Los personajes son de un señor con mucha imaginación llamado Masashi Kishimoto, pero la historia es mía.

Nuevo pasatiempo

Era verano, se podía escuchar la risa de los niños jugando por todo Konoha… bueno, de todos los niños menos él.

El pequeño Shikamaru se encontraba descansando de lo más tranquilo en el patio de su casa.

Se había refugiado del fuerte sol bajo la sombra de un frondoso árbol. Había estado así por al menos una hora, descansando de lo más feliz en el fresco pasto y mirando el despejado cielo. Era la primera vez que hacía algo así y decidió que de ahora en adelante continuaría con ese hobby, ese tono de celeste le gustaba mucho.

- ¡Shikamaru! – escuchó como su madre gritaba dentro de casa.

- Prodemático – resopló mientras fruncía tiernamente el entrecejo.

- ¡Shikamaru ¿dónde estás?! – oh oh, su madre lo encontraría pronto y seguramente lo haría hacer algo más… lo que significaba que ya no podría descansar feliz de la vida viendo ese hermoso cielo celeste.

Temeroso de que interrumpan su nuevo –y favorito- pasatiempo se escondió detrás de unos arbustos a penas escuchó que se acercaban los pasos de su madre.

- ¡SHIKAMARU NARA! No me hagas esto… ¿dónde te has metido?

- Silencio absoluto -

Desde su escondite pudo ver como su mamá estampaba su pie contra el piso… oh, estaba enojada, estaba MUY enojada.

Ahora el pequeño pensó que tal vez no había sido una buena idea el esconderse de su madre, ahora le darían una paliza que su nalgita izquierda jamás olvidaría.

Shikamaru tragó duro ante este último pensamiento, su pequeña mano viajo involuntariamente a su parte trasera y se la sobó, de verdad no quería que su mami lo castigara.

Con fe su mamá no lo encontraba hasta la noche, que llegaba su papá, entonces allí estaría a salvo (su papá usualmente lo salvaba de los castigos que le ponía "por ser tan perezoso" –citó a Yoshino Nara).

- Que ño me vea, que ño me vea… -rogaba bajito con sus ojos cerrados y los puños apretados desde su escondite.

Yoshino el movimiento de unos arbustos y dirigió rápidamente su mirada hasta dicho lugar.

Su sonrisa de ensanchó maliciosamente al ver un par de piececitos escondidos entre las hojas. '¡Ajá! Lo había encontrado… ahora vería ese niño.' Pensó. Estaba desesperada ya no sabía qué hacer. El verano había comenzado hace casi tres semanas y desde entonces Shikamaru se la había pasado holgazaneando como nunca antes. Por lo general cuando ella pasaba por la calle podía ver a otros niños de 4 años jugando energéticamente y llorando cuando sus padres les decían que era hora de ir a casa, pero su hijo… su hijo era agua de otro poso, si por él fuera ni se levantaría de la cama ¡vaya que se parecía a su padre! –sonrió mentalmente ante este último-. Si bien su hijo era apático, usualmente su energética amiguita, Ino Yamanaka estaba allí para hacerlo –Kami sabe cómo- jugar o al menos logra moverlo de su trasero, lo cual de por sí ya es un gran logro, pero este verano…

Shikamaru, pudo ver por entre las ramas de su escondite el precioso cielo celeste.

Ese celeste era muy bonito, creía que le recordaba algo, pero no sabía a qué… el pelinegro abrió grande sus ojitos, de pronto se dio cuenta porque ese color se le hacía tan familiar.

Los ojos de Ino-chan.

El pequeño Nara pateo el piso y cruzó sus bracitos en señal de enojo ¡todo era culpa de Ino! ¡Claro que sí! Porque si ella no se hubiera ido de viaje a la playa con sus papás estaría jugando como todos los días (sobre todo en verano) con él y entonces no se metería en problemas con su mami por "no hacer nada"… ahora por SU culpa le darían una tunda –hizo un puchero-.

De pronto se sintió raro… desde que tenía memoria esta era la primera vez que Ino no estaba allí para jugar. A él siempre le fastidiaba que lo obligara a jugar a la comidita, a las escondidas o a cualquier cosa que implique moverse mucho, pero ahora que no estaba… simplemente se sentía mal ¡estaba mal que su problemática amiga no estuviera allí! –ahora su puchero se hizo más grande-.

Shikamaru sintió como que una cosita que apretaba en su pecho.

Ya no sabía si sentirse molestó, abandonado o triste por el abandono de su amiga ¡Gurr! Si es que Ino era problemática hasta cuando no estaba.

