Wow, wow, wow... vaya que me atrasé con esto. Una disculpas a todos. ¡Sigo viva! ¡Algo ocupada pero viva!

Me tomaré mi tiempo para las siguientes entregas, pero trabajare en otras historias *cofstevenuniversecofjaspercoflapislazulicoff*


Reunión de consejo en Ciudad República posterior al regreso del Avatar Korra y la Directora Ejecutiva de Industrias Futuro, Asami Sato.

8:30 a.m.

Korra se encontraba aburrida, la mayoría de los temas tratados en el listado de la reunión no le correspondía a ella resolverlos, pero estaba obligada a encontrarse presente. Ella misma se había quejado en el pasado de no ser tomada en cuenta, así que ahora debía de estar presente a pesar de sus continuas protestas por iniciar esas reuniones a horas tan incomodas de la mañana. Se colocó un lápiz entre la nariz y el labio superior, jugueteando mientras veía de reojo a la razón más importante por la que asistía no obstante lo difícil que aun le era madrugar. Asami observaba atenta la reunión y tomaba notas en su libreta mientras escuchaba al Presidente Raiko. Al sentir encima la mirada de su novia solo giró los ojos y le quitó el lápiz. Ella también deseaba que todo terminase pronto para salir de ahí junto con su muy fastidiada pareja.

Tenzin se aclaró la garganta antes de tomar la palabra, llamando la atención de su anterior alumna, quien solo bostezó y comenzó a hurgar entre los planos, diseños y anotaciones que la ingeniera tenía en una carpeta frente a sí. Su novia prestaba atención a la palabra del viejo Maestro Aire, referente a la petición de Lin de formar un grupo especial, encargado de dar seguridad al portal. Eso le incumbía al Avatar, quien abandonó de momento la carpeta para participar activamente hasta que el tema se desvió a asuntos oficiales.

Asami miró de reojo a su pareja juguetear nuevamente con los documentos y suspirando se los entregó sabiendo lo mucho que le gustaba curiosear entre el papeleo y los bocetos de sus proyectos. Korra se recargó hacia atrás sacando sobre tras sobre. Algunos no contenían más que contratos y los regresó de inmediato a su lugar. Otros, los más interesantes, eran bocetos a lápiz y pluma.

Una ilustración que no pertenecía a la ingeniero le hizo sonreír unos momentos recordando los eventos que habían pasado justo la tarde anterior.


Meelo estaba sentado en las escaleras que conducían al templo. Rara vez se le veía tan silencioso o concentrado. Poki, su lémur volador, yacía recostado un par de escalones arriba. Su respiración se movía de arriba a abajo con suavidad, disfrutando de un sueño constante, dejándose calentar por los rayos del sol de otoño. Korra se había quedado sola cuando Asami había ido a entregar unos documentos a Tenzin, prometiéndole regresar lo más pronto posible para pasar el resto del día juntas. A esa hora no había mucho que hacer, así que sus pasos la condujeron al lado del joven Maestro Aire.

-¡Meelo! Vaya que es raro verte tan concentrado. ¿Qué haces? -se asomó por encima de su hombro y profirió un murmullo de asombro al ver que estaba dibujando con increíble perfección a su mascota. - ¡Wow! ¡Eres bueno!

-¡Ya lo sabía, soy el mejor! -Le cerró un ojo mostrándole los demás dibujos que tenía guardados en su libreta. Korra se sentó a su lado hojeándolos con gran interés. Los primeros eran varios estudios de Poki y los bisontes voladores de la isla.

-¡Oh, wow, hasta puedo reconocerlos! Este es el de Jinora, ¿verdad? -Señaló las pecas en la nariz de la criatura y Meelo afirmó con orgullo. El Avatar rió un poco cuando el siguiente fue Juicy, la montura de Opal con su inconfundible nariz siempre mocosa. -Tienes mucho talento.

-Claro, Korra. ¡Nací con talento! Aunque... -miró para todos lados asegurándose que nadie los escuchara.- Mi sifu es una persona aun más talentosa.

