Disclaimer: Los personajes son exclusivos de Kishimoto, pero los tome prestado para hacer esta historia n.n

N/A: Holis c: Bueno, esta es una adaptación de un oneshot que me inspire en una canción de mi banda preferida, The Beatles. Nunca lo termine por cuestiones personales, pero decidí adaptarlo al SasuSaku. Advierto que van a ver ciertos cambios en la personalidad de algunos personajes, como Sakura, no será en gran medida, pero es necesaria para la trama. Son pocos capítulos y espero que lo disfruten.

Capitulo uno

Invitación

Close your eyes and I'll kiss you, tomorrow I'll miss you;
Remember I'll always be true.

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Tomo una cantidad considerable de aire y la expulso con lentitud. Repito la acción un par de veces y me froto las manos. No, no hace frío porque el verano ya está entrando en la ciudad de Konoha, pero de todas formas tiemblan y las movilizo por los nervios.

No estés nerviosa. No estés nerviosa.

Me digo a mi misma que es hora de que Sasuke sepa toda la verdad. Tiene derecho a saberlo, ¿no? Está en sus derechos como ciudadano civil enterarse que ha robado mi corazón tantas veces con sus miradas, sus palabras y sus sonrisas de niño arrogante. Incluso su maldito peinado de trasero de gallina hace que mi corazón lata con rapidez. Bien, quizás estoy exagerando un poco, pero no he estado gran parte de mi vida enamorada de mi mejor amigo como para no saberlo. De hecho, cualquiera que tuviera a alguien como él a su lado no dudaría en saltar y violarlo sin piedad, solo que yo soy lo bastante decente – o mejor dicho, idiota – como para no hacerlo.

Me sobresalto al escuchar el sonido de una puerta cerrar, giro mi cabeza hacia la ventana del piloto y veo que Sasuke ya salió del almacén y está en camino al auto. Ha salido a comprar unos refrescos para ambos y algo para saciar mi estómago glotón, pero no me es tiempo suficiente como para prepararme.

Ignoro el miedo y me animo a mí misma que ya ha pasado dos meses desde que me propuse esto: confesarme a mi mejor amigo y dejar que el destino depare lo que quisiera. Quizás pueda tener una mínima oportunidad, ya ha terminado con su novia Karin, lo que lo deja completamente solo y sin compromisos con alguien.

– Coca-Cola para ti, una cerveza para mí – dice mientras se sube al auto y me tira la lata, la cual tomo con cierta torpeza. Miro el objeto en mis manos y le echo una mirada fulminante que él se encarga en ignorar para cerrar la puerta de su lado.

– Es injusto, yo también quiero una cerveza – replico y le quito con brusquedad la bolsita de caramelos que me ha traído, seguramente para que disminuya mi berrinche.

– No, eres menor de edad. – menea su cabeza y enciende el auto.

– Sasuke, tenemos la misma edad. Hasta hace meses atrás tomábamos cervezas a escondidas en lo de Suigetsu.

Vuelve a menear la cabeza y no me contengo para golpearlo con mi lata mientras suelto un grito por mi frustración. Sasuke me ignora y sigue manejando.

Estúpido Uchiha.

Minutos después, cuando ya ha pasado mi berrinche y escuchamos los Beatles, llegamos al mostrador de la ciudad. Subo el volumen al máximo antes de salir del auto y cierro la puerta, doy unos pasos y llego hasta donde está el azabache, apoyado en su auto y con la cesta de comida arriba del capo.

Miro la hermosa ciudad que nos ha visto crecer y mi vista se dirige hacia Sasuke, de solo pensar que en un mes se ira al extranjero a estudiar me pone triste. Yo me quedare aquí estudiando medicina, gracias a la pasión que mi tía Tsunade me ha dado por la profesión; pero aunque hemos quedado en que seguiremos en contacto y vendrá a visitarme en vacaciones, sé que me arrancaran una parte de mí.

– ¿Vas a extrañar esto? – bajo la cabeza con tristeza. ¿Cómo haré para sobrevivir sin Sasuke?

– Hn – aprieto con fuerza los puños, harta ante sus estúpidos monosílabos, pero en su idioma significaba un "si", lo que me causa un revoltijo en mi estómago y cierta alegría– El dobe se quedara, de todas formas.

