Empecé otra historia...si... pero juro que no lo pude evitar, era esto o no terminar ningúna de las historias anteriores... así es que aquí está, espero que les guste el primer capitulo.

Como lo pude olvidar?

Minato – POV

Recién había logrado derrotar al hombre enmascarado, ahora solo faltaba encargarme de contener al Kyubi pero, debería sellarlo en Kushina? No, está muy cansada y no lo soportaría.

"Creo que tendré que usar el Shikifujin…" Miré a mi esposa detenidamente, y después a mi hijo "Naruto" No quería tener que someter a mi hijo a un destino tan cruel, pero era necesario, al menos su madre estaría ahí para él… de eso me encargaría yo.

Kushina debió darse cuenta de lo que yo estaba tramando, puesto que giró su torso para alejar a Naruto lo más posible "Minato, en que estás…"

"Es necesario, para que tú y él sobrevivan… por favor perdóname pero… hay cosas muy preciadas para mí y… las protegeré a como dé lugar" Miré al Kyubi, totalmente decidido a renunciar a mi vida para salvar a mi familia y a la aldea, cuando…

"Minato…"

…Esa voz era inconfundible… "Kyubi? Haz vuelto a la normalidad? En qué demonios pensabas!?"

"Idiota, ese sujeto era demasiado poderoso, encontró la forma de controlarme con su maldito ojo"

Era cierto, Kyubi detestaba que lo utilizaran…

"Necesitas sellarme de nuevo, normalmente mi chakra sería demasiado corrosivo como para que un adulto lo tolere, pero esta vez estoy dispuesto a permitir que me selles… un año por cada vida que tome mientras estaba fuera de control…"

Miré al Biju como si hubiera perdido la cabeza, pensé que intentaría forcejear y matarnos "Por qué estás tan dispuesto? Acaso no quieres ser libre?"

"La libertad es una de mis metas, si… pero no a expensas de la vida de miles" Kyubi miró hacia donde se encontraba la aldea. "Cierta persona me encomendó proteger este mundo, y no pienso fallarle, y si ese sujeto de verdad busca destruir lo que yo he jurado proteger, entonces cometió un error… pero si piensa que podrá utilizarme para ese fin, entonces tendrá que ir contra mí y mis hermanos para conseguirlo!"

Para ese momento Sarutobi ya había llegado a donde me encontraba, seguido de cientos de Jounin listos para atacar si era necesario.

"Entonces que propones, viejo amigo?" Le pregunté a Kyubi, obteniendo la sorpresa de casi todos los presentes, excepto el Tercero.

"Un sello simple y cómodo, Eien no Hi no Fuin, en otro momento te daré los detalles de este sello, pero por ahora sería mejor si terminamos esto y evitamos que se pongan más incomodos" dijo señalando a la multitud que observaba el suceso.

El sello que sugería Kyubi era algo que jamás en mi vida había estudiado, jamás lo había escuchado mencionar antes.

Miré a Kushina una vez más, definitivamente no soportaría el proceso de sellado. Acercándome a ella a paso fúnebre, tomé a mi hijo de sus brazos, besé su frente y miré a todos los presentes.

"Este es Naruto Namikaze, mi hijo! Y a partir de hoy será conocido como el héroe que salvó a Konoha de la ira del Kyubi!" Los presentes se asombraron ante lo que escuchaban, pues no entendían el peso de lo que estaba por suceder.

"Quiero que todos me escuchen atentamente! Guarden sus armas y tomen asiento!" Todos se miraron unos a otros sin saber que decir o hacer.

"Acaso se volvió loco? Lo estará controlando el demonio?" Eso y muchos murmullos más podían ser escuchados entre la multitud.

No parecían querer cooperar hasta que Sarutobi Hiruzen, el Tercer Hokage, accedió a guardar sus armas y tomar asiento "A sus órdenes Hokage-sama"

Viendo las acciones del anciano, se dieron cuenta que no había motivo para desconfiar de mí, después de todo así era el mundo ninja, en un momento peleabas contra quien podría ser tu aliado a los 5 minutos.

Todos siguieron el ejemplo del ex Hokage, guardaron armas y tomaron asiento para escuchar lo que tenía que decir.

"Gente de Konoha! Sé que el ver al Kyubi en este instante solo les recuerda el dolor de haber perdido a sus familiares hace escasos momentos…" ante esto muchos bajaron la mirada, tratando de esconder la ira que sentían "…pero quiero que entiendan lo que sucedió el día de hoy."

"Empezaré haciendo del conocimiento público que el Kyubi ha vivido entre nosotros desde los tiempos de Hashirama, así mismo su primer Jinchuriki fue la mismísima Mito Uzumaki, quien al momento de morir, transfirió al Kyubi a un sello nuevo en Kushina Uzumaki, mi esposa."

