Cuadro I
Historia de cama….

Spike había tenido sexo por primera vez hace tan solo dos meses atrás. Lo recordaba perfectamente, con lujo ignominioso de detalle, cada maldita escena estaba grabada como una película en su mente. Aunque él prefería no pensar en aquel instante en el cual su mente quedó en blanco por un mísero instante.
Y mientras miraba a través de una vaso vacío con reminiscencias de zumo de naranja, la princesa de la armonía descendía con aquella elegancia propia de una gobernante. Bajó las escalares, los ruidos de sus cascos aceleraron el corazón del dragón quien se apuró a terminar su desayuno: un par de huevos revueltos que devoró sin mucho afán de comerlos realmente. Su mirada perdida estaba en sintonía con los ojos de la princesa que le miraba con la tranquilidad de siempre. Como si aquel horrible episodio nunca hubiera sucedido.

-Buenos días Spike-Comentó con una hermosa sonrisa la princesa purpura que se servía un poco de jugo en el vaso que el dragón había terminado de usar. Dio un sorbo largo, excelso y cautivador para posteriormente limpiar con su lengua los filamentos de jugo que escurrían por la cornisura de sus labios, aquellos trozos de suave carne provocaron que su compañero comenzará a sentir un extraño escalofrío que se extendió de su psique a su pelvis la cual comenzaba a palpitar pero su raciocinio la tranquiliza por este segundo.

-¿Sí?…-

-¿Sucede algo?

-No

-Spike ¿Te encuentras bien?-La princesa se acerca y el dragón se levanta bruscamente de la silla y emprende una rápida huida antes de que Twilight pudiera decir algo. Pero ella abusa de su poder, con un hechizo básico paraliza al dragón y lo regresa a su asiento. Entonces le enfrenta

-Spike, ¿puedes decirme que diablos pasa contigo?

Pero el dragón permanece apacible

-Desde hace dos meses que pareciese que me evitarás, no sé qué es lo que pasa. Pero debes explicarme ¿Que te sucede? ¿Fue algo que hice?

El silenció se apodera de la mirada esquiva de Spike, quien al sentir la presión; no puede guardar por más tiempo su comentario y explota con una sola palabra

-Me violaste

-Si es una de tus bromas, no tiene gracia-Un horror se apodera de la princesa

-No lo es ¿Quieres que de detalles?

Por un momento duda…

-Está bien…

La fiesta de Pinkie Pie se había extendido más allá de la cuenta. Todo mundo comenzaba a marcharse del castillo de la amistad. Rainbow Dash y AJ se marcharon juntas acompañadas por Fluttershy quien fungía de guía al ser la única que se encontraba en estado sobrio. Rarity se marchó por su cuenta, pese a tener unas copas encimas y Pinkie Pie estaba tirada en el suelo inconsciente pero viva. Twilight apenas podía ver bien, el alcohol en su sangre comenzaba a despertar algo en su interior. Algo para lo que ella nunca estuvo preparada, para ser exactos un instinto primigenio comenzaba a nacer, un ardor que le carcomía todo su ser, erizando cada folículo capilar que había en su cuerpo. Por primera vez en su vida sentía el demonio de la lujuria que arañaba sus entrañas y le susurraba palabras cargadas de deseo incitándola a entregarse al acto carnal más básico de cada ser.

De forma tambaleante y con su cuerpo hirviendo llega al cuarto de un durmiente Spike, este despierta por el ruido que produce la princesa quien ha perdido todo rastro de elegancia en su porte. Su melena revuelta y con aroma a fresas exclama "Arráncame", su rostro tan rojizo que pudiera ser una manzana en este instante aclama por un ente fálico que penetre en su boca y rellene su interior con el néctar más dulce que su cuerpo ardiente pide en este momento.

El dragón esta enmudecido, por primera vez veía a Twilight en tal estado de decadencia; y ya sea su inocencia o su sutileza no es capaz de ver los ojos de Sparkle los cuales incitan al olvido de todo pudor. Spike se acerca a ella, comentándole calmadamente "Toma asiento" Y la conduce a su cama con la más pura sinceridad. Pero ella no piensa claramente, en estos momentos es una máquina de placer, un mero instrumento para que el demonio del desdén tome su cuerpo y se entregue al placer infinito del sexo. No puede más y en un rápido movimiento alza sus cascos y tira al dragón a su cama posicionándose encima de él "¿Qué haces?" Pregunta amablemente el dragón incrédulo de la situación "Voy a hacerte mío" Dice entre jadeos y con su lasciva lengua comienza a explorar la boca de Spike quien en un instante usa su fuerza draconiana y hace a un lado a la obscena princesa.

