos por el rubio, quien enojado una vez lejos de su amiga decidió enfrentar al peliblanco para que se alejara de ella y dejara de intentar que ella se acercara al resto de sus compañeros.

-¡Ella no necesita a nadie más a mí!-le había dicho Naruto al peliblanco algo irritado-Todos aquí son unas hipócritas, solo se acercaran a ella por ser la heredera de los Hyuga, Hinata es muy ingenua, será fácilmente utilizada por las personas a su alrededor y cuando se dé cuenta de cómo son las cosas realmente sufrirá mucho.

Esa era la excusa que Naruto siempre había utilizado para auto convencerse de que lo único que quería era protegerla, era solo una forma de encubrir su egoísmo y el hecho de que la había monopolizado, pero él se había negado a ver la verdad de las cosas, porque había estado tan fascinado por la primera sonrisa que Hinata le había dedicado que había deseado que esta eternamente solo a él le perteneciera.

-Entiendo que quieras protegerla, pero aislarla de los demás no es la manera, no puedes mantenerla lejos de todos para siempre, las cosas sucederán eventualmente y lo mejor que puedes hacer como su amigo es estar ahí para ella-fue esa la sabia respuesta de Toneri.

Él nunca la vio más contenta que el día en que por fin entablo amistad con las chicas de su salón, y Naruto sonrió con algo de tristeza al ver lo que su egoísmo le había causado, realmente él era como el dragón del cuento que había secuestrado a la princesa más hermosa de los 8 reinos para conservarla como su pertenencia.

A regadientes tuvo que aceptar que Hinata hiciera amistades, pero valía la pena solo por verla sonreír, aunque él ya no fuera el dueño total de esa sonrisa, Hinata comenzaba a hacerse una chica popular, especialmente entre la población masculina desde que había comenzado a seguir los consejos de sus amigas, pues ahora vestía mejor y su figura y rosto comenzaban a ser muy agradables a la vista de los chicos.

Naruto tuvo que unir fuerzas con Toneri para alejar a los chicos de ella, la mayoría de ellos solo tenían malas intenciones con la Hyuga y ellos de ninguna manera iban a permitir que esos idiotas se robaran a Hinata de sus manos, porque si, ambos sentían como si la pequeña ojiperla les perteneciera, principalmente Naruto por ser su amigo de la infancia y es que la relación entre ambos era tan estrecha que sus padres se conocían entre ellos y solamente se soportaban por la amistad entre el rubio y la peliazul, de no ser así lo los Namikase y los Hyuga no se hablarían ni en un millón de años puesto que sus empresas competían entre sí.

-Hey Toneri, me lo he preguntado de aquí a algún tiempo pero… ¿Te gusta Hinata?-le preguntó el rubio una vez que ambos iban hacia casa de la Hyuga para hacer la traería en equipo que les habían marcado.

-Solo la veo como mi hermanita ¿Por qué preguntas eso tan de repente?-preguntó el albino extrañado de oír el tono medio serio y deprimido en la voz del interactivo Namikase, algo no estaba bien y seguro no era el hecho del estrés que ambos tenían por los proyectos finales y sus próximos ingresos a las preparatorias.

El Namikase soltó un suspiro de alivio, pensó que podía confiar en él.

-Nos mudaremos, mis padres piensan expandir sus negocios a Estados Unidos, nos vamos en cuanto me gradué y ya no podre estar al lado de Hinata, no sé cuándo vayamos a regresar y quiero que tú la cuides en mi lugar, yo… siento algo muy especial por Hinata pero ella no parece notarlo o más bien, quizás es el hecho de que pareciera que lo digo en broma que no cree que mis palabras sea serias, pero cuando regrese definitivamente se lo diré, hasta entonces por favor Toneri, cuida de ella.

-Puedes contar conmigo amigo.

Habría deseado no hacerlo, es cierto que las relaciones a distancia nunca eran buenas, pero Naruto hacia todo lo que estaba a su alcance para hablar con Hinata por lo menos una vez a la semana, la comunicación de ambos se había reducido muy continuamente hasta llegar a ser Nula y eso era algo normal después de tanto tiempo que habían pasado separados, siete largos años eran demasiado, la prepa y posteriormente la universidad fueron muy exigentes tanto para Hinata como para Naruto, pero en ningún momento el rubio había dejado de pensar en su adorada peliazul.

