Aquí les vengo dejando el capitulo que hace mucho debería haber subido, pero realmente no he tenido mucho tiempo para terminarlo hasta ahora. En serio les pido mil disculpas por no ser constante, pero lo importante para mi es no descuidar la historia y es lo que estoy haciendo. Espero aun me sigan acompañando en esto porque son bastante importantes para mi sus comentarios con sus opiniones en ellas. La interacción entre Kendall y Logan ya será más puntualizada, solo quería asentar bien las bases de cada uno para que así fuera un poco más profundas esas conversaciones, y ahora que ya sabemos un poco más de ambos...el Kogan puede llegar sin problema alguno.

Bueno dejando la palabrería de lado, aquí les dejo el capitulo siguiente. Espero les guste y ya saben, dejen sus opiniones al final. Muchas gracias a quienes aun siguen esta historia que me encanta escribirla, tarde, pero lo hago jajajajaja.


Capitulo 9

Después de aquel encuentro sorpresivo y ligeramente incomodo, el camino faltante para los chicos fue un tanto silencioso. Logan sabía que en cualquier momento Jett comenzaría a cuestionarlo acerca de James y Kendall y cómo es que los conoce, por lo cual no tendría problema alguno para explicarlo, sin embargo, tendría que persistir en la mentira que el rubio había dicho hace solo unos momentos, y mentir, no es una gran habilidad en el chico. El hecho de que el silencio se prolongara más de lo que esperaba, daba la perfecta oportunidad a la mente de Logan pare repasar uno por uno todos los pensamientos que aparecen cuando Kendall se posa frente a él, llevándolo a concluir cierta afirmación que tal vez ya sabía, pero que se negaba a creer, que era el simple hecho de que Kendall crea en él ese inmenso mar de nervios e torpeza. Logan no lo había querido aceptar puesto que le daba la razón al hecho de que era el capitán del equipo, los encuentros con él habían sido un tanto…peculiares, y sobre todo porque le era más fácil culpar a su inseguridad y timidez en cuanto a sus habilidades sociales. Pero ahora que pudo verlo en un ambiente más tranquilo, con personas que realmente conocía y teniendo la seguridad que no iba a acontecer nada fuera de lo normal, la misma reacción ocurrió con el simple acto de voltear a ver ese par de orbes verdes sobre él. Era como si aquellos ojos tuvieran cierta fuerza descomunal, cierta fuerza gravitatoria que provoca que el cuerpo del chico comience a temblar desde los pies hasta la cabeza haciendo que lo demás deje de tomar importancia, entendiendo ahora como logró olvidarse por un momento que Jett estaba a su lado, pero es que su cerebro entra en un caos total e imposible de detener, y lo peor ahora no era el haber aceptado eso, sino una pregunta que surgió casi al instante… ¿Por qué?

-¿Te gustó?- Jett preguntó provocando un ligero sobre salto en el chico.

-¿Cómo?- Logan respondió cuestionando un tanto sorprendido.

-Digo ¿Qué si te gustó el café y el pastel? Olvide preguntarlo antes-

-Ah…- por alguna extraña razón Logan dejó salir un ligero suspiro de tranquilidad –Sí claro, me agrado…no estuvo mal- le sonrió al castaño.

-Me alegro- y la mirada café del otro se posó en Logan. Un ligero silencio se comenzó a formar, pero finalmente la pregunta esperada lo rompió –así que… ¿Eres amigo de ellos?- el tono suave de Jett se endureció un tanto, captando especial atención en Logan.

Logan se rindió ante la idea de que podría haber evitado esto durante el día, así que no tenía otra opción que contestar aquello, y con una exhalación que dejaba en claro su rendición comenzó a formular una buena respuesta.

-No…no exactamente. A James lo conozco gracias a Carlos, es un buen chico, tal vez un tanto…extrovertido, pero es gentil-

-¿Y Kendall?- Jett no dejó ni siquiera que Logan tomará una pausa. Y ahora no solo su tono endureció, sino también pudo notar como sus manos sujetaron con más fuerza el volante.

-Bueno él…- recordó la excusa que el mismo rubio había inventado hace unos momentos, y sobre todo había recordado que él no diría nada a no ser que Kendall lo decidirá -…solo platicamos un par de minutos en una fiesta a la que fui de ellos, solo…eso- respondió percibiendo una sensación amarga en su garganta. Había decidió no mentir más, eso era lo amargo para él, pero…la balanza en esta ocasión tenía más peso ante Kendall, y extrañamente…no le fue difícil aceptarlo.

