Mocoso probetaUhuru-Chan

Da faq I'm doin' with my life? No prometo nada, sólo volví en forma de fichas por capricho. Sé que no escribo como los autores que admiro, pero lo intento.

Disclaimer: Hetalia es de Himaruya. El prompt de un anon, lo explico abajo.

Advertencias (Quizás sucedan, quizás no): OoC (después de años en FF he llegado a la conclusión de que siempre pondré esto para no tener quejas), Mpreg, Omegaverse, UkUs, Peter, sexo, Francis, lenguaje inadecuado, chistes aburridos, Uhuru escribiendo.

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Los Jones se habían mudado hacía dos semanas a la casa de al lado. Arthur en general no espiaba a sus vecinos, pero estos en particular le habían hecho sentir un puñetazo en el estómago… o en las bolas.

El hijo del vecino se parecía demasiado a él. Tenía los ojos azules, el cabello algo oscuro, como el de su madre, pero las cejas, ¡Las cejas de la familia!, las cejas que nunca antes había visto en personas que no portaran el apellido Kirkland, sin duda estaban ahí, recordándole su pasado.

¡Joder, para qué negarlo cuando eran como dos gotas de agua!

Arthur se mordió las uñas y se alejó de la ventana. No quería pensar en ello. Tenía algo de mala suerte, pero esto ya era ridículo.

-¡Peter!, ¡Te he dicho que te alistes más de tres veces!- Arthur se asomó discretamente por la ventana para ver a su guapo vecino omega gritarle a su hijo.

-¡Pero no quiero ir!, los abuelos son aburridos. –El niño hizo un puchero y frunció sus frondosas y perturbadoras cejas. Perturbadoras, sí, para Arthur lo eran por lo menos.

-Ah, Pete, -El americano se agachó y le dio un beso en la mejilla.-Después podemos pedir una pizza y ver una película, ¿sí?, la que tú quieras. Peter lo quedó mirando.

-¿Y puedo dormir tarde?-Preguntó el menor, cruzándose de brazos.

-Sí, puedes dormir a la hora que quieras. –Alfred asintió y sonrió, acariciando sus castaños cabellos.

Peter siguió haciéndose el difícil por un par de segundos, su mueca lentamente transformándose en una sonrisa. Asintió convencido y tomó la mano de su madre, y ambos entraron a su casa.

Dios, esa mueca, ¡Esa mueca era suya!, ¡Suya!

Arthur se jaló los rubios cabellos y se paseó de un lado a otro en la sala de estar de su casa. No era su asunto… claro que no, ni conocía a sus vecinos, pero vivían al lado, algún día se darían cuenta del innegable parecido entre ambos. A menos que decidiera no volver a salir nunca de su casa, pero eso no era una opción.

Y todo por un par de miserables dólares.

En su defensa lo necesitaba, en aquel tiempo acababa de llegar a América y estaba desempleado, sólo tenía dieciocho años y había huido de su natal Inglaterra como el mocoso malcriado que era. No quería reglas y sus acomodados padres no querían un hijo delincuente que manchara el apellido. Fue conveniente para todos.

Lo enviaron a América con una considerable suma de dinero, suma que había gastado en un mes entre fiestas, omegas y alcohol. Por lo menos se había conseguido un apartamento barato que compartía con uno de sus conocidos y aún tenía suficiente comida para un mes más. Pero conseguir un trabajo con su apariencia era difícil, y no iba a cambiar su modo de vida por un par de dólares, o eso pensó. Fue entonces cuando, mientras revisaba aburrido un periódico que se encontró tirado en la calle –si estaba en el suelo, no era de nadie… sin importar que estuviese tirado en la entrada de una casa- que se encontró con el aviso del centro de esperma de la ciudad. Necesitaban donantes alfas de esperma para los omegas, quienes cada vez más preferían el ser inseminados antes que someterse a un gruñón y mandón alfa para poder ser madres.

A Arthur no le interesaba mientras le pagaran, y qué mejor, ¡Le pagarían por jalársela y eyacular en un vaso!, ¡El "trabajo" perfecto! …o lo era en ese entonces.

Sonrió y leyó los requisitos enlistados bajo el título del anuncio:

-Estatura superior a 1,52 cms.

-Edad entre 18 a 35.

-Escolaridad completa.

-En límites normales de estatura y peso para su complexión física.

Necesitamos donadores de todas las razas. No se aceptan consumidores de tabaco de ningún tipo. El uso de sustancias será probado en el proceso de donación.

Arthur había dejado de fumar hacía cinco años (si, fue fumador precoz), dado que no quería tener dientes amarillos. Era un joven vanidoso. Lo demás parecía estar en orden, excepto lo de las drogas, pero podía dejarlas por un tiempo.

