¡Buenas! Bueno, la idea de éste fic me vino nada más ver la Film Z, será un LuNa y un ZoRo (ésta pareja será el tema principal del fic). Espero que os guste y que me deis vuestras opiniones ;3

La historia no será igual que la peli, el concepto es el mismo, pero hay partes en las que cambia ;)

Oh y una cosa más, quiero decicarle el fic a Aiko Natssume por regalo de cumpleaños, aunque ya sea muy tarde ^^

Disclaimer: One Piece y todos sus personajes pertenecen a Eiichiro Oda ^^

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Todo había sucedido tan de repente que ni Nami, Robin o Franky habían tenido tiempo de asimilarlo.

La navegante estaba tomándose un zumo de naranja tumbada en la hamaca mientras seguía mirando el extraño movimiento de una de las esferas del Log Pose.

-Ah…- suspiró- espero que Luffy no nos meta en problemas en la isla a la que vamos.

Robin sonrió ante las palabras de Nami mientras regaba sus plantas.

-Yo creo que ésta tripulación es conocida por los problemas que causa casi siempre, Nami; ¿o no?

-Tienes razón Robin- Nami sonrió- no creo que llegue ningún día en el que Sanji-kun, Zoro y Luffy no se metan en problemas.

-¡Aaaaaaaaaw!- Franky hizo su famosa pose- ¡Somos la súúúúperrrrr tripulación!

Oyeron un gran estrépito proveniente de la cocina.

-¿Pero qué-?- Nami se incorporó rápidamente.

Justo en ése momento la puerta del comedor estalló en pedazos y Chopper, Usopp y Brook salieron disparados contra la barandilla.

Robin bajó las escaleras corriendo a donde estaban Franky y Nami y se situó al lado de ésta.

Un barco mucho más grande que el Sunny chocó contra éste, haciendo que se tambalearan. ¿Cuándo había llegado aquí? ¿Y todos los demás que los tenían rodeados?

Dos figuras saltaron del mayor barco a la cubierta del Thousand Sunny.

Una de las figuras era una mujer de pelo azul oscuro y ojos granates; vestía una capa azul, camisa violeta y pantalones vaqueros cortos. Mientras que su compañero vestía de una forma totalmente estrafalaria; con ese atuendo con el que parecía más un ninja okama que lo que fuera que era.

Robin frunció el ceño.

-¡Soy una vicealmirante de la Nueva Marina, Ain!- dijo la mujer- Estamos confiscando éste barco pirata; no se resistan, solo acortarán sus vidas.

La arqueóloga y la navegante se miraron entre sí.

-¡Aw! ¡Aw! ¡No hay ningún pirata que se resista cuando le dicen que no haga algo!- el ciborg se lanzó contra el hombre para asestarle un puñetazo.

Chopper, Brook y Usopp contemplaban la escena desde arriba; el pequeño reno y el esqueleto temblaban.

-¡Incluso nosotros hemos comenzado a atacar!- gritó Usopp sin apartar la vista.

El hombre esquivó el puño de Franky saltándolo por encima.

-¿Eh…?- el carpintero se dio la vuelta.

-¡Mosa~! ¡Mosa~!- empezó a hacer un extraño baile con las manos.

En el lugar en el que estaba Franky, comenzaron a salir unas enredaderas del césped, que empezaron a cubrirle hasta el pecho.

-¿Qué demonios es esto?- exclamó.

Nami contempló todo con los ojos como platos, había cogido su Clima Tact y lo empuñaba con ambas manos.

-Ése es…

-¡Un usuario de una Akuma No Mi!- acabó Robin.

Franky empezó a forcejear con las plantas.

-Habilidad Mosa Mosa No Mi- el hombre se dio la vuelta para mirar a las dos mujeres- ¡La danza Mosa Mosa puede controlar cada planta que hay!- se puso a hacer poses extrañas.

