"MATRIMONIO NECESARIO"

Hola, soy nueva en esto, espero que les guste mi historia... claro que los personajes no son míos!

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CAPÍTULO 1 "¿REGRESO CONDICIONADO?"

La cuarta guerra ninja fue sin duda alguna una gran batalla... que trascendería en el futuro de todos los pueblos del mundo ninja y en el rumbo que ellos tomarían en un futuro, luego de terminar esta guerra todos los aliados sufrieron grandes perdidas humanas que sin duda era inevitable, Naruto Uzumaki y Sasuke Uchiha fueron las dos pilares principales de la victoria... con la clara ayuda de los kages aliados y los hokages del pasado, poniendo punto final a ese terrible enfrentamiento.

Es bien sabido que Sasuke Uchiha hace años atrás traicionó y abandonó Konoha para cumplir su venganza la cual era matar a su hermano Itachi Uchiha por el asesinato de todo su clan, pero luego de cumplir su objetivo y asesinarlo se enteró de las verdaderas intenciones de su hermano mayor, haciendo que desarrolle su odio a Konoha por un tiempo hasta que más adelante comprendió las razones de su hermano por su accionar, con ello logrando así redimirse y seguir la voluntad de Itachi... la cual era proteger su pueblo y evitar más dolor y sangre derramada.

Finalizada la guerra Naruto, Sakura y los demás convencieron a Sasuke de volver a Konoha porque al fin y al cabo este era su hogar y que después de finalizar ese ciclo de venganza ya era tiempo de rehacer su vida... porque no podía detenerse en el tiempo e ignorar el sacrificio de su hermano, luego de meditarlo decidió acceder y regresar a casa, claro que lo hiso acompañado de su equipo "taka" por sugerencia de la hokage, al considerarlos de gran ayuda en la batalla; razón por la cual un par de días después de su regreso estaba tranquilo tomando su desayuno al lado de su grupo y preparándose para reunirse con Tsunade a pedido de ella.

Media hora después el grupo "taka" estaba reunido en la oficina de Tsunade:

- Primero quiero agradecerles por su colaboración en esta terrible batalla – les dijo a todo el grupo

- Nos divertimos mucho peleando, verdad? – preguntó un alegre Suigetsu – además teníamos que obedecer a Sasuke – alzó una ceja

- Entiendo, ahora escúchenme con atención... – dijo la hokage y los presentes asintieron con la cabeza – he tomado la decisión de recibirlos en esta aldea por su ayuda y buen desempeño en la batalla, dándoles el puesto de shinobis de la hoja... y con el tiempo ya irán subiendo de puesto – ofreció – qué dices Sasuke? – preguntó

- Ellos deciden por si mismos... – respondió el líder del grupo – Jugo... – dijo mirándolo

- Sabes que yo siempre iré a donde tú vayas... – respondió

- Suigetsu – dijo mirando al tiburón

- Bueno, me quedaré porque parece que aquí no me aburriré... – respondió sonriendo

- Karin... – nombró a la mujer

- Bueno yo... yo... – decía dudando – me quedo para ayudarte en lo posible

- Ya los escuchó Tsunade... – dijo mirando a la hokage y ella dijo:

- Me parece bien! – sonrió – ahora todos están viviendo en el departamento de Sasuke, pero para mañana ya les tendré preparado un departamento para cada uno y además después de estabilizarnos un poco mejor ya pueden empezar con las misiones... – los miró a todos – claro que tendrán un sueldo por ello y como ya les dije antes mientras mejor se desempeñen tendrán más posibilidades de escalar puestos – finalizó esperando una respuesta afirmativa al saber que serían útiles para su aldea.

- Nos parece bien... – dijo Suigetsu – verdad? – preguntó a sus compañeros y ellos asintieron con la cabeza en señal de confirmación.

- Entonces quiero que vengan dentro de un par de días para darles su banda de identificación y hacer unos trámites de rigor – sugirió – eso era todo! ahora ya pueden marcharse, mañana mandaré a alguien para que los lleve a conocer sus departamentos... – dijo y todos se pararon con la intención de irse

- Si, con permiso... – dijo Jugo

- Sasuke, quédate! aún tengo cosas que hablar contigo... – decía ella al verlo irse, entonces el nombrado se detuvo y con la mirada les dijo a los demás que se marcharan sin ningún tipo de problema.