Cierto, cierto. No todo en mi mundo está perdido después de todo porque Naruto se quedaría aquí. Sé que tal vez estoy exagerando, pero estos dos han estado más de diez años en mi vida y la sola idea de separarme de ellos me produce escalofríos.

– Te extrañaremos, Sasuke – digo con sinceridad, mis ojos se encuentran con los suyos y evito ponerme a llorar. Vaya, lo que faltaba, que sea una llorona delante de él.

– Molesta – susurro y ladeo la cabeza hacia otro costado, evitando mirarme.

– ¡¿Qué?! ¡¿Yo te digo que te extrañaremos y tú me dices eso?! – agito mi puño listo para darle un cascarrón en la cabeza. Odio que me llame así, y por muy enamorada que este no se salvara de mi trato especial.

– Necesito un favor.

Mi ira desaparece en un segundo y la sorpresa la reemplaza junto con la curiosidad. ¿Un favor? ¿Sasuke pidiéndome un favor?

– ¿Qué? - inquiero incrédula.

– Hmph. – y me echa una de esas miradas que dicen "no pienso volver a repetirlo".

¿Es enserio que requiere de mi ayuda? Vaya, jamás pensé vivir para que llegara este momento. Sasuke tiene eso de ser orgulloso y arrogante como toda su maldita familia, y eso que los conozco a todos; desde el abuelo cascarrabias (y mi enemigo número uno en cuanto a las apuestas del boxeo) Madara Uchiha hasta el sexy primo Shisui.

– ¿Qué necesitas? – entrecierro los ojos con desconfianza. En mi cabeza se prende una pequeña lamparita cuando me doy cuenta que el azabache esta distraído, así que busco disimuladamente la lata de cerveza que dejo en la canasta antes que se dé cuenta, pero es más rápido y me la quita antes.

Doy un suspiro y tomo la de coca-cola con resignación.

– Quiero que vengas al baile de graduación conmigo – dice con tranquilidad mientras abre su lata.

Mis ojos se abren de golpe al igual que mi boca y siento un repentino vértigo, logrando revolver todo en mi estómago. Por un momento todo está en silencio y no logro escuchar nada, absolutamente nada.

Sasuke quiere que sea su cita en el baile. Pienso y ahí es cuando recién salgo de mi shock.

¡¿Qué?! ¡¿Sasuke Uchiha invitándome al baile?! ¡¿Sasuke Uchiha el jugador estrella, fantasías de todo el mundo y mi mejor amigo desde que iba a kinder?! ¡¿Es que acaso es una broma?! Y no, no lo es porque sus ojos muestran la sinceridad más pura. Conozco al azabache a tal punto que se cuáles son sus expresiones al mentir o bromear y, mierda, Sasuke no tiene razones para mentirme o para joder conmigo. ¡Sasuke es un ogro malhumorado y amargado que nunca bromea! ¡No puedo creerlo!

– ¡¿Quéeeeeeeeee?!

– Hmph – dice otra vez, o mejor dicho monobasilea o como diantres se diga. Noto un ligero rubor en sus mejillas y... esperen... ¡¿Sasuke Uchiha ruborizado?! ¡El día esta de locos!– No te estoy pidiendo matrimonio ni que me prestes el vientre, Sa-ku-ra – su rubor desaparece para dar paso a una sonrisa de superioridad, de esas que me hacen querer partirle una piedra en la cabeza y al mismo tiempo devorarlo a besos – No pienso tolerar a ninguna chica insoportable que se cuelgue de mi todo el baile. Además, ¿quién mejor para disfrutar mi último baile que mi mejor amiga?

En otra ocasión, lo hubiera golpeado y me hubiera burlado de él, obligándolo a aceptar las múltiples propuestas. Pero sería una ocasión donde yo no sintiera nada por él, porque por Sasuke siento todo lo que se pueden llegar a imaginar.

Abro mi lata, aun impactada por su pregunta, pero salgo de mi asombro y entro otro cuando la Coca-Cola sale disparada hacia mi rostro, empapándome. Cierro los ojos y escucho como Sasuke se contiene para no reírse a carcajadas de mí y perder el estilo de chico cool y "a mi nada me hace reír" que tantos años le costó conseguir. Por mi parte, yo me siento asqueada por la maldita Coca-Cola.