La ojiazul vio por el rabillo del ojo una figura que se lanzaba contra su amiga.

-¡Nami!- advirtió Robin a la navegante al ver cómo Ain se lanzaba hacia ella con dos cuchillos en mano.

Ésta paró los golpes con su Clima Tact antes de que la ensartara.

-¡Gracias, Robin!- agradeció mientras paraba todas las estocadas que la mujer le lanzaba.

Robin por su parte se colocó en frente del hombre y puso sus brazos en "X".

-Dos Fleur- su objetivo era conseguir que dos brazos salieran de los hombros del poseedor de la Mosa Mosa No Mi, pero antes de que se diera cuenta él había desaparecido y sus brazos habían aparecido en Franky.

-¿Qué…?- exclamó sorprendida.

Se giró ciento ochenta grados justo cuando el hombre aparecía subido a la barandilla del barco e intentó atraparle de nuevo, pero volvió a fallar.

-¡Mosa! ¡Mosa! ¡Mosa! ¡Mosa!- exclamaba el hombre cada vez que desaparecía.

-¡Es tan rápido que no puedo establecer un objetivo!- Robin frunció el ceño.

-¡Mosa, mosa, mosa~! ¡Mosa~! ¡Mosa~!- empezó a bailar encima del ciborg y las plantas comenzaron a crecer más aún hasta que le cubrieron la nariz y la boca.

-No puedo respirar…- dijo Franky.

-¡Mosa! ¡Mosa! ¡Mosa! ¡Mosa!- continuó él.

Usopp se alarmó.

-¡Con cuidado!- exclamó.

Brook y Chopper saltaron a la cubierta; Usopp les siguió segundos después.

-¡No vengáis!- les advirtió Nami.

Pero fue demasiado tarde. Nada más los tres tocaron el suelo, el nakama de Ain apareció al lado de ellos.

-¡Mosa~! ¡Mosa~!- más enredaderas comenzaron a crecer en el lugar donde éstos se encontraban, agarrándoles las piernas, brazos y extremidades.

-¡¿Qué es est-?!- Usopp intentaba liberar sus piernas, pero le resultó imposible.

-¡Alto!- exclamó Chopper.

-¡Mosa, mosa, mosa~!- el hombre se tiró de un pañuelo que llevaba en el cuello, para que las plantas crecieran más rápidas, más fuertes y más anchas.

-¡A-aaaahh!- exclamaron Chopper y Usopp al estar totalmente indefensos.

-¡No! ¡No! ¡No! ¡No!- gritaba Brook.- ¡Yohoooooo!

Mientras, la pelea de Nami y Ain continuaba por la cubierta.

La navegante deshizo su arma en tres pedazos y apuntó con uno de ellos a la mujer.

-¡Gust Sword!- de la punta de la vara de metal salió una burbuja de jabón que se convirtió en una ráfaga de aire muy potente.

Ain lo esquivó agachándose.

-¡Modo modo!- nada más pronunció esas palabras, una luz parecida a un líquido espeso rosa, apareció en su mano y tocó a Nami con ello.

La navegante se quedó inmóvil mientras una luz rosada la envolvía. Cayó al suelo y despareció.

-¡Nami!- gritó Chopper.

Mientras tanto, Robin liberó a Franky de las ramas que estaban en su cara para que pudiese respirar. Al oír el grito de Chopper se giró a ver qué pasaba, pero solo vio un abrigo naranja en el suelo.

-¡¿Cómo te atreves a hacerle eso a Nami?!- gritó Chopper enfadado- ¡Heavy Point!- rompió las enredaderas y arremetió contra Ain.

-Modo modo- Ain juntó sus manos y esquivó el puñetazo de Chopper saltando por encima de él, como antes su nakama había hecho con Franky.

Tocó su cabeza y al igual que antes había hecho con Nam; a Chopper le envolvió una luz rosa y luego cayó al suelo.

