Los personajes de Free! No me pertenecen, son propiedad de Kyoto Animation y Animation Do.

CAPITULO 1 EDITADO

Este capítulo era una mierda le pedi ayuda mi hermana para remasterizarlo, espero que les guste:'D

Este es mi primer fic, por favor sean amables conmigo.

Está dedicado a mi hermana BitingRain.

Bueno esto es Souharu nada de RinHaru, MakoHaru, SouMako entre otras, POS NO NADA DE ESO ES SOUHARU Y PUNTO :C

Por el momento no pienso poner lemon :V, a menos que me encuentre inspirada para hacerlo, pero por ahora es un fic neutral malo sin lemon

… bueno sin más que decir

Capítulo 1 todo lo que termina tiene que iniciar.

Existen esos momentos en la vida, en los cuales te sientes presionado a hacer algo que no quieres hacer. Y otra cuestión era el talento y la disposición; habían casos en los que uno realmente, realmente, no se podía dar el lujo de asumir cierta tarea, cierta responsabilidad, sabiendo que simplemente no estabas lo suficientemente cualificado para realizar dicha labor; ni aunque tu vida dependiera de ello. Estaba tácito que tú no eras la persona indicada para el trabajo.

Yamazaki Sousuke estaba pasando por dicho calvario. Quién lo mandaba a ser tan buen amigo…

Sousuke era un chico genial que todos sus amigos apreciaban, los pocos que tenía, pero igual lo apreciaban. Era amable, atractivo, ingenioso, tenía un buen físico y además era alto, y todos sabemos que si no eres alto no eres protagonista de dorama koreano; en conclusión, era el hombre que casi toda mujer desearía.

Pero todo chico perfecto tenía algo imperfecto como todo ser humano, y esto era tratar con el amigo de su mejor amigo. Realmente aquello no contaba como un desperfecto, pero él hacía que pareciera uno. Ya no era Sousuke el chico amable que todos sus amigos quieren y aprecian, y que casi toda mujer desearía tener a su lado. Cuando estaba con este individuo era Sousuke, el chico malo que todos sus amigos y lacras del mundo admiran, y que muy en lo profundo desearían ser como él; sin dejar de lado a la población femenina que se derretían por igual ante el barbárico galán.

Este individuo que hacia hervir la sangre del joven Yamazaki era Nanase Haruka, un chico tranquilo, admirador del agua, el cual todos sus amigos lo seguían como perros arrastrados a pesar de que el no parecía el líder.

Aunque Haruka se veía como el tipo de chico que no mataba ni a una mosca, sacaba de quicio al pobre y desvalido de Sousuke. No era a propósito, por supuesto.

Los amigos de ambos individuos no se explicaban el por qué estos dos no podían congeniar, pero tampoco se mataron la cabeza pensándolo, y siguieron sus vidas como si nada hasta el día de hoy.

"¿Cuál era la razón de ese odio?", estén al pendiente, esta pregunta podría salirles en el crucigrama de su asidua revista de los domingos.

Todo comenzó en una mañana de un fin de semana, un día cualquiera de hace mucho tiempo atrás en donde Haruka fue a comprar una soda en la máquina expendedora, cuando de pronto apareció un Yamazaki Sousuke salvaje y le dijo seriamente

—"Aléjate de rin"

Aquella persuasiva petición había tomado por sorpresa al joven nadador de estilo libre, cabía decir que a Haruka ni siquiera le dio tiempo de sacar su pokedex.

Ahora se preguntaran "¿Todo por una chica?" ¡JA!, ¡pues no!, Rin no era una chica. él era el mejor amigo de Sousuke y también amigo de Haruka. Rin era un chico pelirrojo, con dientes de tiburón… realmente no muy apetecible para las mujeres, pero tenía su encanto.

"¿Por qué Rin no hacía nada al respecto?"