-¿Tu sifu? Oh, ¿alguien te enseño a dibujar? -Apenas levantó la mirada, puesto que ahora las ilustraciones pasaron a ser de personas conocidas. Estaba la familia de Tenzin, muchos eran retratos, otros estudios de movimiento de los Maestros Aire. También encontró un par de ilustraciones de Mako y Bolin, pero las siguientes fueron las que verdaderamente la dejaron boquiabierta. Vio a Asami, su ahora pareja, en muchos retratos. Por el peinado y las ropas, se notaba que habían sido inspirados durante diferentes periodos de tiempo. Si Meelo hubiera sido un adulto, Korra se habría puesto muy celosa, bueno, mucho más de lo que estaba en ese momento. -¿Puedo preguntar quién es ese maestro misterioso?

-¿En serio no lo sabes? Mmh... tal vez deba de darte algunas pistas.- Korra giro los ojos cuando el chico le quitó sus dibujos sueltos para sacar de su mochila una carpeta con forro de piel. Ceremoniosamente lo puso en manos del Avatar, quien sintió una extraña familiaridad al tomarlo. -Vamos, a ver si lo descubres.

Soltó una carcajada aceptando el reto y abrió la carpeta, notando que los dibujos iniciales eran muy sencillos, pero todos venían acompañados de anotaciones con la letra de Meelo. Lo segundo que le llamó la atención fueron las líneas bien trazadas que marcaban errores en anatomía de esos primeros dibujos. Conforme avanzaba podía ver que el trabajo del joven Maestro Aire mejoraba. Sonrió al ver los primeros intentos de dibujar animales y también notó que las correcciones del misterioso sifu se volvían cada vez menos frecuentes. Se sonrojó algo apenada al ver que había después de eso, muchas ilustraciones suyas, incluso una algo maltratada que Meelo había utilizado para tratar de encontrarla durante sus días de ausencia en el Reino Tierra.

Giró una hoja reconociendo de golpe la procedencia de las siguientes ilustraciones. Estas contenían algunas notas de Meelo y se notaba el esmero puesto en cada línea. Notó que las hojas incluso eran de una procedencia diferente. Eran del papel que usualmente usaban los ingenieros para hacer anotaciones, puesto que tenían grabados y graduaciones.

-Esto... esto... - Se colocó la mano en la boca mirando las fechas estampadas en cada hoja. Las ilustraciones solo eran de ella. De Korra. Algunos eran documentos oficiales con el sello de Industrias Futuro escrupulosamente grabado en cada hoja, donde estaban estampados los diseños del nuevo traje de los maestros aire y en todas era Korra la modelo. Hasta la ilustración más sencilla estaba dibujada con extremo cuidado. Meelo se apresuró a mostrarle las ultimas ilustraciones de su colección personal. Nuevamente el tema principal era Korra, pero estos sólo eran imágenes donde se le mostraba sonriendo, expresando felicidad, esos tampoco eran de Meelo y la muy conocida firma al pie lo confirmaba. Tenía los ojos bien abiertos y las mejillas totalmente rojas. Sabía que su novia era buena dibujando, lo descubrió cuando la vio llenar un par de libretas con ilustraciones durante sus vacaciones. -¿Asami te... te enseño?

-La vi un día trabajando en un plano en la oficina de papá y le pregunte si sabía dibujar otras cosas que no fuesen máquinas o edificios. Entonces me enseñó esos dibujos, los de los trajes. Y claro que siendo ella tan considerada y notando mi talento innato, comenzó a rogar por enseñarme y... -Korra levantó una ceja y Meelo suspiró- Ok, ok, yo le pedí que me enseñara. ¡Hahaha, la primer persona que aprendí a dibujar fue a ti, Korra!

-¡Meelo! -El joven se congeló y volteo lentamente hacia donde la voz de Asami había pronunciado su nombre. La pelinegra estaba de pie en la escalinata del templo, bastante tensa. Sus mejillas estaban totalmente rojas. Korra rápidamente cerro la libreta para devolvérsela a Meelo, aunque ya era demasiado tarde, la ingeniera los había descubierto. - ¡Quedamos que te enseñaría pero mantendrías el secreto!

-¿Qué secreto? ¿El que te enseñara a dibujar? Tranquilos... no es tan malo... digo, no es que vaya a ponerme celosa de lo que ustedes dos estuvieran haciendo en mi ausencia... -Sonrió rascándose la nuca con un pequeño sonrojo en las mejillas. -¿O hay otro secreto más, soldado Meelo?