En verdad era un idiota enamorado, pensar que llevaba años sintiéndose así por Hinata en ocasiones lo hacía sentirse estúpido y no dejaba de preguntarse ¿Cómo es que ella no lo notaba? ¿Qué debía de hacer para que Hinata lo mirara de la misma forma que él lo hacía con ella?

No tenía esa respuesta pero se juró así mismo que sin importar lo que sucediera la próxima vez definitivamente le haría saber sus verdaderos sentimientos, sería una lástima que alguien se hubiera aprovechado de su ausencia…

Quería darle una sorpresa a Hinata, hacia tanto tiempo que no platicaba con ella pero estaba seguro de que la peliazul estaría muy contenta cuando la sorprendiera así que lo primero que hizo al bajar del avión fue ir a la mansión Hyuga, estaba muy emocionado de tan solo imaginar a la ojiperla abrazándolo, podría sentir nuevamente la calidez de su cuerpo y aspirar el aroma lavanda de su cabello, finalmente después de tantos años de añoranza haría lo que siempre quiso, le robaría un beso y comprobaría si sus labios eran tan suaves y deliciosos como se los imaginaba.

Y entonces cayó de su nube de sueños para ver algo que le partió el corazón, en la entrada de la mansión Hinata se despedía de Toneri con un suave beso, ojala sus ojos lo estuvieran engañando, quería convencerse de que era verdad pero era real, si sintió traicionado, dolido y con el pecho sumamente herido ¿Cómo era eso posible? No había hablado con Toneri en mucho tiempo pero Hinata jamás había mencionado que fueran pareja.

No podía culpar a la Hyuga, pero el peliblanco era un asunto completamente distintito, porque el sabia el amor puro y sincero que le profesaba a la chica que él tan bajamente le había robado ¡Hinata era suya! No era justo que en unos años de ausencia Toneri se hubiera aprovechado cuando él le especifico que volvería por ella.

-Seguro que disfrutaste mucho mi ausencia ¿No es verdad Toneri?-interrogó el rubio sorprendiendo al peliblanco a la vuelta de la esquina de la mansión, la expresión del albino fue todo un poema-Eres un malnacido-escupió con rabia-Confié en ti y me apuñalaste por la espalda.

-Yo… no fue mi intención… Hinata… ella…

-¡Hinata era mía!-gruño tomándolo del cuello de la camisa-¡Yo la cuide desde pequeños, estuve todo el tiempo a su lado! ¡Tu mejor que nadie sabias de mis sentimientos por ella y me traicionaste!-sin poder contenerse más Naruto lo golpeo con todas sus fuerzas dejando que el peliblanco cayera al suelo-¡¿Qué tienes que decir en tu defensa eh?!

-Que la amo-fue la simple y sencilla respuesta del joven cosa que solo hizo a Naruto enfurecer antes de volver a agarrarlo a golpes, lo peor del caso era que el albino aceptaba toda su ira, él era una buena persona, él podía hacer a Hinata feliz, pero Naruto no quería aceptarlo, tenía desahogarse porque el que consideraba su amigo le había robado al amor de su vida y no podía hacer más que aceptarlo.

Su depresión por la Hyuga le costó 3 días de encierro, sus padres creyeron que el viaje le había hecho mal así que decidieron no molestarlo, no había recibido ni un mensaje de Hianta así que lo más seguro era que la chica ni siquiera enteraba estaba de que había vuelto de los Estados Unidos, no fue sino hasta el cuarto día que una intromisión en su habitación lo hizo sentirse desorientado y le abrió los ojos a la realidad.

Ella estaba ahí, luciendo preocupada con él y cuestionándole el que no le hubiera avisado de su llegada, por un momento se sintió especial para ella porque había vuelto a ver la sonrisa que hace tantos años no veía y comprendió que quizás esa sonrisa nunca seria suya y muy a su pesar tuvo que resignarse por completo a la relación entre Hinata y Toneri, seguro que quien ideo la frase "Si amas algo déjalo ir" no tenía ni la mínima idea de lo doloroso que esto era o la frase terminaría con un "Y si esa persona no vuelve ve y secuéstrala".

Durante 6 largos mese sufrió muriéndose poco a poco por dentro de ver los mimos de la dulce pareja, tenía que usar todo su auto control para no matar al traidor de su amigo por bajarle a la chica de sus sueño y a pesar de que intentó enamorarse de otra persona no lo logro, dejo de intentarlo luego de haber hablado con una extraña una noche que se había pasado de copas y había estado a punto de cometer una locura.

