Hola como están todos :D

Bueno aquí les traigo la segunda y ultima parte de este fic, espero que lo disfruten

Fairy Tail no me pertenece su creador es Hiro Mashima-sensei y la historia tampoco me pertenece su creadora es: layla una gran escritora la cual me permitió compartir esta historia con ustedes.

El cumpleaños de Lucy

-Hmmm...-murmuró Lucy

-Perdona, no quería despertarte

-Es raro que no me estés abrazando

-Es que llevo rato ya fuera de la cama...- ella abrió un poco los ojos y miro el reloj

-Es pronto...-tiró la sábana dejando ver su cuerpo en ropa interior

-sabes tengo frío

-ven aquí

El pelirosa sonrió y se abrazó a ella, que los tapo a ambos con la sábana

-A ver si así entras en calor...-dijo Lucy, correspondiendo al abrazó del pelirosa

-Espera un momento, pero si eres un dragón de fuego como puedes tener frió

-Si, pero tu me enciendes... y me gusta estar encendido

-¡Baka! - exclamo ella, sonrojada. Pero lejos de pegarle, se abrazó más a él y al poco suspiró - me encanta estar así... - Mientras cerraba perezosamente los ojos de nuevo

-Luce...

-Hmmm...-debatiéndose de nuevo entre estar dormida o despierta. Pero entonces un dedo hábil del chico recorrió con delicadeza el costado de la rubia, algo que a ella la volvía loca, y él lo sabía muy bien, ya que lo hizo para conseguir su atención. cosa que consiguió, porque ella abrió los ojos rápidamente

-Feliz Cumpleaños- ella solamente sonrió y lo beso con ternura

Estuvieron así un rato hasta que sonó el despertador, entonces ambos se levantaron y se prepararon para ir a su amado gremio

-Que tal si no vamos y nos quedamos aquí solo tu y yo- dijo el pelirosa mientras se acercaba a ella

-No podemos, todos los del gremio nos esperan. Ademas ya celebraremos tu y yo después - guiñando un ojo. Él sólo asistió, pero en su cabeza seguía preocupado por el maldito regalo...

Luego de eso se dirigieron a su amado gremio, el cual se preparaba para celebrar a lo grande el cumpleaños de maga estelar.

La rubia y el pelirosa ya se encontraban en la entrada del gremio. Justo cuando se proponía a abrir la puerta esta se abrió sola, dejando ver a todo los miembros del gremio que formaban una multitud la cual gritaba felicitaciones a la cumpleañera.

-¡Lu-chan felicidades!-decia la pequeña amante los libros, mientras se tira a abrazar a la joven rubia.

-muchas felicidades lucy-hizo su acto de aparición la gran titania

-¡jaja...cada vez mas vieja lucy!-dijo el exhibiciónista

-Es cierto, pronto tendré arrugas ¡No Quiero Envejecer Aun, Quiero Disfrutar Mi Juventud! ¡No Porque A Mi- decía la rubia mientras corría por todo el gremio

-¡Gray!- grito la titania y alisto una de sus espadas - ¡Vez Lo Que Causaste, Prepárate A Morir! - dicho esto busco con la mirada al pelinegro, pero no encontró ni rastro de él

-¡Gi Hi!- ni que fuera tonto para quedarse aquí

-Lucy-san, tranquila usted es aun muy joven para que le pase eso- dijo la pequeña maga de viento intentando tranquilizar a la rubia que aun corría alrededor del gremio. La se detuvo al escuchar lo que dijo la pequeña

-Tienes razón wendy, soy hermosamente joven - dijo mientras sonreía como si nada hubiese pasado. Lo cual hizo que a todos los demás presentes le rodara una gotita al estilo anime

-¡Bueno Mocosos Ya Que Todo Volvió A La Normalidad, Ha Llegado la Hora De Comenzar Con lo Primera Celebrar En Honor A Lucy!¡Asi Que Beban! - dijo el viejo makarov- ¡Y Recuerden Que Esto Solo El Comienzo En La Noche Tendremos La Verdadera Fiesta!

-¡Aye Sir!

