Los personajes de la siguiente historia no me pertenecen. Alguno de ellos son propiedad de Disney y otros son propiedad de Dreamworks

Aaaa…se siente tan bien volver aquí (suspiro de alivio)

El capítulo va dedicado a yara sosa

CAPITULO 7

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Eso fue lo primero que leyó Elsa cuando logro encender la computadora. Movió el mouse, cliqueo y toco las teclas del teclado pero lo único que logro es que en la pantalla apareciera un cartel de ¡Error!

Elsa supuso que lo mejor era no continuar porque no sabía lo que iba a suceder, lo último que quería era meter la pata igual que lo había hecho los últimos días. Primero fue con su celular, cuando intentaba aprender a escribir un mensaje las letras no salían, a veces aparecían extraños símbolos, y el táctil la ponía demasiado nerviosa, termino de perder la paciencia y arrojo el teléfono contra la pared, rompiéndolo al instante. Después fue su playstation, Olaf estaba enseñándole a jugar y no era muy rápida para manejar los controles del joystick, lo que hacía que el personaje no se moviera como ella quería o como su hermanito le indicaba, y también termino arrojándolo. Por último, fue la licuadora. Vio a su madre preparar un licuado y Elsa quiso hacerse uno. Preparo todo sin indicaciones, sin nadie que la mire, según había observado a Lisa, y los primeros pasos le salió todo bien pero cerro mal la tapa del aparato y, cuando presiono el botón para que marche, el pegajoso líquido salió disparando hacia afuera, manchado toda su ropa, cara y cabello. La licuadora tuvo el mismo final que el móvil y el joystick.

Elsa bajo la cabeza, suspirando derrotada. Ella sentía que no conseguía hacer las cosas bien porque eran demasiado difíciles pero la verdad era que no se esforzaba mucho. Hacia una semana que había empezado ir al famoso instituto del que sus padres le habían hablado y del que ella no puso mucho interés en escucharlos cuando lo hicieron. No prestaba mucha atención en las clases y tampoco le hablaba claramente a su neuropsicólogo, especialista que se encarga de los efectos que causa una lesión, daño o funcionamiento anómalo en las estructuras del sistema nervioso central, cada vez que le planteaba alguna pregunta.

Después apagar la computadora, Elsa fue hasta su cama para tomar Oliver, quien estaba jugando con su pequeña pelota roja. Elsa bajo las escaleras y se detuvo en el medio para ver el Living. Su prima Odette miraba algo en la televisión y por su expresión parecía aburrida y pensando en otra cosa en vez de estar poniendo atención a lo que pasaba en la película. Debido a los accidentes que Elsa tuvo cuando se quedó sola, sus padres temieron de que se volviera a repetir así que le pidieron que se quedara en la casa para que no le sucediera nada.

Elsa miro desde donde estaba el televisor y distinguió en la pantalla a un chico y una chica sentados a orillas del rio, hablando. El chico se pone demasiado cariñoso con ella, le rodea la espalda con su brazo y la acerca más a él. La chica se sonroja y lo mira con ternura. Al cabo de unos segundos ambos se besan.

El rostro de Elsa se puso igual que el de la muchacha en el televisor cuando el chico la abrazo. Varias preguntas se le vinieron a la cabeza pero la que más resalto fue ¿Por qué motivo hacían eso?

Un pensamiento extraño se le ocurrió y eso hizo que su rostro se pusiera aún más rojo. Trato hacer fuerza para que se le ocurriera otra cosa pero solo logro que el pensamiento se hiciera más fuerte. Volvió a pensar normalmente cuando Oliver bajo de sus brazos.

"Oye, vuelve aquí" lo llamo Elsa.

Oliver siguió caminando hacia abajo y fue en dirección hacia donde estaba Odette y Olaf. Elsa corrió hacia él y lo tomo en sus brazos nuevamente. Luego paso su mano por la frente, suspirando aliviada.

Esa actitud hizo que Odette levantara una ceja. Desde antes del accidente sabía que Elsa amaba a ese gato con locura pero nunca tuvo una obsesión por él, y menos por perderlo.

"Emmm… Elsa, no creo que a ese gato le guste estar tanto tiempo alzado."

"¿Y tú como lo sabes si ni siquiera lo conoces?"

Odette resoplo en voz baja blanqueando los ojos.