Bueno, tal vez Rin ni siquiera sabía que estos dos tenían ese problemilla, ya que las pocas veces que se encontraba con Haru, este no le hablaba de sousuke; y sousuke, a pesar de verlo todo el día, nunca le decía nada de su vida privada, alias: "lesión de giro inesperado de trama".

En fin, esta historia no da lugar en el pasado, sino en la actualidad. Rin sabe que Sousuke odia a Haruka, y Haruka apenas sabe de la existencia de este.

Todo comenzó en una tarde cualquiera…

Dia 1

Rin es un nadador profesional que estaba de salida a otra competencia, esto ya era muy normal para él, así que no hubo lágrimas ni abrazos. Bueno tal vez un abrazo, pero uno muy macho.

Sousuke se despidió de él como solía hacer normalmente, lo amenazaba de muerte para que le trajera otra medalla a casa y luego lo despachaba con una fuerte palmada en los omoplatos. Pero antes de que Rin se fuera encaminado a su respectivo avión, se le acerco a su amigo y le dijo:

—Sousuke, por favor se amable con Haru.

Todos en la audiencia se voltearon a ver a Rin, luego a Sousuke, y finalmente devuelta a Rin. ¿Acaso Rin comió algo pasado antes de venirse al aeropuerto? Sousuke reviraba los ojos, qué mocoso tan descuidado, siempre debía velar por él…

—¿Qué? – le pregunto como si hubiera oído mal.

—Me refiero a que lo visites de vez en cuando, me prometiste que serias más amable con el de ahora en adelante. – El egoísmo era la cualidad más adorable de Rin. Sousuke, sin embargo, era hombre de palabra. Aunque no recordaba haber hecho una promesa así…

—¿Cuándo dije eso?

FLASH BACK

Rin se acercó sigiloso hasta un inconsciente Sousuke. Empezó a abofetearlo suavemente hasta que este reaccionó al fin.

Sousuke cargaba la madre de las resacas. Las vacaciones de verano estaban empezando y él quería aprovecharlas al máximo. Lo que menos quería en ese momento era oír un sermón de la persona que más le gustaba que lo cuidaran. Rin era el mimado y él solo estaba tirando una cana al aire. Eran vacaciones, él necesitaba esto.

—"No molestes." – lo apartaba bruscamente.

—"Te traeré algo para la resaca y me iré inmediatamente con una condición." – le susurro consiente.

—"¿y si solo te vas?" – Sousuke no tenía que voltearse a ver a Rin como para saber que lo estaba viendo con reproche – Bien. Hare lo que quieras.

—"Estas vacaciones vas a hacer el intento de amistarte con Haru. Ya ha pasado un año y creo que es suficiente. Somos prácticamente adultos y estoy cansado de salir por separado con ambos. Es decir, la primera vez que me hicieron fiestas sorpresa de cumpleaños separadas fue divertido, la segunda vez ya no tanto. Y yo creo que si pones de tu parte, tú y Ha—…– Sousuke le tuvo que lanzar la lámpara del cuarto para que terminara su interminable monologo a lo Laura Bozzo. A quién rayos trataba de conmover…

—"Lo prometo, lo prometo, ahora por favor, tráeme mi verga y sal de mi vista."

FIN DEL FLASH BACK

—Me encanta como te aprovechas de mí. Haciéndome prometer cosas cuando ando hablando dormido y de paso, enratonado.

— Estabas semi dormido, y no culpes a la resaca por tus promesas. Sucio hubiera sido hacértelo prometer la misma noche que estabas bebiendo.

—Y qué rayos, cómo es que me encontraste en esa situación, cuándo fue eso sí se puede saber…

—Hace un año, y volvió a pasar la semana pasada…– Rin señalaba con su dedo acusador, todo amenazante – y más te vale que este año me cumplas Sousuke, si para el termino de tus vacaciones no te has hecho amigo de Haruka, te juro que nunca más te voy a dirigir la palabra.

