Hola.

No. No. No. No quiero que termine u.u me ha costado un montón sintetizar 300 palabras. Este, para mi, no es el fin, pero bueno...

Me ha gustado muchísimo escribirlo y estar en este gran desafió ;)

Creo, no estoy segura, que haré una especia de epílogo a parte y podría estar en otro one-shot o bien en esta misma historia, pero al finalizar todo el reto.

Espero que les guste...

Bye.

Kasandra Potter: Hola, gracias por leer y comentar. Y pues haber que me dices de este capítulo :)


Disclaimer; los personajes de esta historia pertenecen a J. K. Rowling, excepto los que han sido creados por mí.

Este fic participa en el reto especial navideño "Doce Palabras para Celebrar" del foro La Sala de los Menesteres.


Advertencia: Slash.

Palabra: Pociones


Capítulo 12. Finalizando

La palidez no combinaba con su cabello negro, pensó Draco.Sin embargo, sus ojos se ven más verdes. Y luego frunció el ceño ante aquel pensamiento.

Harry caminaba absorto, a paso lento y sin darse cuenta con quien tropezaba. Entonces, Draco tuvo que interceptarlo para que no lo ignorase.

—Acabo… de sacar un Extraordinario en pociones —murmuró tan bajo que solo Draco alcanzo a oír.

Si Draco pudiese hablar le habría felicitado y abrazado, pero solo le palmeó el hombro.

Harry levantó la mirada y abrió la boca para decir algo, pero ambos se vieron interceptados por Ron, Hermione y una acaramelada Ginny.

El rubio se vio dolorosamente desplazado y solo le asintió a Harry. Se giró y caminó hacia la enfermería. Hoy era su última revisión con Madame Pomfrey, luego tendría que ir a San Mungo, pero la mujer le había dado acceso total a su red flu por si necesitaba algo.

Entró silenciosamente y ella ya estaba preparando todo.

—¿Cómo estás?

Él no respondió y se tendió en la camilla.

—Solo tardaré unos minutos.

Ella movió la varita y en cuestión de minutos se sintió relajado.

—Listo.

Draco se levantó y en un acto de pura vulnerabilidad la abrazo. De cierta forma le estaba agradecido, de no ser por ella habría quedado peor. Merlín. Odiaba admitir que deseaba vivir más ahora que nunca.

Hacia unos cuantos meses había tomado la decisión de morir y ahora tendría que vivir con las consecuencias de ello. Lo aceptaba.

—Estarás bien —murmuró ella correspondiéndole.

Draco salió de la enfermería mas aliviado.

Harry, como siempre, estaba afuera esperándole. Nunca había pensado necesitarlo.

—He pensado en… —le dijo acercándose— que podríamos vivir juntos después de Hogwarts.

Y él hablaba en serio. Lo pudo ver en sus ojos.