"Como digas, es tu gato no mío."

Odette apoyo su codo en el brazo del sillón y recargo su cabeza sobre su mano, volviendo su atención sobre el televisor.

Elsa miro a su pequeño hermano que estaba en el piso jugando con montón de muñecos y autitos. Entre ellos estaban las tortugas ninjas, un Superman, el auto de Batman, soldaditos de color verde y un Spiderman. Ella se sentó a su lado con las piernas cruzadas, manteniendo a Oliver en sus brazos. Olaf tuvo que ocultar su cara de fastidio porque desde que su hermana vio a Oliver ya no le prestaba atención como la de antes, era como si para ella fuera más importante Oliver que él.

"¿Qué haces?" pregunto Elsa.

"Juego" respondió el niño.

"¿Y quiénes son todos ellos?"

"¿Por qué te importa?" Pregunto mientras golpeaba con fuerza a Superman con una de sus tortugas ninjas.

"Porque no sé qué hacer."

"¿No tienes tarea que hacer?"

Odette, que escuchaba todo en vez de prestar a tención en el televisor, se contuvo para no reír. Era increíble que un niño de la edad de Olaf le estuviera diciendo eso.

"No puedo hacerla."

"¿Por qué?" Olaf detuvo los golpes y se dignó a mirar a su hermana mayor.

"Porque es difícil."

"Pero nada es difícil para ti, tu siempre fuiste una chica muy inteligente."

Quizás la otra Elsa si era una chica muy inteligente pero ella…no era nada. Olaf noto algo extraño en la expresión de Elsa, eso le hizo sentir algo de culpa.

"Humm bueno… ¿Quieres jugar?" pregunto como para cortar con la tensión que se había formado.

"Es que…no sé qué tengo que hacer."

Del tiempo que habían pasado juntos, desde que despertó, Olaf nunca le había pedido jugar con sus muñecos. Sus papas le habían pedido que le diera a Elsa su espacio hasta que se acostumbrara a estar con ellos. Él hizo caso y de apoco le fue a hablando para que confiara en él, más de una vez consiguió sacarle una risa con las anécdotas que contaba. Olaf pensaba que de apoco estaba consiguiendo la aceptación de su hermana pero eso cambio cuando Elsa vio al gato. Sin embargo, Elsa ahora estaba acercándose a él y no parecía tener intenciones de ignorarlo.

"No es tan difícil, ya lo has hecho antes."

"¿Ah, sí?"

"Si, tú y Anna suelen jugar conmigo todo el tiempo. O mejor dicho, solían… porque tú no te sientes bien y…ella ya nunca viene" Olaf fue bajando el tono de voz a medida que terminaba la oración.

Odette no tardó en darse cuenta que era porque extrañaba a Anna. El pequeño no podía entender cómo es que Anna no haya llamado o venido a visitarlos. Él sabía lo mucho que se preocupaba por Elsa.

Odette sabía que era porque Anna no se animaba a salir de la casa sola. Sus tíos se lo comentaron.

Elsa por otra parte tardo en darse cuenta que Anna era aquella muchacha que había visto en el hospital. Un sentimiento extraño, que no había sentido en ningún otro momento, apretujo su corazón y de inmediato se llevó la mano a ese lugar mientras que con la otra sostenía a Oliver. ¿Qué tan fuerte era el vínculo que tenía con esa persona? ¿Por qué le pasaba solo con ella y no con otras personas?

Odette miro a los dos, meditando para buscar algún tipo de idea. Tal vez había una forma de que los dos se pongan felices. O por lo menos Olaf, de Elsa no estaba tan segura pero quizás le haría bien a ella también.

"Oigan".

Elsa y Olaf se voltearon a ver a su prima.

"Vengan un minuto, quiero enseñarles algo" dijo sacando su móvil que estaba en su bolsillo.


"¡No, no, no, no y no!...Yo no necesito ningún terapeuta".

Anna se levantó del sillón de donde estaba sentada e intento irse pero su padre la obligo a sentarse otra vez. Rapunzel estaba sentada en el sillón de al lado y parecía bastante preocupada por el estado de su prima.

Tanto Harry como su esposa se pararon en frente de su hija con los brazos cruzados.

"Hija" afirmo su padre "necesitas ayuda, no puedes seguir encerrada en la casa".