Sousuke soltó un bufido incrédulo. Qué rayos significaba eso. ¿Acaso Nanase era más importante que él?, ni que Nanase hubiera tenido que prometerle algo también. ¿Qué él tenía que ser el único tarado que tenía que irse a arrodillársele a los pies al otro desquiciado de los trajes de baño para que fuera su amigo?

Pero Sousuke lo sabía mejor que nadie. Rin lo valía, y mucho.

El sonido de los aviones inundo el lugar. Sousuke no quería para nada ver a ese sujeto, pero su religión Rintiana se lo exigía. Si Rin lo pedía tenía que hacerlo.

—Ya vete ¿sí?

—De acuerdo… Pero recuerda que lo prometiste, adiós.

Esas fueron las últimas palabras de Rin ese día, Sousuke a pesar de que era más maduro que antes, le seguía molestando Haruka. El solo pensar en él le molestaba. Y como consecuencia hacia que muchas mujeres en el aeropuerto fijaran sus miradas en él y su perfecto rostro amargado.

Sousuke fue directamente a casa de Haru, en su nuevo y lujoso auto que pago con su sangre, sudor y lágrimas; eso dice pero realmente se lo gano en la lotería e hizo que muchas mujeres se interesaran más en él. Un auto lo es todo, cojan dato.

Después de un rato al fin llegaba a la casa de Haruka Nanase, por unos momentos Sousuke pensó en regresar otro día, pero eso estaba en contra de la religión Rintiana, así que toco la puerta un par de veces.

Escucho unos monotomos pasos hacer camino hasta la puerta, Sousuke sabía que se trataba de aquel hombre que tanto odiaba.

Haru abrió la puerta, pero Sousuke aún estaba procesando el movimiento y estaba a punto de salir corriendo, pero aquel rechinido lugareño que hacia la puerta al abrirse le informaba que ya era demasiado tarde.

—¿Yamazaki?

Esa voz…

Esa voz que tanto odiaba sin razón alguna, por un momento Sousuke lo iba a matar. Debía cortar esa yugular; aun cargaba las llaves de su auto en la mano, solo debía aplicar un poco de fuerza… pero luego recordó las palabras de Rin, y su promesa. La misión debía continuar.

—Nanase.

Se miraron por un par de minutos hasta que al fin nuestro protagonista se dio cuenta de que estaba haciendo el tonto ahí parado.

—Solo venía a decirte que el vuelo de rin ya salió.

Haru se le quedo viendo un par de segundos. Sousuke lo sintió como una eternidad. Finalmente Haru se dignó a hablar.

—Sí, ya lo sabía…– dudó por un momento pero la resolución llego hasta él – ¿quieres pasar?

Sousuke estaba a punto de aceptar, pero se dio cuenta de que él no quería seguir ahí, odiaba todo lo que le pertenecía a este pobre chico. Lo miro por unos segundos, y luego termino respondiéndole con un crudo, y frio

—No... Gracias.

Sousuke se alejó lentamente y se subió al auto.

Haru cerró la puerta tranquilamente y en ese momento Sousuke empezó a arrepentirse; le dijo una estupidez, y defraudo a todos los rintianos; que lo conformaban Momotarou, Nitori y tal vez el ex capitán del Samezuka, que no eran personas que realmente le importaran, pero ¡defraudo a Rin!…

Imperdonable.

Sousuke se prometió así mismo, que mañana iría a la casa de Haruka, y se la pasaría todo el santo día con él. Sousuke regreso a su casa, y se fue a dormir, su meta era que al despertarse iría a la casa de Nanase y haría un milagro.

Día 2

Sousuke se despertó con mucha energía. El sol estaba radiante, iba a ser un buen día; seguramente ya serían las 12:00 del mediodía, por lo tanto no podría pasar mucho tiempo con Haru, para su suerte, tomo su teléfono para ver la hora y marcaban las 6:00…am.