-¿Entonces has ido a sus fiestas?- Jett cuestionó con el mismo tono.

-Solo una vez, fui porque Carlos me invitó- lo miró bastante extrañado -¿Por qué tanta curiosidad?-

-¿Recuerdas que te dije que no eran personas del todo confiables?...tú mismo viste a Kendall actuar, no es alguien del todo tranquilo en ciertas situaciones, y no necesitas describirme las fiestas en las que están metidos, sé cómo son. Logan…– suspiró –sé que esto es difícil para ti, empezar de nuevo en un lugar que tal vez no te agrada del todo, pero no lo hagas más difícil al juntarte con ese tipo de personas, solo te traerán problemas, créeme-

-¿Problemas?... Lo dices como si fuera algo realmente serio-

Jett lanzó un pequeño suspiro, tensionando un poco más sus manos al volante.

-Hace poco, ambos estuvieron involucrados en una situación un tanto...especial. Al parecer Kendall y James acabaron encerrados por unas horas en la estación de policía-

-¿Qué?...¿Por qué?-

-Realmente desconozco el verdadero motivo, lo que sé es que los encontraron ebrios arrojando piedras y a punto de empezar un incendio en la casa de algún tipo de aquí. No sé cómo acabó la situación, pero mi padre me dijo que no dejaría nada bueno esos dos chicos aquí, y creo que es así-

Logan no dijo nada. Simplemente la ligera sorpresa que esto le provocó lo llevó a guardar silencio absoluto.

-No quiero asustarte con esto Logan, ni provocarte cierta actitud paranoica con ellos, pero…solo cuídate ¿quieres? Eres un buen chico y…nada de esto te ayudaría. Imagina lo que tu padre podría hacer si se entera de que sales con chicos así, no te arriesgues-

Las palabras de aliento de Jett sonaron débilmente en la cabeza del pelinegro, se sintió de cierta manera agradecido por la intención que el castaño tenía con esto, pero en este momento no sabía cómo sentirse realmente al respecto. Podría haber pensado que Kendall era un chico terco, rebelde y presuntuoso, pero jamás pudo haber llegado a imaginar que el hacer ese tipo de cosas estaría en su personalidad, al menos no en la poca que ha presenciado, y sobre todo ¿Por qué Carlos no le había mencionado algo así? Después de todo él igual le advertía sobre la compañía de Kendall, ¿acaso el problema es que igual estaba involucrado James? Definitivamente esto tendría que averiguarlo con él, pues si está dispuesto a ayudar a Kedall al menos tendría que saber un poco más de él.

-Llegamos- Jett irrumpió los pensamientos de Logan al detener su carro.

El chico pelinegro observó por la venta, y fue en vano tratar de ubicarse pues desconocía completamente el lugar, además de que había perdido la noción de tiempo y espacio desde que aquella noticia de Kendall le fue dicha. Quiso ahorrarse la pregunta obvia pues sabía que Jett la contestaría en unos segundos.

-Bienvenido a mi casa- Y así fue.

La camioneta del chico entro por un gran portón de color café, dejando ver una hilera de casas bastantes grandes y nada parecidas a las de la zona donde Logan residía. Logan pudo entonces saber que tal vez se trataba de un barrio bastante exclusivo de aquí, pues al empezar a observar con detenimiento las casas que desfilaban en ambos extremos a él, podía notar que al menos el área que ocupaba cada casa era igual a la de 2 o hasta 4 del estilo de Logan. Algunas tenían incluso tres pisos, otras podía notarse una alberca al frente o al extremo de ella, con grandes jardines y automóviles nada baratos.

-Pensé que habías dicho que nada ostentoso- El pelinegro dejó salir en una bocanada de aire.

-Oh vamos, simplemente es mi casa…no tiene por qué ser ostentoso, además…también dije gratis ¿cierto?-

Logan se limitó a seguir observando por afuera con cierta incomodidad ya emergiendo de su cuerpo. Sí así eran la mayoría de casas hasta ahora, no quería imaginar cómo sería la de Jett, que ahora ya no confía tanto en su definición de "no ostentosidad".