Todos escuchaban con sorpresa al saber que aquella bestia había estado viviendo entre nosotros por un largo tiempo.

"El día de hoy, mi esposa dio a luz a un hermoso bebé, a quien ya tuve la dicha de presentarles a todos ustedes. Sin embargo, cierto hombre enmascarado apareció para aprovechar que el sello en mi esposa se había debilitado y utilizando su Sharingan logró controlar al Kyubi."

Podía oír los murmullos de la gente que se preguntaba cómo era posible, y si el clan Uchiha había sido participe de lo sucedido.

"Les aseguro que el Clan Uchiha no tuvo nada que ver, sin embargo, estoy seguro que la persona a la que me enfrenté era lo suficiente mente fuerte para controlar a Kyubi… tal y como Uchiha Madara lo hizo en su tiempo."

Esto generó un poco de pánico mental en los que se encontraban ahí, pues Madara debería estar muerto, o en el peor de los casos, tan viejo como para no poder si quiera moverse.

"Podría ser algún descendiente de Madara? Su hijo? O tal vez un fanático que simplemente desea mostrar su poder? La respuesta en este instante es un misterio… pero lo que sí puedo asegurarles es que Kyubi no fue culpable de lo ocurrido el día de hoy, si quieren odiar y detestar a alguien, entonces que sea aquel enmascarado que intentó destruir nuestra amada aldea."

"Probablemente ninguno de ustedes confíe en mí, pero he aceptado la responsabilidad de mis actos y estoy dispuesto a ser sellado nuevamente, y esta vez ayudaré a esa persona a proteger esta aldea, ya que ese fue el deseo de Hashirama, quien en su tiempo se convirtió en un amigo. Y también es parte de una promesa que hice hace mucho tiempo, y que ese enmascarado intentó obligarme a romper…"

Pude observar como muchos se relajaban ante la información recibida, pues entendían que en este mundo existía gente muy poderosa y el que Kyubi hubiese sido poseído no estaba fuera de este mundo, pero había algunos cuantos que aún mostraban signos de desconfianza.

"Si alguno de ustedes siente odio o rencor hacia mí, que venga y desahogue su frustración en este instante, pero no permitiré que se convierta en un círculo vicioso. Ya he visto suficiente odio en el mundo y he sentido suficiente odio hacia el mundo que debería estar protegiendo…"

Muchos se sorprendieron al ver al Kyubi dirigirse a un grupo de personas que no parecían muy seguras de lo que pasaba.

"Puedo sentir el rencor en ti… si no puedes dirigirlo a ese enmascarado entonces descárgalo en este instante en mí, pero no dejes que crezca y te domine"

Dicho ninja simplemente comenzó a llorar al recordar la muerte de su hermano. "Mi hermano… el ya no…"

"Esa es la razón por la que pelearé al lado de ustedes en el futuro, atraparemos a ese sujeto enmascarado y evitaremos que vuelva a suceder algo como esto, creen que podrán hacerlo? No solo por tu hermano, por todas las personas que no debieron fallecer el día de hoy… y por las personas que Hashirama quería tanto, por Konoha!"

Si había duda en las mentes de las personas, claramente habían sido eliminadas al escuchar al Kyubi, pues ahora todos tenían claro que la desgracia de hoy podría repetirse, y que no solo la aldea corría peligro. Si existía alguien tan poderoso como Madara, o si el mismísimo Madara seguía con vida, entonces probablemente las naciones elementales correrían peligro en el futuro.

La gente comenzó celebrar la victoria sobre aquél hombre enmascarado, algunos incluso se acercaron al Kyubi para intentar saber un poco más de lo ocurrido. Algunos ninja médicos se acercaron a Kushina para atenderla y estabilizarla antes de moverla a un hospital.

Después de unos momentos, miré a Kyubi y me acerqué a él "Creo que es hora"

Extendió una de sus colas y la colocó en el pequeño estomago de Naruto, un gran destello se hizo presente y al siguiente momento Kyubi había desaparecido.

En el estómago de mi hijo había ahora un sello con la palabra Fuego, lo cual representaba el nuevo hogar del nueve colas. Ya habría tiempo para averiguar las funciones de este sello, pero por ahora, solo había que ir a casa y descansar.

Unos meses después

Había pasado un tiempo desde el incidente del Kyubi, a la gente le gustaba pensar que ese día habíamos demostrado poder al derrotar al gran zorro de las nueve colas, aunque todos sabían la verdadera historia.

Sorprendentemente todo el rencor había sido dirigido hacia el hombre enmascarado, quien había despojado a Kyubi de su voluntad y había atacado a la aldea, pero lo mejor de todo era que la gente había aprendido a ver a Naruto como el hijo de un héroe y como a alguien que en el futuro se volvería uno de los más poderosos del mundo.