Una parte de Sousuke quería golpearse innumerables veces en la cabeza para terminar medianamente aturdido y tuviera que ir a un hospital, así no tendría que pasar todo ese maldito día con Nanase Haruka. Por otra parte pensaba: "Es un ser humano como cualquier otro, estoy exagerando la situación."

Sousuke se puso lo primero que encontró, y se fue directamente a la casa de Haruka, no sin antes desayunar.

Al fin había llegado. Esta vez estaba listo. Este día si se la pasaría, en su totalidad, con Nanase Haruka.

Bajo del auto, y toco la puerta como el día anterior.

Espero unos minutos hasta que al fin Haruka abrió la puerta, y se encontró con Yamazaki Sousuke, el rompe corazones.

—Yamazaki… ¿Qué haces aquí tan temprano? – Sousuke respiro profundo. Era obvio que le preguntaría algo como eso. Era malditamente temprano, por qué no lo preguntaría. La buena noticia es que Nanase no parecía del todo molesto por el asunto. Y ahí algo lo golpeó. A lo mejor Haruka estaba al tanto de lo que él le había prometido a Rin. Así las cosas eran más sencillas…

—¿… Por qué no puedo venir y pasar un rato con mi amigo Har… Nanase?

—¿Somos amigos? – pregunto con ese aire apagado usual, pero con genuina curiosidad. Eso sí, cualquiera diría que actuaba como un sínico.

Sousuke jamás se esperó que Haruka le dijera eso. Era cierto que lo había tratado un poco mal en el pasado, pero no era para tanto. Él no sabía que Haruka pudiera tratarlo así de indiferente…

Una vez más Sousuke respiro hondo y trató de remar hasta el montículo de arena dudoso.

—P—pero por supuesto que si somos amigos, ambos conocemos a Rin, y es como que nos conociéramos – En ese momento Sousuke coloco su brazo alrededor de haru, Dios, pero qué rayos estaba haciendo y diciendo, se preguntaba el mismo.

—Supongo…–Hasta Sousuke que no conocía de nada a Haruka, sabía que estaba incomodo por su contacto, "aguántate Nanase" pensaba él. – ¿Entones… quieres pasar?

—Naturalmente…

Sousuke entro a la humilde morada de Nanase y ya estaba arrepentido, pero tenía que ser fuerte.

Se sentó en la sala, Haru se puso a hacer té y un incómodo silencio apareció…

Haruka no era muy hablador, por lo tanto Sousuke no sabía de qué hablarle, hasta que uno de los dos se dignó a hablar… y no, no era Sousuke.

—¿Esta mejor tu hombro?

¡Oh si, al fin un tema de conversación común y corriente!

En este tipo de conversaciones era imposible que nuestro héroe pudiera restregarla.

—Pues sí, está mucho mejor.

Y nuestro héroe nos falló en esta ocasión…

Había matado el tema de una sola estocada y ya no había más que hablar.

—Que bien.

Haru se sentó al frente de sousuke, le dio una taza de té, sorbió un poco de él, y ya no sabía que más decirle.

—Está bueno el té…

—Gracias.

Pasaron varios minutos en los cuales ninguno de los dos se dignó a hablar. Haruka salió un momento del cuarto, y regreso con su block de dibujo, Sousuke al principio se sintió un poco ofendido, pero tenía que admitir que Haru tenía razón en ponerse a dibujar. Hoy Sousuke se supone que debía ser el alma de la fiesta, y había logrado lo imposible, aburrir a Nanase.

Sousuke estaba muy aburrido por igual, y estresado. Busco en su bolsillo sus cigarrillos y empezó a fumar, ignorando la existencia del chico que tenía al lado.

—Oye Yamazaki. – Haruka fulmino a Sousuke sin vacilamientos.

—¿Mh?

—No fumes dentro de la casa.