Bajo los efectos del alcohol había intentando lanzarse de un puente por su amor no correspondido, la cosa fue bastante extremista pero para él en su estado de ebriedad era mucha mejor opción que seguir aguantando ver a Hinata con otro, sería peor por el asunto de que planeaban comprometerse públicamente.

Una mujer, muy extraña a su parecer lo había salvado de cometer tal estupidez y amablemente se había ofrecido a escuchar sus problemas, no pensándolo 2 veces Naruto se desahogó con esa total extraña de orbes tan similares a los de su amiga de la infancia, si no mal recordaba la mujer se había presentado con el nombre de Kaguya, por alguna razón algo en ella le era extrañamente similar.

-De verdad duele-rió el tontamente en un intento por auto compadecerse tras haber contado su historia-Lo peor de todo es que siento como si todo este dolor me lo mereciera, como si yo le hubiera hecho a Hinata algo tan terrible como para merecerme este sufrimiento-confesó.

-Tal vez fuera de esa manera, quizás la heriste mucho en una vida pasada y estas pagando el precio por ello, pero si tú verdaderamente la amas entonces esperaras pacientemente por ella y seguirás a su lado sin importar cuán doloroso sea, después de todo, enredado en tu dedo meñique tienes algo que te une a ella, solo tendrás una oportunidad para que ella este a tu lado dime ¿Estarías dispuesto a traicionar por ello?

-Haría lo que fuera necesario-declaró Naruto algo adormilado.

-Ya lo creo y aunque lo que debas de hacer no sea lo mejor es el único camino que puedes tomar para llegar a su corazón.

El rubio despertó al día siguiente como si todo se hubiera tratado de un sueño, pero una parte de si mismo le decía que había sido real e internamente agradeció haberse encontrado con aquella mujer.

Para bien o para mal tan solo 2 días después llegó Sasuke a Japón argumentando que estaba ahí en representación del Sharigan Corp para extender su mercado, Naruto nuevamente se sintió traicionado por un amigo cuando Sasuke dijo que se casaría con Hinata.

El pelinegro ridículamente se había enamorado de Hinata, más bien obsesionado con ella al punto de mover hilos para que la chica se viera obligada a casarse con ella ofreciendo una alianza entre su corporación y la empresa perteneciente a la familia Hyuga, su padre no dudo 2 veces en aceptar el trato y estaba dispuesto a obligarla a casarse.

Pero Hinata había cambiado, ya no era la tímida chica que obedecía ciegamente las ordenes de su padre solamente para tener un poquito de su cariño y por esa misma razón había decidido escaparse con Toneri la noche previa a su boda, ella tenía prohibido cualquier contacto con él, de un tiempo atrás llegó a pensar que las cosas entre ella y el albino no daban para más, su padre había hecho de todo para separarlos plantando un sinfín de evidencias y por un leve momento Hinata dudo de Toneri.

Sin embargo estaba dispuesta a dejar todo por él, su familia, sus amigos, su vida, se iría lejos a un lugar donde no los encontraran, con la esperanza de una nieva vida a lado de su amor pidió a su amigo que le entregara al albino su mensaje, Naruto le diría a Toneri que Hinata lo esperaba en la estación de trenes del oeste a las 11:30 para que huyeran juntos, esa era la última oportunidad de ambos para reconciliarse y formar una nueva vida.

Sin embargo él nunca asistió a su encuentro, Hinata lo espero por horas en la fuente de la estación de trenes mientras la lluvia la cubría fundiéndose con sus lágrimas, Naruto había ido a despedirse de ella y se había ofrecido a hacerle compañía hasta que Toneri llegara, pero ni un rastro del albino, Naruto se acercó a ella algo dolido por la tristeza de la joven.

-Hinata-en el momento que su nombre salió de sus labios la joven se abalanzo contra su pecho ocultando en este su rostro, la calidez que invadió a Naruto por ese gesto no se comparaba a la punzada en su corazón por el dolor que la chica estaba experimentado, el mejor que nadie sabia como se sentía porque durante mucho tiempo había sufrido en silencio de su amor no correspondido-Tenemos que irnos-le susurró, después de un par de minutos de no tener reacción de la joven decidió actuar.

Guió con delicadeza a la joven a su auto, la peliazul no emitió más sonidos que sollozos durante su camino a la casa de Naruto quedándose dormida en el transcurso, el rubio acarició con ternura y preocupación el rostro de su amada, lo hecho hecho estaba, subió a su departamento, tomó una maleta y esa misma noche desapareció de la ciudad junto con Hinata.