Decidió marcar el número indicado pasado un mes y esperó. La persona que le atendió le citó al recinto para las pruebas correspondientes y una entrevista. Arthur dio las gracias y cortó la llamada.

Cuando llegó el gran día se vistió con su ropa de marca, la ropa que sus padres le habían comprado durante años en esperanzas de que su hijo dejase de ser un punk y se volviese un caballero. Se sacó los piercings y se tiñó el cabello rubio para que quedara parejo, dejando atrás su cabello azul eléctrico. Le hicieron entrar a una sala y le hicieron varias preguntas, le entregaron un formulario para llenar con el historial médico suyo y de su familia. Al final le dejaron a solas con una televisión, varios CD's pornográficos y un vaso plástico. La primera muestra era para probar si su esperma estaba en buenas condiciones.

Arthur tuvo su diversión con un video de dos mujeres pechugonas y un hombre de gran miembro. Se tomó su tiempo para disfrutar lo más que podía hasta que decidió que ya no podía esperar más y eyaculó en el recipiente, los chorros quedando perfectamente dentro del vaso. Después de todo, Arthur solía ser el goleador número uno en su equipo de fútbol escolar.

Después de aquel día le citaron de nuevo para hacer exámenes físicos completos y de enfermedades, cuando todo estuvo correcto le llamaron para que comenzara con su trabajo de donante. Las donaciones serían constantes por seis meses, así podía buscarse un trabajo fácil aparte para poder mantenerse.

Buscó trabajo en un súper mercado como empaquetador y tuvo que dejar de hacer fiestas y drogarse. Arthur se animó pensando que sólo sería mientras su economía se estabilizaba, después volvería a su vida frenética de punk.

Dios, pero no pensó que el producto de sus placenteras masturbaciones volviese en forma de un mocoso de probeta, malcriado y gruñón, llamado Peter. Tenía unos siete años mínimo, Arthur ya tenía treinta, y la madre del crío parecía de unos veinticinco.

Arthur no sabía cómo se llamaba el omega que había recibido su esperma, pero era muy guapo, buen trasero y piel bronceada. Arthur deseaba haberle metido él mismo al pequeño Peter…

¡¿Qué estaba pensando?!

No sabía qué iba a hacer. ¿Debía ir a recibirlos como solían hacer los gringos en las películas?, no, quizás no daría una buena primera impresión el llegar con sus scones bronceados –BRONCEADOS, NO QUEMADOS. El alfa suspiró y se echó sobre su sofá. Sacó un cigarrillo y comenzó a fumar como un maniaco. Observó su casa, era una casa grande y linda, ordenada. Nadie pensaría que el dueño de ella en su juventud fue un salvaje punk adicto al sexo y a las drogas, y que se pajeaba para ganar dinero.

Caló el cigarrillo y miró hacia el techo. ¿Habría más pequeñines en el país con las frondosas cejas Kirkland correteando por ahí? Los imaginó corriendo sueltos como animalitos, niños y niñas peleando como él solía hacerlo con sus hermanos. Mordiéndose y jalándose los cabellos. Los niños eran criaturas tan insoportables. Por eso Arthur seguía soltero, ningún omega quería atarse a un alfa que no quería ser padre. Lástima que Arthur ya era padre.

Quizás si llamaba a su amigo para que le diera su opinión… si, Francis le daría el veredicto final. Quizás sólo era su imaginación y no eran tan parecidos. Quizás Scott se había emborrachado, había terminado en Estados Unidos de alguna mágica forma y se había revolcado con su vecino y ¡Voilá!, ¡Peter!

Sí.

Sacó su celular del bolsillo y buscó el nombre del beta francés.

To: Francis. (17:37)

Necesito verte, ven a mi casa mañana después del trabajo. Es IMPORTANTE.

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No sé de dónde saco tanta estupidez (del cerebro, Uhuru), pero aquí estoy.

Este es un prompt que saqué del Hetalia Kink Meme (en inglés), pero no quiero postear la historia en inglés, 'cause of reasons. Así que el anon que pidió este fic jamás sabrá de esto BUAHAHA… HAHA…ha.

El tema pedido es lo escrito en el resumen más "El Mpreg puede existir en la forma que quieras." Los bonus que escribiré también, pero no lo pondré aquí por los spoilers.

Investigué un poco y cada banco de esperma tiene sus propias reglas, les pagan bien a los donantes. No sé cuánto tiempo guardan los espermatozoides, así que no me vengan a decir cosas por las edades más adelante (?)

Eso, lo siento anon de habla inglesa, I've failed you in every possible way.

Bye!