Hola ^^! Vengo a cumplir XD

Bueno, como ven… Me atrasé con esto del especial ('n.n). Estas fechas consumen mucho tiempo 77! Y realmente a mí me falta! Sin embargo… Tómenlo como un regalo de año nuevo y navidad XD

Ems… De todas maneras, ahora tengo un mes para dedicarme totalmente a las historias. Espero que me resulte y haga todo lo que tengo planeado ñ.ñ … Si no, los compensaré u.u…


*Nyotaimori (o sushi corporal):es la práctica de comer sashimi o sushi del cuerpo de una mujer, típicamente desnuda –Gracias wiki-

Especial Navideño: "Tú, yo y un poco de chocolate"

(…) Nico Pov (…)

Por fin había llegado mi época favorita. No soy amante del frio (pese a que no lo odio), pero sí de las luces, las decoraciones y la fraternidad que se vive.

Con ese mismo espíritu, µ's decidió jugar al santa secreto. Nos juntaríamos en noche buena para celebrar y dar el respectivo obsequio. Por mi parte, tenía que darle algo a Honoka, que en realidad no era para nada difícil, comida, algún juguete o algo simple era lo primero que se me pasaba por la cabeza al pensar en un regalo para ella, por ende las posibilidades eran amplias.

No obstante, había alguien que de verdad me estaba dando dolores de cabeza. Maki-chan me regaló el colgante hace solo unos meses atrás. Mi madre sabe de joyería, y al verlo estimó un valor, el cual no podría pagar ni con toda la mesada de un año. Sin embargo, no me podía rendir, debía comprar algo significativo, y que estuviera al alcance de mi bolsillo.

Con ese propósito Rin, Hanayo y yo fuimos al centro comercial. Ellas buscaban un presente adecuado para la chica que le tocó, mientras yo hacía doble trabajo.

-Ustedes pasan mucho tiempo con Maki-chan, ¿Tienen alguna idea de algo que quiera? –Pregunté, al menos para hacerme una idea

-Mmm… Bueno, Maki-chan es algo complicada… -Manifestaba Hanayo

-Si es algo que tú le das, le gustara de todas formas-nya –Me animaba Rin

-Pueden que tengan razón, pero ella me consiente siempre que puede, y yo… lo hice una vez –Explicaba algo nostálgica

-Si hablas de tú confesión, creo que eso vale por más de una vez –Seguía hablando mi kuhai pelinaranja- Eso fue como unas cien veces-nya

-Nico-chan, no importa cuantas veces hagas algo por ella, lo importante es cuantos sentimientos depositas en lo que hiciste –Sonreía Hanayo

-Ah… -Suspiré- Gracias, ya no estoy tan estresada

-Nico-chan –Acercándose a mi oído susurró- Invítala a cenar nyotaimori*

-I-Idiota –Alejándola con un empujón me quejé. Sentía mi cara caliente, y Rin definitivamente estaba esperando eso.

Continuamos caminando, viendo unas mil vitrinas, de las cuales ninguna me llamó la atención.

-Vamos Nico-chan –Me apuraba Rin

-Sí, lo sé… -Trataba de apaciguarla- Pero aún no encuentro algo lindo para Maki-chan

-Ahh… -Suspiró Rin- ¡Esperen-nya!

Las tres nos detuvimos en seco, y mirando hacia donde apuntaba Rin, divisamos el objeto que nos quería mostrar.

-Es perfecto –Sonreí, definitivamente le iba a gustar

-Muy bien Rin-chan, gran idea –Aprobó Hanayo

Acercándose a Hanayo, Rin murmuró- Pensaba regalárselo a Kotori-chan –A lo cual solo suspiré, ya que incluso, me parecía divertido

Y así, después de unas vueltas más buscando el regalo de Hanayo, todas conseguimos regalos para nuestras respectivas chicas.

(…) (…)

Era 24 en la mañana, y con las chicas habíamos quedado que un grupo prepararía la cena, mientras las otras decoraban y ordenaban las mesas para hacer todo con eficacia. Nos juntaríamos en casa de Maki-chan a eso de las 9. No obstante, el tiempo me sobraba, y no tenía más, que salir a pasear.

Caminé bajo el tibio sol de invierno por un rato. Consideraba que la mejor manera de pensar era de esa forma, y más aún si la mitad de la gente está tratando de amortiguar el frío en sus casas, dejando la calle libre.

Pensaba en varias cosas, pero en la mayoría (de no ser en todas), predominaba Maki-chan.