Al dia siguiente hubo un gran revuelo cuando la heredera Hyuga no asistió a su boda dejando al Uchiha plantado en el altar, nadie encontró ni una sola pista de su paradero, parecía como si la tierra se lo hubiera tragado, de Naruto nadie sospecho nada, si siquiera sus padres, el rubio había dado aviso de que la noche anterior viajaría a los Estados Unidos para visitar a su prima Karin, a nadie se le ocurrió verificar si realmente se encontraba con ella y de haberlo hecho la pelirroja lo habría cubierto, pues tenia más o menos una idea de donde se encontraba y pensaba que lo mejor era dejarlo solo.

Para cuando Hinata despertó se encontraba confundida y desorientada, sus ojos perezosamente apenas distinguían que había una persona muy cerca de ella.

-En un lugar donde no van a encontrarnos-la joven reparó en la presencia del rubio y se sonrojó al darse cuenta lo apegados que ambos estaban en aquella cama y ella rodeaba el cuello del Namikase con sus brazos, se sintió extrañamente cómoda, el sentimiento de tenerlo tan cerca de si era tan reconfortante que no se atrevió a moverse, contrario a lo que hubiera hecho se apegó mas a su amigo disfrutando de su calidez-Esta casa la compre hace algún tiempo, es algo así como mi refugio, podemos quedarnos aquí por algún tiempo-considero innecesario terminar con un "hasta que te sientas mejor", no quería herir más a Hinata de lo que ya estaba a pesar de que tarde o temprano tendría que enfrentarse a su padre.

-Tú, nunca vas a traicionarme ¿Verdad Naruto?-le preguntó con voz algo quebrada mientras se aferraba con más fuerza en su pecho, el la apretó más contra si acariciando su cabeza y por algún motivo Hinata sintió tanta paz que sentía que podía morir en ese mismo instante feliz de la vida sin pensar en nadie más que el rubio con el que estaba en la cama.

-A partir de hoy te juro que no voy a traicionarte, voy a estar a tu lado siempre a pesar de que no me quieras contigo, en esta y en otra vida, porque eres la persona más importante en mi vida-le susurró con dulzura besando con suavidad su frente y limpiando las lagrimas de la joven.

El corazón herido de Hinata pudo volver a la vida gracias a los cuidados y el cariño de Naruto, ella sin darse cuenta a paso muy lento se iba enamorando de su mejor amigo, se casaron a tan solo 2 semanas de su huida, no fue por amor, no hubo un altar esperándola ni una maravillosa luna de miel a la vuelta de la esquina, fue para obtener libertad del dominio de su padre que Hinata acepto la descabellada propuesta del Namikase, lo cierto era que Naruto siempre había sido el yerno predilecto de Hiashi, no solo por la posición económica que tenia, después de muchos años de que la familia Hyuga y Namikase se vieran las caras solo porque sus hijos eran amigos habían llegado a la conclusión de que si ellos se enamoraban no intervendrían en su relación, porque ellos habían visto el cariño sincero entre ambos y no dudaban que aquello tarde o temprano se convirtiera en amor.

Así que cuando ambos herederos regresaron a su hogar luego de casi un mes desaparecidos y soltaron que se habían casado, ninguno de los padres argumentó nada ante tal unión, a pesar de que no estaban seguros como se habia dado la relacion entre ambos siendo que antes de casarse con el Uchiha, Hinata mantenía una relación con Toneri, decidieron no indagar al respecto, la familia Namikase estaba feliz de que su hijo finalmente estuviera casado Hinata, pues ella era una buena chica, hermosa, amable y servicial, por su parte Hiashi simplemente lo dejo pasar, él siempre había preferido a Naruto como su yerno predilecto, tanto así que estaba dispuesto a pactar un trato con los Namikase para que el matrimonio se diera pero conociéndolos ellos no hubieran accedido si Hinata no mostraba interés romántico por el rubio, pero como ella no lo hacia y el tenia la firme idea de que el Otsutsuki era un trepador había tomado la decisión de casar a Hinata con el Uchiha, quien tuvo que olvidarse de su idea de casarse con la Hyuga puesto a que ahora era la esposa del dobe.

Naruto hacia de todo para complacer a Hinata, cada vez los roces entre ambos se acrecentaban, bastaron 2 meses para enamorarla, la Hyuga se rindió completamente a los encantos de su marido, con amor, devoción, paciencia, cariño y dulzura él fue llenando el vació en su pecho que Toneri había dejado y Hinata había comenzado amarlo dejando el distante recuerdo del albino de lado, consumaron su matrimonio volviéndose marido y mujer en todo el sentido de la palabra y la felicidad que la peliazul sintió al saberse amada por el rubio prácticamente desde que la conoció fue indescriptible.