"Estoy saliendo a caminar más seguido."

"Cariño, no basta solo con salir a caminar a pesar de que ya sean más de seis cuadras. Tienes que salir a hacer alguna actividad, ver a tus amigos. Hacer lo que te gustaba hacer antes del accidente" dijo su madre.

Pero Anna hacia todas esas cosas con Elsa y ahora que ella no era la misma no podía hacerlo.

"Anna" esta vez fue Rapunzel la que hablo "entre más te encierres más difícil será para ti seguir adelante."

"¿Y si no quiero salir adelante?"

"Anna" se desconcertó su madre.

La pelirroja se levantó y logro pasar por delante de sus padres para, como ya tenía de costumbre, correr hasta su habitación y encerrarse ahí dentro. Su fiel amigo canino lo esperaba sentado en el suelo. Anna lo ignoro y se sentó en el borde de la cama, uniendo sus manos y bajando la cabeza. Dodger apoyo su cuerpo contra las piernas de su dueña. Esas pequeñas muestras de afectos hacían que el corazón de Anna se ablandara y ya no se sintiera tan triste.

No paso mucho tiempo para que Rapunzel entrara al cuarto. Soltó un suspiro que estaba conteniendo hacia un rato al ver a su prima llorar.

Rapunzel se acercó y se sentó a un lado de Anna, dejando a Doger entre medio de las dos. Anna sitio la mano de su prima pasar suavemente por la espalda.

"Anna, entiendo cómo te sientes. Al principio yo tampoco me sentía segura de hablar con un desconocido acerca de lo que pasaba cuando… perdí a mis padres."

Rapunzel tuvo que tomar una gran bocanada de aire y soltarlo con suavidad por la nariz y por la boca. No estaba dispuesta a llorar por ese tema en ese momento, su prima la necesitaba y debía ser fuerte.

"Veras que te ayudara y saldrá todo bien."

"¿No comprendes?" dijo Anna con voz apagada, mirando a Rapunzel con ojos llorosas. "No quiero subirme a otro auto. Ahora, déjame sola".

Para evitar que Rapunzel siga hablando Anna se acostó en su cama y le indico a Dodger que subiera para que le hiciera compañía y lo abrazo con fuerza.

Rapunzel no tardo en salir de la habitación y cuando estuvo fuera saco su móvil del bolsillo de su pantalón y marco el número de la única persona que podía ayudar mientras caminaba a su propio cuarto.

"Hola" saludo una voz medio dormida.

"¿Quisiera saber porque no te has aparecido en estos días?"

"Intento ser buena amiga" se defendió.

"Bella" se quejó Rapunzel.

"¿Qué? Estoy diciendo la verdad."

"Ignorándola no te hace buena amiga."

Bella tardo en responder. En ese tiempo Rapunzel abrió la puerta de su cuarto y la cerro detrás de ella, luego camino hacia la silla de su escritorio y la hizo girar de un lado a otro.

"¿Y bien?" insistió Rapunzel al notar que su amiga se estaba tomando demasiado tiempo para hablar.

"¿Qué…que pretendes que yo haga?" Bella sonaba demasiado nerviosa. "Creí que tú y Kristoff la estaban ayudando."

"No es suficiente. Anna ya puede salir a caminar pero no puede subirse a un auto. Necesita un terapeuta y tenemos que convencerla."

"No veo en donde entro yo en todo el asunto."

"¡Habla con ella!" Rapunzel sonó un poco exasperada. ¿Y cómo no estarlo? Estaba cansada de no poder hacer nada más para ayudar a Anna. "Eres la única a quien va a escuchar ahora."

"¿Y Elsa?"

"No la ha visto desde que salió del hospital"

"¿Cómo que no la ha visto?" Bella sonó sorprendida.

"Elsa está en un estado peor que el de Anna ¿Qué quieres que le diga?"

Rapunzel escucho a su amiga golpearse la cara. Bella no se había expresado del todo bien, en realidad su duda era en por qué Anna no se había atrevido a hablar con Elsa sabiendo lo mucho que se preocupaba por ella.

"Escucha" siguió hablando Rapunzel. "Entiendo lo que sientes pero…háblale, ahora…Tomate tu tiempo y hazlo, por favor."