Kushina no estaba muy contenta por la decisión, pero había sido lo mejor. Hablando de momentos decisivos, cometí un error hace un tiempo, justo después de que naciera Sasuke, quien era unos meses más pequeño que Naruto.

El problema principal radica en el simple hecho de que intente jugarle una broma a mi amigo Fugaku, y coloqué un sello en el recién nacido, pero jamás tuve la oportunidad de deshacerlo, ni de explicarle a Fugaku que "Sasuke" no era el mejor nombre para su "Hijo". Desgraciadamente cada vez que intentaba confesar lo que había hecho, algo se interponía y terminaba entreteniéndome en asuntos diversos sin la oportunidad de hablar con mi amigo acerca del tema.

Por otro lado también había nacido la pequeña Hinata, hija de Hitomi Hyuga, la niña era totalmente preciosa, tanto que Kushina quería hacer los arreglos necesarios para que ella y Naruto se casaran en el futuro.

Hoy intentaré hablar con Fugaku de nuevo "Espero que Fugaku no se moleste por lo que hice…"

Un pequeño golpeteo en la puerta me avisó que había llegado el momento "Pasa Fugaku…" La puerta se abrió y por el umbral pasó un hombre de cabello negro y corto, ojos ónices profundos y el porte de un verdadero líder de Clan.

"Minato, escuche que querías hablar conmigo, pasa algo?"

"Si bueno veras…" Me puse rápidamente de pie, cerré todos los accesos, incluso la ventana y me aseguré de que nadie pudiera entrar ni oír lo que iba a ser discutido… o mis gritos pidiendo ayuda… tal vez los sellos contra el sonido no eran tan buena idea.

"…Te llamé aquí porque hay algo que debes saber y creo que es muy importante ya que Sas…" Justo en ese momento ocurrió lo que menos quería.

"Osu! Sensei! Equipo 7 reportándose para la acción!" De la nada salieron tres Jounin, El primero de cabellos oscuros y ojos negros, similares a los del hombre que recién había entrado a la oficina, seguido por otro joven de cabellos plateados y ojos oscuros, y por último una chica de cabellos castaños claros y dos marcas en sus mejillas.

"Obito, Kakashi, Rin, enserio no podían esperar a un mejor momento? Y como es que lograron entrar?"

Obito retorció los labios creando una mueca de desagrado "Pero Sensei! No hemos tenido una misión en más de una semana! Queremos un poco de acción! Además no es importante que sepas como entramos, es secreto ninja."

"Kakashi, tú también estuviste de acuerdo con esto?" le pregunté a mi segundo estudiante quien se limitó a sacar un libro de portada naranja… Icha Icha.

"A decir verdad también estoy aburriéndome… y el perdedor no deja de quejarse así es que no veo por qué no…"

"A quien le llamaste perdedor!" Ambos chocaron frentes mientras que chispas salían de sus ojos.

Fugaku simplemente soltó una carcajada ante la actitud de mi equipo "Obito, no le des demasiados problemas a Minato"

"Claro tío! Pero si no voy a misiones no podré demostrar el poder de los Uchihas!"

Rin se limitó a esbozar una pequeña sonrisa "Entonces Sensei, nos darás una misión?"

Fugaku interrumpió antes de que yo pudiera contestar "Veo que estas ocupado Minato, te veré luego" y con eso se retiró, arruinándose así una vez más mi oportunidad para confesar mi delito.

"Veamos, una misión para ustedes… vayan a encontrar a Tora y tráiganlo de vuelta."

"Pero Sensei! Esa es una misión para genins!" reclamó Obito al escuchar su misión.

"Si Kurenai me ve haciendo esa clase de misiones entonces terminará aceptando salir con Asuma!" Incluso Kakashi había comenzado a refunfuñar.

"Vamos chicos, dejen de quejarse! Tenemos nuestra misión" dijo Rin llevándose a Kakashi de una oreja y entrelazando su brazo con el de Obito, obligándolo a caminar.

"Hey! Por qué tengo que ser yo al que le jales la oreja!" fue lo último que escuché de mi equipo antes de volver al papeleo… o al menos así sería si yo fuera un tonto.

"Al menos lo suficiente para no poder arreglar el problema en el que me he metido"

Sonriendo ante la pila de papeles, simplemente hice una seña de mano "Kage bunshin no jutsu!"

Cinco clones de sombra aparecieron y comenzaron a repartir el trabajo de manera equitativa "Recuerden, si alguno de estos es de suma importancia o requiere decisiones definitivas, déjenlo en una fila aparte, lo revisaré en la tarde"

Los clones asintieron y comenzaron su trabajo, mientras que yo me dirigía a ver a mi familia.