-¡Chopper!- Brook empezó a forcejear con las enredaderas, pero no pudo soltarse. Paró de forcejear cuando la peliazul se acercó a él.

En su mano brillaba la ya conocida luz rosa.

-¡No! ¡Alto! ¡No se acerque…! ¡No! ¡No! ¡No!

-¡Brook!-Usopp vio como el cuerpo –si es que se podía llamar cuerpo- de su amigo, se convulsionaba.

-¡Alto!- Robin se situó atrás de Ain y en medio de las ropas de Nami y Chopper- ¡Seis Fleur!

Seis brazos inmovilizaron a la Vicealmirante de brazos, tronco y piernas.

-También eres una usuaria de Akuma No Mi , ¿verdad?- le preguntó Robin-¿Qué has hecho con Nami y Chopper?- exigió saber.

De pronto una pequeña cabeza apareció entre el abrigo de Nami que estaba en el suelo.

-¡Robin! ¡Deja de usar tu habilidad!- le grito la niña. Mientras que un más pequeño Chopper salía de sus ropas.

La arqueóloga miró a la niña. ¡Era Nami! Pero parecía más… niña. Se sorprendió al ver esto y se desconcentró, por lo que Ain tomó ventaja para usar su habilidad.

-Modo modo- tocó uno de los brazos fleur de Robin con la mano.

Lo que hizo que la pelinegra empezara a brillar con una luz rosa. Robin notó como sus pechos y caderas se hacían más pequeños.

Los brazos del cuerpo de la peliazul desaparecieron e hizo aparecer una voluta de luz rosada en su mano.

-Me comí la Modo Modo No Mi y ahora soy una persona regresiva-explicó-mi habilidad puede transformar cualquier cosa doce años atrás en el tiempo.

Robin se miró el cuerpo, era cierto que se sentía… diferente.

-Ahora tú deberías tener unos dieciocho años- le dijo Ain a Robin.

-¡Ah! ¡Soy muy pequeño!- exclamó Chopper tocándose la cara, mientras una Nami de ocho años le miraba.

-Si me tocas una vez más-continuó- retrocederás doce años en el tiempo de nuevo, pero no físicamente, si no mentalmente.

-¿A qué te refieres con eso?- preguntó Nami.

Ain la miró, y después a Robin.

-Si toco a tu amiga de nuevo, perderá la memoria de éstos doce años.

La arqueóloga retrocedió un paso.

-Y si la vuelvo a tocar, otros doce años físicamente; así hasta que deje de existir.- especificó.

Lo siguiente que llegó a los oídos de los que estaban en la cubierta, fue una gran explosión proveniente de la cocina. Los cristales de las puertas se rompieron y salió fuego de ellas; hasta que las paredes explotaron.

Zoro y Sanji cayeron con estrépito al suelo y se golpearon Sanji contra las escaleras y Zoro contra el banco del árbol.

Antes de que pudieran reaccionar, unas enredaderas cubrieron sus torsos.

-¡Mosa~! ¡Mosa~!

Justo de donde se había producido la explosión; el hombre al que habían salvado horas antes agarraba a Luffy con su brazo de Kairouseki.

-¿Te convertirás en el Rey de los Piratas con éste poder? ¿Nada más?- le preguntó a Luffy mientras que éste intentaba hacer fuerza, pero le resultaba imposible hacerle frente a la piedra marina.-No me hagas reír-empezó a hacer fuerza con su brazo, aplastando a Luffy cada vez más.- ¿Te aplasto así? ¿Qué opinas Rey de los Piratas?- el capitán de los Mugiwara seguía intentado resistir, de mientras- ¿Cuál es tu nombre?- le preguntó.

-Soy… Monkey D. … Luffy…- respondió con esfuerzo.

El rostro de Z pareció endurecerse más.

-Ya veo, eres el nieto de Garp.- lo lanzó al césped con fuerza.

-Z-sensei, me alegro de que esté bien- dijo la vicealmirante desde abajo.