Y asi comenzó la fiesta al estilo fairy tail. Personas bebiendo como si no hubiera mañana, mesas que volando por el aire y los gatos que tambien volaban esquivaban los objetos lanzados debido a las acostumbradas peleas, gajeel ladrando...perdón cantando y todo fairy tail sumido en la gran celebración por el cumpleaños de la querida maga estelar. La cual se encontraba riendo por la locura de su nakamas junto a su querido pelirosa, el cual se había mantenido al margen de las peleas por estar a su lado.

Después de horas de celebración algunos se fueron a sus casas para prepararse para la verdadera fiesta que tenían por delante, mientras otros se quedarían allí para alistar todo, y que la joven rubia fuera corrida del lugar con la escusa de que era una sorpresa y por lo tanto no podía estar ahí.

La rubia salió del gremio en compañía del dragón slayer de fuego, pero estando a pocos metros el pelirosa se disculpo con ella diciendo que había dejado algo en el gremio por lo cual dijo que regresaría a buscarlo. Dicho esto se encamino en dirección al fairy tail, mientras la rubia seguía encamino a su departamento, al cual llego en poco tiempo.

Tengo que conseguir un regalo, pero que...porque no se me ocurre nada

Y la única solución que se le ocurrió fue comprar un ramo de flores, al menos no se presentaría con las manos vacías. Y cuando se dirigía a la casa de su amada, un pensamiento lo asalto: Lucy ya tiene que estar alistándose o quizás este escribiendo su novela...¡¿Y si había visto la carta?! pensaría que era un estúpido, un cobarde...un perdedor

Acelero el paso, mejor dicho comenzó a correr a toda velocidad en dirección a la casa de la rubia. Una vez llegó no perdió tiempo y salto por la ventana, antes de ingresar completamente se aseguro que de que su luce no estuviera por los alrededores. Una vez convencido entro totalmente a la habitación y corrió hacía el escritorio en busca de la carta. Abrió el cajón y dio un suspiro de alivió al ver que allí estaba. Para evitarse más sustos así, solo le quedaba deshacerse de ella, así que abrió más el cajón y agarró la hoja. La puso frente a sí unos segundos y sonrío.

Cómo me gustaría que algún día supieras todo lo que esta aquí escrito...-entonces llevó su mano al tirador del cajón para volver a cerrarlo, pero algo llamó su atención en el fondo del cajón... Era un papel... una especie de nota. Intrigado, se inclino para leer lo que tenia escrito...

"Date la vuelta"

Quedó shockeado unos segundos, sin ser capaz de moverse al reconocer en esas palabras la letra de la rubia.

-Es de mala educación no obedecer lo que dicen las notas - era la voz de lucy, con un tinte irónico. Un escalofrió recorrió el cuerpo del pelirosa, que se giró por pura inercia. Ella lo miraba muy seria, y entonces... se echó a llorar, ante la atónita mirada del muchacho.

-¿¡Lucy!? ¿Estás bien? ¿Qué te pasa? - ella se secó un poco las lágrimas

-Sí... yo sólo es que... lo siento mucho, natsu...

-¿Qué? - exclamó confundido - ¡pero el que debería sentirlo soy yo! Soy un idiota ¡de veras! Perdóname...

-No natsu - negando con la cabeza - Lo siento... siento no habértelo dicho antes... - a él se le derretía hasta el alma de verla vulnerable en esos momentos

- Tú no tienes que disculparte por nada conmigo ¿entiendes? Nunca - recordó lo que acababa de oír y le picó la curiosidad - pero... ¿que me tenías que decir? - Ella lo miró fijamente a los ojos muy seria, pero poco a poco formó una cálida sonrisa en su rostro. Se acercó a él y lo abrazó con fuerza

-Que no entiendo como mi corazón no ha explotado aún en mi pecho... de todo lo que te amo - el pelirosa la apretó contra sí

-Yo también te amo Luce... con todo mi ser - al rato se separó sonriendo - Espera un momento, tengo algo para ti - y agarró las flores que había dejado en el escritorio

-Ten... se que no es gran cosa, pero...

