Disclaimer: Esta historia no nos pertenece, es de una gran autora llamada LyricalKris y los personajes ya saben son de la gran Stephenie Meyer así que a nosotras solo nos toca la parte de la traducción. DISFRUTEN! :D


Capítulo 1: Mala Cita.

La cena transcurría muy bien, sorprendentemente. Al menos, Bella Swan no la odiaba tanto como esperaba.

Su cita, Mike Newton, era suficientemente agradable –enérgico, pero agradable –Era moderadamente atractivo y medianamente interesante. Ella no estaba particularmente intrigada pero tampoco estaba aburrida.

-Todo esto es un poco extraño, para ser honesta –respondió a una de sus preguntas –No soy gran fanática de las citas por internet –En realidad ella no era gran fanática del periodo de citas, pero esa era otra historia. –Es extraño. Sin ofender.

El hombre rubio sacudió su mano.

-No hay problema. Nunca he salido con una de mis chicas de las citas online. Será una nueva experiencia también para mí.

Extraño, pensó Bella, parpadeando porque sus palabras no tenían sentido alguno. Pero antes de que tuviera tiempo para pensar en su elección de palabras extrañas, Mike empezó a divagar, discutir las diferentes encuestas del sitio en el que se habían conocido. Bella había pasado más noches de lo que quería recordar tratando de descifrar los algoritmos - cómo afirma el sitio para que coincida con la gente basada en intereses comunes.

Su madre siempre le había dicho que las buenas relaciones sobre todo debían ser basadas en intereses en comunes.

-Mira. Incluso en La Bella Durmiente y su Príncipe estaban interesados en bailar con completos extraños en los bosques. A veces es todo lo que se necesita, ¡pequeña chicharito!

Pero, su madre había añadido, el amor toma un brillo que nunca podría ser explicado con lógica.

Bella seguía recordando la voz de su madre en su oído como cuando leían cuentos de hadas en la cama. Su corazón dio un doloroso vuelco en su pecho, y ella rápidamente eliminó sus pensamientos acerca de las creativas historias de su madre. Ahora no era momento para ese dolor en particular.

-Se ahorra tanto trabajo, ¿no es así? –Mike preguntó, inclinándose sobre la mesa ligeramente.

"¿Qué es eso?" ¿De qué estaban hablando? Bella se apresuró a recordar lo último que dijo.

"Bueno, sabemos que estamos de acuerdo en muchas cosas. Tenemos mucho en común".

Sus fríos ojos azules eran tan serios, ¿qué más podría hacer Bella a parte sonreír y asentir? Este chico es un poco extraño.

Bella por dentro se amonestó por su pensamiento no tan caritativo. Todo el mundo era un poco raro, ¿no? Le había prometido a Rose que le daría a este chico una oportunidad.

Por otra parte, conseguiría quitarse a su amiga de encima por unos cinco años o más. Bella seguía intentando decirle a Rosalie que ella no necesitaba a otro para ser feliz. Eso, al parecer, nunca le importó a su amiga.

Aún así, mientras que Bella no podía decir que se la estaba pasando mal, tampoco podía decir que estaba impresionada.

Rose a veces se lamentaba de que Bella estaba hastiada de enamorarse sin alguna razón. En realidad, eso estaba realmente lejos de la verdad. Si tan sólo fuera porque la voz de su madre nunca estaba lejos, Bella creía que la magia del amor existía. Pero por mucho que su madre le había inculcado una arraigada creencia por ideas fantasiosas, su padre se había mantenido firme en su realidad.

Ella vio el mundo a través de los ojos de sus padres. Como su madre, ella vio el poder y la magia del amor, la dureza del espíritu humano, el poder de las cosas místicas. Pero la firme empuñadura de su padre en la realidad significaba que ella también sabía que el amor no detuvo al mundo de ser tan real. Las personas aun serían imperfectas. El amor no podría evitar que la gente cometa errores o sea herida. Y a veces, los chicos buenos iban a perder.

La vida no era mágica ni tenía finales felices.

Así que Bella simplemente prefirió no vivir con la cabeza en las nubes, soñando como La Bella Durmiente que un día la persona perfecta vendría por ella y la rescataría de un largo sueño. Ella tenía otras aspiraciones además del amor, y su vida era feliz aunque su cama estaba vacía.

Tal vez era una tontería, pero Bella no tenía el deseo de amamantar una tibia conexión por el simple hecho de no estar sola.

Cuando su cita con Mike se terminó, ella tenía toda la intención de desearle una buena noche y nunca verlo de nuevo. Esperaba qué el no quisiera algo más, que si sentía el deseo de pedirle otra cita, esperaría hasta que ellos estuvieran a salvo detrás de las pantallas de computadora. Sería menos raro y más fácil decepcionarlo educadamente cuando no estuvieran cara a cara.

Fuera del restaurante, Mike se giró hacia ella, tomando sus manos entre las de él. Ella se tensó, estaba a punto de quitar sus manos, pero él las sostuvo en un agarre alarmantemente fuerte. Sus ojos se clavaron en él, y Bella estaba aturdida momentáneamente por su expresión absolutamente serena. Su sonrisa era suave.