La camioneta nuevamente se detuvo, y Logan no quería mirar hasta estar frente a ella. Ambos bajaron en cuanto Jett apagó completamente el motor, y al llegar a lado del castaño simplemente confirmo lo que había pensado. El tamaño no variaba mucho de acuerdo a las demás casas, y el jardín era ligeramente más grande que los demás, lo que la hacía diferente de las otras eran los grandes ventanales que tenía en la fachada, pudiendo observarse grandes cortinas que cubrían estas y dejando ver una tenue luz amarilla detrás.

-Vamos, el frio está creciendo-

El chico palmeo ligeramente el hombro de Logan y lo impulsó a dar los primeros pasos hacia la entrada. La incomodidad de Logan no había bajado, pero tampoco había aumentado, después de todo debía aceptar que la actitud de Jett ayudaba un poco.

El chico abrió la puerta de madera para después dar paso a Logan, quien de inmediato se encontró con un gran piso de madera que lucía bastante brilloso, muebles y lámparas que dejaban ver lo costosos que eran en el momento en que ponías la mirada en ellos. Y sobre todo el engaño que el exterior te dejaba, pues por dentro la casa parecía aún más grande de lo que él se imaginaba. Logan dio unos pasos temerosos, terminándose de cohibir un poco más.

-Ven, vamos a la cocina, prepararé algo de cenar- el chico lo llamó y Logan lo siguió sin cuestionamiento alguno.

Pasaron por el comedor que lucía intacto, para después dar una rápida mirada a la sala en donde pudo notar una gran televisión. Definitivamente la definición de "no ostentoso" no se aplicaba aquí. Llegaron a la cocina donde un acabado de metal lucía en todos los muebles y una gran estufa en medio era lo que dividía en cuatro el área. Logan se acercó y tomo asiento en uno de los bancos más cercanos.

-¿Quieres un emparedado o prefieres…algo más?-

Logan tomó un ligero respiro para poder comenzar a hablar sin sonar tan estúpidamente tímido.

-Un emparedado estaría bien-

-Tengo pollo, atún, crema de maní, jamón- recitaba mientras su cabeza observaba el interior de su refrigerador.

-Decide tú, no tengo problema por ninguno-

Y en silencio Jett comenzó a hacer emparedados para ambos, mientras la mirada de Logan aun no terminaba de estudiar por completo la zona en la que estaban.

-Es…bastante grande, nada…ostentoso por cierto- Logan sonrió. Después de todo debía darle un poco crédito por el esfuerzo que estaba haciendo.

-Velo de esta manera, seguramente hay casas más grandes que estas donde nada de esto sería gratis- le devolvió la sonrisa mientras untaba crema de maní a una de las tapas de pan.

-¿Me estás diciendo que pudiste haberme cobrado?-

-Obviamente. ¿Crees que es suficiente el dinero de mis padres? Claro que no, pero por tratarse de ti…estoy haciendo una excepción-

-Vaya, pase de sentirme ofendido a privilegiado-

-Bueno, digamos que esta noche ambos somos los afortunados- y con ellos un ligero guiño en los ojos cafés del castaño provocaron un tinte carmín en las mejillas del pelinegro –Anda vamos a la sala, seguro hay algo bueno que ver en la televisión-

-Sino, al menos ver una gran televisión seguramente es bastante entretenido-

Este último comentario provoco en ambos chicos ligeras carcajadas. Logan lo siguió hasta sentarse a lado de él en sofá más grande justamente frente a la t.v.

-Vamos dime más acerca de ti- Jett tomó el control de la televisión y la encendió sin notar el canal en el que estaba puesto.

-¿De mí? No hay mucho que saber, lo básico ya lo escuchaste. Eres tu quien al parecer aún faltan cosas por saber-

-Tengo curiosidad- Jett al parecer evadió la pregunta lo cual no intrigo a Logan, simplemente causo cierta gracia en él -¿Por qué aceptaste mi invitación? Es decir, apenas nos dijimos algo aquella vez y sin más…aceptaste venir-

Logan dio un pequeño mordisco a su emparedado para evitar así el ponerse aún más colorido por la vergüenza de esto, pues claramente lo había pensado también momentos después de haber dicho "sí".

-¿Por qué no?, es decir, no conocía a nadie en esta ciudad, y parecías un buen chico…así que me arriesgue. Es algo nuevo que estoy tratando de hacer-

Jett asintió convencido de aquella respuesta.

-¿Parecía un buen chico, ósea que no lo soy?-

-Estoy en tu casa, alejado a no sé cuántos kilómetros de la mía, apenas conociéndote de algunas horas… ¿Tú crees que haría algo así con cualquiera? Solo que…la ostentosidad no es algo que me divierta, pero bueno…supongo que de ti es normal esperar eso-

Jett río divertido encogiendo los hombros ante aquella sutil explicación, mientras que Logan le devolvía, tímidamente, la misma expresión de sonrisa.