Primero, ¿estaría bien su presente? que ha decir verdad, lo encuentro indicado para ella, pero seguía pensando que era poco

Segundo, ¿cómo iría vestida? No debía ser tan formal, sin embargo, no quería rozar lo casual. Quizás debería preguntarle, y así combinaríamos

Tercero, ¿debía llegar antes? Al fin y al cabo, la anfitriona era mi novia, y quizás se sentía sola al ser ésta la primera navidad que pasaba sin sus padres

Pensando todo eso y más, sin darme cuenta, llegué frente a la casa de Maki. Roja por la vergüenza empecé a huir, pero una voz me llamó antes.

-¿Nico-chan? –Era obvio de dónde provenía, por ende, de la forma más natural que pude, volteé mi cara

-Hola, Maki-chan –Le sonreí

-Hola… ¿Qué haces por aquí? –Me preguntó

Suspiré, no le mentiría… solo escondería las cosas vergonzosas que pensaba- Caminaba, y sin darme cuenta terminé por aquí

Mi miró unos segundos, porque a decir verdad, era algo extraño caminar sin rumbo y terminar al frente de la casa de tu novia (aunque fuera verdad)

Se acercó un poco, y con su cara manchada de un tenue rosa, vaciló –N-Nico-chan… ¿M-Me acompañarías?

Sonreí para mis adentros, puesto que, si lo exteriorizaba, se enojaría pensando que me burlo de ella.

-Bien, de todas formas no tengo nada que hacer –Le sonreí siguiéndola

(…) (…)

Hace solo unas semanas atrás, Maki había empezado a tomarle el gusto a ir de la mano. Me parecía tierna y débil tratando de evitar mi mirada y ruborizándose al ver gente cerca, no obstante, no la soltaba en ningún momento, lo cual yo amaba.

-Maki-chan, ¿Dónde vamos? –Pregunté al percatarme que nunca había venido a este sector de la ciudad

-Cerca de aquí venden mi chocolate caliente preferido –Dijo con una cara de niña siendo llevada a una dulcería- Quiero compartirlo con todo µ's

Maki-chan, es tsundere de nacimiento. Si la he visto diciendo cosas lindas o revelando sus sentimientos, ha sido solo cuando estamos solas. Pero con casos como los de µ's, le es más difícil hablar desde el corazón, siendo que estima mucho a todas las chicas. Por eso, hace estas cosas, no lo dice, pero lo demuestra

Caminamos por calles muy bonitas y lujosas, hasta llegar a cierto local con un nombre escrito en italiano que no logré descifrar

-¡Maki! –La saludó con un divertido acento un señor de barba negra

-Señor Benoni –Le correspondió

-¿Y quién es esta chica? –Preguntó señalándome

-Es Yazawa Nico –Me presentó, haciendo que el hombre se acercara y agitara reiteradamente mi mano

-Es un gusto –Sonreí, era una rara pero entretenida situación

-Igualmente Nico –Sonrío, separándose y dispuesto a atender a Maki

-Supongo que vienes por lo de siempre –Dijo él dándose la vuelta y tomando un tarro con letras doradas que escribían el mismo extraño nombre de la tienda

-Sip. Hoy vienen unas amigas –Explicaba animadamente- y las sorprenderé con el mejor chocolate caliente que he probado

-Me honras, Maki –Contestó- ¡Ah!, y para que ella también me recomiende

Acercándose a mí, extendió una bandeja de chocolates blancos. Lo tomé, no diría que no a algo dulce, pero apenas lo eché en mi boca comprendí que no solo era 'algo dulce'.

-¡Ahhh! –Exclame alucinada- Es fabuloso

El hombre miró con orgullo la reacción que provocaba su creación y sonrió.

Después de un rato, en donde yo veía las vitrinas y Maki-chan con el señor Benoni hablaban, me llamó mi novia

-¿Vamos? –Dijo aproximándose

Asentí, y luego de dar una despedida rápida volvimos por el mismo camino.

-Es… un hombre bastante peculiar –Le dije

-Bueno… ya sabes…en Italia la gente es… más de piel –Manifestó

Dándole un pequeño empujón agregué- Deberías aprender algo

Con su mirada seria me penetró y el miedo se apoderó de mí, e incluso, estaba a punto de disculparme, sin embargo, en un movimiento suave metió su mano y la mía en su bolsillo, entrelazando nuestros dedos.

Me sonrojé un poco, y una sonrisa hiso el ademán de salir de sus labios.

