Como no pillara estas indirectas, definitivamente iba a asesinarlo, y más teniendo en cuenta de que me estaba jugando los huevos (literalmente, por sus jodidas patadas) al decirle tales cosas. Empezaba a sentirme más patético que en toda mi existencia por lo desesperado que parecía, joder.

Pero venga, empezábamos con la fase dos: las indirectas vulgares.

Esta vez estábamos viendo cualquier mierda que echaban por la tele, ni siquiera sabía cómo se llamaba ese programa. La cuestión es que estábamos abrazados en el sofá, él rodeándome la cintura y yo rodeándole los hombros. Estando tan pegados era la ocasión adecuada. Giré la cabeza hacia él, besándole el cabello para luego bajar mi boca hasta su oreja, susurrándole.

-Is it hot in here or is it just you?-

-Ngh, ¿calor? Y-yo estoy bien.—Dijo levantando la vista hacia mí, y deshaciendo el abrazo para darme espacio.

Vale, empezábamos mal.

-No, espera.—Volví a acercarle a mí abrazando su cintura, y poniendo la sonrisa más seductora que podía. Vale, esta era un poco "fuerte" para su gusto, pero por lo menos era más directa que la anterior.-I'm an… i'm an astronaut and my next mission is to explore Uranus.

Agh, p-pero Urano no pu-uede explorarse, n-no es ack rocoso! ¡Además i-ir al espacio ngh es muy pe-peligroso! ¡No quie-ero que agh te mueras, Craig!—

Ya no sabría decir si Tweek era demasiado inocente, o directamente gilipollas. Paciencia, Tucker, paciencia.


Perfecto, vislumbraba otra oportunidad perfecta de cortejo. Tweek vino al instituto con una camisa nueva. No era muy diferente a las que solía llevar, pero esta todavía no estaba manchada de café, era de un color más clarito, y no le quedaba tan holgada. Eso sí, los botones los llevaba mal abrochados igualmente.

Como fuera, enseguida me acerqué a él y le di una intencionada mirada de arriba abajo, soltando un silbido.

-Baby, you're as hot as the bottom of my laptop.-

El imbécil ni siquiera reparó en que le estaba halagando.-Pero Cr-Craig, tú no ngh ti-ienes ordenador portátil. ¿Te ha-has comprado ack uno?—


A la mierda, ¡a la mierda! Las sutiles no funcionaban con Tweek, así que me la jugaría y le diría una indirecta directa, y como no la entendiera, ya sí que me suicidaba o algo.

Nada más entrar en mi casa y cerrar la puerta de la entrada, le acorralé entre esta y mi cuerpo, abalanzándome sobre sus labios sin ningún rodeo, devorándolos tan apasionadamente como sabía. Joder, encima los jadeos que daba Tweek no ayudaban en nada a controlar mis alborotadas hormonas.

Cuando rompimos el beso por falta de aire, volví a poner mi mirada y sonrisa seductora, viendo el color de sus mejillas. Sin duda, el momento perfecto para decirlo.

-Let me slip into something more comfortable… Like your anus.-

-…-

Vale, aquello sí que lo había entendido. No, no lo supe por el silencio, sino por la patada en los huevos que recibí, para luego verlo abrir la puerta y echarse a correr como si los supuestos gnomos le persiguieran.

-C-cabrón…-Como volviera a darme una de esas patadas, seguro que me quedaba estéril.


Después de ese estrepitoso fracaso, no me habló durante un día entero, y eso que me pasé pidiéndole perdón a cada minuto. Reconocía que, analizándolo fríamente, esa frase había sido una burrada bestial, pero coño, tampoco tenía que haberme dado una patada ahí. Como fuera, mi orgullo ya se había ido a la mierda desde que este plan empezó, así que poco me importaba implorar su perdón.

No sé si fue por pena, porque ya estaba hasta las narices de mí, o porque el amor que me tiene es muy grande, pero conseguí que me perdonara. Claro está que dejé lo de las fracesitas por un tiempo, concretamente por una semana.