Bella volvió a quedarse en silencio. Le rompía el corazón el estado de Anna, no podía seguir tolerando estar así por más tiempo. Ya se había regañado varias veces por no hacer nada.

"Hablare con ella" acepto. "Pero tendrás que ser paciente, aunque le hable del asunto no creo que pueda convencerla tan fácilmente de que vaya a un terapeuta."

Rapunzel se llevó la mano al corazón y sonrió aliviada.

"Muchas gracias."

"De nada pero…dame unos minutos para pensar en cómo hablar con ella."

"Si, está bien, de todas formas te dije que te tomaras tu tiempo. Solo no tardes mucho."

"No, descuida, la llamare en un rato."

"Está bien, adiós" Rapunzel se despidió con una inclinación en la cabeza, a pesar de que Bella no podía verla, y colgó cuando su amiga se despidió.

Rapunzel sabía que le había pedido algo difícil a Bella y rogaba porque la cosa no terminara mal.

Anna estaba a punto de dormirse cuando escucho el timbre de su móvil. Tanto ella como Dodger levantaron la cabeza sobresaltados. Anna se limpió un poco los ojos que, aunque había dejado de llorar hace rato, estaban algo húmedos, además adormecidos. Tomo su móvil, se puso de rodillas sobre su colchón, y vio que Odette le había enviado un mensaje de audio. Quedo algo sorprendida. Su relación con la prima de su mejor amiga no era mala, solo que a veces si tenían algunas leves discusiones pero no eran grabes. Aun así Odette no era de pasarle algún mensaje a menos que sea importante, pero los mensajes eran de texto nunca de audio.

Anna prefirió no darle muchas vueltas al asunto y escucho el mensaje

"Hola, Anna. Responde por audio cuando escuches este mensaje… ¿Qué tal todo, por cierto?"

Anna levanto una ceja de confusión y miro a Dodger como si él pudiese darle alguna respuesta. Pero Dodger le dio la misma mirada de confusión y se encogió de hombros, él menos que menos sabía lo que estaba pasando.

Anna suspiro sabiendo que con tantas dudas no lograría nada. Toco unas rápidas veces la pantalla de su móvil y lo acerco a sus labios.

En la casa de Elsa, ella, Olaf y Odette esperaban la respuesta de la pelirroja. Elsa no entendía muy bien que es lo que iba a pasar pero por lo que le había explicado su prima, Anna le hablaría y estaba impaciente por saber que sucedería.

Odette sonrió de una forma exitosa al sentir vibrar su teléfono en su mano.

"Ya contesto chicos."

Olaf festejo levantando sus brazos hacia arriba.

"Muéstranos que dijo."

Odette rió mientras tocaba la pantalla de su móvil para darle Play al audio.

"Humm…hola, todo en orden. Hace un rato estaba hablando con mis padres y mi prima, y subí a la habitación porque no tenía otra cosa que hacer. Entonces me recosté un poco en la cama y me estaba por quedar dormida hasta que escuche el ruido del teléfono. Me sorprendió tu mensaje, ya que no estoy acostumbrada hablar contigo de esta forma. No es que me moleste tampoco, solo es raro…no un raro malo, solo raro porque esto es nuevo y…aaahh como sea, estoy bien ¿Qué tal tú? ¿Está todo bien?"

Olaf soltó una risa, le gustaba cuando Anna empezaba a divagar. A Elsa se le abrieron los ojos. Reconocía la voz, estaba algo distorsionado por la calidad del audio pero sabía que era de la muchacha pelirroja que había visto antes. De inmediato se puso feliz. Dejo a Oliver, que estaba en su brazo sobre la alfombra para que se acurrucara sobre ella y se acercó un poco más a Odette para seguir sabiendo que sucedería.

Odette se preparó para contestar.

"Digamos que en estos momentos soy niñera. Hay alguien que quiere hablar contigo" hubo un silencio unos pocos segundos. "Hola, Anna, me alegra escucharte ¿Qué has hecho en estos días?...por cierto, te extrañe."

Anna sonrió ampliamente al escuchar la voz de Olaf. Además de alegría pudo distinguir que el niño de verdad la había extrañado. Acerco su teléfono a la boca

"He estado complicada pero...nada serio. También te extrañe ¿Y tú que estás haciendo?"