-Tonta –Susurré

A lo que ella apretó más mi mano

(…) (…)

De camino a casa pasé a comprar unos ingredientes. Lavé mis manos y me puse a cocinar.

Cuando por fin terminé, vi la hora, y sorprendida me fui a bañar y a cambiar.

Mi look era bastante sencillo. Tenía unos jean azules desgastados, unas botas grises que llegaban hasta mi pantorrilla un suéter gris y una bufanda azul en mi cuello.

Salí de mi casa a eso de las 8.15, ya que, cada vez más tiempo a solas pase con Maki-chan, de mejor humor me encuentro, y así podría disfrutar de mejor manera la víspera de navidad

Al llegar, Taeki-san me abrió la puerta, y me avisó que Maki-chan aún no estaba lista, por ende charlamos un rato antes que Maki apareciera.

-¿Nico-chan? –Llamó desde el umbral- Llegas temprano

Pasando la vista por su cuerpo me fije en cada uno de los detalles. Un pantalón negro ajustado remarcaba su figura y, una polera café era cubierta por un chaleco rojo con cola larga. Un brazalete rojo y dorado decoraba sus muñecas, pendientes rojos y nuestro colgante cayendo de su cuello.

-¿Qué rayos? –Murmuré mientras se acercaba para sentarse a mi lado. Se veía muy bien

-¿De qué hablas? –Me miró levantando una ceja

-¡Ah! Nada –No contaba con que me escuchara

Con esa mirada algo gélida me obligó a hablar

-Te ves linda –Inflando mis mejillas y apartando mí vista le contesté

-T-Tú también te ves linda, Nico-chan –Dijo sonrojándose

Ambas sonreímos- Ya que falta para que las chicas lleguen, ¿quieres ir a mi habitación?

Asentí, y nos encaminamos. Sin embargo, apenas pasamos el umbral, Taeki-san nos detuvo

-Señoritas, no pueden romper la tradición –Dijo con algo de seriedad

Las dos miramos con duda, hasta que él con la vista, nos incitó a mirar arriba nuestro. Y claro, un muérdago colgaba sobre nuestras cabezas

Miré a Maki con duda. Taeki-san era una de las personas en la que Maki-chan depositaba más confianza, inclusive, meses después del incidente con Touma, él se enteró de lo nuestro, y nos apoyó con esmero. Sin embargo, aún era algo vergonzoso besarnos en público.

Maki tomó mi cara con una mano, mientras con la otra la colocaba en mi cintura. Cerramos los ojos, labio y labio se tocaron unos segundos. Nos separamos y dándole una mirada rápida a Taeki-san me encontré con que estaba conteniendo una risa.

(…) (…)

Las chicas empezaron a llegar por grupo. Las primeras fueron Nozomi y Eli. Después las de segundo, para terminar con las de primero.

En la sala de estar nos acomodamos las nueve, y después de charlar un poco, Hanayo, Kotori, Nozomi y yo nos dispusimos a hacer la cena.

Nos demoramos casi una hora y sin contar la cocción, sin embargo, la comida no podría haber quedado mejor.

Nos sentamos, ya que las chicas que habían puesto la mesa, también la servirían. A mí me sirvió Maki-chan

-Ojou-sama –Dijo con el plato en su mano- Le traigo su cena

-Muchas gracias –Dije siguiéndole el juego, desde el intenso juego con la harina, ese tipo de cosas se habían hecho habituales- ¿Y me podría informar de que se trata este apetitoso platillo?

-Claro- Dijo colocándose muy cerca de mí- Como entrada tenemos un mix de frutos secos y las ensaladas típicas de esta época. Como plato de fondo disfrutara de pavo relleno de especias y colocado en una cama de piñas, para lograr un agridulce suave al paladar, todo esto acompañado de arroz al estilo árabe gourmet. Y como postre, mi plato favorito… -Dándome un fugaz beso agregó- Sus labios

-Juraba que el postre sería tarta –Sonreí

-Maki-chan –Nos interrumpió Nozomi- Deja de devorarte a Nicochi antes de cenar

Maki la miró de forma seria- No porque te gustaría que Eli te hiciera lo mismo debes ponerte celosa

-Uy… -Contestó- La gatita tiene colmillos

Con una mueca se fue a la cocina de nuevo.