– Molesta.

Me río falsamente y le tiro el líquido de mi lata en su rostro, Sasuke deja de reírse y esta vez soy yo la que me burlo de él, sin importarme su mirada asesina. Sin embargo, no cuento con que el azabache se una a un juego tan infantil (o al menos para él, a mí me encanta joder a las personas) y me tire parte de su cerveza en mi cara y mi pelo, como si no bastara con la horrible Coca–cola.

– ¡Estúpido! – grito furiosa y trato de tirarle el resto de Coca-Cola que me queda, pero él es más rápido y toma mi mano antes que pudiera hacerlo.

Comenzamos a forcejear y a tirarnos nuestras bebidas en las ropas, no evitamos reírnos ante el pequeño juego, o al menos yo me río a carcajadas mientras él sostiene una sonrisa que pocas veces ha mostrado; esa sonrisa que demuestra que en verdad es feliz. Eso sí, Mikoto va a matarnos cuando nos huela el olor a cerveza en las ropas y más si mañana hay clases.

– ¿Y bien? – Sasuke me pasa una cobija que tenía guardada en el baúl del auto y me la coloco alrededor de mi cuerpo.

– Bien, pero no quiero ir en una estúpida limosina.

– De acuerdo. ¿Otra cosa?

– No quiero que nadie lo sepa hasta el día del baile. – Sasuke me mira confundido y me apresuro a explicarle – Lo único que me falta es que tu club de fans me acose nuevamente. Aún me deben la vez que asesinaron a Kim.

– Era solo una bicicleta, Sakura.

– Pero era mi bicicleta, y ni siquiera me dejaste perseguirlas con Sophia.

– No puedes perseguirlas con una navaja.

– Aun así no deben saberlo.

– ¿Algo más, molesta?

Ugh, ese apodo de nuevo. Un día voy a meterle algo por donde no le entra el sol y ahí si sentirá una molestia.

– No pienso usar vestido ni tacos.

– No me importa como vayas, solo quiero que vayas conmigo – responde con sinceridad y quita sus ojos de mi para volver observar la ciudad.

Mis mejillas automáticamente se ponen rojas. Por Kami, ¿cómo se le ocurre decirme algo así? ¿Acaso no sabe el afecto que tiene en mí? Estúpido y sensual Uchiha.

Lo miro de reojo y noto como la luz de la luna daba en su rostro, iluminándolo y haciéndolo aún más atractivo de lo que es. ¿Y si le suelto la verdad ahora? ¿Ahorita? ¿Qué diría él? Siento como el vértigo se pronuncia aún más fuerte y por un momento creo que voy a desmayarme.

Ya, solo tengo que decirle algo simple como "Sasuke, sé que no soy femenina y parezco uno de ustedes cada vez que hay boxeo en la televisión y comemos nachos con queso derretido solo con las manos, también que la preparatoria completa cree que soy lesbiana porque no saben que es un pequeño truco para que tus fans me dejen de joder la existencia. Oh, y que suelo golpear a los idiotas que intentan propasarse con mi mejor amiga, y admito que fui yo quién le rompió la cara Kabuto cuando te dio una paliza junto con sus amigos, ya que se me hacía una injusticia que te agarrara con cinco tipos más. Y también que fui yo quién le sugerí al tío Jiraiya que tu madre tenía una buena delantera y ardientes curvas para inspirarse en su próximo libro de Icha Icha, pero en mi defensa yo estaba jodiendo y él fue quien quiso espiarla en las aguas termales y por eso termino en coma cuando tía Kushina y ella lo agarraron, y ni hablar cuando tía Tsunade lo agarro después. Pero yo... yo te a–..."

– Vámonos, es tarde – dice para darse la media vuelta y entrar al auto.

Y una vez más, me deja con las palabras en la boca.

Estúpido Uchiha.

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¿Qué les pareció? ¿Les gustaría que en el próximo capítulo apareciera alguien en específico?

Espero poder subir pronto la siguiente parte (: Comienzo el lunes la universidad, así que no tendré tanto tiempo disponible.

Sayonara, ttebane!