Hola Hola (?) Aquí vengo yo con un nuevo proyecto D: realmente se me ocurrió mientras me bañaba y, para que no se me olvidara lo anote en el teléfono y ps, ya está desarrollado –Una parte- Este proyecto es un Two shot (O eso tengo en mente)

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Recordaba a la perfección los días en la academia; Cuando se convirtió en gennin, las misiones peligrosas que afronto, los incesantes cambios de humor de su madre. Todo lo que había vivido mientras se encontraba en Konoha.

Al fastidioso y playboy de su mejor amigo, intentando coquetear con cualquier chica que se le pasara enfrente. A Sakura ignorando al Uchiha cada vez que tenía la oportunidad. Shikamaru con su sonrisa de idiota a cada hora del día. Al chico oscuro Aburame con su fobia a los insectos. La extrema timidez de Ino cada vez que él Pintor Sai se acercaba —Que para él, era demasiada —

También cuando Akamaru le mordía el trasero a Kiba, quien se creía un estúpido gato. A Chouji y su dieta extrema de vegetales — La cual estaba seguro de nunca poder seguir— El decadente ánimo en "Cejotas" cada vez que Tenten le golpeaba.

¡Ah! Y como olvidar cuando Neji lo invitaba a espiar los termas.

Estaba seguro de que nunca podría olvidar todo aquello que, alguna vez fue su felicidad.

Pero había algo en especial que sabía que nunca saldría de su mente; Hinata Hyuga.

Y ¿Por qué ella, tenía al gran honor de dejar una gran marca en él?

Porqué ella le había amado.

Ella, la gran prodigio Hyuga, inteligente, fuerte, hermosa y testaruda Hinata Hyuga se había enamorado de él, Menma, alguien corrompido por la oscuridad.

Se lo había demostrado; Cada vez que tenía la oportunidad lo decía, se lo decía. Habia arriesgado su vida un par de ocaciones por él, sin importar que el ya no fuera de Konoha, sin importar que él quería destruir a Konoha.

Y, poco a poco se dio cuenta de que pensaba más en eso que en cualquier otra cosa.

Él desesperado por intentar pensar claramente, intento calmar aquello pero era inútil. Entonces pensó que tal vez si la veía una vez más, quizás volvería a ser el mismo ser oscuro.

Claro que no contaba con que eso fuera un error.

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Y ¿Cómo iba a lograr poder deshacerse de aquello?

Raptarla no era buena opción, no pensaba entrar a Konoha de nuevo. Mandarle cartas sería algo… Idiota según él, además, el necesitaba de alguna manera saciarse en el aspecto físico, o almenos eso pensaba.

Y, como una luz en la oscuridad trazo el plan perfecto.

Tras varias semanas de vigilar sus movimientos en las misiones fuera del país del fuego, pudo interceptarla y alejarla de su equipo.

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— ¿Menma? — Pregunto aturdida, observando los ojos azules que le miraban fijamente, como un cazador a su presa.

— Calla — Ordeno, a lo que ella frunció el ceño.

En un intento para poder alejarse un poco y reclamarle, quizás hasta tener una batalla, fue acorralada rápidamente contra un árbol mientras él le sujetaba las muñecas dejándola a su merced.

Su respiración se cortó al ver una extraña ansiedad en sus ojos y su corazón comenzó a latir demasiado rápido, llevando la sangre a su cabeza y bloqueando todo pensamiento coherente.

Sintió como suavemente los labios de Menma rozaban el puente de su nariz y con extrema lentitud bajaba. Quería gravar esa sensación dentro de él, así no tenerse que ver obligado a repetirla, porque ¡Demonios! Aquello se sentía tan bien en todos sus sentidos ¡En todos! Aquello estaba haciendo estragos en él, al igual que en Hinata.

Tomo un bocado de aire, sintiéndose extremadamente nerviosa ¡Ella, Hinata Hyuga nerviosa! ¿Cómo era posible qué él provocara tanto en ella? Ah, sí, estaba enamorada de él.

Un leve rose en la comisura de su labio la trajo de vuelta de sus pensamientos.

