El sol entró por la ventana brillando con suavidad, reflejando la luz por toda la habitación. Una chica dormía plácidamente en su cama de dosel. Esa chica era yo y esa maldita luz me estaba molestando, realmente. Entró mas luz en la habitación y abrí un ojo perezosamente mientras me daba la vuelta. En ese momento entró mi sirvienta favorita.

" Vamos Ishtar, levántate, ya es casi mediodía" dijo la sirvienta acercándose a la ventana y abriéndola, dejando que una brisa suave entrara en la habitación. Murmuré algo incomprensible y hundí mas aun mi cabeza en la almohada. Mi largo cabello rojo caía a los dos lados de la cama y estaba tapada hasta la barbilla a pesar del día cálido que hacía.

"¡Ishtar!" gritó la sirvienta. "Tu padre se va a volver a enfadar y no querrás que te castigue como la otra vez ¿no?" me avisó llegando hasta la cama y destapándome por completo.

" Por favor, Nani, estoy muy cansada, dile a mi padre que estoy con la peste o algo y así me deja en paz de una vez" dije enfurruñada levantándome lentamente .

" Esa excusa te ha servido últimamente pero hoy no lo hará señorita. ¿ No se acuerda de que hoy es el día que las tropas de exploración están invitadas al baile anual de la corte? Todo el mundo esta ocupado con las preparaciones y te necesitan para que ayudes en la cocina"

Abrí mis ojos azules con sorpresa. Habia olvidado completamente el baile anual. Usualmente todos los años la familia real convocaba un baile conmemorando la creación de la muralla Sina y del gobierno monárquico y estaban invitados todas las familias nobles con contactos con la corte ,los grandes hombres como médicos populares,grandes pensadores, políticos y los religiosos dedicados al culto de las murallas. La Policía militar también iba a estar allí por supuesto. Esos malditos idiotas no tendrán nada mas que hacer, solo emborracharse y acosar a las pobres jovencitas hijas de los aristócratas. Pero este año iba a haber una novedad. La tropa de exploración, la que se encarga de salir fuera de las murallas para combatir a los titanes y recopilar información sobre ellos, iba a asistir al baile por primera vez. La tropa esta financiada por el rey pero no tienen muy buenas relaciones. Hace poco tuvo lugar una reunión donde negociaron presupuestos y financiación y acercaron relaciones por lo que el rey quiso recompensarlos con esta " honorable" invitación.

Soy hija de la mano derecha del rey, no soy de la realeza pero me trataban como tal. Vivimos cerca del palacio, dentro de la muralla Sina, en una gran mansión. Estudio todos los días con un profesor particular en casa y me relaciono siempre con la alta sociedad, muy a mi pesar. Estoy realmente harta de todo eso. Odio con toda mi alma todas esas comidas escandalosas, la decoración pomposa y el estúpido y ridículo comportamiento que tenia que mostrar ante los demás. Mi sueño era entrar en la tropa de exploración y ver mundo, matar a esos asquerosos titanes y aportar ayuda a la humanidad para recuperar la libertad que tanto ansiaban. Había pedido permiso a mi padre para entrar como recluta en el ejército pero me lo prohibió alegando una dama como yo tenía que asistir a bailes y empezar a pensar en los posibles candidatos para un cercano casamiento.

Me levanté de la cama y me acerqué al espejo . Observé como debajo de mis grandes ojos azules tenia unas sombras oscuras de no haber descansado bien. Me quedaba todas las noches leyendo historias antiguas y también pensaba mucho acerca de escaparme de esta aburrida vida. Me había intentado escapar varias veces pero siempre me habían pillado. Sobre todo me pillaba el idiota de Warner, mi guardaespaldas. Siempre acababa encontrándome. . Warner es un chico 5 años mayor que yo , castaño claro, con ojos marrones . Trabajó desde que era pequeño como mozo de cuadras pero hace un año pidió permiso para trabajar protegiéndome y mi padre se lo concedió ya que no dudaba de su lealtad.