Kushina – POV

Mientras caminaba por las calles al lado de mi amiga Mikoto y el pequeño Sasuke, quien intentaba alcanzar a Naruto que se encontraba en mis brazos, para jugar con él, no podía evitar ver cómo la gente saludaba y sonreía al ver mi bebé.

"El pequeño Naruto se ha hecho muy popular, cierto?" preguntó mi amiga con una sonrisa.

"Pensé que tal vez lo detestarían y lo exiliarían por ser un Jinchuriki, pero Minato-kun se encargó de que eso no sucediera" respondí con una enorme sonrisa.

Nos aproximábamos al parque de la aldea, donde ya se encontraba Hitomi esperándonos con la pequeña Hinata en sus brazos. Les diré, esa niña es preciosa, espero que mi Naruto se enamore de ella cuando sean mayores.

No pude evitar soltar una leve risita ante mis propios pensamientos, pues mi imaginación solo lograba crecer exponencialmente a cada segundo.

Mikoto me miró de manera extraña "Otra vez dejando que tu imaginación vuele? No sé por qué te niegas a que nuestros hijos se enamoren…"

Eso simplemente me bajó de mi nube, y una cara de fastidio y asco reemplazó mi sonrisa "No convertirás a mi hijo en un Uke, pervertida."

Esto solo logró que Mikoto soltara una carcajada a todo pulmón, mientras que mi molestia incrementaba.

Al llegar al lado de Hitomi y después de saludarnos, tomamos asiento las tres juntas mientras platicábamos de todo lo que habíamos hecho en esta semana.

"Y han sabido algo de Kyubi-sama?" Preguntó Mikoto.

"Nada, Minato asegura que probablemente lo que sucedió lo dejó agotado, y está descansando en este momento, o probablemente solo pueda hablar con nosotros hasta que Naruto tenga mayor conciencia de sí mismo."

Hitomi sonrió levemente "O tal vez aún se siente responsable por lo que sucedió, a pesar de que nadie lo culpe, o de que muy pocos lo hagan… Casi todos comprenden que si Madara Uchiha está de vuelta, entonces lo sucedido era inevitable."

Asintiendo levemente la cabeza, miré como Naruto observaba a Hinata dormir, para después bostezar y caer dormido nuevamente.

"Muy buenas tardes, hermosas señoras" Una voz totalmente conocida para nosotras nos llamó desde atrás de las bancas.

"Minato, no nos llames señoras, nos haces sentir viejas!" reclamé en un susurro pues no quería despertar a los bebes.

Mi marido solo soltó una pequeña sonrisa y se acercó a mí, rodeó mis hombros con sus brazos y puso su mejilla al lado de la mía, logrando apreciar a nuestro pequeño mientras dormía.

"No puedo creer que lográramos sobrevivir a ese día" dijo Minato mientras acariciaba levemente el cabello de Naruto.

Sonreí al ver a Naruto moverse un poco, intentando acercarse más al calor de la mano de su padre "Yo tampoco, pero intento no pensar en ello y simplemente disfruto el estar viva al lado tuyo y de nuestro pequeño."

Seis años después.

Minato – POV

Ya había pasado mucho tiempo desde aquel suceso tan terrible en la aldea, el pequeño Naruto había crecido mucho, incluso Jiraya-sensei llegó a comentar que probablemente el niño llegaría a ser más grande que yo.

Esperaba que así fuera, amaba verlo crecer cada día que pasaba. Pero así mismo no podía dejar de pensar que algo estaba olvidando, que no había concluido algún asunto pendiente.

En ese instante Mikoto y Fugaku entraron a mi oficina con el pequeño Sasuke siguiéndolos, tomando la mano de Itachi, quien se había vuelto totalmente sobreprotector con su hermano pequeño.

"Fugaku, Mikoto-chan, a que debo el honor de su visita?"

"Nos gustaría que vinieras más tarde al complejo Uchiha, es cumpleaños del pequeño Sasuke y vamos a celebrarlo"

Asentí levemente con una sonrisa al escuchar a Mikoto-chan, Naruto estaría más que encantado de ir a jugar con su amigo. "Ahí estaremos"

Fugaku asintió "Mi esposa ha estado algo insistente con que no estaría mal que nuestros hijos estuvieran en una relación, y estoy seguro que tanto tu como yo sabemos que eso es simple y llanamente imposible"

"Nuestros hijos son hombrecitos hechos y derechos, eso no sucederá, además ya sabes que Kushina-chan ha hecho su misión personal el que Hina-chan y Naruto-chan se vayan encariñando más y más con el paso del tiempo" respondí intentando contener la risa ante la insistencia de Mikoto.