-¿AH? ¿Otro? ¿Otro más? ¡Hahaha, nooo! ¿Cuál podría ser..? -La mirada de Korra se posó amenazante sobre el joven Maestro Aire, quien simplemente no resistió la presión. -¿Qué Asami pasaba día y noche dibujándote? ¿No... te lo contó ella ya?

-¡Meelo! ¡Basta! -Asami protestó completamente roja de la pena. Se alejó unos pasos para recargarse en un barandal con las manos en el rostro. El menor rápidamente junta sus cosas, sabiendo que ha metido duro la pata. De hecho habría jurado que la ingeniero ya le habría contado esos detalles a Korra y eso lo tenía asustado, sin saber que hacer de momento.

El Avatar le sonrió al menor, despeinándolo, indicándole después con una sonrisa que no ah hecho nada malo. Meelo aun así se apresura hacía Asami y haciendo una reverencia se disculpa lo mejor que puede antes de salir corriendo hacia otro lado de la isla. Korra espera a perderlo de vista antes de lentamente acercarse a la joven ingeniera que aun continua con las manos en el rostro, incapaz de dirigirle la mirada. La morena pasa lentamente el brazo por su cintura, recargando lentamente la mejilla en el hombro de su pareja.

-Entonces... ¿Puedo considerarme tu musa?- Asami se eriza por completo, aun mas apenada que hace unos segundos. Korra incapaz de hacer que la mire nuevamente se decide por hacerle pequeñas cosquillas en los costados, logrando que la ingeniero retire las manos del rostro para intentar detener entre risas las manos entusiasmadas de su pareja. Sus dedos se entrelazan y sus labios se unen en un beso tierno cuando por fin quedan frente a frente.

-Si... eres mi musa y te dibujaba cada vez que me era posible porque no quería olvidar ni un solo detalle de ti. -Baja la mirada nuevamente avergonzada por lo ocurrido hace unos momentos. -Le dije que guardara el secreto, no quería sentirme una adolescente enamorada.

-Eras una adolescente enamorada... de hecho, para mi aun lo eres. Igual que yo. -Le da algunos besos pequeños en el mentón, arrancándole nuevas sonrisas. Súbitamente Korra se detiene, y por la expresión es seguro que se una nueva ocurrencia ha pasado por su mente. Le toma la mano a Asami, conduciéndola escaleras abajo. -¡Cierto! ¡Ven, vamos a buscar a Meelo!

-¿Ah? ¿Quieres que me disculpe o..? -Se deja llevar bastante confundida por la el súbito arrebato de la morena. Es un comportamiento normal para Korra, pero no siempre viene acompañado de explicaciones. Su pareja le guiña un ojo mientras apresura el paso, apenas aguantando las ganas de cargar a la pelinegra en brazos.

-¡Quiero que repare su indiscreción!


Korra sonríe extrayendo del folio una imagen a lápiz y carbón, cuidadosamente protegida por una capa de barniz y una película transparente de plástico: Un retrato hecho con la maestría y el esmero de un joven Maestro Aire, quien con unas líneas bien logradas detuvo en el tiempo un tierno abrazo, miradas llenas de amor y una promesa silenciosa entre Asami Sato y el Avatar Korra.

La mano de Asami la toca en el antebrazo, haciéndole voltear para encontrarse con sus ojos verdes y una tierna sonrisa mientras sus dedos se entrelazan. A lo lejos las voces de Tenzin y Raiko parecen desaparecer a la distancia mientras la atención de ambas queda reducida al contacto entre sus manos y una hoja de papel con un hermoso recuerdo estampado que atesoraran durante el resto de sus vidas.


Y Tenzin las regañó despues por quedarse pasmadas por varios minutos xD

Algo corto esta vez, pero esta idea de que Asami había dado clases a Meelo me andaba rondando en la cabeza desde hace meses.

AVISOOO: Estoy empezando a "trabajar" con una nueva ship directamente de Steven Universe: Lasper/Jaspis [Jasper y Lapis Lazuli]. Si alguien visita mi tmblr ya lo habrá notado. Si soy basura porque estoy a punto de subir un fic de ellas clasificacion M, con Noncon/Dubcon porque hace tiempo que tengo deseos de trabajar con una pareja tóxica y que a recibido mucho odio ultimamente.

¡Nos leemos pronto!