-Si Maki-chan se enoja, será tu culpa –Le dije suspirando

-No lo hará –Rio- Y perdón, es solo que olvidé mi cámara, así que me sentía frustrada al no poder inmortalizar el momento

-Idiota

Después de eso, las cuatros esperamos a que llegaran las chicas. Dimos las gracias y comimos.

Entre charla y charla se nos pasó la hora, y ya eran más de las doce, así que era hora de entregar los regalos.

-Bien chicas –No llamó Honoka- Ahora entregaremos los regalos

-Yo parto entonces –Dijo Rin moviendo sus manos alocadamente

-¡Está bien! –Sonrió Honoka- ¿Quién es tu santa secreto?

-Es Kotori-chan –Acercándose le entregó el paquete, y ante los ojos de todas apareció una set de costura con una tela color calipso bellísima

-¡Gracias Rin-chan! –Dijo felizmente la peligris

-Kotori, es tu turno –Le dijo Honoka

-Okey~ –Dijo poniéndose de pie y dándole una caja a Maki-chan

Al abrirlo un traje de Santa Claus versión femenina relució- ¿Lo hiciste tú, Kotori? –Preguntó

-Sep, y espero que te lo coloques ahora –Manifestó

-¡Si, vamos Maki-chan! –Apoyaron todas

-Bien, bien –Dijo saliendo de la habitación

Pasaron solo unos minutos cuando Maki asomó la cabeza y llamó a Kotori. Ésta se acercó y después de unos segundos salió jalando a Maki-chan

Y en ese momento comprendí la diferencia entre bonita y preciosa. El traje consistía en un vestido de mangas largas con piel blanca en los puños, pero la falda era muy corta aunque también tenía terminaciones de piel. Un cinturón negro y ancho marcaba su muy delgada cintura. Pompones blancos en medio hacían la idea que eran botones. Sus pies eran cubiertos por unas botas rojas que le llegaban debajo de la pantorrilla. Y un gorro cubriendo su cabeza.

Maki estaba suavemente sonrojada mientras sostenía la falda con sus manos- ¿Me lo puedo sacar ya?

-¡No! –Exclamé recibiendo las miradas traviesas de las chicas- E-Es decir, se te ve bien, y Kotori-chan se esforzó mucho por eso

-Es verdad Maki-chan –Me apoyó Kotori

Con un puchero en sus labios accedió usarlo un rato más y entregó su obsequio.

-Gracias Maki-chan –La abrazó Nozomi- Me encanta

Haciendo que Eli la ayudara, se colocó un brazalete color plata con adornos de lunas, soles y estrellas

-A mí me tocó… -Decía mientras miraba a todas las chicas- Umi-chan

Umi extrajo un libro de poemas y un cuaderno con una llave de sol en él. Colgando, había un collar con otra llave de sol.

-El colgante es la llave –Agregó Nozomi- Así nadie vera las cosas eróticas que escribas sobre Kotori-chan

-Y-Yo no¬

-Vamos Umi-chan, entrega el presente –La apuró Honoka

Suspirando dijo- Está bien

Se paró frente a la rubia del grupo. Y sonrojada se lo entregó (¿Cuántas tsunderes tenemos acá en µ's?)

Eli lo abrió, y dentro había un juego de mostacilla.

-¿C-Cómo supiste? –Preguntó, yo tampoco sabía que hacía esas cosas

-Nozomi me dijo –Contestó Umi

-Nozomi~ –La "reprochó" Eli

Eli se levantó y le extendió una caja a Kayochin

-¡Wow! Las amo –Dijo mostrando unas figuritas de unas idols

-El cuaderno está hecho para dibujos –Añadió Eli guiñándole el ojo, mientras Kayochin lo veía

-Hanayo-chan, es tú turno –Seguía coordinando Honoka

-¡Ah, sí! –Se sorprendió- P-Pero

-¿Uhm? ¿Pasa algo? –Preguntó Nozomi

-B-Bueno… debe haber un error, p-pero –Se levantó, y le extendió un presente a mi novia- Tú eres mi santa secreto, Maki-chan

-¿Quién puso el nombre de Maki dos veces? –Preguntó Umi

-Yo puedo explicarlo –Sonrió Kotori

-¿Tú los pusiste Kotori-chan? –Preguntó Honoka

-No, pero creo que se malentendió mi regalo –Explicaba- Mi santa secreto era Nico-chan, y no encontré mejor regalo que una vista sexy de Maki-chan

No sabía si correr abrazarla y agradecerle, o golpearla por ser tan influenciada por Nozomi…

Hubo unos segundos de silencio… Como si estuviéramos tratando de comprender lo que dijo. Sin embargo, cuando todas entendimos, reímos a carcajadas.