"Bou, ustedes no son divertidos" respondió Mikoto a forma de berrinche.

Ambos padres salieron de la oficina mientras discutían el por qué era mala idea o buena idea una relación entre mi hijo y el pequeño Sasuke… hablando de él, siento que he olvidado algo muy importante, pero no logro recordar qué.

Dejando a mis clones de sombras me retiré de mi oficina para ver a mi esposa y alistarnos. Durante el camino encontré a Hizashi caminando junto a su esposa e hijo.

"Ah Hokage-sama! Un placer encontrarlo, se dirige a ver a su esposa?" preguntó Hizashi con una sonrisa.

"Vamos Hizashi, viejo amigo, sabes que me molesta que me llames de manera tan formal" respondí mientras intentaba ocultar mi rostro, aún me apenaba que mis amigos me llamaran así.

Hizashi simplemente se limitó a reír, mientras que su esposa, Hiromi, sacudía levemente la cabeza de manera reprobatoria "Siento mucho la actitud de mi marido, Minato-san, a veces se comporta como si tuviera la edad de Neji."

"Y Neji se comporta como si tuviera la edad de su padre" terminé la frase soltando una leve carcajada.

Neji simplemente frunció el ceño ante las comparaciones, pero relajó el rostro y preguntó "Minato-sama! Naruto nii-chan irá también a la fiesta de Sasuke?"

Neji había comenzado a ver a Naruto como su hermano pequeño, algo que Kushina y yo apreciábamos totalmente "Claro! Puedes apostarlo, después de todo sabes que tu tía Kushina querrá verlos a ti y a Hina-chan"

"Más a Hinata imouto-chan, sigue teniendo esa idea de que los dos se casaran" Neji simplemente suspiró, definitivamente a veces se comportaba como si tuviera 10 años más de los que debía.

"Cierto, muy cierto, pero creo que es mejor idea que aceptar la propuesta de Mikoto-chan…" al decir esto Neji sintió escalofríos recorrer su cuerpo, pues Mikoto llegó a sugerir un escenario parecido pero con Neji reemplazando a Naruto, solo en el caso de que mi hijo terminara enamorándose de Hina-chan.

"Esa mujer no está bien, debería ponerla bajo el cuidado de Tsunade-san." Dijo el pequeño con un tono de desesperanza que logró hacerme reír a carcajadas.

"Tienes razón Neji, hablaré con ella en su debido tiempo" y después de esa platica con la pequeña familia, me despedí de ellos y continué mi camino.

"Insisto… siento que olvido algo importante… pero qué?"

Restándole importancia, continué mi camino hasta llegar a casa, donde lo primero en recibirme fue un pequeño destello amarillo. "Juraría que aprendió el Hiraishin si no supiera que no sabe moldear chakra"

"Tou-chan! Volviste!" Naruto rápidamente trepó por mi pierna, torso y cuello hasta llegar a mi espalda.

Kushina observaba todo mientras reía a carcajadas "Juraría que en vez de un zorro, es un chango"

Naruto reía junto a su madre mientras que yo simplemente negaba con la cabeza "Tenemos que arreglarnos bien, iremos a casa de Fugaku, hoy es cumpleaños de Sasuke"

"Yaay! Iré a casa de Sasuke!" Naruto se deslizó por mi espalda y salió corriendo a su habitación para prepararse.

"Tiene demasiada energía" dijo Kushina con una sonrisa.

Rodeé su cintura con mis brazos y apoye mi cabeza en su hombro izquierdo "Si no fuera así entonces no sería hijo tuyo"

"Yo no soy hiperactiva!"

Simplemente solté una leve risa "Lo que tú digas amor… lo que tú digas"

Después de arreglarnos nos dirigimos al complejo Uchiha, donde nos encontramos a la familia de Hiashi "Ah Hitomi, Hiashi, es bueno verlos."

Naruto reconoció a la niña que se encontraba a un lado de Hitomi, quien de igual manera había reconocido a mi hijo.

"Hina-chan! Cómo estás?"

"Naru-kun, konbawa!" respondió la pequeña con una sonrisa.

Naruto rápidamente se separó del lado de su madre y corrió a encontrarse con la pequeña "Vayamos a buscar a Sasuke!" dijo tomando su mano y corriendo hacia el patio, mientras que la niña simplemente reía ante la emoción de su amigo.

Kushina por su parte simplemente dejó escapar una risita macabra "Mi plan está funcionando hehehe!"

Hitomi por su parte simplemente sacudió lentamente la cabeza mientras que en sus labios se mostraba una pequeña sonrisa "Eres incorregible, amiga"

"Ya me agradecerás cuando veas a pequeños niños rubios con Byakugan corriendo por ahí" dijo Kushina con una pose de orgullo.