Cogí un peine del tocador y comencé a peinarme la larga melena rojiza, la cual estaba llena de nudos. Me puse un vestido azul claro y sin mangas y cuando estuve presentable salí hacia las cocinas.

Siempre me gustaba ayudar a los sirvientes y me pasaba la mayor parte del día en las cocinas y en los jardines. Abajo los cocineros tenían pinta de estar muy agobiados, preparando los postres mas codiciados para el baile. Pasé las siguientes cuatro horas cocinando y cuando estaba todo mas o menos preparado salí hacia el jardín. Fui hasta mi árbol favorito, un manzano, y me senté bajo el . Suspiré. Odiaba esto, con todas sus fuerzas. Estaba aburrida de hacer todos los días lo mismo, necesitaba acción en mi vida, quería sentirse de ayuda, que sirviera realmente para algo. Pero estaba encerrada en una jaula de la que quería desesperadamente salir y nadie podía oírme. Me quedé dormida y desperté justo cuando mi madre se estaba volviendo loca intentando encontrarme para que me vistiera para el baile.

Estaba muy nerviosa, tenia muchas ganas de ver a la famosa tropa de exploración y sobre todo tenia ganas de conocer al soldado mas fuerte de la humanidad( es así como le llamaban), Rivaille. En la corte y en la nobleza Rivaille era muy conocido, se había hecho un nombre. Era admirado y envidiado por todos, uno de los mejores soldados que la tropa de exploración ha tenido nunca. También era sabido que era un mujeriego. Dicen que se le ha visto varias veces en los burdeles mas lujosos de la capital y también se cuentan historias de la gran estela de corazones rotos que ha ido dejando a su paso. En general, un tipo nada de fiar. Pero soy curiosa y ante todo quería que el se fijara en mi . Soñaba con entrar en las tropas y formar parte del equipo de Rivaille y juntos, luchar contra los gigantes. Y hacer otras cosas, cosas adultas y salvajes... Pero solo eran sueños, pensé tristemente.

Estaba caminando por un pasillo dirigiéndome a mi habitación para cambiarme cuando sentí a alguien detrás mía . Me dí la vuelta y una mano tapo mi boca, mientras me arrastraban a una habitación cercana, cerrando la puerta. Estaba oscuro pero reconocí el olor de la figura que ya me había empotrado contra la pared.

" ¡Warner! ¿ Qué demonios estas haciendo?" repliqué enfadada " Me has asustado".

" Shhh no hagas ruido..." dijo Warner con una sonrisa pícara acercándose mucho.

Las manos de Warner fueron hacia mi cabeza y me llevó más cerca de él. Sentí su lengua moviéndose lentamente en mi boca, y lo besé de regreso duro. Sabía muy dulce. Estaba envuelta en su sabor y nuestras lenguas se enredaron apasionadamente. Jadeé en su boca mientras sentía su mano en mi culo presionándome en él. Nuestros cuerpos estaban presionados y sentí su hombría contra mí, excitado y agitado. Moví mi cuerpo así podía sentirlo mejor y él río entre dientes. Sus labios nunca dejaron los míos mientras me depositaba en una cama junto a la ventana y se movió entre mis piernas, su erección luchando contra los confines de sus pantalones de lino , envolví mis piernas alrededor de su cintura y jalé su cuerpo hacia abajo, más cerca del mío. Su pecho aplastado contra el mío y mis pechos encantados con el contacto cerca. Quería sentir su piel desnuda contra la mía y levanté su camisa, tratando de sacarla.

Warner se separó de mi ligeramente y besó hacia abajo de mi barbilla a mi cuello. Sentí su mano derecha subiendo lentamente por encima de mi vestido, para acariciar mi pecho y gemí mientras él lo presionaba. Todos mis nervios estaban puestos al borde y quería sentir su mano en mi piel desnuda. Me retorcí debajo de él y finalmente conseguí sacar su camisa. Pasé mis manos sobre su espalda, encantada por la sensación de su piel. El era cálido al toque y gruñó mientras lo rodaba sobre su espalda y me senté en él. Bajé la mirada hacia él jadeando e inclinándome para besar su pecho, pasando mis manos a través de sus pezones mientras besaba hacia abajo por su camino feliz.