-Bien… No se le puede hacer nada –Dije

-Porque tampoco quieres que Maki-chan se cambie –Sonrió traviesa la pervertida pelipurpura

-C-Como sea- Le pasé mi regalo a Honoka

Y dentro, había una almohada con forma de dulce de arroz.

-¡Un dango gigante! –Exclamó con sus ojos destellantes

-Honoka es¬ -Trató de detenerla Umi, pero tarde, ya la había mordido

-No sabe a dango –Lloró

-Porque es una almohada, Honoka –Le explicó Maki-chan

-Y bien, ¿le darás el regalo a Rin? –Le pregunté para concentrarla

-Es cierto –Dijo entregándole su obsequio

-¡Nya! –Dijo emocionada- ¡Ramen!

Todas volvimos a reír. Y después de un rato de charla, Nozomi se levantó

-Chicas, creo que todas trajimos un regalo para alguien en especial –Todas asentimos- Entonces repártanlo

Todas sacaron los respectivos envoltorios y los repartieron. Di una mirada rápida, para ver que le traían las otras chicas a sus parejas, sin embargo, me arrepentí después de ver a Kotori-chan regalarle un látigo a Umi-chan y a Nozomi obsequiarle unas esposas a Eli.

Me senté frente a Maki, e intercambiamos regalos.

Al abrirlo, me encontré con un osito de peluche. Y al devolverle la mirada, me la encontré con la misma mirada sorprendida que probablemente yo tenía.

Ambas nos sonreímos, con cariño mostramos nuestros ositos.

-Gracias Nico-chan –Dijo poniendo al peluche blanco con listón rosa en su falda

-Gracias Maki-chan –Dije poniendo el peluche café con listón rojo en mis piernas

-¡Oigan! –Llamó Honoka- Les tengo un regalo a todas

Pasando puesto por puesto nos entregó unos llaveros con las letras µ's.

-Es pequeño –Declaró- Pero creo, que cuando seamos mayores y lo veamos, recordaremos todas las cosas que hacíamos juntas, como repartir regalos, bromear en las prácticas o apoyarnos como amigas. Chicas, las quiero mucho

-Ohh… -Se escuchó en la sala

-Hey, ¿Maki-chan? –le susurré

-¿Qué?

-¿No les darás el chocolate caliente?

-C-Creo que ya no –Dijo sonrojándose un poco- E-Es vergonzoso

Suspiré, y tomándola de la mano, nos levanté a ambas- Chicas, Maki-chan también compró algo para nosotras

-¿De verdad-nya? –Preguntó Rin enérgica

-¿Qué es? ¿Qué es? Insistía Honoka

-B-Bueno, compré chocolate caliente para todas –Dijo avergonzada

-El cual es su preferido –Maki asintió viendo el piso

-Oh… Que tierna –Dijo Nozomi tratando de abalanzarse sobre ella, a lo cual reaccione y moví a Maki

-Quien iba a pensar que Maki lo compraría para nosotras –Dijo Umi ignorando la caída de Nozomi, lo cual me pareció gracioso

-¡Nya! Que bien –Exclamó Rin

-¿Qué mejor que chocolate caliente antes de dormir? –Le dije a Kayochin

-Hoy dormiremos muy bien –Afirmaba

-Era obvio que el trio Navigators sería el más feliz –Rio Eli

Y otra vez, acercándola le dije- ¿Ves? No tiene nada de vergonzoso -Me sonrió

-Maki-chan, ¿te ayudo a servir? –Preguntó Kotori

-Yo también te ayudaré –Decía Nozomi acercándose

-¡Ah! También hice galletas –Les sonreí

-¿Ustedes dos se han puesto de acuerdo? –Preguntó Hanayo acercándose para ayudar, mientras caminábamos a la cocina

-Sí

-No

Dijimos al mismo tiempo, a lo cual reímos las cinco.

-Y Maki-chan –Preguntó Kotori- ¿Podemos usar los chocolates que están ahí para hacer cupcakes?

-Claro, usen lo que quieran –Nos dijo

(…) (…)

Ayudé a Kotori a cocinar, en tanto Nozomi y Maki-chan preparaban el chocolate.

Con una bandeja repleta de cupcakes y galletas, y mas el chocolate caliente recién preparado, nos sentamos a ver un clásico navideño.