Hiashi por su parte tembló al sentir un escalofrío en la espalda "Espero que no, y si es así, espero que tengan la actitud de Hinata o de Minato, incluso el de mi esposa, pero no creo que Konoha pueda soportar a tantos mini clones de Kushina"

"Hey!" reclamo mi esposa mientras todos soltábamos una carcajada y nos dirigíamos hacia el complejo.

En el lugar se encontraban muchos de los compañeros de clase de los niños, una pequeña escuela creada para hacer que los niños comenzaran a socializar entre sí y que existiera un mejor trabajo en equipo cuando llegaran a la academia ninja.

Quien llamó más mi atención fue una pequeña niña de cabellos rosas quien parecía estar encantada con Sasuke y discutía con una pequeña niña de cabello rubio, probablemente la hija de Inoichi.

"Yo me casaré con Sasuke-kun!"

"Claro que no frente de cartelera! Yo seré quien se case con él!"

Mikoto no podía evitar reír, mientras que Sasuke se ocultaba detrás de su hermano, con una mueca de enfado y un pequeño sonrojo "Odio a las niñas, tienen liendres"

Itachi soltó una carcajada al escuchar lo que su hermano pequeño había dicho, pues era una mentira que él mismo había inventado antes.

"Algo estoy olvidando…"

Sacudí el pensamiento con un movimiento de cabeza y rápidamente me uní a los otros padres de familia.

Y así el día pasó mientras disfrutábamos de la tranquilidad que teníamos.

Unos meses después –

Minato – POV

En las épocas de diciembre, Kumo había intentado secuestrar a la heredera del clan Hyuga, afortunadamente Hiashi logró evitar que se la llevaran, matando al ninja que intentaba llevársela.

Ahora Kumo estaba intentando amenazarnos con una guerra.

"Esto es inaudito Hokage-sama! Tenemos que entregarles a Hiashi!" dijo uno de los miembros del consejo civil.

Hiashi veía todo en silencio pero ciertamente no estaba nada contento.

"No lo haremos, no entregaremos a nadie, quieren guerra? Les daré una guerra! Pero no entregaré a nadie de mi aldea por algo que ellos causaron!"

Danzo Shimura, quien había permanecido callado, decidió dar su opinión "Konoha es la aldea más poderosa entre las naciones elementales… Pero estás seguro que podremos ganar?"

"Vaya, no pensé que vería el día en que te acobardaras, Danzo, pero te aseguro que soy más que capaz de destruir otro ejercito si se atreven a atacarnos" respondí con un poco de arrogancia, sabía que no era bueno, pero si no podía aparentar seguridad, entonces la gente no podría seguirme.

Todos rápidamente asintieron al recordar los sucesos de la Tercera Gran Guerra Ninja, y uno de ellos tuvo la valía de decir "Es verdad, si tenemos a Minato-sama, el hombre que incluso logró domar al Kyubi y hacer que sirviera a Konoha lealmente, entonces no hay nación que nos pueda derrotar"

A pesar de que no me gustaba el tono en el que lo dijo, simplemente dejé las cosas desarrollarse de esa manera, era mejor que hacerles pensar que había un peligro que naturalmente no existía.

Hiashi por su parte se había relajado ante las noticias, no tendría que sacrificarse o a nadie de su clan para evitar guerra, pues los otros clanes y el pueblo estaban dispuestos a protegerse entre ellos, una de las pequeñas semillas que habían brotado el día del ataque del Kyubi… solidaridad.

"Entonces se cierra esta sesión y nos reuniremos de nuevo después de recibir respuesta de Kumo"

Y así todos comenzaron a retirarse, menos Hiashi quien se quedó esperando a que salieran todos "Crees que es lo mejor? Una persona por toda la aldea?"

"No es una simple persona, es una porción de la aldea, y no lo permitiré. Además ya escuchaste a todos."

Hiashi asintió y por primera vez en mucho tiempo lo vi quebrarse "Estuve a punto de condenar a mi hermano, sabiendo que él estaba dispuesto a morir por mí"

"No morirá, y dile a tu clan que el sello no es necesario, nadie tomará nada de Konoha mientras yo viva" le aseguré a mi mejor amigo mientras salía de la habitación.

Naturalmente Kumo no estuvo muy contento, pero sus planes habían sido frustrados totalmente pues no tenían los recursos para una guerra, y estaban conscientes que no lo estarían en varios años.

Así mismo, con ayuda de mi esposa diseñé un sello nuevo para todos los clanes de Konoha, destruía cualquier límite sanguíneo después de la muerte de la persona.

Había algunos detalles que afinar, pero era mejor que el sello del ave enjaulada que proponían los ancianos del clan.