Pero ya era tiempo que volver al ataque.

Esta vez habíamos quedado en su casa, y como estábamos hasta los cojones de hacer deberes nos pusimos a jugar a cartas un rato. Y ahí fue cuando reparé en su cama, y se me vino la frase ideal.

-Nice bed. Can we break it?-

-¡Claro que n-no! ¿Dónde ack do-ormiré si la rompemos? ¡Agh, no, m-más importante! ¿Po-or qué quieres ngh romperla?—

-…Por nada, Tweekers. Era una broma.—Joder, pues tan ideal no era. Puta madre.

-Sigues s-sin ack saber hacer b-bromas.—


Hasta los huevos, estaba hasta los mismísimos huevos de esta situación tan desesperante. Ni las frases sexuales sutiles funcionaban, y por supuesto no volví a intentar decirle alguna indirecta directa; no quería volver a pasar un día entero cojeando. Pero coño, quizá estaba ahí el problema… Quizá debería decirle alguna frase de esas, pero menos vulgar. Con un toque de humor, sí. Y tenía la… bueno, no volvería a decir cosas como "idea, perfecta, genial", porque las otras veces resultaron todo lo contrario. Mejor no celebraba antes de tiempo.

Pues ahí estábamos: hora del recreo, Tweek a mi lado con su termo, Clyde haciendo el gilipollas, y Token intentando mantener la paciencia. Así que aprovechando que no nos prestaban atención, me acerqué más al rubio, tocándole el hombro para que dejara de beber y me prestara atención. Heh, ahora no podría darme ninguna patada en las bolas, ya que estábamos sentados.

-Do you play Pokemon? 'Cause I want to throw my balls at you.-

Se me quedó mirando sin parpadear, como analizando mis palabras. ¿Había dado resultado?-¡Agh, eres un p-pervertido!—Me tiró el termo a la cabeza y fue a esconderse detrás de Token, que junto a Clyde me miraban sin entender nada.

Encima cuando Tweek les explicó lo que le había dicho, me echaron bronca. ¿De qué cojones iban? La madre que los parió a todos.


Juraba por Dios, Buda, y quién coño fuera, que este sería mi último intento. De hecho ya no me quedaban más frases, y pasaba de volver a pedirle ayuda al jodido de McCormick. Estaba claro que sus consejos nunca funcionaban.

Era viernes por la tarde, y acompañaba a Tweek a su casa. Mañana no teníamos clase, así que si mi siguiente y última indirecta funcionaba, dormiríamos juntos. Aunque ya habíamos dormido en la misma cama en otras ocasiones, quizá esta ocasión sería especial, con un poco de suerte.

Primeramente le di un beso en la mejilla, y como quien no quiere la cosa, lo dejé caer:-There's something wrong with my bed. You're not in it.-

-So-solo volveré a ngh dormir contigo si p-prometes no mete-erme mano ack como la última vez.—Me miró recriminatoriamente. Sí, para qué negarlo, lo que decía es verdad. Recuerdo perfectamente cómo prefirió dormir en el suelo antes que volver a la cama conmigo, el maldito frígido que ni siquiera dejaba que le acariciara el trasero.

-…Vale.—Mascullé, rindiéndome. Por lo menos me permitiría dormir con él; ni de coña lo diría en voz alta, pero dormir con Tweek, tenerle abrazado toda la noche de una manera tan íntima, es una de las cosas que más me gustan en este mundo.

Y sí, señoras y señores… Mi abstinencia, sigue su curso y sin señales de que vaya a acabar pronto. Al final se me pondrá el brazo derecho como el de un jodido tenista.


Naru here;

Oh Gosh, no pude evitar escribir una tontería como esta. Hm, me salió mejor de lo que me esperaba en un principio, so, decidí subirlo para ver si hago reír a alguien(?. Las frases no son mías, obviamente, pero os aseguro que me apuntaré algunas, a ver si tengo más suerte que Tucker.

Espero que guste al menos un poco. See ya~