-Twilight por favor tranquilízate-Comenta el ente purpura arrinconado en una esquina mientras la princesa se acerca cada vez más

-Estoy tranquila… Pero mi cuerpo no… Mira-La princesa se sienta en el suelo apoyándose con sus cascos traseros, los cuales abre en una "V" casi perfecta que muestra todo el interior de su vagina chorreante, pareciese una la entrada del círculo del placer, siendo sus líquidos el fuego que mantiene intacto aquel circulo tan dantesco como exquisito- ¿Puedes verlo? Yo sé que sí. Esta cosa, jamás ha sentido semental alguno en su interior… ¿Sabes cómo aliviaba mi ardor?- El dragón traga saliva, mientras una leve señal en su cabeza envía el signo a su falo de que comience a emerger del letargo en el que ocasionalmente se encuentra-Así-Alza su casco frontal derecho, lo introduce en su boca y lo saborea con todo el poder de la indecencia. Lo extrae y lo introduce en repetidas ocasiones mientras el dragón observa como su casco se convierte en una especie de paleta en el caldero hirviente de su bozal.

Entonces ella prosigue con el acto más simple y tabú de todos, en su "V" introduce su casco húmedo casco y procede a hacer una imitación de un glande que acaricia su exterior suavemente, excitando cada terminación nerviosa de su órganos externos, los cuales provocan una descarga que recorre toda su espalda y provoca que se retuerza suavemente en el suelo. No puede más, e introduce su casco al monte de venus y procede a girarlo en su interior revolviendo su útero y provocando otra descarga que termina por aniquilar todo rastro de pudor o decencia, en estos momentos ella ya no es más una hembra decente, debido a que finalmente ha renunciado al pudor al masturbarse frente al Apolo abnegado que mira con deseo y horror tal escena. Entonces al momento del primer orgasmo, el emprende su huida por la puerta mientras la princesa jadea con todo el ímpetu de su moral.

-No escaparás- Exclama a jadeos a la par que con su magia cierra la puerta y levita a Spike hacia la cama, con un hechizo lo inmoviliza. Comienza a lamerlo por su cuerpo, bajando desde el cuello al cual dedica un tiempo especial, y desemboca en por su cintura. El dragón quiere escapar, pero su cuerpo no responde, su moral le dice que es no correcto, pero el deseo también comienza a invadirle, no quiere aceptarlo, pero está disfrutando esto pese a que su rostro no puede mostrar expresión alguna por el doble encantamiento…

-Bien, y ahora hagamos una excepción-Una chispa se enciende y su pene emerge inmediatamente. Ella no aguanta más y aborda el enorme mástil que tiene enfrente. Lo introduce bruscamente y su interior ha comenzado a sangrar, pero eso le tiene sin cuidado, ella es un súcubo en este momento y solo piensa en hacerlo. Mueve sus caderas, y comienza a sentirse vigorosa, poderosa, casi una dictadora al estar encima de Spike y hacer con su cuerpo lo que le plazca. Su corazón late rápidamente y su salivación cae en el torso de un Spike que no sabe que sentir. Su lado dionisíaco está encantado con tal demostración pero su contrario le dice que debe huir. La princesa se da una vuelta y prosigue con su deleite. Grita histéricamente sin poder contener su placer que inunda toda la estancia. No puede ocultarlo, jamás en su vida se había sentido tan llena de energía tan llena de calor y tan completa, de haber sabido que el sexo abre las puertas al cielo lo hubiera hecho hace años atrás, probablemente su instinto hubiera despertado el día que espiaba a su hermana que "abrazaba" a una pegaso en su cuarto, lo recuerda, la noche silenciosa y una pegaso cabalgando a su hermano mientras en su interior algo comenzaba a encenderse, nunca entendió el porqué, hasta ahora.

El ritmo se acelera, es como un maquinaria casi perfecta no puede aguantarlo, el orgasmo está cerca pero Spike se viene antes e inunda su interior con la calidez de su semilla, ella da un último alarido y cae exhausta a la cama deshaciendo el hechizo y liberando a un Spike que se tira al suelo y siente como todo su ser ha comenzado desmoronarse. Sus garras se clavan en la tierra y él cae en una posición fetal…