¡Hola a los antiguos y nuevos lectores!

Lamento que el final de esta historia haya tardado mas de lo esperado, pero ya llego el capitulo final espero que sea de tu agrado.

¡Gracias por los reviews!


Cuando la familia Jaeger llego a su hogar no esperaban encontrar al primogénito de la familia besándose con Levi. Antes de pedir una explicación Carla y Grisha debían evitar que Mikasa atacara a Rivaille mientras ellos sostenían a su hija, Eren era el escudo humano de Rivaille; después de que Mikasa se cansó de forcejear desistió en su ataque, Carla le pidió que subiera a su habitación mientras ellos hablaban, pero ella insistía en quedarse porque tenía el derecho de escuchar sobre la relación de Eren y Rivaille.

—Bien te quedaras —se resignó Carla—, pero con la condición de que estés en completo silencio y que te comportes, ¿de acuerdo?

—Sí, madre. —respondió Mikasa regresando a la postura de una señorita elegante.

—Ahora pasemos a la sala para poder hablar cómodamente —Grisha señalo el camino a la sala—. Eren nadie lastimara a Rivaille así que relájate.

"¿Rivaille? ¿Ellos saben mi verdadero nombre?" se preguntó mientras seguía detrás de Eren, no necesitaba protección, pero Eren por reflejo lo protegió.

Eren se relajó y siguió a su familia a la sala en silencio siempre mirando con cautela a Mikasa quería a su hermana, pero su sobreprotección a veces lo hostigaba. Todos estaban reunidos en la sala, Carla y Grisha sentados en un mismo sillón y a su lado estaba Mikasa sentada en un sillón individual, frente a ellos estaban Eren y Rivaille sentados en un mismo sillón al igual que los padres de Eren.

—Quiero agradecerles por lo que hicieron por mi madre —Rivaille inclino la cabeza—. Sin su ayuda ahora ella estaría…

—No tienes por qué agradecer —hablo Carla y Rivaille levanto la cabeza—. Ella es mi amiga y deseo que recupere su salud.

—Aun así, gracias por todo. —miro a la pareja Jaeger y sonrió.

—Habría sido mejor para todos se hubieras sido sincero desde el principio, Rivaille —agrego Grisha—. Puedes confiar en las personas y apoyarte en ellos.

—Él tiene razón si Sara no me hubiera llamado yo no sabría de toda esta situación.

—No pensé que ella la llamaría a usted. —dijo apenado—. Nunca puedo anticipar sus acciones.

—En esa llamada aparte de explicar la situación ella pedía que velemos por tu seguridad —hablo Eren y lo tomo de la mano—. Pedía que no te dejáramos solo.

Rivaille no podía creer que su madre incluso estando en un estado de salud tan delicado su preocupación era el, a veces se sorprendía que tan lejos podía llegar su madre por amor a su único hijo.

—La señora Sara nos dijo que eres un hombre —Mikasa rompió su silencio y recibió la mira de reproche de Carla—. Tu nombre es Rivaille y tu apodo es Levi.

Por alguna razón Rivaille sintió que lo estaban regañando era gracioso porque Mikasa era menor que él y le estaba hablando como una madre que atrapa a su hijo pequeño en una travesura.

—No te dejes llevar por las apariencias, Mikasa también ayudo —Carla dio unas palmaditas en la cabeza a su hija—Ella casi estrangula a tu padre, Rivaille.

—Los cobardes deben ser castigados. Además, no podía creer que dejara a su esposa de esa manera. —frunció el ceño recordando las excusas de aquel hombre para evitar regresar al hospital.

—Gracias, Mikasa.

No podía creer que estaba agradeciendo a la persona que menos le agradaba de esta casa, pero se sorprendió que ella también apoyara para convencer a Alejandro de regresar. La familia Jaeger era el tipo de familia que daba todo de sí para alcanzar su objetivo, era lógico que Eren siempre luchara para alcanzar su meta y salir victorioso.

—Ahora es turno de hablar sobre ustedes dos —Carla los señalo con el dedo y mostro una sonrisa pícara—. No crean que nos olvidamos de ustedes.

Eren y Rivaille se pusieron nervioso y se miraron buscando apoyo en el otro ambos sonrieron y devolvieron la mirada a Carla y Grisha, pero ahora se veían seguros y confiados.

—Amo a Levi.

—Y yo amo a Eren.

—Sé que dirán que soy joven para amar a alguien, pero mis sentimientos son sinceros.

—Y también que soy mayor que Eren…

—Nueve años para ser exactos. —aclaro Mikasa.

—Y en ese tiempo nunca sentí lo que siento por su hijo —hablo con firmeza—. Cuando estoy a su lado solo puedo sentir paz y una inmensa alegría.

Carla y Grisha se quedaron en silencio era como si tomaran un momento para analizar lo que acaban de escuchar, después de unos minutos ellos sonrieron. Al ver a la pareja sonreír Eren y Rivaille suspiraron aliviados, Mikasa también suspiro y miro con firmeza a Rivaille.