De repente, Bella se sentía tan completamente superada por el miedo, ella se congeló por completo, sus pensamientos era demasiado confusos para procesar el por qué de pronto quería salir corriendo lejos y rápido. Se quedó quieta mientras él se inclinó, rozando su mejilla con sus labios.

-Nos veremos muy pronto. Muy, muy pronto, hermosa Bella –él susurró sobre su oído.

Y la dejo ir, deseándole una buena noche y alejándose, silbando, sin mirar atrás.

A Bella le tomó algunos segundos darse cuenta que estaba temblando.

Se frotó la parte de atrás de su cuello tímidamente, confundida del por qué estaba tan afectada. Ridículamente, las lágrimas inundaron sus ojos, y pasó un minuto antes de que recordara como caminar. Se tambaleó hacia su coche como si estuviera borracha.

Mientras se dirigía a casa, Bella no podía dejar de temblar ante el sentimiento que la había superado. Su piel se erizó, sus pensamientos estaban al borde de una teñida paranoia.

Pero seguramente estaba siendo ridícula. No era como si Mike la hubiera lastimado. ¡Por el amor de Dios! ¡Sólo le había besado la mejilla!

¿Por qué demonios estaba tan descolocada?

Y ella seguía estándolo. Se sentía como si su carne se arrastrara, como si estuviera cubierta de alguna baba invisible que la hacía sentirse sucia. Fue la cosa más lejanamente agradable, esa sensación.

En el momento en que se detuvo en su pequeña casa, ella se había convencido de que era sólo una caricia. Mike no había hecho nada malo, y nunca tendría que volver a verlo, además. Sea lo que fuera, era una reacción exagerada a la mínima invasión de Mike en la burbuja de su espacio personal.

Respirando profundo, salió del carro. A pesar de que nunca antes había tenido miedo de la oscuridad del bosque que rodeaba su casa, parecía extrañamente siniestro y ahora ella miraba a su alrededor con nerviosismo, su mente hacía formas aterradoras de las sombras oscuras.

Era todo lo que podía hacer para contenerse de lanzarse a su puerta como un niño huyendo de un trueno. Se obligó a respirar hondo. Dio un paso, decidida a mantener su ritmo a un paso normal, sólo para colocar una mano sobre su boca, ahogando un grito cuando oyó un disturbio en los arbustos.

Es sólo un gato. Mantén el jodido control, Swan.

Sacudiendo la cabeza, sacó su teléfono. Ella envió a Rose un texto rápido, siendo cortante.

La cita estuvo bien. Casa. Sí, sola. Nos vemos el viernes.

Justo cuando estaba poniendo el teléfono en el bolso, y comenzando a buscar las llaves, oyó otro crujido y el inconfundible sonido de las pisadas rápidas en una fracción de segundo antes de que se encontrara a sí misma con sus brazos pegados a los costados. Ella jadeó, sintiendo un pinchazo y un ardor en su cuello. Justo cuando se preparaba para gritar, una mano surgió, agarrando rudamente su boca.

-Está bien. Cálmate. Sólo respira profundo.

La sangre de Bella se le heló cuando reconoció la voz.

Mike.

Ella se agitó violentamente, tratando desesperadamente de soltar los brazos de Mike de su entorno.

-Cálmate, Bella. Tómalo con calma, chica dulce. Vas a tener sueño en tan sólo unos segundos. Sólo relájate. No luches.

Ella luchó. Luchó ferozmente tanto como podía. Él tenía razón. Lo que había atrapado su cuello ardía en sus venas, pero pudo sentir su cuerpo cada vez más liviano. Ella sacudió la cabeza con fuerza, sus gritos amortiguados contra la mano de él.

-Eso es. Sí. Estás bien, chica dulce. Va a estar bien. Te tengo ahora –continuó arrullándola absurdamente cuando sus sacudidas espasmódicas disminuyeron. Su visión se estaba difuminando alrededor de los bordes. Ella estaba cayendo - cayendo en sus brazos, hacia el sucio suelo del bosque que rodeaba su casa.

¿Cuándo se había alejado tanto del camino?

Bella luchó, pero sus párpados se sentían tan pesados. Los pensamientos giraban desconectados en la cabeza. Incluso su pánico se estaba desvaneciendo. Todo se estaba desvaneciendo.

Ella estaba en el suelo y él estaba tocando su rostro. Podía ver sus gélidos ojos azules. Eran tan tranquilos. Parecía malo. Tan malo.

-Tú y yo, muchacha Bella. Vamos a pasar un buen rato juntos. Ya lo verás. Tú eres la única. Creo que realmente eres la única.

Quería gritar su terror, pero su lengua se sentía demasiado gruesa en la boca. El sonido salió más como un gemido.

El desenfoque invadió su visión y todo se volvió negro.


Que les pareció? A que no está interesante?! Lo amaron? Lo odiaron?

Edward aparecerá en el siguiente cap y veremos cómo le va a Bella así que solo espérenlo!

Dejen sus reviews y díganme qué les pareció

Pasen un bonito día y les vaya todo bien

Kisses and huggies from Emo. and the other girls :D