"Y aún no puedo evitar pensar que estoy olvidando algo sumamente importante"

Seis años después

Naruto – POV

Ese día simplemente me levanté de cama con mucha pereza, al menos sería la última semana que pasaría en la academia. Saliendo de mi habitación me dirigí a la cocina, donde se encontraba mi madre sirviendo el desayuno.

"Odio los vegetales…" refunfuñé al ver la tortura que se hacía llamar desayuna.

Mi madre simplemente me dio un ligero golpe en la cabeza "Hina-chan no estará muy contenta si tiene que agacharse para besarte, anda, come tu desayuno para que crezcas como es debido"

Me sonrojé ante ese comentario "Mamá! Sabes que solo somos amigos…"

"Oh vamos hijo, se conocen desde siempre, además no puedes ser tan ciego y distraído, se sonroja cada vez que están juntos!"

Replicó mi madre, y si lo pensaba bien… ella tenía razón, Hina-chan suele sonrojarse demasiado cuando platicamos, pero eso no pasa cuando Sasuke-teme platica con ella.

Dejando que un leve rubor se hiciera presente en mis mejillas, simplemente me dispuse a desayunar sin refunfuñar.

Después de desayunar tomé mis cosas y salí corriendo de casa, en la entrada encontré a papá regando algunas plantas "Nos vemos papá!"

"Ve con cuidado hijo!" fue su respuesta, a lo que simplemente contesté levantando una mano y despidiéndome, pues ya se me hacía tarde.

En el trayecto me encontré a Hinata y Sasuke caminando hacia la escuela "Hey Sasuke-teme! Hina-chan!"

Ambos voltearon a verme, Sasuke sonriendo con un poco de arrogancia mientras que Hinata nuevamente portaba ese sonrojo en sus mejillas y una sonrisa tierna… bueno no soy tan despistado como cree mi madre, solo no noto las cosas a tiempo.

"Ohayou, Naruto-kun"

"Por poco se te hace tarde, perdedor"

"Buenos días Hina-chan, y tú cállate bastardo!"

Tomé la mano de Hinata en la mía comencé a caminar a paso apresurado a la escuela "Vamos Hina-chan, se te pegará lo idiota"

Sasuke simplemente sonrió y encogió los hombros "Si la sigues tocando… entonces si es muy probable"

Hinata simplemente dejó escapar una leve risita mientras que yo hacía coraje.

Unas horas después -

La clase de Iruka parecía un tormento interminable, y de verdad no tenía muchas ganas de escuchar lo que tenía que decir.

"Cachorro… tienes un momento? Aunque no creo que te pierdas de mucho…" la voz que escuché en ese instante la reconocía de hace mucho tiempo, era la voz de Kurama.

Cerré los ojos y rápidamente me encontré en un pequeño bosque, frente a un zorro de un tamaño considerable "Que pasa Kurama-san?"

"Se acerca nuevamente tu cumpleaños, así es que te daré un regalo… de hecho mi padre dejó esto conmigo si la persona adecuada se presentaba…"

Mi confusión era un poco evidente, y solo incrementó al ver al Kyubi poner dos de sus colas cerca de mis ojos, justo en la sien.

"Que estás…aargh!" un dolor inexplicable comenzó a hacerse presente en mi cabeza, era como si mis ojos estuvieran a punto de estallar.

"El regalo que te he dado es muy especial, por ahora no hace mucho, pero con el tiempo descubrirás cuán grande es su poder"

Saliendo de manera abrupta de mi mente, no pude evitar soltar un grito de dolor.

"Naru-kun, estás bien?" La voz de Hinata a mi lado me decía que estaba muy preocupada.

Sasuke se puso de pie y rápidamente puso uno de mis brazos sobre su hombre, con Hina-chan haciendo lo mismo del lado opuesto "Lo llevaremos a la enfermería, Iruka-sensei"

"De acuerdo, pero solo uno puede quedarse"

Salimos del salón con esa advertencia y nos dirigimos hacia la enfermería, al llegar el doctor comenzó a revisar mis ojos y "Sorprendente… esto es algo que no está en el libro de formación académica ninja."

"Quieres decir que no sabes que le pasa a mi mejor amigo?" preguntó Sasuke con un tono peligroso.

"Oh para nada, Uchiha-san, lo que le pasa a Namikaze-san es algo común cuando despiertas un Kekkei Genkai." Las palabras del médico sonaron en mi mente como si fueran eco.

"Que quieres decir con Kekkei Genkai?" pregunté algo extrañado.

El dolor ya se había relajado un poco, debe haber sido cosa de Kurama, así es que rápidamente me dirigí hacia el espejo más cercano y por fin pude observar, en mis ojos podías apreciar un anillo que rodeaba la pupila.

Mirando a Hinata me dí cuenta que ella también estaba muy sorprendida.