Todas comimos mucho. Y realmente no me sorprendió ver a Rin, Nozomi y a Kotori quedarse dormida, sin embargo, para Taeki-san quien siempre estaba cerca, notó algo extraño y pidió a probar un cupcake, que claro, se lo dimos, no obstante, él no pareció apreciarlo.

-Señoritas, no pueden comer esto –Dijo preocupado- Esos chocolates contenían alcohol

Okey, nunca más cocino algo que está en un idioma que no entiendo, ni menos si es en italiano, que definitivamente no es lo mío.

-Lo mejor será que vayan a descasar –Dijo ayudando a tomar a Rin quien al parecer había comido más que todas.

Me sentía algo mareada, pero podía caminar con normalidad- Maki-chan, ¿Estás b¬? Oye idiota, no debes comer eso

Le dije quitándole el cupcake de la boca- Ven, te ayudaré

Haciendo que se afirmara de mí la hice caminar a su habitación, y dando una mirada hacia atrás, vi como Hanayo y Honoka se encontraban bastante bien, pero Nozomi y Kotori necesitarían ayuda para caminar. En cambio, Umi y Eli, aunque se les veía tambalearse, llegarían sin ayuda a su habitación.

Las chicas entraron a las habitaciones que les indicaba Taeki, mientras tanto acostaba a Maki-chan. Cuando ya estaban todas adentro de una pieza lo llamé.

-Taeki-san, lo siento mucho –Me disculpé

-No es su culpa Nico-sama –Me contestó- Y estoy seguro que Maki-sama está feliz de pasar noche buena con usted, pese a este final

-Muchas gracias –Le dije sonriendo

Volví a donde se encontraba Maki, cerrando la puerta con dificultad. Me acosté a su lado y acomodándome sobre mi brazo izquierdo la aprecié

-Nico-chan… -Susurró Maki-chan sorprendiéndome un poco, ya que juraba que estaba durmiendo- Te puedo contar un secreto

Sonreí y con cariño murmuré- Claro

-La verdad… es que tenía mucho miedo –Confesó

-¿Miedo? ¿De qué? –Pregunté

-Tenía miedo que no saliera como lo había imaginado –Suspiró

-¿Y salió cómo lo imaginaste?

-No… -Dijo tomando mi mano- Es aún mejor

La besé, y suspirando dije- ¿Y tus padres?

-Es la primera vez que paso una navidad sin ellos… Pero no es mucha la diferencia –Sonrió

-¿No los extrañas?

-Algo… pero es soportable, siempre se van de viaje

-Maki-chan… Nadie te creerá si lloras –Le dije pasando mi mano por su cara

-Es extraño, estoy feliz de estar contigo, pero aun así los extraño –Me abrazó quedando en mi pecho

-Es obvio que los extrañaras… -Comencé a acariciar su pelo- Son tus padres… y por mucho que te obligaran a casarte con alguien, tu sabes que lo hacían pensado en ti…

-Lo sé… -Me contestó- Gracias Nico-chan

-No es nada –Le sonreí

Estuvimos unos segundos en silencio, hasta que…

-Nico-chan, ¿me quieres? –Preguntó mirándome fijamente

-Te quiero, es más, te amo – Le contesté desconcertada

-Nico-chan, no mientas –Dijo inflando sus mejillas

-No estoy mintiendo –Le contesté

-Entonces, ¿por qué somos las únicas que no han tenido una noche intensa? –Preguntó con voz molesta

-¿I-Intensa? –Me sonrojé- Te refieres a ir al otro nivel

Asintió -Nozomi dijo que las parejas lo hacían siempre

-No es así –Contesté molesta, ¿qué rayos le está enseñando Nozomi a mi inocente Maki-chan?

-Nozomi, y Kotori ya lo hicieron –Prosiguió

–"Nozomi, ¿Qué le hiciste a Kotori-chan?" –Me pregunté- No te acerques, la perversión se pega

-¿Y no quieres hacer cosas pervertidas? –Colocándose arriba mío su falda se levantó ligeramente

-N-No es que no quiera –Me sonrojé, definitivamente Kotori había hecho ese traje provocativo intencionalmente

-Entonces Nico-chan –Afirmando mi cara con sus manos, me besó apasionadamente- Tenemos toda la noche

-¡M-Maki-chan! –Trataba de detenerla, pero ella es claramente más fuerte que yo, y lo peor, era que el alcohol estaba empezando a hacer efecto y mi cuerpo se sentía adormilado

Efectivamente, esos pompones no aparentaban ser botones, lo eran, y Maki ya había desabrochado la mitad, dejando a relucir un bello sostén de encaje negro con detalles dorados.

