Capítulo 6

Secundaria Seirin

Los rojizos ojos de Kagami estaban centrados en la figura del fantasma, cada movimiento, cada acción que hacía el peliceleste era observada por el tigre de Seirin. Al moverse en la cancha sus pies solo daban pasos torpes, descuidados y poco precisos en el juego, no podía evitar ver esa cabeza celeste contoneándose de un lado a otro por el lugar, cada vez que la mirada de Kuroko chocaba con la suya rápidamente desviaba el rostro para cortar cualquier contacto visual, no quería ser obvio pero desde que conoció el pasado de su compañero y su relación con los jugadores de Teiko se ha vuelto tenso e impaciente sin poder pensar con claridad.

Cada vez que la imagen o el simple hecho de escuchar el nombre de su sombra le hace caer en una sarta de pensamientos confusos sobre el chico. No entiende el porqué Kuroko es un completo misterio y cada vez que se le cruza en la mente empieza a divagar sobre el joven, cada vez más las dudas lo inundan y el hecho de no saber las respuestas es lo que realmente le mortifica, es como si quisiera saber todo sobre Tetsuya.

En el descuido el balón llego hasta su dirección sin percatarse de ello no llego a escuchar las voces sus compañeros solo se vio el gran cuerpo de Kagami caer de bruces al suelo con la marca del balón en su frente, el pelirrojo apenas pudo darse cuenta de lo que sucedió para cuando que dé un salto la furia Taiga se levanto del suelo con el ceño fruncido para reclamar por el repentino golpe en su contra, antes de gritar y hacer un alboroto la entrenadora apareció frente del despistado jugador con una mano sobre las caderas, mientras con la otra sostenia un balón entre el brazo y la cintura.

—¡Pon más atención, Bakagami!

La castaña le regaño teniendo un tic en la ceja arrojándole sin compasión el balón que tenía en manos directamente a Kagami y ante el impacto hizo que la cabeza del malumorado chico se hiciera atrás rebotando el balón hacia otro lado.

Era increíble el temperamento voraz de la entrenadora que en ocasiones llega a causar un tremendo miedo, pobre del hombre que se case con ella.
La mayoría de los compañeros se quedaron callados manifestando una expresión bastante incómoda incluso comenzaron a sudar y no por el entrenamiento sino por la actitud aterradora de Riko.

Kagami se froto la mejilla y como esta tomaba un color rosado en forma de circulo, de seguro Riko le vio una gran diana dibujada en el rostro porque siempre le da justo en la mera cara.

"Maldita enana" Fue lo que pensó luego de erguirse y encararla.

—¡No me des en la cara!
Respondió encolerizado, casi hasta se pidan ver el humo saliendo de sus orejas.

—¡Idiota! Eso te pasa por no fijarte donde está el balón, concéntrate.

Riko se irguió a lo que puso con las manos en la cadera sin despejar ni un momento esos ojos afilados del contrario, debía aprender a no distraerse en un momento crítico en medio de un partido, que pasaría si hacia lo mismo en un verdadero partido.

Algunos reproches y gruñidos salían era todo lo que escuchaba por parte de Taiga asi que Riko harta de esa actitud soplo el silbato y todos se reunieron en donde estaba.

— Vamos a descansar — Suspiro relajando los hombros al hacerlo, ya con más paciencia miro a Kagami y como este seguía resoplando con desgana y se iba con el resto de sus compañeros a sentarse a tomar el descanso.

Riko llevo una mano a la boca, pensativa viendo la espalda del pelirrojo, se veía tenso y estresado como si algo le estuviera inquietando y eso no era bueno, mas tratándose de Kagami y no solo era en el entrenamiento desde varios días Taiga ha estado muy distraido y presta muy poca atención a su alrededor es extraño verlo en un partido en que actué despistado.

Se mordió la uña en señal de concentración, no lo comprendía del todo pero conocía a la perfección la actitud de cada uno de sus compañeros en Kagami es sencillo por ser tan más abierto como un libro abierto con respecto cuando algo le molesta y es más que evidente que el motivo de ello es Kuroko, su forma de dirigirse a él, ese modo de verle, inmediato desvió la vista hasta Kuroko y como este se limpiaba el sudor en una toalla, estaban a unos metros lejos uno del otro y era más que obvio que entre dos había algo extraño.

Dio otro silbatazo y al instante las miradas de posaron en ella.

—Dejemos el entrenamiento por hoy, deben descansar que mañana tenemos un partido.
Dio un aplauso y con ello concluyo viendo como los chicos soltaron un suspiros para irse a los vestidores.