-Por favor no llores-murmuró Naruto preocupado limpiando sus lagrimas mientras ambos reposaban tendidos bajo la sabanas de la cama después de haberse entregado el uno al otro.

-Yo... estoy feliz de ser amada por ti Naruto-sonrió la Hyuga apegándose a él-No se en que comento comencé a quererte, pero ahora te amo tanto que no haberme dado cuenta de tus sentimientos duele, te debo tantos años de un amor no correspondido que no se como pagártelos.

-Solo prométeme que sin importar que, vas a seguir amándome.

-Nunca voy a dejar de amarte.

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Para Naruto fue inesperado pero claramente justificable el haber recibido un puñetazo de la nada para que al levantar la vista darse cuenta de que Toneri se encontraba en su oficina visiblemente enojado.

-¡Yo la amaba! ¡Habría dejado todo por ella!

El Otsutsuki había regresado de su viaje de 6 meses a China, se había ido ahí por asuntos de su empresa justo antes de la boda de Hinata pensando en que al regresar la vería casada con el Uchiha, cual fuera su sorpresa al enterarse que ahora era la señora "Namikase" y escuchar de sus labios que había mandado a Naruto a decirle que lo esperaría en la estación de trenes la noche antes de su boda para huir juntos pero que el nunca se presento.

Naruto nunca le aviso, de lo contrario habría encontrado la forma de llegar a Hinata, por supuesto que no le comentó eso a Hinata, entendía muy bien que el rubio solamente había hecho lo mismo que él en su ausencia, simplemente se alejo de Hinata con rumbo a aclarar ciertos puntos con su "amigo".

-¡Ella me amaba a mi!-le reclamó el albino esperando ferviente una respuesta por parte del Namikase quien solo le había lanzado una mirada seria mientras limpiaba la sangre de su labio.

-Pero ahora me ama a mi-declaró el rubio.

-Jugaste sucio Namikase-gruñó el albino suprimiendo sus ganas de golpearlo.

-Igual que tú cuando me fui para Estados Unidos, sabias de ante mano que yo la amaba, solamente hice los mismo que tú, vi una oportunidad para estar a su lado y la tome, no iba a dejar que te salieras con la tuya y la alejaras de mi-confesó Naruto con determinación.

-Me engañaste-un susurró tembloroso llamo la atención de los 2 presentes, ahí en la puerta de la oficina estaba Hinata sorprendida y al mismo tiempo dolida por lo que acababa de escuchar.

-Cariño...

-No... no me llames así-notó las intenciones del Namikase por acercarse y retrocedió-¡Eres un mentiroso!-le gritó antes de salir corriendo, lo más lejos que pudiera, soro quería que ese sentimiento de sentirse traicionada desapareciera, Naruto decía amarla, pero si la hubiera amado de verdad no la hubiera lastimado como lo hizo al no comunicarle su mensaje a Toneri y pensar que ciega y estúpidamente se había enamorado del rubio.

Él solo se había aprovechado de su situación al verla tan débil ¿Porque? ¿Porque la había engañado de esa forma haciéndole creer que Toneri ya no la amaba? A pesar de que no podía decir que seguía sintiendo amor por el albino, en su momento el dolor de no tenerlo a su lado fue más de lo que pudo soportar ¿Como pudo haberla hecho pasar por aquello? Eso no era amor, Naruto no podía haberla amado y lo peor de ese descubrimiento era ser plenamente consiente de que ya no era capaz de vivir sin él.

¡Era horrible! Quería alejarse definitivamente de Naruto, pues ya no creía en su amor, sin embargo los recuerdos de sus últimos meses juntos la atormentaban, los besos, los abrazos, las caricias, lo mimos que él hacia, las dulces palabras que él le susurraba al oído cada mañana después de una noche de contacto intimo, la sensación en su pecho de sentirse irradiando felicidad cada vez que él se despedía para ir al trabajo dándole un beso en la frente, ¿Como iba a sobrevivir sin ello el resto de su vida? Era el cariño amor y devoción de Naruto contra los sentimientos que la unían a Toneri, no solo era el hecho del engaño, si no que él había prometido no mentirle o traicionarla y a la primera oportunidad le había arrebatado lo que pudo ser con Toneri.

Sintiéndose herida hizo lo único que se le ocurrió hacer en una situación como esa, ir a desahogar su tristeza, enojo y frustración con alcohol en un bar.

