Ni la distancia nos separara.

Shaoran P.O.V.

Después de haber capturado las cartas clow y que la niña de mi vida las convirtiera en cartas Sakura, mi prima Meiling y yo tuvimos que regresar a Hong Kong por que el clan de ancianos requería mi presencia, ya que yo seré el próximo jefe de la familia Li.

Cuando supe que me tenía que ir, no saben el gran dolor que sentí, porque tenía que alejarme de mis compañeros de clase, pero también de la chica a la que amaba.

Unos días antes de que partiera a mi país natal, yo le confesé mis sentimientos. Claro que no pude esperar por su respuesta ya que mi vuelo saldría en muy pocas horas.

—Oye…¿No esperaras a Kinomoto, Xiaoláng? —Escuché a mi prima preguntarme con algo de esperanza en su voz.

—No, Sakura tardará demasiado en llegar. —Le respondí apesadumbrado, si ya sé que estarán pensando, « ¡vamos Li, no seas un cobarde y espérala!», pero no es cuestión de cobardía, es que si la espero perderíamos el vuelo.

— ¡Xiaoláng no seas idiota! ¡Espérala! —Me dijo mi prima…corrección, gritó, haciendo que todas las personas que se encontraban a nuestro alrededor voltearan a mirarnos extrañados.

—Mei… baja la voz. —Reproché con enojo.

—Pero… pero… Xiaoláng ¡Tienes que esperarla ella llegará pronto! —Volvió a gritar.

—Mei baja la voz. —Comenté entre dientes.

Mi prima lo único que hizo fue soltar un bufido y girarse a observar por la ventana.

Meiling P.O.V.

¡Hola!, yo soy Meiling Li, la prima del cobarde de mi primo Xiaoláng Li.

Hace unos días, antes de que mi tía nos llamara para regresar a Hong Kong, él se le declaró a la joven Sakura Kinomoto, la cual es dueña de su corazón. ¿Saben? al principio yo estaba renuente a perder a Xiaoláng, porque yo estoy enamorada de él.

Sí, ya sé que ustedes dirán: « ¿Cómo puedes enamorarte de tu primo?», pero es algo que no pude evitar.

Él es el chico perfecto para una mujer como yo, es tierno, cariñoso y a veces con un carácter que nadie lo soporta.

Cuando me enteré que Sakura era la chica que había logrado atrapar el corazón de mi primo, yo hice de todo para que ellos dos no estuvieran juntos. Desde el día que Xiaoláng se le declaró a Sakura yo llamé a mi tía Ieran para que lo obligara a regresar a Hong Kong, pero no saben cómo me arrepiento, porque por mi culpa mi primo no va a poder estar al lado de la chica que ama.

Después de haber realizado esa llamada me comencé a sentir muy triste porque por mi causa ellos no podrán estar juntos nunca, ya que cuando lleguemos a Hong Kong, el clan de ancianos nos casaría a mí y a Xiaoláng, puesto que él y yo estamos comprometidos desde niños. Así que llame a la única persona que sabía que me podría ayudar.

«Flash back»:

Me encontraba en mi habitación pensando cuando se me ocurrió llamar a Tomoyo Daidouji, mejor amiga de Sakura Kinomoto, quien sabe de mis sentimientos.

¿Daidouji? —Le pregunte con algo de nerviosismo en mi voz.

Sí… Ella habla. —Me respondió siempre con su característico tono de voz.

Daidoji, soy Meiling la prima de Xiaoláng. —Le dije más nerviosa que antes.

¿Ocurrió algo, Mei? —Me preguntó preocupada, entonces proseguí a contarle todo. Después de unos minutos me habló en tono comprensivo.

No te preocupes Meiling, tengo una idea ¿Cuándo se van? —Me preguntó con algo de emoción en su voz.

Pasado mañana.

¡Ok! Meiling, este es el plan. Mira, cuando tú y Li lleguen al aeropuerto, esperen unos minutos a que Sakura y yo lleguemos, y una vez que estemos ahí, los dejamos solos para que Sakurita le diga lo que siente por él.

¿Crees que funcione el plan Tomoyo? —Le pregunte con algo de duda, ya que esos dos son tan reservados para actuar que no se atreverán a hablar.

¡Claro que funcionará Mei! ¿Confías en mí? —Después de escuchar esa pregunta yo suspiré y dije.

Está bien Daidouji confiare en ti.

¡Ok!... Llevare a Sakura a las 16 horas. —Me dijo antes de colgar.

«Fin del flash back».

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Y aquí estamos en el aeropuerto esperando nuestro vuelo, yo me comienzo a impacientar, ya que Daidouji y Kinomoto tardan demasiado, me encuentro observando por el gran ventanal y sonrió al ver que ambas chicas vienen corriendo por los pasillos, cuando escucho la voz de mi primo que me dice.