—Pero me aburro…— "¿Por qué rayos dije eso…?" Pensó

Una ráfaga de emoción paso rápidamente por los ojos del menor, y así como vino, se esfumo – Si tanto te aburres, ¿Qué haces aquí?

Sousuke apago el cigarrillo.

—¿Contento?

—…Si…

Nuevamente se quedaron en silencio. Sousuke estaba de muy mal humor y apenas eran las 7:30, su misión seguía en pie… Miraba a Haru, luego a la pared y trataba de ver que dibujaba, y así se la paso por una hora hasta que no aguanto más.

—Me voy.

Haru se quedó en silencio… era como si Sousuke ya se hubiera ido.

Nuevamente nuestro héroe Salió por la puerta principal y monto su auto. Estaba insatisfecho con el resultado, pero era inevitable, simplemente no sabía comunicarse con Haru.

Regreso a su territorio pensando cómo debería presentarse nuevamente por esa casa, y como disculparse debidamente por lo de fumar…

Y ya tenía la respuesta.

Día 3

Sousuke ya estaba preparado para su tercer día de "Pasar tiempo con Haruka Nanase", o la PTHN.

Tomo su auto y se fue directamente a su casa, tocó la puerta como ya había hecho en días anteriores, y espero a que su víctima bajara.

—¿Yamazaki? – Se había asomado un pequeño delfín al abrir la puerta.

—Nanase… ¿Qué te sucede?

—¿A qué te refieres?

—Me refiero a que eres un maldito delfín a eso me refiero.

—¿Pero de que hablas? Siempre he sido así.

Sousuke decidió ignorar todo este suceso y pensó en dejar los chicles súper ácidos y las mini gelatinas descontinuadas, si es que esos eran la causa de esta pesadilla zoófila.

—Por favor pasa.

Al pasar, la casa estaba llena de agua y apenas se podían apreciar los muebles. Esto era raro. Primero Nanase era un delfín y ahora su casa era una laguna, definitivamente algo estaba mal…

Al entrar a la cocina se encontraba un tiburón tomando una taza de café, "Rin" aparentemente.

—Ok, no sé qué me comí anoche pero ¿Por qué estoy soñando todo esto?

—Sousuke –Dijo el tiburón mayor arrastrándose a su amigo, para quedar frente a frente – escúchame, sé que todo esto parece raro, pero esto demuestra por lo que estás pasando, bueno, por lo que todos estamos pasando, nosotros no somos lo que realmente aparentamos y…

Sousuke luego se puso a pensar en una canción que se había escuchado el otro día. Ese tiburón no podía ser Rin, y al no ser éste, Sousuke ni siquiera pensaba gastar un segundo de su vida oyendo a aquel impostor.

—La conspiración mundial te seguirá día a día y tienes que dar de tu parte…– Qué nunca se callaba este maldito sushi…

Cada minuto se hacía más y más tonto el sueño. Rin empezó a patalear por falta de aire y regreso al fondo de la casa a tomar agua. Sousuke no lo siguió y se sentó a tomar del café que estaba en la mesa, quedando en frente de un pequeño delfín de mirada fría.

—¿Quieres un pan tostado? – pregunto el anfitrión.

—Dale…

El tiempo pasaba lentamente, no había ninguna preocupación en la mente de Sousuke y eso le gustaba, hasta que al fin se dignó a hablarle su compañero, poniéndose encima de la mesa para captar su atención.

—Te preguntaras ¿Por qué estoy soñando toda esta estupidez? – El delfín Nanase era tan plano al hablar como Nanase humano, qué dicha…

—conspiración mundial ¿no?

—Pues no, no le prestes atención a lo que dijo Rin… nada de lo que te dijo importa en este momento.

—Ok…

—Solo te queremos demostrar que Rin no es siempre la razón de tu ser.

Eso ofendió un poco a Sousuke – ¿Qué?, ¿qué quieres decir con eso? – le dijo entre dientes.