-Dime el trago más fuerte que tenga-pidió en cuanto toco la barra, el barman acató la orden dándole su mejor bebida y antes de que pudiera tomar un sorbo la voz de una mujer irrumpió su acción.

-Beber nunca es la solución a los problemas-la mujer de larga melena blanca y ojos lila se sentó a su lado.

-No, pero ayuda a olvidaros al menos por un rato-murmuró la ojiperla.

-Es por un hombre que quieres emborracharte ¿No? Si no es una molestia podrías conversas conmigo de lo que ha sucedido, quizás pueda darte algún consejo, no te dejes llevar por mi juvenil apariencia pequeña, he vivido más de lo que piensas-le dijo la enigmática y hermosa mujer.

-Supongo que no pierdo nada, aunque no soy de andar contando este tipo de cosas a completas extrañas-comentó Hinata con una media sonrisa.

-En ese caso me presento, mi nombre es Kaguya y soy un bruja que viajo a esta dimensión para ayudarte con tus problemas-lo dijo con tal sinceridad y un toque de inocencia que Hinata rió ante tal broma.

-Entonces yo soy la princesa de una dimensión alterna-le siguió el juego a la mujer divertida por la manera en la que había intentado hacerla reír.

-Puedes contarme lo que te aflige sin necesidad de entrar en detalles.

La Hyuga desvió la mirada a su copa.

-Mi esposo... él decía amarme desde muy pequeños pero creo que si él realmente me hubiera amado me habría dejado ser feliz con la persona con la que iba a huir antes de que me obligaran a casarme. Yo confié en él para que le informara a Toneri que huiríamos juntos esa noche pero él no le dijo nada y por lo tanto Toneri nunca llegó, si Realmente mi esposo me hubiera amado tanto como decía habría hecho lo que fuera necesario para verme feliz aunque no fuera a su lado, ya no se si creer en el amor que decía tenerme... yo... estoy algo confundida, aun no entiendo como fue capaz de hacerme eso-lagrimas resbalaron por las mejillas de la joven.

-¿Aun sientes algo por ese hombre llamado Toneri?-le preguntó la albina.

-Yo... no... pero llegue a amarlo de una forma muy especial, si mi actual esposo no hubiera intervenido lo más seguro es que yo estuviera felizmente casada con Toneri.

-En eso te equivocas, déjame contarte una historia. Había una vez una hermosa chica heredera de su clan que estaba enamorada de su amigo de la infancia, el príncipe de su reino, sin embargo su amigo nunca notó sus sentimientos a través del tiempo y se enamoró de otra chica, sin embargo y a pesar de todo esa chica siguió fiel a su lado, cuando ella creyó que podría querer a alguien mucho más de lo que llegó a querer a su amigo de la infancia este finalmente se percató de sus sentimientos.

Hinata siguió escuchando en silencio, por alguna extraña razón la historia se le hacia terriblemente familiar, sintió una leve opresión en su pecho intuyendo el final de esa historia.

-La chica estaba tan enamorada del príncipe que jamas se dio cuenta de lo que sucedía a su alrededor, su clan planeaba traicionar a la corona y ante los ojos del príncipe ella era parte del confabulado plan para sacarlo del trono, entre varias cosas se caso con ella para mantenerla vigilada pero no la amaba, al menos no en ese entonces, sin embargo se comportaba como un verdadero esposo y fingía tan bien que la chica ni siquiera se dio cuenta de que él hasta la engañaba con otra mujer, sin embargo el príncipe cayo preso de su propia mentira y poco a poco fue enamorándose perdidamente de su esposa hasta el grado de perdonarla incluso si ella realmente había tenido que ver con la muerte de sus padres como las pruebas apuntaban, pero ella era inocente y estaba siendo inculpada por la amante de su marido sin siquiera saberlo. Una guerra entre ese reino se desato contra el reino vecino y cuando estuvo apunto de morir entonces el príncipe o mejor dicho rey, se había dado cuenta de que ya amaba irremediablemente a su esposa y estaba dispuesto a compensarla por toda su estupidez al creerla parte del plan para derrocarlo, lo llevaron muy herido de vuelta al palacio y su reina desesperada por no perder la luz de su vida hizo un pacto con un demonio, la demonio le ofreció un trato, si el rey la amaba tanto como ella creía entonces no pagaría ningún precio por haberle salvado la vida, pero si él no la amaba tanto o más de lo que ella lo hacia entonces la reina se transformaría en una muñequita que iría a la colección personal de la demonio.