Anna no consideraba correcto decirle a Olaf sobre su problema. Esperaba que Odette se diera cuenta de que debían cambiar rápido de tema.

Ella se apresuró a escuchar el mensaje tan pronto vio la respuesta.

"Estaba jugando con mis muñecos, espero que pronto vengas a jugar."

Anna soltó una risa, pero detrás de ella ocultaba tristeza porque sabía que era muy difícil que volviera a jugar con él. Sin embargo, no podía darle una respuesta desalentadora al muchacho.

"Cuando tenga tiempo tal vez podamos jugar, pequeño"

Olaf reía de felicidad. Escuchar la voz de Anna era como volver a los viejos tiempos cuando ella y su hermana estaban ahí jugando con él.

Se fuero enviando un mensaje detrás de otro. Olaf hablaba de muchas cosas que había hecho en la semana, pero nada relacionado con Elsa y ni siquiera la menciono. No porque no quisiera, sino porque no se daba cuenta de hacerlo. Anna solo le contaba que había pasado tiempo con Kristoff y no había dicho algo relacionado con su pánico a los vehículos.

Olaf volvió a acercar la boca al móvil de su prima pero antes de hablar noto la expresión de su hermana. Elsa parecía estar esperando algo. Olaf lo entendió de inmediato, su hermana quería hablar con Anna. Una idea se le cruzo por la cabeza.

"Bueno, Anna, me alegra saber de ti. ¿Adivina qué? Te tengo una sorpresa.

Odette se quedó sorprendida pero no pregunto, directamente envió el mensaje. Elsa por otra parte solo seguía observando sin sospechar nada de lo que su hermanito planeaba.

"¿Una sorpresa? ¿Qué sorpresa? ¿De qué se trata? Sabes que me gustan las sorpresas" Anna sonaba bastante emocionada.

Olaf apunto a Elsa cuando Odette le acerco el teléfono para hablar. Sin cuestionar, Odette obedeció.

Elsa se puso roja de los nervios y negó con la cabeza. Ella quería hablar con Anna pero no se animaba a hacerlo. Tenía miedo de hacer algo mal.

Odette movió los labios formando un "hazlo" con cara de estar ordenándoselo.

Elsa suspiro resignada.

"Hola…"

Esa palabra, que provenían de esa voz, justo de esa voz, golpeo lo más profundo del alma de Anna. Cubrió la boca con su mano derecha, ahogando un gemido de dolor.

El audio aún continuaba, Elsa se había tomado demasiado tiempo para hablar.

"¿Cuándo volveré a verte?"

El móvil cayó y revoto en el colchón. Anna se llevó la otra mano a la boca, curvando su espalda, ahogando otro gemido mucho más doloroso que iba junto con un grito.

Dodger levanto las orejas preocupado por ver a su dueño llorando. Acerco su hocico para levantar su cabeza pero no lo consiguió.

El perro soltó un ladrido como último recurso pero siguió sin dar resultado. Para colmo los sollozos de Anna se hicieron más fuertes.

Anna levanto la cabeza sobresaltada, afligiendo el llanto, por escuchar otra vez el timbre de su celular. Esta vez no era un mensaje de audio sino una llamada.

En la pantalla figuraba el nombre Bella junto con una foto suya. La pelirroja se tranquilizó un poco y contesto la llamada.

"Hola" saludo Anna hurgándose la nariz.

"Hola" saludo Bella tratando de sonar animada. "¿Te encuentras bien?"

"Si" Anna respondió pasándose el dorso de la mano por los ojos.

"Anna, no me mienta. Suenas como si hubieras estado llorando."

"No te preocupes es…una tontería."

"¿Por qué me cuesta creerlo?" preguntó irónica.

Anna suspiro por la boca sin ánimo de poder hablar.

"Dime que ocurre…o solo habla de algo como para desahogarte."

La voz calma de su amiga hizo que la pecosa esbozara una débil sonrisa. Ladeo la cabeza, sabiendo que no podía escapar de esto.

"Todo lo que está ocurriendo es mi culpa. "

Era una respuesta que llevaba a varias preguntas, las culés Bella no estaba dispuesta a formular.

"¿Hay algo que pueda hacer para que te sientas mejor?"

"No estaría mal que vinieras a hablar conmigo" dijo después de un breve minuto en el que se quedó pensado algo para decir. Anna atrajo sus piernas a su pecho y las envolvió con un brazo. "Echo de menos pasar tiempo contigo."