-¡son preciosas! - interrumpió ella sonriendo - ¡muchas gracias! - las olió un momento y luego se dirigió a la cocina, al volver traía las flores en un florero que lo coloco en la mesa.

Natsu que había seguido las acciones de la rubia con la mirada, de repente se acordó de la carta y la tomó, para deshacerse de ella de una vez

-¿Qué estás haciendo? - grito enfadada. el pelirosa se giró asustado por el tono de la chica - ¿Dónde crees que vas con mi regalo de cumpleaños?

-Yo...

La rubia se acercó y le quito la carta de las manos. El solo se encogió de hombros, mientras tanto la rubia se sentó en la cama a releer la carta. El pelirosa se acerco a ella

-Luce... ¿Qué haces? Mas valdría tirarla... - ella le hecho una mirada asesina

-No bromes con eso

-¿Bromear? ¿Con que?

-Con tirarla. No pienso tirarla jamás. Por que natsu, querías hacerme el mejor regalo del mundo... y lo has hecho

-¿esa carta que ni siquiera está terminada es el mejor regalo del mundo? - pregunto alzando una ceja, sin comprender

-Esa carta es tu corazón, Natsu - sonrío - Es nuestra historia... y por eso no debe estar terminada. Es perfecta tal y como es... - él sonrío y se inclino sobre ella para darle un suave beso... pero lo que no esperó fue que los brazos de la rubia lo rodearan con fuerza, haciendo más apasionado aquel beso. Hizo un poco de fuerza para atraerlo más hacia ella, quedando ella tumbada sobre la cama y él sobre ella, apoyando ambas manos en la cama. Se fue a separar, pero los brazos de la rubia se lo impidieron, así que continuó besándola hasta que sintió como ella separaba una mano para quitarle su bufanda. Al comprender sus intenciones, él comenzó a deslizar sus besos por su cuello sensualmente.

-¿No se enfadara erza por llegar tarde a la fiesta?

-Pues que se enfade si quiere... - respondió ella - pero ahora mismo... tengo algo más importante entre manos - el pelirosa solo sonrió por el comentario y continuó.

obviamente llegaron tarde a la fiesta, por lo cual la rubia casi se queda viuda antes de casarse, ya que titania culpo al pelirosa de todo sin escuchar escusa alguna.

Una semana después decidieron vivir juntos, y en menos de un año finalmente se casaron bajo la alegría de todos sus amigos del gremio

Lucy cumplió lo que dijo nunca tiró la carta, y la leyó cientos de veces, y no hubo una sola vez que la leyera y no se dibujara una sonrisa de felicidad en sus labios. Aunque ese día hubiere discutido con el pelirosa o que uno de tres hijos la sacara de sus casillas, eso no cambiaba.

Casi sesenta años después, un anciano recorría las calles de magnolia tranquilamente. A su paso todo el mundo lo saludaba amablemente. Todos parecían respetarlo y admirarlo.

Cuando llegó a su destino, Camino entre los fríos trozos de piedra, hasta que se detuvo frente a uno en concreto, y no pudo contener un suspiro.

-Hola de nuevo, Mi amor. Hoy hace unos meses el destino decidió separarnos... Desgraciadamente tuviste que irte tú antes... pero no será por mucho tiempo... yo ya estoy viejo y pronto nos reuniremos... mientras tanto haré como tú siempre quisiste que hiciera, no me rendiré... aunque en el fondo de mi alma... deseo que mi hora llegue cuando antes... sabes la nueva generación de fairy tail es muy poderosa y conservan esos grandes lazos de amistad al igual que nosotros, se que llegaran lejos en todo lo que se proponga y siempre serán una familia. ya no nos necesitan porque se tienen a ellos mismos.

y entonces buscó entre sus ropas y sacó un viejo papel arrugado y medio roto.

-Y ahora como te prometí que haría cada día... - se acomodo las pequeñas gafas y fijó su vista en el papel, aunque ya podía decirlo de memoria...- "Me escabullido con todo el cuidado que he podido entre la sábanas para no despertaras. Aunque parezca mentira viniendo de mí"

Espero que les guste

comentarios :D

nos leemos y que viva Fairy tail Aye Sir!