-Y tú… ¿Por qué me invitaste? ¿Penaste que después de mancharme la chaqueta era una buena forma de reivindicarte?-

-¿Lo fue?- Logan respondió encogiendo sus hombros tratando de que diera la respuesta que esperaba –La verdad, fue porque…chocar contigo dos veces me dijo que no era casualidad, es decir, cuantas probabilidades hay de que suceda eso entre tantas personas. Así que me dije que deseaba conocerte-

Y la mirada del castaño se colocó fuerte y sin duda alguna en la de Logan provocando cierto nerviosismo en él, apretando ligeramente su emparedado hasta sentir como lentamente se rompía entre sus dedos. No deseaba malinterpretar esas palabras, pero…algo le decía que no eran del todo normales.

Después de eso, la noche termino bastante tranquila, viendo una película no muy buena pero lo suficientemente graciosa para no decidir cambiarla. Logan no podía evitar tener cierta actitud defensiva ante el chico, pero tampoco debía negar que al final de todo no resultó tan mal como pudo haber sido, después de todo ahora puede decir que no solo existe Carlos o James, y eso es un pequeño avance en la vida social del chico.

Al día siguiente, todo comenzó de manera normal. Su madre solo se había molestado en preguntar si todo había salido bien, tal vez el último encuentro bastante sentimental, les había ayudado a los dos a entenderse un poco mejor. Su padre al encontrarse nuevamente en el trabajo ni siquiera había notado la ausencia de su hijo, lo cual a Logan no le molestó en absoluto.

Una vez empezadas las clases, pensó que todo seguiría de manera tranquila, sin embargo podía notar cierta actitud diferente en su amigo latino, confirmándola cuando pasando dos clases ya, las preguntas incesantes que esperaba escuchar acerca del encuentro con Kendall y Jett aún no llegaban, y sinceramente, él esperaba haberlas contestado mucho antes del mediodía, el cual estaba a punto de llegar y ni una palabra había sido dirigida al pelinegro por parte del menor. Logan no quiso cuestionarlo, al menos no por ahora, pero estaba seguro que esto no podía tratarse más que de James, recordando entonces que justó ayer él le dio la idea al musculoso para fuera a visitarlo, comenzando a preguntarse si realmente había resultado una buena idea.

Los últimos minutos antes del mediodía finalizaron para dar paso a un intervalo que los chicos ocupan como almuerzo. Logan recogía sus últimas cosas para dirigirse a la salida del salón.

-Hey Logan, puedes adelantarte a tomar un mesa, iré al baño ¿está bien? Te veo allá- Carlos le comentó sin dar lugar a que el otro le respondiera. El latino tomó sus cosas y abandono el salón con paso acelerado.

Logan no tuvo otra salida más que aceptar mentalmente la petición de su amigo. Acabando de meter todo lo necesario a su mochila, tomó camino hacia la cafetería por los ya ocupados pasillos de la escuela. Su destino estaba cerca, pero de pronto su trayecto fue interrumpido. Interceptado por una extraña fuerza que lo jalo a un cuarto completamente desconocido, Logan no tuvo tiempo ni de decir alguna palabra o exclamar algo, simplemente fue débil ante aquel agarre que lo metió a una especia de almacén. Sin entender que estaba pasando un tanto agitado, decidió buscar con su mirada quien provocó esta repentina y no muy grata sorpresa, llevando sus ojos a la persona que aun persistía en sujetarlo. Kendall.

El rubio se presentaba frente a él, con una mirada enjuiciadora, una ligera agitación en su pecho, pero sobre todo con una fuerza un tanto drástica en el antebrazo del pelinegro. Pero claramente nada de esto le sorprendía a Logan, no más que el hecho de que fuera él quien lo había arrastrado a este peculiar lugar. Logan deseaba cuestionarlo, pero al parecer algo le decía que esta vez no tenía por qué decir nada, ya que el rubio se encargaría de explicarlo en unos segundos.

-Ayer, después de que nos vimos, ¿le dijiste algo sobre ya sabes a aquel chico?- El tono de Kendall sonaba bastante duro, más de lo normal para Logan, pero no entendía a qué se refería con aquello, así que no respondió –Sobre las estúpidas tutorías- al parecer la expresión de confusión fue demasiado obvia para el rubio.