Le agradecía y criticaba a la luna con desvelo. Me daba una vista perfecta… pero… ¡Me daba una vista perfecta!

¿Cómo la detendría si una parte de mi quería seguir viendo su cuerpo al azul de una hermosa luna de 25 de diciembre?

¡Ya! Esto debía parar… Un botón más y estaría completamente a su disposición…

-¡Maki-chan! ¿No crees que deberíamos ir a dormir? –Pregunté aun sabiendo la respuesta

-¿No quieres que siga? –Dijo con un puchero

-Sí quiero –Confesé- Pero Maki-chan, Santa-san no vendrá si no estás durmiendo

-T-Tienes razón –Dijo algo sorprendida- Me pondré mi pijama

Tirando todas las prendas que llevaba se empezó a cambiar, yo también me cambié, terminando antes que ella, y mientras esperaba trataba de recitar π y voltear mi mirada.

Por fin nos acostamos dispuestas a dormir. El frío no era tan intenso, sin embargo nos acercamos lo más que pudimos a la otra.

-Nico-chan, quiero ser una contigo –Me dijo mientras me abrazaba

-Maki-chan, te prometo que para la próxima vez que me quede aquí no dormirás

-No me refería a eso, pero está bien –Me sonrojé y ella sonrió

-idiota-Susurré

-Te amo, y mucho Nico-chan –Me murmuró

-"Creo que el alcohol la hace ser más honesta" –Suspiré –Yo también te amo, y mucho

Maki me atrajo más a su cuerpo y con cariño le correspondí dejándome llevar, y con eso sentimientos, traté que el sueño disipara el alcohol.

(…) (…)

El sol golpeó nuestra cara, y ambas despertamos. El reloj marcaba las 10 de la mañana y el clima se veía prometedor. Pero algo llamado resaca golpeaba por primera vez a Maki-chan

-Pareces enojada –Le dije acostada de bruces

-No lo estoy… -Me dije colocándose su pulgar e índice en su entrecejo

Me acerqué muy lentamente y besé sus labios con cariño. Ella me correspondió y sonriendo me separé

-Sep, no estás enojada –Besando su frente me levanté

Maki-chan me sonrió y se volvió a tapar

-¡Oye! –Casi lanzándome arriba de ella le dije- Levántate

-Me duele la cabeza –Con un movimiento ella quedó arriba mío, y se relajó nuevamente

-Pesas –Me quejé- Te traeré una pastilla para el dolor, pero levántate

Suspiró y se sentó en la cama- Bien… pero me demoraré en bajar

-Tómate tu tiempo –Le sonreí en tanto abrochaba mis pantalones

Bajé, y el aroma de panqueques recién hechos despertó mi apetito.

-Nico-chan –Sonrió Kotori sacando otro panqueque del sartén- Qué bien que despertaste

Asentí- Y, ¿Cómo durmieron?

-¿Qué? –Dijo la tetona pelipúrpura- Acaso Nicochi y Maki-chan durmieron

-¡C-Claro! –Dije sonrojándome un poco, aunque no sabía bien porqué

-Nico-chan, ¿se fueron directo a dormir con Maki-chan? –Preguntaba Hanayo batiendo una masa

-Obvio, ella estaba muy mareada

-Elichi también lo estaba –Dijo Nozomi- ¡A no ser…!

Kotori-chan y Kayochin miraron a Nozomi con curiosidad, mientras yo ponía una sorpresa involuntaria en mi rostro

-Nunca lo has hecho con ella, ¿verdad? –Rio traviesa y malignamente

Todas las miradas eran dirigidas a mí, y pese a que siempre soy el centro de atención, ahora me era incómodo.

Desvié la mirada y caminé directo al fregadero- Dejen de hablar de esas cosas, pervertidas

Kotori sacó la lengua sonriendo, Nozomi infló el pecho orgullosa y Hanayo repetía – ¿P-Pervertida? ¿Y-Yo?

-Nico-chan, pensé que me llevarías algo para el dolor –Me sorprendió Maki-chan, mientras me miraba fijamente apoyada sobre el arco de la puerta

-¡Kayochin! ¡Muero de hambre-nya! –Gritaba Rin entrando a la cocina- ¿¡Cuánto falta!?