Una leve corriente eléctrica recorrió todos sus sentidos solo al sentir ese leve rose, por lo que algo dentro de él le ínsito a tener más contacto. Y poco a poco, ese rose se convirtió en un beso, que comenzó siendo suave pero que al pasar los segundos la intensidad subía.

Ambos necesitaban desesperadamente sentirse tan solo un poco más.

El agarre de las muñecas de Hinata se volvió flojo, y pronto se vio con la libertad de subir sus brazos hacia la cabellera negra de Menma, para poder atraerlo más hacia ella.

Y lo que había estado esperando desde que era una adolecente ocurrió.

Menma le besaba.

Y él, estaba besando a Hinata Hyuga con la esperanza de calmar esa ansiedad.

Pero el resultado fue muy diferente de lo previsto; Aquel encuentro propino muchos más de esos. Donde Hinata fuera de misión, él la interceptaba y comenzaban con una larga sesión de besos que después se convirtieron en caricias.

Aunque no pudieran ser tan seguidas como ambos quisieran, debido a que Menma no podía entrar a Konoha y Hinata estaba siendo preparada para tomar el liderazgo del clan al cumplir la mayoría de edad.

De igual manera, estaba claro que no volvería a Konoha, aun tenia asuntos pendientes. Quizás, cuando todo aquello terminara iría por ella y la haría su mujer.

Pero no contaba con que aquello se desmoronaría por una estúpida misión a la que Konoha la mando.

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El quejido de dolor que retumbo en el campo de batalla llego rápidamente a sus oídos, paralizándolo por completo y con cierto temor a virar su rostro y encontrarse con algo atormentador.

Apretó la mandíbula lo más fuerte que pudo y elimino rápido al enemigo con quien combatía, partiéndolo literalmente a la mitad con su propia arma, manchándolo e inundándolo del hedor a sangre que poco a poco comenzó a disfrutar cuando comenzó a vivir como un ermitaño; un simple 'juego' para él aquella escoria, pero le había dado el tiempo suficiente para que su compañero se deshiciera de los de Konoha.

Y aparentemente Hinata estaba entre ellos.

Respiro agitadamente, pues su adrenalina había sido disparada hasta los cielos solo con escuchar el dolor de ella.

Pero ¿No se suponía que él no sentía nada por ella? ¡Solo la veía como la mujer que podría tener sin dificultades! Era solo eso ¿No?

No pudo pensar más en eso cuando finalmente se giró; Todo había ocurrido en fracciones de segundos y aun así, pudo ver como el cuerpo inerte de ella caía al suelo rocoso y se estampaba contra él.

— Parece que tu amiguita no aguanto mi ritmo ¡Que lastima! — Bramo sintiendo la victoria, alborotando sus cabellos verdes y observando el cuerpo de Hinata, el cual comenzaba a convulsionarse.

Sentía como la ira se apoderaba de él poco a poco y como su respiración se desregularizaba.

El hombre se agacho hasta quedar a la altura de ella, tomando su rostro sin expresión y con sus labios manchados de carmín. Una sonrisa lasciva apareció en su rostro mientras relamía sus labios acercándose más a la Hyuga.

Quería matarlo.

— Me hubiese gustado jugar con ella — Y aquella fue su última palabra.

El odio rápidamente lo absorbió en un mar de emociones que no lo dejo pensar, solamente escuchar como su puño —y parte del brazo — atravesaba el pecho de aquel desgraciado, dejando que su sangre brotara de manera rápida.

Podía saborear la cara de terror que el tenia, y le gustaba.

Tomo un kunai y lo acerco peligrosamente a la entrepierna del peliverde. Sonrió sínicamente ver que la mueca de terror de él se deformaba en tintes extremos y, por fin corto aquella extremidad de él, arrancándole un grito de dolor y horror que hasta los demonios disfrutarían.

Y pronto, cayó muerto para después ser alejado de una potente patada por él.

Escucho un leve quejido de ella y una parte de él volvió en sí ¿Por qué había reaccionado así? ¡Él nunca se dejaba llevar por las emociones!

Pero no había tiempo para pensar en eso, ya tendría tiempo después ¿No?