Logan por fin contestó negando con su cabeza.

-No mientas. Conozco a aquel chico, y si se entera que por culpa de una materia me pueden sacar del equipo, tú serás el culpable- la mirada verde se endureció al enfocar aún más al menor.

-Estoy diciendo la verdad…- esta vez Logan trató de calmar su frágil voz y volverla un tanto pesada y segura –No dije nada respecto a eso. Simplemente sostuve la mentira que tú te encargaste de decir. Soy solo tu tutor ¿recuerdas? Yo no soy encargado de divulgar cualquier cosa de ti-

Kendall no dejaba de verlo, buscado alguna duda en su mirar o expresión facial, pero por primera vez Logan le sostuvo aquella verde mirada, aunque por dentro estuviera muerto de nervios, no dejaría que dudará de él. Podría pensar que era tímido, pero mentiroso…ya no.

-Bien- y al termino de esto el agarre entre ambos se rompió.

Un par de segundos en silencio pasaron, y la curiosidad de Logan no dejaba de subir, sobre todo al tratarse de Kendall y olvidando en la especia de lugar en la que estaban, su boca al parecer comenzó a comportarse por sí sola.

-y… ¿Por qué tanta preocupación ante lo que digan los demás sepan?-

Kendall lo miró con una sonrisa burlona, para después negar divertido con la cabeza.

-¿Los demás? Me importa una mierda lo que digan los demás…- y nuevamente la expresión de confusión en el rostro de Logan se hizo evidente –Es el hecho de lo que puedan hacer. Si se enteran que mi puesto corre peligro por una estúpida materia, cualquier intentará quitármelo-

-Pero pensé que los de tu equipo…-

-No los de mi equipo- interrumpió Kendall –Ellos son…diferentes. Los demás son los peores, intentarían meterme en problemas, que falte a clases…cosas así, ahora imagina que pasaría si aquel equipo de tu amiguito se enterará, ayudarían a esas personas a arrebatarme mi puesto, y eso no sería nada bueno…al menos no por ahora-

Logan fijó la mirada en aquel rubio, fijó una mirada de sorpresa ante aquellas palabras, y no solo por eso, sino también por la manera en que las había dicho. Esa forma en que casi podía sentir el enojo que emanaba de Kendall ante aquellos pensamientos, casi siendo palpable la ira que podría surgir si alguien intentará amenazarlo, pero también notaba algo más, él lo sabía que muy dentro de esas líneas, se encontraba un temor. Un temor a abandonar aquel puesto que, obviamente, quiere tanto, y sobre todo un miedo de que en verdad él no pueda defenderlo más, ese gran susto que uno se lleva al perder algo que tanto quiere sin poder defenderlo…algo así a lo que él paso el día que le fue arrebatado su piano.

-Tranquilo…no dije nada. Tu excusa es la única que él sabe- asintió para darle más fuerza a su afirmación. Tal vez lo hizo con la intención de no provocar en él un ataque de ansiedad o tal vez porque él hubiera deseado que alguien lo hubiera calmado el día que perdió su piano.

-Adelante…puedes criticar mi manera de acércame a ti- El rubio dijo en un tono fastidioso, pero que Logan pudo sentir casi bromista.

-No, descuida…yo, no diré nada- Logan se mordió la lengua para evitar una sonrisa –Solo que, fue un peculiar lugar- por el rabillo de su ojo observó cómo Kendall rodó sus ojos, pero igualmente noto aquel ligero y casi invisible curveo en sus labios –Mentira, solo…solo bromeaba. Ya te dije, eres tú el que decide si decirle o no a los demás-

-Y yo ya te dije que eso no es posible porque…-

-Lo sé, lo sé…- interrumpió ahora al rubio quien sin mirarlo le dedico una expresión de fastidio y enojo –Pero…sinceramente, no creo que eso pase- De inmediato la atención de Kendall se enfocó nuevamente en Logan, fueron cuestiones de segundos cuando la mirada verde se posaba en él.