Cuando todos tomaron sus cosas estaban exhaustos, camino detrás de Kagami darle una palmada en la espalda. —Animo Kagami, te necesitamos.

Se dirigió a él casi murmurando en lo que Taiga solo sonrió de esa forma usual y se despidió de la entrenadora.

Debía averiguar mas, las pistas que tenia no era suficientes y aunque los indicios eran claros necesitaba confirmarlos antes de poder actuar impulsivamente.

—Kagami-kun.
La voz monótona y sin alteración de Kuroko apareció tras la espalda del nombrado. Este se sobresalto con solo escucharlo y darse la vuelta al ver al chico, este andaba con el usual uniforme y la mochila colgando en su hombro.

— ¡No aparezcas así!
Grito en un sobresalto al verlo allí, normal como si fuera lo más natural, esa repentina aparición del chico le ponía los pelos de punta detestaba eso de Kuroko era realmente molesto verlo y no sabía el porqué.

—He estado aquí desde hace un rato.
Sus ojos miraban directamente hacia arriba viéndole desde arriba con esa expresión inexpresiva y carente de emoción.

— ¿Eh?
Se rasco la mejilla nervioso por esa declaracion que lo hizo sentirse estúpido, a esas alturas debía estar familiarizado pero era muy difícil poder acostumbrarse a alguien que de un momento a otro se aparezca como… como un fantasma, a veces pensaba que Tetsu no era humano, eh, lo mejor era dejar de ver películas americanas le estaban haciendo perder el juicio.

Siguió a Kagami desde por varios minutos incluso lo llamo varias veces pero ni siquiera se percato de su presencia, no le molesto se notaba que estaba distraído, pasaron de largo por el Maji Burber lo que le pareció extraño, normalmente Kagami no pasa desapercibido las veinte hamburguesas diarias, tal vez algo malo le pasaba así que volvió a pronunciar su nombre y esta vez sí reacciono a su llamado.
Todo se vio normal al verlo actuar como siempre, terminaron frente a una tienda de convivencia, tenía la garganta seca y devolverse por un batido no era algo que realmente quisiera hacer, quizá algo frio le sacie la sed, un helado estaría bien.

Con pasos pesados y sin ánimos entro a la tienda sin decir, Kagami apenas se percato de ello y por inercia fue tras él.

Al entrar se quedo un momento mirando la variedad de helados pero solo tomó uno de sal marina, no duro en sacarlo del paquete y salir por las puertas del local, Kagami que solo le siguió la mirada le vio marcharse así como si nada.

Aquello llamo la atención del empleado de la caja que luego le reprocho a Kagami y este estaba sin poder procesar lo que recién había pasado que comenzó a sudar incomodo por los gritos del hombre por el pago en lo que las demás personas centraban su vista en el joven alto y cabello alborotado asi que ante eso Taiga sin tener otra opción a regañadientes reviso sus bolsillos aventando casi el dinero al tipo y salir del local rojo ya sea por la rabia o la vergüenza a lo lejos capto las espaldas de su sombra sin dudarlo corrió como una fiera tras él.

— ¡Kuroko! ¡Tu, pequeño idiota!
Le tomo del brazo y jalarlo para que lo viera de frente.

Los dientes se mostraban apretando la mandíbula, era demasiado que hiciera algo como eso, de hecho el que le dejara con una deuda y se marchara como si nada era merecedor de un golpe, tenía el brazo levantado sujetando del hombro al chico pero al contrario de castigarlo solo se quedo boquiabierto, pasmado con la vista puesta fija en la figura de su compañero que yacía con el helado entre los labios y este chorreando entre sus dedos, la simple imagen del chico era extraña que le revolvió el pecho mirándolo embobado y volver a sentir la sangre subírsele a la cabeza y sudar frio al instante reacciono y de rápidamente soltó el agarre que tenia sobre el hombro del menor.

La vista de celeste del menor se guio a la boca del tigre, quito el helado de entre sus labios y lo introdujo en la boca abierta del contrario, cosa que le pareció divertido quería ver su reacción si bien ya sabía cual seria.

—Eres muy molesto. Dijo como si nada y siguió caminando dejando al pelirrojo atrás, este ultimo por su parte se helo por la acción del fantasma. —No me gusta tu expresión. Eso último lo dijo en un tono más serio.

Mierda, mierda ¡Mierda!
Kuroko era un maldito realmente quería golpearlo con todas sus fuerzas… ¿Golpearlo? No, golpearlo no, era diferente…

¿Qué era esa clase de sentimiento? Un hueco en el estomago le inquietaba y no era por hambre pero era sumamente angustioso nunca antes se había sentido de ese modo.