"Mmmm " lo besé de nuevo hacia arriba en su pecho a sus labios y comencé a rozarme encima de él. Sonreí con la sensación de su dureza debajo de mí y me balanceé una y otra vez mientras me besaba. Envolvió sus manos alrededor de mi cintura y las soltó en mi culo hasta que él estaba ahuecando las mejillas de mis nalgas y empujándome abajo hacía él más a fondo. Alcancé la hebilla de su cinturón, esperando liberar su bestia , pero Warner me detuvo.

" No" Warner me rodó sobre la espalda y se acostó junto a mí, besando mi nariz. "No creo que sea una buena idea hacerlo ahora . "

Suspiré y me aparté de el, volviéndome a colocar el vestido. " Tienes razón, tenemos que prepararnos para el baile" dije y salí apresuradamente de allí. Me sentía frustrada, llevaba acostándome con Warner desde hace un año y era muy agradable tener sexo con el, juntos aliviábamos nuestros anhelos sexuales, pero quería sentir mas , algo que el no podía darme.

Llegue a mi habitación y estuve unos minutos intentando calmarme. Me vestí con un nuevo vestido largo azul oscuro que me resaltaban mis curvas. Tenia diecinueve años y estaba bastante desarrollada. Ya con doce años tenia el doble de pecho que las demás niñas y se podía decir que ahora estaba bastante bien dotada. Soy una mujer bastante atractiva, no lo voy a negar, y muchos hombres aspiraban convertirse en mi marido pero yo los rechazaba a todos. No quería casarme de esa manera, quería casarme por amor y no sabía si eso sucedería algún día. Al menos tenia claro que no con Warner.

Cuando estuvimos todos preparados nos dirigimos hacia el palacio real. Warner estaba a mi lado, mirando hacia el suelo. Al entrar , nos llevaron hacia el recibidor, el cual estaba lleno de gente . Algunos eran conocidos, otros no lo eran tanto. Pero me di cuenta de que había caras que no había visto jamas.

" Deben ser las tropas de exploración" pensé en voz alta. Warner se limitó a mirarlos y a asentir en silencio. La situación estaba bastante incomoda entre nosotros.

Pasaron los minutos y nos volvieron a llevar a una sala mas grande, era el gran comedor, con grandes mesas repartidas por toda la sala, la cual estaba iluminada por unas gigantescas lamparas con diminutos cristales que brillaban por toda la estancia. Al fondo de la sala habían dispuesto una gran mesa donde se sentaba la familia real y sus mas allegados. Allá vamos, suspiré con fastidio cuando me di cuenta de que tendría que sentarme allí.

Mientras me sentaba al lado de Warner ( a el le permitían estar en la mesa ya que me protegía) y de mis padres, observé con interés la sala. Nuestra mesa estaba llena, a excepción de 4 asientos al fondo. Quería saber donde se iban a sentar los lideres de la legión y así poder acosar a Rivaille en silencio. " ¡Si, soy una acosadora y realmente, necesito verle de cerca! , chille interiormente mientras daba saltitos en mi asiento.

La Policía Militar estaba tomando sus asientos al igual que los soldados de la legión de exploración cuando cuatro personas se acercaron a nuestra mesa y tomaron asiento. Los observe con interés, una de ellas era una mujer. Llevaba un vestido de noche negro y el pelo recogido en un moño. Su cara estaba adornada con una sonrisa excitada y llevaba unas gafas negras. Dirigí mi atención a los tres hombres restantes. Dos de ellos eran rubios y altos y portaban caras amables y muy serenas. El último de ellos era sin duda, la persona que protagonizaba mis sueños mas íntimos. Con su corta estatura y su mirada fría e indiferente, Rivaille tomó asiento al lado de la mujer y se dispuso a beber de su copa de vino.

No podía dejar de mirarle, me fascinaba esa mirada suya, como si le diera todo igual. De pronto Rivaille alzó su mirada y se encontró con la miá. Rápidamente me sonroje y me puse a hablar con Warner mientras todo mi interior ardía de deseo.

Estaba perdida.