Hola! Si hay alguien que me lee, entonces me haré muy feliz en saber que alguien más conoce esta miniserie, manga, lo que sea y que me ha gustado tanto que decidí hacer esto. Espero le guste.

Tlahcuilo Yatziri

La tarde después del té

A él le era sencillo poder admirar a las personas mientras leían. En el último año, a pesar de todas las experiencias vividas a través de los libros podía darse cuenta de más cosas de las que alguna vez espero ver y concentrarse en las personas le era intrigante.

Tal vez esa era la razón. Tal vez ese era el motivo por el cual comenzó una extraña fascinación por la pequeña Dalian, no solo porque representara el mundo que había buscado desde siempre o porque sus labios resplandecieran cada vez que decía algo amable, en esos lapsos tan cortos y vulnerables que solían hacer que bajara la vista y una pequeña sonrisa se difundiera en su rostro, lo suficiente para que ella no creyera que mostraban burla o que, en efecto, había notado su cambio… el cambio mismo que ella detestaba mostrar aunque fuera real.

Y ahí estaba, Dalian se sentaba en la misma silla confortable de siempre, su vestido largo resaltando la blancura de la poca piel al descubierto, sus manos tomando al libro como si fuera un bebe y el largo flequillo tapando sus ojos, que apartados del mundo en que ellos respiraban adoraban las letras que le proporcionaban algo más que solo información o conocimiento.

Él no estaba lejos de ella, como cada día después del té, Dalian se sentaba a leer y el caminaba por los libreros buscando algo que pudiera entretenerlo si no tenia correspondencia que contestar o cartas que enviar. Así que, como los últimos meses, cuando elegía un libro y sus ojos reclamaban un poco de descanso la miraba a ella y no tenía ninguna consideración, ninguna vergüenza en mirarla fijamente.

Suspiro lentamente, con algo de cansancio y junto las palmas de sus manos, tan acostumbradas a la textura de la otra. Levanto la vista y se quedo contemplando a la chica frente a él, que soltaba varios bufidos o risas, ella era la única que podía comprender los libros a la perfección y era admirable, ella era admirable no solo por ese don.

No supo cuanto tiempo había estado mirándola, pero noto el instante en que ella levanto la mirada, disparándole con los ojos violetas. Las mejillas ligeramente rosas o escaparon a su campo de visión y su pecho latió solo una vez más de lo que estaba acostumbrado, lo suficiente para que regresara a la lectura que había sido suspendida.

Dalian era dulce, tanto como las delicias que le gusta comer y que él no tiene ninguna intención de quitarle, le encanta darle todo lo que desea, porque sabe que ella le aporta algo más.

De esa forma, estuvo seguro de que la amaba como se aman ciertas cosas oscuras, en secreto. Entre la sombra y el alma.