El tener algo que Kuroko tuvo con anterioridad en él no ayuda en nada y peor que estuviera en su boca le puso nervioso realmente nervioso.

— ¡No me des cosas que hayas comido! Es asqueroso.
Hablo sin pensar solo fue por defensa que había reaccionado de ese modo.
Se quiso morder la boca por decir eso, fue un error no se refería a eso… tks, se llevo una mano a la cara al darse cuenta de esa estupidez que había dicho, a veces le gustaría poder cortarse la lengua.

— Además ¿Que tiene mi cara?
Cambio de tema tocándose la nuca pero con el entrecejo bastante pronunciado, esperaba que con eso lo que dijo se disipara.

Kuroko fijo su vista a otro punto, era incomodo estar con Kagami, sentía que ese amistad que tenían antes nunca volvería hacer la misma, no desde que…
Prefirió no querer mencionarlo pero era evidente que Kagami no lo pasaría por alto, le prometió que no lo divulgaría pero eso no significaba que fuera a olvidarlo. Trago saliva y recordar como Kagami se quedo viéndole minutos antes y eso solo le daba un mal recuerdo.

—He visto esa expresión que hiciste y no me gusta su significado, no quiero verla en Kagami-kun.
Claro que la había visto antes, en sus anteriores compañeros en Teiko, esa misma expresión que indicaba que terminaría acostándose con ellos en cualquier momento era simplemente humillante recordar eso y solo pensar eso de Kagami era simplemente algo que no quería pasar de nuevo.

Caso contrario del pelirrojo que su comentario solo le provoco un tic en el ojo por tales palabras, no era como si fuera tan simple para el cómo ser gélido y carente de emociones como cierta persona así que ese comentario le molesto.
— ¡Es mi rostro, idiota! Si no te gusta no lo veas.

Ese no era el caso pero lo mejor era que lo entendiera de esa manera, mucho mejor, se quedo callado sin verle sin embargo aquello únicamente empeoro a Taiga que

ante eso le tomo de la barbilla para que volteara a verle metiendo a la fuerza el helado en la boca del más bajo.

—¡Tu cara es aun peor!

Kuroko al tener aquello en la boca parpadeo varias veces retirando el helado de sus labio, observo con atención por un momento el helado y cambiar de tema.

—Así que esto es un beso indirecto. Murmuro con una leve sonrisa, muy perceptible.

Se llevo el dulce a los labios nuevamente como si nada para acabárselo no obstante en cuanto a Kagami se quedo congelado por esas palabras que su rostro se torno del mismo tono de su cabello algo alterado sin nada de delicadeza de un jalón retiro la paleta de los labios del menor y tirarlo directo a la basura.

—¡E-estas equivocado!

Kuroko guio la vista al basurero y volver a ver a Kagami que se mostraba molesto y sudando parecía inquieto e incomodo.
Se encontraba rojo sin dirigirle la mirada, solo lo dijo de broma no habia necesidad de tomarlo tan agresivo luego pero luego lo comprendió. Bajo un poco la cabeza y apretar apenas los puños al entender.

—¿Tanto te molesta?
Algo frio y monótono pregunto aquello, se sintió herido pero no lo demostro de cierto modo debía de suponerlo después de todo Kagami había descubierto aquello que tanta humillación le había causado en el pasado era obvio que sintiera desagrado y no lo culpaba también se sentía asqueado de sí mismo.

—No te preocupes Kagami-kun, entiendo que te desagrade.

El más alto se quedo mudo sin poder contestarle, trago saliva ¿Desagrado? No, estaba equivocado, completamente equivocado, no le desagradaba pero tampoco podía decir lo contrario era… ¡ARG! No lo entendía, todo con referencia a Kuroko le dejaba aun más confuso y sin respuestas que solo le hacía quererlo estamparlo contra la pared y que de una vez le aclare toda esa mierda.

—Kuroko…
No quería que pensara de esa forma era su compañero y como tal quería darle su apoyo aunque incluso no lo comprenda pero solo quería que Tetsuya confiara en él, tan solo que dependa de él y solo de él.

Cuando estaba dispuesto hablar el sonido de un móvil inmediatamente lo callo y no era el suyo, su vista se guio al móvil del fantasma y como este le ponía atención.

