Renuncia: Ni Nana ni sus personajes me pertenecen, todo de Ai Yazawa.
Dime, Nana...
Dime, Nana, ¿Cuándo se torcieron tanto las cosas? ¿Cómo hemos llegado a esto? En realidad no hace falta que digas nada porque se que yo tengo gran parte de la culpa. He hecho tantas estupideces... Gracias a mí y mi egoísmo, he hecho llorar a muchas personas. Junko a llorado por mí, a Shouji también le hice llorar, se que Shin también lo ha pasado mal por mi culpa. A Nobu le he hecho tanto daño y le he hecho derramar tantas lágrimas que no se cuantos años pasaran antes de poder perdonármelo.
¿Sabes? Todavía quiero a Nobu, él me quería mucho y se ocupaba de mí, siempre me cuidaba. Seguro que si hubiera permanecido a su lado, habría vivido mi cuento de hadas y princesas junto a él. No pudo ser, y no pasará un día sin que me arrepienta.
Cada vez que recuerdo las lágrimas que derramaste por mi, siento una presión en el pecho y no puedo evitar llorar también. Me gustaría ser un pañuelo para poder recoger las que caen por tus mejillas. Me gustaría que solo con abrazarte, tu corazón se reconfortara y pudieras volver a sonreír.
¿Recuerdas la primera vez que cantaste para mí? Me miraste fijamente y dijiste "Haré que esta noche sea inolvidable", entonces tu voz acompañada por la guitarra de Nobu llenó la noche. Tenías razón, Nana, esa noche fue realmente inolvidable. Esa y muchas más. Como cuando me besaste por primera vez, las veces que nos hemos bañado juntas o cuando hemos dormido en la misma cama. Guardo todos esos momentos especiales en mi corazón, esos en los que nada que no fuéramos tú o yo importaba. Solo tú y yo.
Tu canción decía: "Cuanto más intenso, más profunda es la herida". Es por eso que creo que las heridas entre nosotras eran tan difíciles de curar. Y ni necesidad de encontrar la felicidad en los brazos del primer hombre que pasara no ayudó nada. Lo siento, Nana.
Siempre me he preguntado cómo dos chicas tan diferentes consiguieron ser tan unidas. Tú cantante de un grupo punk y yo una niña tonta y mimada, enamorada del amor. Ahora se que seguramente lo que nos unió fue que por dentro las dos estábamos igual de vacías. Solo intentábamos llenarlo. Tú conmigo, y yo contigo después de ser usada por cualquiera que quisiera ponerse encima de mi. Nunca te agradeceré lo suficiente por coger mi mano tras cada uno de mis fracasos.
Cada vez que pienso qué hubiera pasado si me hubiera enamorado de ti, una sola palabra viene a mi mente: felicidad. Se que tú me podrías haber dado toda la felicidad que necesitaba, estoy segura de que, contigo, mi corazón se hubiera desbordado. Nana, tú eres todo lo que necesitaba para ser feliz y cumplir mi sueño, y estaba tan cegada por mi empeño en encontrar un príncipe azul, que no logré verlo a tiempo. Ahora es tarde. Perdóname, Nana.
Si pudiera pedir un deseo, pediría unas grandes alas blancas, como las de un ángel, aunque se que no soy buena persona para merecerlas. Te cogería a ti, solo a ti, y volaría lejos. Volaría hasta que el cansancio no me dejara respirar, hasta que mis alas blancas se deshicieran y cayéramos al suelo. No necesitaría nada más, solo ese deseo y sería feliz junto a ti. Dejaría atrás todo, absolutamente todo, la familia, los amigos, Blast, Trapnest... No quiero nada a mi lado que no seas tú. Por favor, Nana, recuerda, estés donde estés, que te quiero.
Dime, Nana,¿También serías feliz junto a mí?