—Si le rompes el corazón yo romperé todos los huesos de tu cuerpo —lo amenazo—. Lo juro por mi hermano.

—Por Dios, Mikasa… —suspiro Eren.

—Esa es mi condición para aceptarlo como tu novio.

—Nunca lo lastimaría —sonrió Rivaille—. Aunque tiene corazón de pollo…

—Que vergüenza no digas eso, Levi.

—En eso te doy la razón. —asintió Mikasa.

—Mikasa… —miro a su hermana—, para no llevarse bien ustedes se parecen bastante.

—¡No es cierto! —gritaron Rivaille y Mikasa al mismo tiempo.

Todos rieron ante la cara de indignación de Rivaille y Mikasa que lucían avergonzados al ser comparador, pero era cierto ambos veían a Eren como alguien que debe ser cuidado y protegido de todo aquel que quiera lastimarlo.

—Levi solo te pido que cuides a mi querido hijo. —hablo Carla con una voz maternal.

—Por supuesto.

—Ámense, cuídense y valórense —agrego Grisha—. Tener a alguien a quien amar para toda la vida es algo maravilloso.

Grisha tomo la mano de Carla, ella en respuesta se recostó en el hombre de su esposo ambos anhelaban que sus hijos encontraran a alguien que los amara con todo su corazón, así como ellos se habían amado por más de diez años y seguirían estando al lado del otro hasta el final. Ahora estaban seguros que Eren ya había encontrado el amor de su vida.

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Ya había pasado un mes desde que Rivaille confeso su amor a Eren, y él no podía dejar de pensar que ahora todo era tranquilidad era maravilloso poder vivir sin tener dudas o temores. Las vacaciones de otoño de Rivaille habían llegado hace una semana y ahora podía pasar tiempo con su madre que aún estaba internada en el hospital y Eren que seguía atrapado en sus clases de la secundaria. Rivaille disfrutaba de caminar hacia la casa de Eren, le gustaba ver la caída de las hojas de los arboles era un paisaje precioso, sin ninguna duda el otoño era se estación favorita del año. Toco la puerta de la casa Jaeger y Petra lo recibió como siempre lo hacía con una sonrisa y un cálido "Bienvenido".

—Hola, Petra.

—Hola, Levi —sonrió—. Pasa el joven amo te está esperando en la biblioteca.

—Gracias.

—Por cierto, debes abrigarte más a veces la temperatura baja y hace mucho frio.

Rivaille llevaba puesto una camisa crema con un estampado de cuadros, un jean verde oscuro y un abrigo gris de lana para él era suficiente, pero para Petra no era suficiente abrigo para el otoño ella solía tratarlo como a un niño a pesar que tenían casi la misma edad.

—Estoy bien, pero igual gracias por el consejo.

—Ve con el joven amo —señalo la dirección, aunque Rivaille ya sabía el camino—. Les llevare té y galletas en unos minutos.

Ella fue hacia la cocina y Rivaille hacia la biblioteca encontró a Eren recostado en la alfombra tomando una siesta, llevaba puesto un suéter azul grisáceo de lana y uno jean blanco, se había quitado las zapatillas para estar más cómodo, Rivaille se quitó sus zapatos negros para poder acercarse sin hacer ruido, se arrodillo y le dio un beso en la frente a Eren.

—Hora de despertar, niño.

—¿Levi? —abrió los ojos y se encontró con la mirada de Rivaille—. Ya somos novios así que deja de llamarme niño. No te gustaría que los demás digan que sales con un niño.

—Los adultos no toman siestas en la tarde.

—Que triste.

Rivaille se recostó al lado de Eren y apoyo su cabeza en el brazo de Eren, ambos se acurrucaron uno con el otro se sentía bien estar juntos.

—¿Cómo está tu madre?

—Mucho mejor le darán el alta pasado mañana —sonrió—. Ella desea poder tener una cena con todos nosotros.

—Entonces comenzare con los preparativos para una cena especial para ella.

—De seguro Hanji querrá venir —suspiro resignado—. Ella está emocionada por nosotros.

—Es tu mejor amiga así que no veo porque no pueda venir.

—Tus padres se asustarán.

—Invitare a Armin, estoy seguro que ellos se llevarán de muy bien, ambos son mentes brillantes.

—Aun así, tengo el presentimiento que esa cena será un desastre.

—Sera un divertido desastre. —Eren y Rivaille comenzaron a reír tratando de que no hacer mucho ruido, pero era difícil contenerse.

Ambos rieron al imaginar todo lo que pueda ocurrir al juntar a sus familias y amigos eran una combinación disparatada, pero estaban seguros que sería una cena que nadie olvidaría. Deseaban que momentos como estos recostados en la alfombra riendo fueran eternos, que la felicidad que sentían los acompañara hasta el final de sus vidas.


¡Gracias por seguir esta linda historia!

Como muestra de agradecimiento por haber llegado hasta aquí conmigo el Spin-off de A su servicio: Mahō Shōjo Special Operations ya esta publicado. Si deseas leer una historia badass sobre Levi maid entonces ese fic es lo que estas buscando. ;D