-Estamos destruyendo éste barco con ataques simultáneos de nuestra flota.- anunció él.

Chopper y Nami se apresuraron a ponerse al lado de su capitán.

-¡Luffy!- exclamó Nami.

-¿Estás bien, Luffy?- le pregunto el pequeño reno.

El azabache se incorporó con esfuerzo y miró a Z.

-Soy el comandante de la Nueva Marina, ¡Z! Y eliminaré a todos y cada uno de los piratas! Tratad de sobrevivir mientras podáis, ¡piratas!

Nada más decir esas palabras, todos los barcos que los tenían rodeados empezaron a disparar cañones contra ellos.

Nami y Chopper –quienes eran los más pequeños ahora- gritaron y cayeron al suelo.

Ain, al ver toda la confusión que había, se acercó a Zoro, quien intentaba soltarse del agarre de las plantas. Aunque la mujer intentó que nadie la viera, ése gesto no pasó desapercibido para Robin.

-El cazador de piratas, Roronoa Zoro- Ain se agachó a medio metro del espadachín- debería darle vergüenza a un pirata llamarse así a sí mismo.

Zoro sonrió de lado.

-¿Y qué vas a hacer al respecto, mujer?

Ella sonrió enigmáticamente.

-¡Modo modo!- la palma de su mano comenzó a brillar.

-¡Detente!- exclamó la arqueóloga.

Pero al darse cuenta de que no iba a poder usar su Akuma No Mi para detenerla a tiempo, y al ser la que más cerca estaba del espadachín, se puso en medio de la mujer y su nakama; recibiendo ella el impacto de la habilidad.

Se desplomó en el suelo como una marioneta a la que le habían cortado los hilos.

-¡Robin-chan!- gritó Sanji, quien había presenciado toda la escena. Empezó a forcejear con más fuerza.

-Jujujujuju- rió la ojigranate- esto será divertido.

-¡Ain! ¡Rápido!- le gritó Z a la mujer desde el barco.

Ésta se agarró a una escalera que estaba colgando de su barco y que habían bajado para que pudiera subir.

-¡Espera!- Luffy se levantó de golpe y se asomó por la borda- Nuestra pelea… ¡Nuestra pelea aún no ha terminado!

Pero el barco de Z ya había comenzado a alejarse del de los Mugiwaras. Aunque los demás barcos aún seguían atacándolos, lazándoles bombas que difícilmente podían esquivar estando la mayoría atrapados por las plantas.

El capitán continuaba mirando el barco de Z con el ceño fruncido.

-¡Luffy!

El grito de la pequeña Nami lo sacó de su trance.

-Luffy, ¡hay que huir!- volvió a decir Nami, mirando a su capitán.

Otra bomba dio de lleno en la cubierta. Luffy apretó los dientes con fuerza.

-¡Franky, retrocedemos!- ordenó.

Se acercó al carpintero e intentó liberarlo.

-Vamos… ¡Maldición!- empezó a arrancar las enredaderas.

-¡Soy libre! ¡Súperrrrrrrr!- exclamó el cibrog cuando ya estuvo libre.

Corrió a situarse en el timón mientras que Luffy desviaba las balas de cañón dando patadas y puñetazos.

-Vamos Sunny… ¡Yo creo en ti!- agarró el timón con ambas manos- ¡Sistema de escape de emergencia!- anunció- ¡Coup de Burst!

Todos los Mugiwaras se agarraron a lo que más cerca tenían y Nami se agarró con un brazo a Zoro mientras que con el otro sujetaba a Robin como podía.

El braco salió volando por el cielo ante la mirada sorprendida –aunque bien disimulada- de Z y sus nakamas.

El Thousand Sunny aterrizó en alguna parte del mar del Nuevo Mundo.

-¡Agarraos fuerte!- advirtió Franky.

El barco se posó en el agua con violentamente, dando varios botes hasta que se detuvo.