La peliazul estaba tensa, esa historia le parecía haberla oído en otra parte, pero no lo recordaba.

-Entonces ¿Que sucedió?-incitó a la mujer a que continuara su relato.

-La demonio le mostró por medio de sueños que su esposo le había sido infiel, pero ella se negaba a creerlo, una noche de tormenta fue lanzada de las escaleras por la amante celosa de su marido, cayo inconsciente cerca de morir sin saber que por la caída había perdido al hijo que estaba esperando.

La Hyuga sintió una punzada en el vientre y llevó las manos a este para protegerlo, pobre chica, haber perdido a su bebe sin siquiera ser consiente de que estaba embarazada... eso debía ser algo terrible y curiosamente esa misma noche ella le daría la noticia a su esposo de que estaban esperando un hijo que ironía ¿No?

-Ella no murió si es lo que estas pensando, fue transformada en una muñequita eso fue parte del trato que hizo con la demonio, pasaría la eternidad siendo consiente de todo a su alrededor y sin poder moverse-Hinata ahogó un grito-Su esposo no vio hasta ese momento todo el daño que le había hecho, pero ya era demasiado tarde para repararlo, la demonio pudo ver que la mentira de su amor se había transformado en algo puro y verdadero después de tanto tiempo, compadeciéndose de él le ofreció un trato a cambio de la vida de su amante y el sin titubear acepto la propuesta, mató a su amante, puesto a que el embrujo que transformo a su esposa en muñeca era consecuencia de su propio deseo la demonio no podía romper el hechizo, sin embargo le dijo que había una forma en la que ella podía volver a ser humana, algo muy simple, el hechizo se rompería si la chica dejaba de amarlo o creía en que él amor que él le profesaba era verdadero, sin embargo ninguna de las 2 opciones sucedió, el rey enloqueció sumiéndose cada día más en la oscuridad y la vida de ambos acabo en un incendio. Las ultimas palabras que se escucharon en el castillo antes de que este colapsase fueron las de él prometiendo que en su próxima vida seria él quien se enamorara primero y ella pensó que seria hermoso si su amor no terminara nuevamente en una tragedia ¿Crees que ellos pudieron tener otra oportunidad para ser felices?-le preguntó la mujer.

-¿Porque me cuenta algo como eso?-preguntó limpiando las lagrimas de sus mejillas, por alguna razón su pecho se oprimía dolorosamente.

-La falta de comunicación y confianza entre dos personas eventualmente desencadena en algo trágico pese que el amor de 2 persona sea fuerte, entre más fuerte es el lazo que los une peor sera el desenlace... la chica al final de todo lo perdono y él se redimió, sin embargo, si la chica tan solo hubiera creído en su amor, al menos por un instante entonces hubiera vuelto a ser humana y los 2 hubieran podido volver a ser felices, yo tan solo pensé que este relato te ayudaría a reflexionar sobre lo que ha sucedido contigo y tu pareja, piensa que tal vez tu esposo te amaba tanto que habría preferido estar muerto antes de no tenerte, de hecho hace un tiempo vi a un hombre rubio queriendo saltar por un puente porque creía haber perdido al amor de su vida, oh, curiosamente se parece a ese joven-señalo a la entrada del bar donde entraba Naruto en ese mismo instante.

Sus ojos se toparon con los azules llenos de preocupación y remordimiento, el rubio corrió hacia ella como si su vida dependiera de ello y la abrazo con todas sus fuerzas sin darle tiempo si quiera de reaccionar por la sorpresa que era verlo ahí.

-Hinata, por favor perdóname-escuchó su voz quebrada mientras se aferraba a ella con más fuerza, por favor, por favor, por lo que más quieras no me dejes, prometiste amarme ¿Recuerdas? Se que lo que hice no estuvo bien, que te arrebate tu felicidad con otro hombre-sintió su hombro derecho humedecerse, no tenia que verlo a la cara para saber que él estaba llorando-Pero, créeme cuando te digo que te amo tanto que duele, por favor, yo... no se que haría si me dejas... moriré, te juro que si te alejas de mi salto por un puente, pues mi vida ya no tiene sentido si no estas a mi lado, te amo... Hinata yo...

-Naruto-kun...-susurró ella conmovida y sin ser plenamente consiente le devolvió el abrazo.