Comenzó a sentir como algo dentro de él se quebró cuando la vio tendida y al borde de la muerte.

Se puso de cuclillas, tomándola para que quedara en sus brazos y poder verla.

¿Acaso le dejaría?

Sus ojos una vez llenos de vida y retos, alegría y amor se estaban apagando y aquel toque purpura que el juro alguna vez ver en sus ojos se extinguía poco a poco.

Desesperación.

Una gran desesperación lo azoto. La estrujo contra él, queriéndola fundir con él ¡Ella no podía morir!

¿Por qué se sentía así? Acaso… ¿Se había terminado enamorando de ella?

No lo sabía, aun, pero haría lo que fuera para poder descubrirlo en cuanto salieran de aquella situación.

Las débiles manos de ella subieron hasta acariciar él rostro de Menma, quien tenía la desesperación palpada en su rostro. Sonrió, él se preocupaba por ella ¿Cómo no amarlo?

— Menma, eres un idiota — Intento murmurar, casi en un susurro pero callo al ver como una pequeña lagrima descendían por las mejillas de él.

Menma, derramaba una lágrima por ella.

Sonrió débilmente, por lo menos había estado junto a él y había tenido parte de lo que soñó. Pero aun así, le hubiera gustado más.

Intento reprimir unas lágrimas, no quería que le viera llorar en ese estado.

Tenía que ser la fuerte y testaruda Hinata para él hasta que muriese, y de eso faltaba poco.

— Me hubiera gu-gustado estar m-as tie…

— ¡No! — Grito, casi en un rugido, interrumpiéndola — No morirás ¿Entiendes? — Le dijo, más bien, convenciéndose a sí mismo — Serás mi mujer, quieras o no cuando esto pase — Sonrió a medias, intentando no descontrolarse.

Cuando en la mayor parte de su vida fue duro, cuando pudo aguantar la muerte de sus padres por la codicia de Konoha fue duro pero, ahora mismo se desmoronaba, por ella, Hinata.

Se había hecho a la idea de su plan, se había aferrado a ella como una chispa de felicidad y ahora, se le escapaba.

— E-estoy feliz — Aspiro profundamente mientras la sonrisa en su rostro más pálido de lo usual se desvanecía — Idiota…—.

Aquel sería el último aliento de Hinata Hyuga.

Y entonces, todo para él se desvaneció y todo fue negro.

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Abrió sus parpados que le parecían extrañamente pesados, su cabeza daba vueltas, como si se encontrara en una gran resaca pero él estaba seguro de no haber bebido, almenos no recientemente.

Lo primero que pudo ver fue el cielo inundado por estrellas.

¿Qué había pasado?

Entonces su vista se fijó en el gran astro llamado luna y sus ojos se ensancharon.

Llevo su mano a su pecho y lo presiono fuertemente ¿Por qué le dolía?

Hinata ya no estaba, ahora era un muerto más.

De cualquier forma ¿Dónde demonios se encontraba?

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Primer Capítulo: Terminado

Bien, este fanfic lo escribí hace millones y millones, y lo tenia guardado por falta de inspiración :C Normalmente NUNCA se me dan los fanfics largos, complico mucho el asunto y luego me da pereza. Pero ya lo tengo, ahora sí!

Este sera un two shot, según yo, si se hace demaciado largo el siguiente/final creo que seran 3 capitulos y ya, todo depende U_U

Esta es la intro, tiene que ver tanto en el mundo de Road to ninja como en el cannonico.

Tambien puedo decir ¡Volvi! Hace mucho que no escribia fanfics, pero ahora que estoy a punto de terminar el segundo semestre y voy para tercero ya esta mas relax todo U3U. Ademas que con mi metida al mundo de cosplay bueno, absorve xD. Sip, la fotito de perfil soy yo (?) No tiene nada que ver pero si gustan seguirme por instagram me encuentro como milchrangel :3

Espero les haya gustado y sin mas que decir me despido, la siguiente publicacion sera el Lunes (llegando de la conve del domingo, juejue)

Pueden agregar a favoritos y dejar un review :3 se los agradesco.

Chocolates a todos~