-¿Estáis todos bien?- preguntó Chopper.

Asintieron.

Luffy se acercó a Brook y a Usopp y los liberó; después hizo lo mismo con Sanji y Zoro.

Nami se había separado del espadachín y puso a Robin boca arriba.

-¡Robin! ¡Oi, Robin! ¡Reacciona!- la sacudió de los hombros.

No se movió.

Chopper se agarró la cabeza y comenzó a correr en círculos.

-¡Robin está herida! ¡Rápido! ¡Necesitamos un médico! ¡Necesitamos un médico!- de paró- Oh, pero si yo soy el médico.

Se acercó a la arqueóloga y sacó un estetoscopio de su mochila.

-¡Oi! Nami, Chopper, ¿no parecéis más pequeños?- preguntó Luffy quién se había agachado al lado de Nami.

-Fue la mujer de pelo azul.- explicó la pelinaranja- su Akuma No Mi hacía que retrocedieses doce años en el tiempo físicamente si te tocaba un vez- miró a Robin- y a Robin la ha tocado dos.

-Ya veo… Poderes misteriosos- se puso una mano en el mentón con expresión pensativa.

Zoro chasqueó la lengua.

-Estúpida mujer, no debió ponerse en medio.

Sanji le dio una patada que él esquivó.

-Oye, marimo de mierda. Deja de insultar Robin-chan, ¡y más después de que te protegiera, imbécil! ¡Te tendría que haber dejado convertirte en un niño de nueve años!

-¡¿A quién llamas marimo de mierda, ceja de sushi?!- Zoro se puso en posición de ataque- ¡Además yo no le pedí que hiciera nada de eso!

-¡Eres un desagradecido! ¡Si le pasa algo a mi querida arqueóloga por tu culpa, te cocinaré vivo!

-¡¿Estás amenazándome, acaso?!

Empezaron una de sus típicas peleas.

Todos los demás se habían reunido alrededor de Robin, pasando de la discusión de los otros dos, mientras que Chopper la auscultaba.

-Chopper, ¿se encuentra bien?- preguntó Usopp.

El reno asintió.

-Tanto su respiración como su pulso están bien, solamente se ha desmayado.

Todos se relajaron un poco, menos Nami.

-Aún hay algo que me preocupa…- dijo más para ella que para los demás.

Un quejido proveniente de Robin hizo que se olvidara de lo que estaba pensando.

-¡Robin! ¡Eh, Robin! ¿Puedes oírme?- preguntó el doctor.

La pelinegra movió la cabeza de un lado a otro, aún un poco grogui.

-¡Roooobin~chwaaaaaaaan~!- Sanji se acercó corriendo con un corazón en el ojo, haciendo su típico bailecito con brazos y piernas.

La arqueóloga abrió un ojo y luego otro.

-¿Dónde-?- se incorporó y se frotó la frente.

-¡Yohohohohoho! ¡Robin-san se ve más joven que antes! Aunque claro… ¡Yo no puedo ver porque no tengo ojos! ¡Yoho! ¡Yohohohoho!

Robin pareció despejarse por completo y miró a todos atentamente. Abrió mucho los ojos y se levantó de golpe, tambaleándose un poco.

-¿Robin…?- Luffy ladeó la cabeza.- ¿Te encuentras bien? Parece como si hubieras visto un fantasma, ¡shihihihihihi!

La nombrada se alejó de ellos y miró a los lados.

Después posó su mirada en cada uno de los Mugiwaras; y ellos vieron algo que casi nunca habían podido ver en los ojos de Robin: terror.

-¿Quiénes sois vosotros?

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¡Bien! Espero que os haya gustado ^^ Me gustaría que me dieses vuestras opiniones sobre el capítulo ya que es la primera vez que escribo un fic sobre los Mugiwaras ;3

¡Dejad reviews, porfis!

Nos vemos en el siguiente cap.

Natsuki-chan.