Miró de reojo a su lado pero la mujer con la que hablaba ya no estaba, mentalmente pensó que la chica de la historia y el príncipe pudieron tener su segunda oportunidad de ser felices y de alguna manera eso se lo atribuía a la mujer demonio, agradeció desde el fondo de su corazón haberse encontrado a Kaguya y tomó la decisión de tan solo una vez más creer en el amor que Naruto le profesaba, lejos de ser su final feliz, aquel era el inició de una nueva etapa en su vida a lado del la persona que siempre la amo.

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No se por que pero sentí un nudo en la garganta hacia el final de este capitulo... en fin, espero que les haya gustado, volveré muy pronto con otro shot... que probablemente se a large igual que este y el otro, pero eso dependerá de los comentarios, entonces aguarden a la historia que vengo pregonando desde los otros shots, y ya que estoy en mi espacio publicitario quiero informarles que en mi perfil esta el Link de Kodenima (Pagina de la que soy admin y que me sera dificil explicarles de que trata) y el link de la novela colaborativa que estoy escribiendo en wattpad titulada Infinity Unbalance, si tienen tiempo porfavor denle una leida.

Hime-Uchiha-Namizake: Solo viendo el punto de vista de Hinata el parece un verdadero malvado jeje, pero supongo que la culpa del tragico final es de ambos por la falta de comunicacion.

Alex-Rikudo-165 : me intriga saber que punto de vista te gusto más, realmente no me gusta redactar en primera persona porque la perspectiva de cada personaje es diferente, pero en fin, creo que al final se entendió muy bien la historia.

Onigan: Uno nunca termina de conocer a las personas a nuestro alrededor, nunca tenemos la seguridad de que no nos van a traicionar, triste pero es la verdad. gracias por comentar y espero que te haya gustado el final.

Mimi Tachikawa08: final feliz, para complacer a los fans jeje, bueno, en si la historia entera fue triste, en esta a Naruto le toco sufrir jeje.

diana carolina : ¿Te basto con su sufrimiento en este capitulo? Sientete feliz, por tu culpa tuve que poner que el pobre casi se suicidad, al final, no importa sus crimenes pasados, yo creo que logro pagar por ellos y pues... no especifique pero Naruto no fue su primera vez jeje ni ella la de él.

peste21: Yo solo quería matar a Sakura y utilice a Naruto para ello XD en fin, uno no puede asegurar los conceptos de bien y mal puesto que para cada quien estos son diferentes, espero que el cap haya sido de tu agrado.

natsumi hhr nh : Ahora si escoge que narracion te gusto más, jeje, gracias por el comentario, me alagra que la historia haya sido de tu agrado.

kate: agradezco tu comentario y bueno, no se que decir, por mi parte, nunca he tenido pareja (Si, ya tengo 20 y sigo soltera) pero no porque no haya tenido la oportunidad, he estado huyendo de cupido jeje, simplemente no tengo interés en una pareja por el momento, creo que moriré soltera jeje, en fin, me alegro de que las cosas hayan resultado bien para ti.

Estrella11: Si, yo pienso que no pueden llegar a amar una persona de la noche a la mañana, para ambos en vida real del manga paso algún tiempo antes de que se dieran cuantas de sus sentimientos, mira, a Naruto, tardo años jeje.

vdevenganza: tu nick me lo aclara todo, tu eres otra de las razones de que el rubio casi se tire de un puente ¿No lo compadeces ni un poquito despues de este cap? ¿No crees que ya tuvo suficiente? por oytra parte me han dicho que soy la ama de lo inesperado, si no me crees lee mi fic de rin y len titulado cosas de tu y yo, creo que ahi me diverti de lo lindo trolleando a los lectores pero aun no le llego a Kishi XD

Hinata Uzumaki:Si te sentiste asi con los anteriores capitulos no me imagino como estabas cuando acabaste de leer este jeje

Kyoko Nakamura: por supuesto, soy una genio sorpendiendo a la gente, nadie se esperaba lo que paso en el segundo cap porque simplemente vieron todo desde la pespectiva de hinata que tan enamorada como estaba no notaba nada a su alrededor, de hecho, para mi fue como si la historia se hubiera hecho sola, ni yo me lo esperaba, el plan era dejar a Naruto como el patan y de la nada solo fue victima de la situacion, hasta yo me siento engañada.

Araceli : listo, tercera narracion y la historia desde el punto de vu¡ista de Kaguya jeje, espero que te haya gustado.

Zianya: me costo mucho hacer este cap, estuve muy ocupada con mis finales y el trabajo asi que hasta ahorita pude traer el cap pero ojala la esperaq haya valido la pina.

¿Hice a alguien llorar? XD