—Mei ya casi es hora de irnos.

—Xiaoláng espera un momento. —Digo algo nervioso.

—Mei ya te dije que no llegaran a tiempo. —Me dijo con algo de reproche pero al momento que iba a decir algo escuche la voz de Kinomoto que dijo.

— ¡Ay! ¡Chicos no se vayan todavía! —Mi primo al escuchar la voz de su amada, se giró bruscamente y comenzó a sonreír como un bobo.

Sakura P.O.V.

Después de un día de clases bastante aburrido y triste para mí, ya que el chico del que yo estoy enamorada regresa a su país natal sin que yo le haya podido decir cuáles son mis sentimientos, en estos momentos me encuentro siendo arrastrada, literalmente hablando, por todo el aeropuerto, por mi mejor amiga Tomoyo, quien me trajo aquí diciéndome que quería despedirse de Meiling y que yo debería de hacer lo mismo con Shaoran.

Después de algunos minutos de haber corrido los llegamos a ver y lo único que pude decir fue: — ¡Ay! ¡Chicos no se vayan todavía! —Gran error porque cuando me escuchó, Shaoran se giró a verme, mi corazón comenzó a latir desbocado y pensé. « ¿Qué hago ahora?»

—Estaba a punto de salir corriendo, cuando Tomoyo me cogió del brazo y me puso al lado de Shaoran y dijo.

—Mei quiero hablar contigo, tengo que decirte algo. —Después de esas palabras se llevó a Meiling al otro lado del gran ventanal, yo al ver que me quedaba sola con Shaoran me sonroje, porque enseguida supe las intenciones de Tomoyo y además porque Shaoran no me quitaba la mirada de encima.

—Eh… ya te vas a tu país, ¿verdad? —Fue lo único que logre decir ya que me encontraba nerviosa.

—Eh… sí… ya regreso a mi país.

—Escuche la voz de Shaoran y cuando lo mire a los ojos me quedé totalmente en blanco y pensé. «Vamos Sakura es hora que le digas tus sentimientos».

—Shaoran...yo...yo —comencé a sudar, ya que me ponía más nerviosa.

—Dime. —Escuché la voz de Shaoran y salí de mi trance.

—Eh…yo…yo quiero decirte que...que tú me gustas Shaoran. —Dije y alce la cabeza para encontrarme con un Shaoran totalmente sonrojado y con un extraño brillo en sus lindos ojos color ámbar.

—Tú también me gustas Sakura. —Me dijo y se acercó un poco a mí.

— ¿Qué haces? —Le pregunté antes de volverme a perder en sus hermosos ojos que me observaban con mucha ternura.

— ¿Sakura quieres ser mi novia? —Me preguntó con un tono de voz tan dulce que no pude decirle que no.

—Eh…bueno...pues… ¡sí! —Dije tartamudeando, y Shaoran lo único que hizo fue llevar sus brazos alrededor de mi cintura para darme un dulce y tierno beso en los labios, al momento de separarnos escuchamos unos aplausos detrás de nosotros y en ese momento nos percatamos de que Meiling y Tomoyo nos estuvieron observando todo este tiempo.

— ¿Chicas cuánto tiempo llevan ahí? —Les pregunte sonrojada.

—El tiempo suficiente para grabar la fabulosa declaración tuya Sakurita. —Me respondió Tomoyo con estrellitas en los ojos.

—Xiaoláng es hora de irnos —Dijo Meiling triste.

— ¡Eh!..., si, vamos.

Antes de que Shaoran comenzará a caminar le pregunté con tristeza:

— ¿Nos volveremos a ver? —Sonreí— ¿Verdad?

—Claro que si amor…te lo prometo. —Me respondió Shaoran con una gran sonrisa y comenzó a caminar hacia la puerta de embarque.

Han pasado dos meses desde ese día, y hoy es el gran día en el que volveré a ver a mi querido Shaoran. Tomoyo y yo nos encontramos en el aeropuerto esperando la llegada de su avión, cuando escuchamos el anuncio de los parlantes que decían:

«El avión proveniente de Hong Kong aterrizará en la puerta número 22».

Yo me puse completamente nerviosa, cuando vi a las personas que comenzaban a salir y mi corazón comenzó a latir desbocado, que por unos segundos pensé que se me iba a salir del pecho.

—Tranquila Sakura. —Me dijo mi mejor amiga mientras me daba un apretón de manos, yo al oír su voz respire hondo y me tranquilicé por unos segundos, porque mi corazón comenzó a latir fuertemente al ver a un joven de cabellera castaña acercarse a mí y darme un fuerte abrazo y susurrarme:

—Nunca más me alejare de ti, «mi amada flor de cerezo».

¿Fin?