—Poco a poco te vas a ir dando cuenta. Y la razón del por qué tienes este sueño, pues, tienes que averiguarlo por ti mismo, lo siento. Ahora debo irme… lejos. – Tenían que estar bromeando…

—¡¿Y para que todo este rollo?!

—Adiós yamazaki.

Sousuke amaneció con la cara rota en el suelo, ¿Pero que quería decirle ese sueño?, bueno, realmente no le importaba, y se fue a tratar su herida. A pesar de que solo ha pasado muy poco tiempo con Haruka, ya estaba harto de él y decidió no visitarlo ese día…

Día 4

Sousuke tenía una curita en la cara, no importa que herida tuviera este chico, igualmente todos querían ver su bello rostro cada mañana.

Ya conocía a Haru de tres días, (Según él), y por lo tanto podría hacer los planes que deseara sin su permiso (por lo menos él lo pensó así).

—¡Nanase!

—… Yama—…

—Sí, si, conozco mi nombre

—…

—Escucha estoy harto de que cada vez que me encuentro a solas contigo no pueda comunicarme de una manera normal, por lo tanto hoy saldremos… – Ahí estaba él, haciendo su voluntad, pero Haruka era una persona con voz y voto, no podía simplemente venir y hamaquearlo y pensar que eso estaba bien.

—Pero no tengo ganas de salir.

—¡No me interesa, saldremos a pasear! – Lo que Haruka poco recordaba era que Sousuke era extremadamente persuasivo…e intimidante.

—…bien.

Que chico tan fácil de convencer, era uno de los pocos aspectos que le gustaba a nuestro manipulador protagonista.

Luego se arrepintió, ¿Qué derecho tenia de decir eso?, ahora parecía un idiota, defraudo una vez más a los rintianos.

—¿A dónde quieres salir?

—Pero tú fuiste el que—…

—Ok, si no vas a aportar ninguna idea, vámonos al cine, ¿Qué película quieres ver?

—No sé qué están dando…

—… Ok…

Sousuke pensó "hey, el cine, un lugar en donde no tienes que hablar, y además la gente se va conociendo a pesar de que ni siquiera se hablaron durante toda la velada."

Por supuesto todo se preciaba y el cine fue el principio de unas vacaciones horribles.

—Emmh, ¿me puede dar dos boletos para la función principal?

—Está agotado señor

"Maldita sea, lo que faltaba." Pensó – Deme dos boletos de lo que tenga.

—Aquí tiene señor.

Bien, la función ya estaba por empezar, no le importaba que rayos iba a ver, pero si eso hacia feliz a Rin lo haría con gusto.

Para su mala suerte, le toco "Un Nuevo Amor se Asoma" la película que se ha estado hablando desde hace días. En donde todas las chicas invitaban a sus novios como excusa para sugerir volver su noviazgo de semi serio a serio, pero la única misión del novio era ignorar las burradas que llegara a decir alguna Jenifer Aniston y besuquearse hasta el cansancio con su pareja, y si era lo suficientemente suertudo ese día, la novia le dejaría tocarle un seno. Por supuestísimo, este no era el caso de nuestro galán, en primera porque él tenía acceso a todos los senos del gremio femenino, y en segunda, Nanase era su cita…

No había pasado ni diez minutos de película cuando ya la parejita de al lado había avanzado de segunda a tercera base. Esto frustraba a nuestro protagonista, La película era francesa, así que era una peliculita semi pornográfica que no mostraba nada, pero igual era incomoda y no podías voltearte porque era lo mismo que ver lo que sucedía en la pantalla; solo que en físico y molestándote el brazo. Al fin entendió como se sentía Rin cuando tuvo que ir a ver una película de esta índole junto con Gou.

Haru se encontraba con la cara que siempre usaba para cuando estaba Feliz, triste o enojado; era igual de incomodo, de alguna forma.

