Hola, siempre me he preguntado, ¿Qué pensaba Tamao después del hijo de Yoh? bueno…esto se me ocurrió mientras intentaba hacerme una idea sobre ¿Qué pasaría si…?, entonces me llegó, espero que les guste :)

Sumary: unos simples deseos de Tamao, pueden hacer que todo cambie, la historia y la familia, pero no será rival para el amor verdadero…creo

Aclaraciones: empieza después del torneo de shamanes, cuando Hao es nombrado rey de shamanes y pues…ya todos tienen formado su futuro (no sé si me entendieron)

Estos "…" son los pensamientos


_¡mamá, papá!- gritaba un chico de unos cinco años corriendo hacia sus padres, quienes llegaron a la pensión

_hola hijo- dijo Yoh agarrando a su hijo en sus brazos

_¿listo para irnos?- preguntó Ana a su hijo con una sonrisa, éste asintió

_bueno, jjjj- río Yoh- entonces buscaré tu abrigo, ustedes adelántense, yo los alcanzo-

Ana agarró a su hijo cargándole, Hana la abrazó rodeando su cuello con sus brazos y colocando su cabeza en su hombro con una sonrisa

_no te tardes, sabes muy bien que hoy puede haber mucha fila- dijo Ana a su esposo y salió de la pensión

_claro Anita, jjjj- dijo Yoh feliz, le gustaba mucho pasar tiempo con su familia y además era navidad, que día mas genial para estar con los seres que mas amaba. Entró al cuarto de su hijo, sacó de la cómoda un abrigo de color naranja, como le gustaba ese color, sin duda era su hijo, con una sonrisa en sus labios salió de esa habitación al pasillo, estuvo a punto de irse cuando se acordó de algo

_Tamao- la nombrada estaba en la cocina cabizbaja, ella no tenía con quien pasar ese día- estamos saliendo, jjj-

_está bien señor Yoh- dijo Tamao mirándole con una sonrisa fingida

_bueno- dijo Yoh marchándose, sentía pena por Tamao, pero si la invitara no quería causar problemas con su adorable Anita como la última vez que casi le costaba su compromiso. Salió de la pensión y encontró a su familia esperándolo

_les dije que se adelantaran, jj- dijo Yoh acercándose a ellos

_lo sé, pero Hana no quería irse sin ti- dijo Ana- y…yo tampoco-

Yoh sonrió se acercó a su esposa y le dio un beso en sus labios- gracias por esperarme- luego besó la frente de su hijo quien sonreía feliz de que su padre llegó

_vámonos, no quiero tener que hacer fila- dijo Ana sonriendo, siempre lo hacía cada vez que ella estaba con ellos, su familia

Yoh rio, rodeo a su esposa con un brazo sobre sus hombros y caminaron toda la familia Asakura con una sonrisa radiante

En la pensión una pelirosa estaba viendo la escena desde la puerta, una lágrima se le escapó por la mejilla, como hubiera querido ser ella en vez de Ana, tener un esposo y un hijo amorosos, pero no, ella era solo la sirvienta de esa casa, aun no sabía por qué se había quedado, le dolía ver a Yoh y Ana besándose y sonriéndose, olvidándose por completo que ella estaba ahí presente, pero ella no podía alejarse de Yoh, no podía.

Entró a la sala y vio lo que le encomendaron, llevar en regalo a Hao, el rey de los shamanes, agarró el regalo entre sus brazos, se puso un abrigo por que hacía mucho frío afuera y salió de la pensión. Llegó a un hotel de cinco estrellas "vaya, hasta los reyes tiene una mejor vida" pensó, entró y le dio al recepcionista que buscaba al joven Hao, él le dijo que fuera a la habitación 234 de la derecha, ella se fue directo al ascensor, llegó a la dichosa habitación y toco, nada, toco otra vuelta, nada

_"tal vez está dormido"- pensó Tamao, pero descartó es idea, eran las 8 de la mañana, ¿Quién dormiría a esa hora?- joven Hao ¿está ahí?- preguntó, pero al no oír respuesta, se acercó a la puerta, colocando su cara en la puerta haber si escuchaba un ruido, pero para su mala suerte la puerta se abrió, haciendo que ella cayera

_perdóneme no fue mi intención entrar yo solo…- estaba hablando demasiado rápido, pero al ver que no había nadie, suspiró aliviada, dirigió su mirada hacia la habitación, "está muy desordenada" , vio una luz encendida que provenía del closet, sin pensarlo se acercó, la abrió y vio una habitación totalmente oscura, "sospechoso", entró y la puerta del armario se cerró, asustándola, de repente cuatro luces se iluminaron en frente, divisó unas cuatro puertas

_el infierno- pronunció ella, tres puertas poseían letreros- los grandes espíritus y la tribu apache- vaya, ya entendía como Hao asistía a sus reuniones con los apache y llegaba rápido a Japón- y ¿Qué es esa puerta?- la cuarta puerta no tenía un letrero y al acercarse más pudo ver una fuente, se acercó a ella y se vio en el reflejo del agua, de repente pensó en Yoh, le hubiera gustado que él estuviera a su lado

_desearía que tu, Yoh, fueras mi prometido- dijo la pelirosa cerrando los ojos- también que Hao no fuera malo, así no te sentirías solo en tu infancia y también…- pensó un poco- que la "señorita" (hizo énfasis en sus palabras por que en verdad la odia al ver que ella se quedaba con SU Yoh) Ana no fuera abandonada por sus padres, así nunca la conocerías, así todo sería felicidad para mí- de pronto una luz segó a Tamao, haciéndola retroceder, pero luego se desmayo al instante, quien sabe por qué, solo se desmayo, cuando la luz se disperso, hubo un letrero arriba de la fuente que Tamao no vio

A Hao le había obsequiado esa fuente, decían que era solo para él, un regalo, Hao sabía que era, pero no le dio importancia, lo que quería ya lo tenía, no necesitaba más, así que lo dejo intacto y se encontraba en una reunión con los apaches, por eso no estaba en su habitación

El letrero decía:

Para el rey shaman, de los grandes espíritus

Como ha cambiado de opinión respecto a la humanidad y haber ganado el torneo, le entregamos este obsequio, que es la fuente de los deseos, solo tiene tres, así que piénselos bien

Continuará…


¿y bien?, ¿qué les pareció?, dejen reviews para saber si quieren que continúe la historia ^_^