-¡Kotori-chan! –Empujando a Rin y lanzándose sobre la falda de Kotori, Honoka lloraba- Moriré si no me alimentas ahora

-¡Oigan! ¡No griten! –Decía Umi con un tono lo suficientemente elevado para contradecir su petición- Esta no es su casa

-¿Por qué hay tanto ruido? –Entraba ahora a la habitación Eli

-¡Elichi! –Dijo Nozomi acercándose- Nicochi me dijo pervertida

Se armó un griterío, entre que Rin y Honoka pedían comida y Eli trataba de calmar a Nozomi. Fue tan escandaloso, que mi pelirroja colapso

-¡Basta! –Dijo en un grito que calló a todas- ¡Tengo jaqueca y ustedes solo la empeoran!

-L-Lo senti¬ -Trató de disculparse Eli

-No es necesario que se disculpen, solo salgan de la cocina –Les pidió mientras con una mano sujetaba su entrecejo

-P-Pero… -Ahora era Kotori quien intervenía, pero Maki no la dejó

-Fu-e-ra –Dijo apuntando la puerta

Todas empezamos a salir con algo de tristeza, Maki-chan se había enojado, y si existía alguien más cabeza dura que ella, no queríamos conocerla

Como estaba al final de la cocina, era la última de la fila. Y dándole una mirada rápida a Maki me dispuse a salir

-Tú no –Dijo afirmando mi muñeca- Necesito alguien que me alivie el dolor

Jalándome dentro me abrazó por la cintura y me besó

-Creo que no estás tan mal –Dije sonriendo

-Mi cabeza me está matando –Sonrió- Pero mataría por un beso tuyo

-¡Que mala! –Exclame sorprendida

-Y tú eres peor –Con su semblante más serio agregó- Mataste el momento

Sonreí, lo había hecho pero era divertido verla hacer esas expresiones. Y de todas formas, es fácil hacer que Maki-chan siga la corriente, en especial si es un beso.

Me acerqué y la besé como pocas veces puedo hacerlo. La abracé por el cuello y la obligué a bajar unos centímetros, mientras ella tomaba mi cintura para acercarme aún más. De esa forma nos perdimos por unos cinco minutos en la intensidad y calor de ese tacto tan especial.

Sentí una extraña sensación. De esas que sientes solo cuando estás dormida en medio de la noche y despiertas porque alguien te estaba mirando. De esa misma forma me sentía.

Abrí mis ojos, y Maki aún disfrutaba con sus ojos cerrados. La separé un poco, y al darme la vuelta me encontré con cuatro miradas traviesas.

Maki volteó la cara con enojo, y yo me dirigí a reprenderlas. Al verme acercarme con mis puños apretados y una mueca de enojo intenso, huyeron.

Me volteé suspirando, espero que no esté molesta conmigo también.

-Maki-ch¬ -No alcancé ni a terminar, cuando ya me tenía sellada con sus labios

-Nico-chan, es la navidad más intensa y divertida que he vivido –Dijo con seriedad- No sería lo mismo si no estuvieras aquí… Gracias

-No me des las gracias –Le dije- Esto lo hago porque amo estar contigo

Se dio la vuelta algo sonrojada y agregó- De verdad… µ's es un dolor de cabeza

Me aguanté una risa y salí a cobrar venganza con Nozomi y sus nuevas vasallas: Kotori, Rin y Honoka. Pero antes de salir, me volteé, topándome con Maki-chan colocando un chocolate en su boca

-También ha sido una Navidad muy divertida- Manifesté- Pero espero que no olvides la promesa de anoche

Con su cara ruborizada me miró fijo durante unos segundos. Y con esa reacción salí satisfecha de la habitación, rumbo a buscar a mis presas…

(…) (…)


Okey! Eso es todo por ahora ^^! Lo bueno es que me voy con una promesa hecha ñ.ñ, la próxima vez que Nico se quede con Maki, será algo más Hot *^*

Ems… y contestando a Guadas 06, si preguntas por "Oportunidad Inefable": Ese fic debería haber sido un one-shot, pero al parecer a varios les gustó, por ende, sacó cap de vez en cuando… Ahora, si preguntas por "Cielo Nocturno", se supone que ya debería haber sacado el cap 1, sin embargo, arreglando el final y con el especial de este fic, mas el otro cap de Op. In. Me quedé sin tiempo u.u, pero lo subiré pronto ^^!

En fin! Gracias por leer. Ojalá hayan tenido una feliz navidad, y que pasen un próspero e interesante año nuevo. Los espero en otro especial o fic *0*!