-Y debo creerte porque…-

-Porque eres tú!...Es decir, ¿te has visto jugar? Dios Kendall, no creo que tengas de que temer, es decir, sé que solo te he visto jugar una vez, pero por lo que he escuchado eres un gran capitán, tus compañeros te adoran…y al parecer tu afición también, así que quien se atreva a quitarte eso…no solo te debe superar a ti…sino a ellos también. Y sustituir algo así no es nada simple-

Y por vez primera, Logan había dicho todo aquello sin titubear, por vez primera su mente y boca tuvieran una coordinación perfecta al grado de mantener su caos y nerviosismo bajo su control. No sabía cómo lo había hecho, pero fue claro que al momento en que los orbes del ajeno se posaron en ellos, dejó de sentir aquella intimidación para ser envuelto por un cierto grado de valor. Tal vez el hecho de verlo un tanto desprotegido ante aquella preocupación, que seguramente ocupa gran parte de sus pensamiento, lo hizo querer hacerlo sentir bien, pero lo sorprendente fue que esta ocasión no recurrió a palabras triviales, frases clichés o simplemente palmeadas en los hombros, esta vez algo se activó en él para dejar salir aquello que definitivamente había atrapado la atención del rubio, y no lo notó hasta que ambas miradas estaban enfrentándose directamente.

Al parecer Kendall se estaba dando cuenta de aquella conexión visual, que la rompió lo más rápido posible alejándose y tomando un poco de aire, a lo cual Logan esta vez, sintió ya un poco la vergüenza. Kendall se acomodó el cuello de su camisa con la intención de dejar ya ese lugar y esa conversación que para su gusto se comenzaba a tornar un tanto extraña.

-Solo…ten cuidado con lo que dices ¿ok?-

Y recibiendo un asentamiento por parte de Logan, Kendall lo dejó ahí dentro.

El pelinegro soltó un gran suspiro, como si sus pulmones hubieran retenido en todo momento, desde que se encontraron, el aire. Hizo una rápido retrospección de lo que había sucedido, y no pudo evitar dibujar una sonrisa en su rostro al darse cuenta que pudo mantener controlada la situación, eso sin decir que también pudo controlar aquellos inevitables nervios que Kendall y sus par de ojos producen en él, pero sobre todo le dio cierto orgullo el hecho de que el rubio haya por fin hablado un tanto más con él, algo muy rápido…pero que Logan logró notar ciertos detalles que antes no lo había pensado en él. Definitivamente esta vez le daba crédito a su curiosidad.

-Carlos…- se repitió para sí mismo, y de inmediato recordando el trato que había hecho con su amigo, abandono el lugar, sabiendo que tal vez se llevaría algunas miradas al notar de donde había salido, pero esta vez deseaba preocuparse por encontrar alguna mesa desocupada.

Una vez que sus pies lograron llevarlo lo más rápido posible a la cafetería, era su mirada la que ahora trabajaba buscando una mesa desocupada. Encontrando una, con un gesto de alivió se dirigió apresuradamente a ella antes de que alguien más llegara, y soltando una bocanada de aire logró ocuparla y sentarse, esperando a su amigo.

Carlos tardó menos de 5 minutos después de que Logan ocupara la mesa en llegar. Con bandeja en mano y un poco menos de comida que lo habitual se dispuso a comer en silencio, mientras que Logan aprovecho entonces para ir por su bandeja, ya que esta vez su madre olvido hacer su almuerzo. Cuando ambos chicos comenzaron a disfrutar del convencional menú de la escuela, la inminente tensión entre ambos crecía…o al menos por parte de Logan al querer saber que era lo que acontecía con Carlos. Sin poder esperar más, Logan decidió dar el primer movimiento.

-Bien, toda la mañana has actuado realmente extraño… ¿Qué sucede?- lanzó aquella pregutna provocando que el latino lo mirara un tanto culpable, sin embargo no respondió –No me harás rogarte ¿cierto?-

El menor dejó de lados sus cubiertos de plástico y con una expresión de derrota alzó un tanto su perfil.

-Ayer fue James a visitarme…- Logan asintió esperando más explicación, pero imaginaba por donde iba aquella conversación –para que esperar que él pudiera decirme algo sobre aquellos comentarios si termino más que borracho. No recuerda nada, lo único de lo que hablo fue de eso, de cómo paso todo, y lo único que recuerda fue que bailo…o intento hacerlo con personas desconocidas, que vomito por todo el jardín y que al final termino en la casa de Kendall sin tener noción de nada- las facciones del latino lucían bastante grises, apagadas y el tono con el cual comentaba todo aquello se podía percibir un tanto exhaustivo y decepcionante –Lo primero que me pregunto fue "¿Acaso no tienes resaca?", ¿puedes creerlo?- sonrió con un tinte de enojo mientras negaba con su cabeza.