"En este instante se encuentra en modo pasivo, lo que quiere decir que no está activado…" La voz de Kurama me sacó del trance en el que me encontraba.

Sasuke simplemente suspiró "Entonces volveré al salón de clases y le informaré a Iruka-sensei."

Asentí de manera ausente, mientras que Hinata examinaba mis ojos "Es una lástima, me gustaban tus ojos azules… N-no! Quiero decir! Son azules y-y aún me gustan! E-Eso tampoco, me refiero a que son distintos a-ah pero me gustan también, a-ah lo que quiero decir…"

Dejé escapar una leve risa y abracé a Hinata logrando que se sonrojara por completo "Gracias Hina-chan"

"…Para activar tus ojos solo debes de enviar chakra a tus ojos mientras que realizas los sellos de mano Dragón – Mono – Perro – Zorro. " Entramos al salón de clases mientras que Kurama me decía esto.

Iruka se acercó a mi "Sasuke me explicó lo que pasó, como te sientes?"

"Mejor, aunque aún me pican los ojos" Seguí el patrón que me enseñó Kurama mientras aplicaba chakra a mis ojos.

"Ahora llama al Rinnegan y despierta el primer nivel de su poder."

"Rinnegan!" al comando de mi voz mi vista comenzó a aclararse, permitiéndome ver con claridad el chakra que circulaba en la habitación.

"Así es que ese es el Rinnegan…" murmuró Iruka apreciando el cambio en mis ojos.

Rápidamente me dirigí a la primera superficie metálica que encontré, y pude apreciar que, mientras mis ojos habían retenido su color azul ahora contenía un ligero tinte morado, y la línea que rodeaba a la pupila se había hecho un poco más gruesa.

Al voltear a ver a mis amigos pude notar que había un chakra extraño emanando del cuello de Sasuke, me acerqué lentamente e hice que se diera la vuelta.

"Oye idiota! Que haces?"

Una de sus fans se acercó a mí con la intención de golpearme y alejarme de Sasuke, pero Hinata intervino antes de que pudiera lograr su objetivo "Ni se te ocurra acercarte a Naru-kun o a Sasuke-san sin su permiso, Haruno-san, o me aseguraré de que no te acerques sin su permiso"

Una gota de sudor frio recorrió la espalda de las presentes mientras que yo seguía analizando el cuello de mi amigo.

"Oye Naruto, piensas respirarme en el cuello todo el día? O me dirás que ocurre?"

Pensando bien en cómo debería decirle esto a mi amigo, me aparté un poco y le pregunté "Itachi te ha jugado alguna broma recientemente? O haz estado cerca de mi padre en los últimos meses?"

"Ninguna de las dos opciones? Por qué lo preguntas, Naruto?" preguntó Itachi con una expresión de confusión.

Mientras tanto con Minato –

"Un momento… ahora recuerdo…"

Naruto –

"Es porque hay un sello en tu cuello."

Sasuke tocó su espalda y preguntó "Un sello?"

Minato –

"La cosa importante que debía decirle a Fugaku! El sello de broma que nunca pude quitarle a Sasuke!"

Naruto –

"Quieres que intente retirarlo?"

Sasuke asintió y le dio nuevamente la espalda a su amigo mientras que Iruka apreciaba las habilidades lo que hacíamos.

Minato –

"Ese sello oculta la apariencia de Sasuke a cualquiera que no tenga entrenamiento con sellos y un doujutsu, es por eso que el Sharingan no lo podría detectar si no sabía nada de sellos…"

"…Ese sello oculta la verdad de Sasuke… y es que él…"

Naruto –

Me dispuse a retirar el sello y al hacerlo, una cantidad pequeña de chakra se dispersó por la habitación y un poco de humo cubrió a Sasuke, algo parecido a deshacer una transformación.

"Pero que demo…"

Sasuke volteó a verme extrañado… o al menos la persona que yo creía que era Sasuke.

"Que pasa Naruto… huh? Que le pasa a mi voz? Por qué suena un poco más aguda…" rápidamente comenzó a notar ciertos cambios en su cuerpo.

"Me siento más liviano, y siento algo molesto en el pecho…" comenzó a manosearse haciendo que algunas chicas se sonrojaran mientras que otras salían del salón llorando desconsoladamente.

"Que es esto…" Dijo presionando su pecho… "…suave?" miró hacia abajo y notó que había algo que no debería estar ahí "Esto… se parece un poco a… Kyaaaaa!"

En un momento de pánico Sasuke introdujo una mano en sus pantalones, como quien busca una moneda en un bolsillo "No está! Que sucedió! Soy… soy…"

Minato – Sasuke – Al mismo tiempo.

"…Es una chica!"

"…Soy una chica!"

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