El comentario puso a Bella demasiado nerviosa, por suerte no podía verla. Con hablar por teléfono no conseguiría hacer mucho. Sabía que Rapunzel tenía la intención de que se apareciera por la casa además de llamarla.

"¿Quieres que mañana pase a saludarte?...Y de paso salimos a caminar."

"¿Sabes de mi problema?"

"Si, Kristoff y Rapunzel me lo explicaron. "

Anna no se sorprendió, ya se imaginaba que la noticia de su problema había sido noticia entre su grupo de conocidos.

"Me gustaría verte mañana" termino diciendo Anna.

"Está bien, pasare mañana a la tarde."

Anna se puso muy feliz, olvidando la tristeza de hace unos minutos. Pasar tiempo con una de sus amigas más importantes iba a ser bueno. Valoraba el tiempo que Kristoff pasaba con ella pero no era lo mismo cuando estaba con Bella, porque la relación era más diferente.

"Okey, te espero entonces."


Poco más de doce minutos habían pasado desde que Odette envió el mensaje y Anna todavía no respondía. Olaf suspiro cabizbajo.

"¿Por qué no contesta?" quiso saber preocupado.

"Tal vez se quedó sin batería" dijo Odette como para animarlo.

Odette sabía que era demasiada casualidad que a Anna se le haya acabado la batería justo en ese momento. Anna sintió algo al escuchar la voz de Elsa pero no sabía porque no se atrevía a contestar.

"O tal vez fui yo la que hizo algo malo."

Odette y Olaf vieron a Elsa. Ella estaba con la vista perdida en algún punto del suelo y parecía deprimida.

"¿No puedes mandarle otro mensaje para ver si responde?" insistió el más pequeño, él no quería que su hermana cargara con la culpa.

"Olaf, Anna puede estar ocupada o tal vez tuvo alguna urgencia."

"Pero no puede estar segura de eso."

En medio de la discusión Elsa se levantó del sillón y coloco las manos en sus bolsillos.

"Ya olvídenlo" dijo Elsa entre medio de la conversación que tenían su hermanito y su prima.

Elsa comenzó su trayecto hacia las escaleras, no se molestó en tomar a su gato.

"Elsa, no te pongas así" trato de animarla la joven.

Elsa se giró, pasándose la mano por detrás de la cabeza, para dar una rápida mirada a Odette.

"¿Ponerme cómo?...Si de todas formas ni siquiera la conozco."

Elsa volvió a dar otro giro y subió a su cuarto. Solo para quedarse ahí y no salir.

Ya tengo ganas de escribiré el próximo capítulo :3

Si recibo más de 15 Reviews puede que me apresure en subirlo.

Krystelcg19: Sé que paso mucho tiempo pero mejor tarde que nunca, felicidades por tu tesis. Mis felicitaciones. Espero que andes bien, mucha suerte, gracias por seguir comentando :)

AzblueHell: Gracias por el apoyo. Lamento la demora, espero que hayas disfrutado el cap.

yara sosa: Como lo prometí el capítulo fue dedicado a ti. Lamento no haber contestado, pero a veces en serio son bastante colgada XP. Muchos saludos.

Nara375: Primero que nada, deja de pensar en rubias porque la chica no es rubia. Créeme que esa chica volverá a aparecer y jugara un papal bastante importante. Saludos.

Alex: No te preocupes, tendrán más encuentros. Pero primero es lo primero.

HanazonoRomantic: Oliver y su pandilla es mi película favorita de toda la infancia y no existe alguna que la reemplace (ni siquiera Frozen XP). Me algra que te haya gustado el capítulo :)

Lunatica Lovegood S.C: Tal vez si tal vez no ¿Quién sabe?...mmm.

Tasiakrood: No te desanimes, vendrán los capítulos de felicidad… ¿o no?

Guest: No es mala idea, pero decidí otra cosa para la escena del beso.

LaMafer: No te preocupes, seguire actualizando. Me tomo mi tiempo con todas las cosas que tengo que hacer pero ahora tengo algo de tiempo libre así que quizás me apresure.

Guadalupedigimon, Laurora boreal, Rollerbyr, erivip7: Gracias por seguir la historia y por apoyarme con sus comentarios :).