-y supongo, como siempre, que no le dijiste lago al respecto- Logan intentó no sonar tan duro con aquella acusación.

-No me dio tiempo siquiera para pensarlo, simplemente conteste su primer y estúpida pregunta y de ahí…todo fue acerca de su experiencia ¿Cómo quieres que lo haga?- mostrándose un tanto desesperado Carlos alzó ligeramente su voz.

-No esperes a que te dé la oportunidad, dátela tú mismo- la contestación de Carlos fue un resoplido de frustración –Solo digo, que si deseas que él haga algo entonces haz algo tu primero, sin embargo, si sigues así…lo siento amigo, pero no tienes derecho a quejarte- Logan encogió sus hombros.

-Lo dices como si fuera lo más fácil-

-No digo que lo sea, solo que…si realmente quieres que deje de tratarte así y que comience a…tratarte mejor, entonces deberías de decirle algo. Dile que te gusta…-

-Jamás diré eso- rápidamente la interrupción de Caros se llevó algunas miradas de los chicos de alrededor -¿estás loco?...es lo que menos quiero que sepa, entonces ahí sí lo perdería totalmente-

-Bueno entonces habla con él acerca de eso, es tu amigo y lo entenderá-

-No quiero que sienta que no me interesa, es decir, me encanta escucharlo hablar, que me cuente todo acerca de él, pero…me encantaría hacer lo mismo con él, que él sepa todo mi día, pregunte como me siento o cosas así-

-Díselo de esa manera y lo que menos sentirá será que lo rechazas…te lo aseguro-

Carlos le regreso la mirada rodando sus ojos con algo de fastidió. Definitivamente el enfrentar la verdad acerca de lo que tenía que hacer para Carlos representaba algo difícil, tal vez no por el hecho de que no pueda hacerlo, sino por el simple hecho de que es a James a quien debe decirlo y sencillamente cuando de aquel chico musculoso se trata…Carlos se convierte en la persona más dudosa de todas, sabe que no tendría por qué hacerlo, pero el hecho de gustarle a una persona te vuelve alguien totalmente vulnerable, y eso a Carlos le trae un gran peso.

La hora del almuerzo acabo más rápido que de costumbre después de aquella pequeña discusión, y ambos chicos fueron a tomar su última clase antes de partir a casa. Cuando llegaron al salón Logan recordó que aquella clase era justamente la que él ayudaba a Kendall, y por un momento antes de que el profesor iniciara una pequeña esperanza de verlos ahí surgió…pero al paso de los minutos y sabiendo que no llegaría, no hizo más que aceptar su ausencia, igualmente dándose cuenta que solo ha pasado un encuentro y que era pedir mucho para que Kendall ya se aparecía sin problema alguno.

Antes de acabar la sesión, y que los chicos salieran, Logan fue llamado al escritorio del profesor.

-¿Cómo dice?-

-Sí, sé que es tal vez mucho pedir, pero no tengo a quien más recurrir…al menos no antes de ir a dirección. Necesito que Kendall comience a venir la semana que viene, más faltas a su historial no ayudarán- el profeso sujetando nerviosamente sus gafas se dirigía a Logan un tanto apenado.

-Pero…pero… ¿cómo podré hacer eso? Es decir, solo soy quien le ayuda en los problemas que no pueda resolver-

-Lo sé, y disculpa que te ponga en esta situación, pero…idea algo, no sé, tal vez más lecciones por semana, pero haz algo para que él acuda a clases, créeme que lo que menos quiero es tener que ir a notificarlo a dirección-

Logan se mantuvo unos minutos en silencio, observando un tanto la angustia del profesor, mordió su labio inferior a causa de su nerviosismo, pero de inmediato recordó aquella expresión de preocupación extrema de Kendall y todo aquello que le dijo retumbo en su interior haciendo eco.

-Está bien- dijo sin dudar después de que aquellas imágenes vinieron a su mente –arreglaré con él más clases por semanas y haré lo posible para que comience a presentarse-

El profesor le agradeció más de lo que esperaba, pero al final pudo librarse a tiempo para alcanzar a Carlos en la puerta de salida. No se molestó en buscar a Kendall pues sabía que no lo iba a encontrar, así que se encargaría de hablar con él al día siguiente. Durante su camino a casa, la plática entre ambos chicos se concentró en los encuentros que Logan tuvo con Jett y con Kendall, recibiendo cada tanto unos comentarios burlones por parte de su amigo, que al parecer ya se notaba un poco más animado.