— Discúlpame, debo irme.
Sin más se dio la vuelta sobre sus tobillos para tomar un camino distinto al que tenía que ir con Kagami, antes de cruzar la calle el pelirrojo le detuvo, no dejaría que Tetsu se marchara así como así y menos sin aclarar ese pequeño malentendido.

—Geez, no me dejes con la palabra en la boca, maldición. Apretó los labios antes de continuar. —Escucha...

—Kagami-kun, me están esperando…

Un escalofrió recorrió el cuerpo de Taiga al escuchar eso, no le dejo terminar y sin medirse lo tomó del cuello de la camisa y verle con una expresión de completo enfado.

— ¡¿Quién te está esperando?!

No sabía porque gritaba ni porque le detuvo pero… ¡Kuroko no puede irse!

Varias personas les miraron pero al más alto no le importo solo se quedo esperando la respuesta. Kuroko no respondió y eso solo aumento la ira del otro, rechino los dientes soltándole con desgana y mirar al suelo, ahora estaba más confundido ¿Por qué estaba molesto porque Kuroko se fuera? ¿Porque, maldición? ¡Porque!

Chasqueo la lengua sin poder saber que hacer o que decir se sentía extraño y mostrarse de ese modo nuevamente con el chico le hacía sentirse patético pero no lo podía evitar.
Luego de unos minutos en los que ninguno hablo solo el sonido de los autos y la gente de la calle al pasar se dispuso a volver a dirigirle la palabra pero sin tener las ganas de verle.

—Perdona.
Se llevo una mano a la boca dándole la espalda, no tenía el derecho de reclamar nada aunque le molestara sin motivo pero no era quien para privar a Kuroko de su vida personal de la cual no tiene nada que ver con él.

—No me desagradas, para nada.
Se rasco la nuca para alejarse del chico, tenía un nudo en la garganta que no le dejaba en paz, lo mejor era atragantarse con comida, darse un buen baño e ir a dormir, tenía que calmarse y pensar mejor las cosas.

Ambos se fueron por lugares distintos, Kuroko antes se quedo dudando si debía se seguir se volteo y ver a lo lejos la cabeza de su amigo, se mordió el labio inferior apretando entre sus manos el móvil.

—Lo lamento Kagami-kun.
Se disculpo sin ser escuchado volviendo de nuevo al camino.

.

.

Al llegar sus piernas apenas soportaban su peso y sentía la boca seca, no supo cuando tiempo se quedo allí viendo la puerta, el viento revoloteando su cabello contando los segundos para tener que tocar la puerta y entrar a "ese" departamento para ver a "esa" persona esperándole. Alzo la mano dispuesto a tocar pero a centímetros de hacerlo algo le detuvo, un dolor en el pecho le hizo querer retroceder y así pensaba hacerlo hasta que la puerta se abrió.

— ¿Pensabas huir?

Aquella sonrisa retorcida y pose erguida llena de orgullo era única, solo esa persona es la única capaz de mostrarse tan engreída y altanera que con solo verlo le hace temblar y querer con más ganas el querer escapar de esa mirada inquisidora, como si estuviera estudiando cada parte de su cuerpo.

—No.
Contesto cortante y vacio mirándole sin expresión alguna solo verlo pero por dentro algo le consumía, no era miedo pero si una sensación muy intensa.

—No mientas, sé que no quieres estar conmigo.
Deshizo la posición en la que estaba para acortar la distancia entre ambos. —Pero adivina qué… — Expuso una sonrisa ladina llena de malicia en lo que se inclino tomando del cabello al chico jalando sus cabello para que le viera claramente...

—Eres mio~

Je, creo que ya paso mucho desde la última actualización, la verdad no pensé que el fic les gustara así que pensaba dejarlo hasta que leí los últimos comentarios fue que me atreví hacer este cap.

Ahora con respecto a las parejas sé que no hay ninguna entonces cambiare eso, este fic al principio era un "TodosxKuroko" ya que no planeaba hacer una historia pero ahora me decidí y la pareja será KagaKuro, amo esa pareja y el desarrollo de este fic con ellos tiene buen camino así que ¿Por qué no?
Eso sí, va haber una batalla para que esta pareja se efectué, un malote que no permitirá que las cosas sucedan, jejeje…

En fin, espero que les guste el fic tanto como yo al escribirlo, me falta aun el lemon de la mayoría pero como ya establecí una pareja entonces no se si hacer el resto de los lemos o al menos un lime, solo los que ustedes quieran de los que faltan: MuraKuro, AkaKuro, AoKuro.

Es todo, gracias por sus comentarios tan chulos y esos hermosos fav's
Los amo.