Yoshino avanzó cuidadosamente tratando de que su hijo no notara que había sido descubierto (es que ese niño era demasiado inteligente y ella estaba más que segura de que eso algún día le traería problemas) - ¡AJÁ! – abrió de golpe las ramas del arbusto para encarar a su perezoso hijo. Ella iba a gritarle, por Kami que iba a gritarle, pero al ver la forma en que sus grandes ojos la miraban fue incapaz de articular palabra. '¿Acaso me tiene tanto miedo?' se preguntó la pelinegra al ver que sus lindos ojitos marrones estaban ligeramente aguaditos. Abrió nuevamente la boca para hablarte, esta vez en un tono más calmado, pero…

- ¿Cuándo degesa? – soltó mirándola directamente a los ojos.

- ¿Ah? – si ella, había entendido a que se refería… sólo que estaba algo sorprendida.

- ¿Cuándo degesa? – repitió su hijo, en un tono más decidido mientras arrugaba ligeramente el entrecejo.

- Pequeño… -ok, esto era oficialmente lo más tierno del mundo. Se agachó hasta quedar a su altura y lo despeino amorosamente (todo rastro de enojo de había borrado de ella) – ¿la extrañas verdad?

- ¡No! es una niña, yo no etaño a las niñas y menos a ella poque me obligan a haced cosas – cruzó fuertemente sus bracitos y miró hacia otro lado.

A Yoshino se le hizo entretenida la reacción de su hijo, aun que no pudo evitar el sentirse ligeramente ofendida por eso de que las son tontas y mandonas ¡vamos que eso es solidaridad de género! Así que decidió jugar un poco con su hijo.

- Ah, entonces ya no quieres que venga. Bien, le diré al tío Inoichi que no la traiga más y así...

- ¡NO! – dijo fuertemente esta vez mirándola directamente a los ojos de forma decidida.

- ¿Pero no dices que las niñas son problemáticas? - haciendo énfasis en la palabra "niñas"

- Si, pedo ella no tanto. – a quién engañaba esa era probablemente la niña más problemática de toda la galaxia.

- ¿Entonces si te gusta jugar con esa niña, aun que sea algo problemática y mandona?

- Si... – Shikamaru miró algo apenado al cielo celeste.

Oh por Kami… –rió divertida- Shikamaru y su padre eran más parecidos de lo que había imaginado, resulta que ambos disfrutan de jugar con el mismo tipo de niñas.

- La etraño – dijo el pequeño, quien ahora sentía como una de esas caritas tristes que le habían hecho dibujar en el niño.

- Oh, yo sé que si… - lo abrazo amorosamente, el enojo que inicialmente había tenido se había esfumado completamente– Ayer recibí una carta de su mamá, me contó que habían adelantado una semana su regreso –le contó a Shikamaru y es que era cierto, al parecer Ino también lo extrañaba y había armado el berrinche del siglo para volver rápido a casa y ver a su amigo favorito. Esta era la primera vez que se separaban y aparentemente ninguno lo estaba tomando muy bien que digamos.

- ¿De vedad? – su expresión empezaba a cambiar por una más animada.

- ¡Sí! En menos de lo que piensas verás sus preciosos ojitos celestes entrando por la puerta.

- Celeste como eso… –señaló hacia el cielo-… me recuerda a ella.

Yoshino asintió con la cabeza – ¡Ya sé! Te doy permiso para echarte y mirar el cielo cada vez que sientas que las extrañas.

Shikamaru le regaló una grande y bonita sonrisa.

Claro que cuando Yoshino dijo eso jamás imaginó que si hijo continuaría viendo el cielo cada vez que extrañase a su amiguita por los siguientes años. Los problemas que le traía el nuevo pasatiempo de su hijo en el futuro...

FIN

Ahora saben porque a Shikamaru le gusta ver el cielo, nop… no es por las nubes, es porque le recuda a Ino. Bueno, esta es la explicación (según yo lol) de cómo comenzó uno de sus pasatiempos favoritos.

Reviews

Naoko-eri: Me alegra que te haya divertido. Y pues si, todo es exagerado para Inoichi cuando se trata de su pequeña (igual que muchos otros papis, super sobreprotector lol). Jajaja si, me fue imposible dejar de poner lo del llanto, es tan tierno.

Etsuko Hoshi: Gracias por tu cometario. Me da gusto que te pareciera tierna, espero que te guste este nuevo capítulo. ¡Besos!

inochan-uchiha: en los próximos habrán más celos ¡lo juro! si dame cuenta este onshot me salió más como para darle a alguien un coma diabetico con tanto dulce. Gracias por leer y tomarte dejarme un comentario. Nos leemos pronto ;D

anime love: ¡gracias por leer y dejar un review, que genial que te haya gustado. Y si pobre Iruka, hasta mi me dio penita escribirlo, a Yoshino la veo completamente a favor del ShikaIno y es que ambas tienen un carácter similar y tratan de forma parecida a los sexys y perezosos Nara.

A todos nuevamente gracias por leer, espero que les haya gustado este nueva capítulo, estaré actualizando rápido porque ya tengo en mente varias historias de estos dos pequeños. ¡Muak!