-¿Lo volverás a ver?-

-¿A Jett?- Carlos asintió –No lo sé, no hemos hablado desde esa vez y…no me preocupa no verlo nuevamente, es decir, fue grato haber estado con él…pero, no planeamos salir otra vez-

-¿Tu lo quieres volver a ver?- el latino pregunto con una sonrisa burlona en su rostro que dejó a Logan un tanto apenado.

-Sinceramente no pienso en eso, si se llega a dar nuevamente una salida…al menos no será hecha de mi parte-

-Eso no responde mi pregunta-

Logan suspiro a la contestación burlona del chico.

-No…no me molestaría verlo nuevamente-

-Aja!...entonces te gusta-

-Jamás dije eso, fue un buen chico y me agrado su compañía, pero…no lo sé-

-Es guapo, te invitó un café, tiene dinero… ¿qué más quieres?-

-Sabes que hay más que eso-

-Lo sé, pero…solo digo que puedes aprovechar, quien sabe, tal vez resulte mejor de lo que esperas-

-No lo sé- dijo aun con cierto tono fastidioso.

-Como sea, pero insisto en que es un buen partido y no porque lo veas de nuevo quiera decir que comiencen algo, solo…conócelo mejor, tal vez te agrade-

-Lo pensare ¿satisfecho?- y el latino le contestó con una amplia sonrisa –Ahora será mejor que te vayas antes de que cambie de opinión- comento divertido Logan señalando con su mirada la casa de su amigo.

-Está bien, pero hey…hazlo ¿ok? Después me cuentas que tanto ha pasado. Nos vemos mañana-

Los dos amigos se despidieron, y Logan siguió su camino. Mientras pensaba en aquello que le dejó Carlos en su mente, y realmente no estaba del todo errado, es decir, no estuvo del todo mal haber pasado ese día con él, omitiendo claro el gran parecido que tiene a las ideas de su padre, pero…desde que llegó, además de Carlos había sido la única persona que se había molestado en hacerlo sentir bien, y al mendos darle una pequeña bienvenida, y Jett lo hizo con apenas 5 minutos de haber conversado…o chocado con él. Además como su amigo dijo, el verlo nuevamente no quiere decir que comiencen a salir o algo por ese estilo, tal vez pudiera ser otro gran amigo como Carlos. Logan sacudió la cabeza ante aquellos pensamientos que comenzaron a estresarlo y que deseaba borrarlos, pues había cosas con un poco más de importancia que si ver o no nuevamente a Jett, y uno de esos era la cuestión de su Piano.

Había tratado de averiguar cómo o dónde podía colocarlo, pero simplemente no se le ocurría lugar o forma alguna para hacerlo, y sabía que era cuestión de tiempo para que madre comenzara a presionarlo también, pues sabía que con su padre una mentira no dura mucho, y lo que menos necesitaba ahora era que él lo descubriera, pero si lo hacía estaba dispuesto ahora sí a pelear por él, no lo hizo antes, pero ahora que lo recupero no dudaría en defender su objeto más preciado, solo que esperaba que aquello no sucediera. Todas las opciones que había ideado ninguna predecía con éxito el final, sobre todo porque su cabeza no lograba proyectar un buen lugar donde esconderlo, y no se culpaba, apenas tenía dos semanas en este lugar, lo menos que esperaba era conocer con exactitud los espacios más escondidos que puede tener, eso se lo dejaría a alguien con la capacidad o el conocimiento exacto de este pueblo, alguien como Carlos por ejemplo.

-Carlos!- el nombre de su amigos retumbo en el aire, igualmente notando que estaba hundido en sus pensamiento que no había percibido que se encontraba justamente frente a su casa.

Entrando rápido y sin molestarse en averiguar quien estaba, subió a su habitación. ¿Cómo no lo había pensado antes? No había persona que conociera mejor el lugar que un policía, y claro no tenía a un policía como tal, pero sí al hijo de uno que conociéndolo, lo más seguro es que tuviera idea alguna de ciertos lugares que pudieran ayudarle. Sus esperanza de encontrar y salvar su piano comenzaron a crecer, pero para esto debía idear el cómo podría decírselo y así que Carlos aceptara su ayuda y ya después tal vez entre ambos pudieran averiguar una manera de transportarlo. Después de todo, Logan se dio cuenta que el estar solo puede ser desventajoso, y que el compartir secretos con alguien realmente ayudaría bastante.