—¿Qué sucede? – pregunto Haruka que ya estaba cansado de que Sousuke le perforara la mejilla con la mirada.

—Sabes, al final el protagonista se muere, ya me la contaron, mejor vámonos.

—Está bien.

Salieron de la tortura, No quería ni pensar en que soñaría esta vez.

—Vamos a comer ¿quieres una hamburguesa?

—Bien…

—Sabes, puedes decir que no

—Estoy bien…

Se fueron a comer una hamburguesa y el resultado fue el mismo, incomodidad, y unos tipejos se estaban besando atrás de ellos.

—Ya es tarde te llevare a casa, ¿a menos que quieres hacer algo más?

—No, estoy bien

Al llegar a casa de Haru, Sousuke decidió quedarse por un rato, estaba exhausto, y solo había salido a comer básicamente.

Haru prendió la televisión; estaban pasando un programa que Sousuke solía ver.

—Oh déjalo ahí

—Bien…

¿Enserio? Esto era inusual, en momentos así el dueño de la casa debería decir "No, mi novela empieza pronto. Vete a tu casa" Pero bueno…

Se quedó hasta que termino su programa, se reía como idiota a cada rato y Haru ni se molestaba en hablar, "¡cielos, ver la tele con este tipo era lo máximo!", ya sabía qué hacer para la próxima vez que se quedara en casa de Haru.

—Me voy.

—Te acompaño a la puerta.

Sousuke Llego a su casa cansado, no podía creer que fuera tan tarde, pero qué se le iba a hacer, de inmediato se hizo la cena y se fue a dormir.

"Y gracias al cielo no soñó con el agua… esa noche."

Atte: Rin Yamazaki.

Dia 5

Sousuke ya había conseguido la forma de evitar a Nanase Haruka y decir que ahora eran los mejores amigos del mundo, y esto era la televisión.

Muchos se preguntaran "¿Qué era la televisión?"

Bueno es un aparato como la radio, solo que con pantalla, que te muestra lo que está sucediendo. Pero no como la computadora, con la tele tenías que esperar un horario para ver lo que tú querías, algunos usaban cable, otros tenían TiVo.

Esta máquina olvidada era lo que Sousuke iba a utilizar, lamentablemente era sábado. Se sabía que los sábados pasan todo lo que la gente no quiere ver, así que al entrar al horario y ver que no estaban pasando nada, y no pasaría relativamente nada sino hasta unas cuantas horas más tarde, se durmió.

Al despertar estaba acobijado sobre el suelo, mientras pasaban el capítulo de Dance Moms que ya se vio la semana pasada; estaba oscureciendo y no encontraba por nada del mundo a Haruka, hasta que al fin pudo escuchar su voz.

—Ah ya despertaste…

—¿Por qué no me despertaste antes?

—Lo intente pero no respondías…

—Igual debiste intentar más… oh, empezó el nuevo episodio.

—¿Quieres cenar?

—Sí, sí, si…

… Otro día exitoso, se decía Sousuke mientras se acurrucaba en las sabanas ajenas y esperaba por la cena que jamás espero que le brindaran.

—Ah, bien, ganaron. Bueno Nanase gracias por la comida, me voy.

—Te acompaño a la puerta.

Sousuke se fue a descansar, cumplió su misión a pesar de ser un peso muerto aquel día, y sentía que debía presumírselo a Rin, pero eso ya lo dejaría para después

Fin del capítulo 1

Esto es un Gag así que espero no se hayan puesto esta cara "e—e" al menos hice mi mejor esfuerzo EH EH EH

Como sea

Esto se lo dedico a mi hermana que todo el día me ha estado jodiendo con que hiciera este fic de pacotilla, espero no le guste para finalizarlo de una vez e—e realmente te odio al obligarme al enseñarte esto pero aprendí algo, no se escribir

CHAO

Los amo

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Y recuerden cepillarse los dientes e ir a la escuela.