- La escucho... – respondió volviéndose a sentar

- Ayer he hablado con lo que queda del consejo y todos están de acuerdo con que te quedes, porque te reconocen como uno de los héroes de la batalla... – entrecruzó los dedos encima de la mesa – pero también son conscientes que si es que tú quisieras podrías acabar con nuestra aldea, y por eso quieren un garante que afirme que ahora estarás definitivamente con nosotros... y de nuestro lado –finalizó mirándolo a los ojos

- Explíquese – fue lo único que él dijo devolviéndole la mirada

- Primero que nada quiero que sepas que tú puesto será distinto que el de tus compañeros – suspiró – te propongo que seas un jounin de élite o un ambu, tú decides... y por lo otro creo que la idea no te va agradar... – dijo ella estirando las manos y dando un gran suspiro

- Qué quiere decir? – preguntó inquieto

- Quiero decir que según el consejo la única forma de atarte para siempre a la hoja es mediante una unión matrimonial... – respondió ella haciendo que Sasuke quedara estupefacto – dicen que debes casarte con una ciudadana de la aldea...

Luego de esas palabras hubo un silencio tenso por parte de ambos, ya que la hokage simplemente se limitaba a ver la fría expresión de Sasuke y la forma de asimilar la noticia que comprendía era difícil, incluso para alguien como él... luego de largos segundos por fin él rompió el silencio:

- Soy muy joven, cómo es que tengo que casarme a mi edad? – quiso saber un poco aturdido pero sin demostrárselo abiertamente a la mujer mayor

- Lo sé, todos sabemos que todavía te falta mucho por vivir... pero también sabemos que pese a tu juventud tú eres un chico muy maduro – tomó su taza de té – porque tú siempre has sido muy responsable y disciplinado, y que para colmo... siempre cumples tus objetivos – respondió con sarcasmo a lo último dicho

- Comprendo eso, pero... – decía él pero fue interrumpido

- Además según lo que sé otro de tus objetivos era restablecer tu clan y para ello necesitas de una mujer... – cruzó los brazos – y quien mejor que tu esposa, no? – dijo retándolo con la mirada

- Esa es una condición? – preguntó sin dejarla de mirar a los ojos

- Abiertamente no, pero más allá de lo que diga el consejo, luego de haberlo pensado durante toda la noche, yo pienso que sería bueno que te cases... – sonrió - para que ya no exista ningún tipo de duda con respecto a tu estancia definitiva en la hoja y para que formes una familia! – suspiró – porque créeme que uno de mis sueños es ver resurgir el clan Uchiha y eso solo será posible gracias a ti y a los hijos que desees tener... – finalizó con nostalgia en sus palabras

Sasuke durante largos minutos pensó en las palabras que Tsunade le decía y le daba crédito en algunas cosas, sin embargo se está hablando de "matrimonio" un término que tenía en cuenta pero no tan pronto... porque pensaba por lo menos esperar un par de años más para ponerse a pensar en una mujer ideal para él y la cual este a su altura, pero así de pronto y de la nada... no se lo esperaba!

- Vamos Sasuke no lo pienses tanto... – mencionó ella al verlo sumergido en sus pensamientos – además tú puedes escoger a la chica que quieras como esposa, nosotros no te vamos a imponer a nadie! – dijo con firmeza en sus palabras – la única condición es que sea de este lugar, como ya te lo mencioné

"Matrimonio y esposa..." una y otra vez se repetía en la alborotada cabeza del Uchiha, no había duda que Tsunade podía llegar a ser realmente muy impredecible ya que ni en sus más remotas pesadillas se imaginó que de la noche a la mañana le planteara tomar esa opción, por ser una idea un tanto descabellada.

- No me vayas a salir ahora que no estás preparado para tomar una mujer y hacerla tu esposa... – mencionó con sarcasmo – mira que yo sé muchas cosas...

- Así, y qué cosas supuestamente sabe? – preguntó curioso por el sarcasmo de ella

- Que no eres un santo y que tienes "experiencia" con las mujeres – respondió sonriendo con burla – lo cual es obvio por el aspecto que tienes... – dijo evaluándolo y sabiendo que los años le habían favorecido – entonces, qué dices? – insistió buscando que el pelinegro aceptara.

- Está bien, voy a casarme... – respondió tranquilo luego de comprender a la hokage

- Bien, eso es genial! Más que maravilloso! – dijo con emoción y se puso de pie – tienes a alguien en mente?

- No! – respondió secamente

- Y no has pensado en... en Sakura? – preguntó ella sabiendo que pese al tiempo su alumna seguía enamorada del Uchiha y él respondió:

- No creo que sea una buena opción... – cruzó los brazos y miró a otro lado

- Es la mejor opción! – enfatizó – la conoces desde años, es una de las pocas personas con quien tienes una buena relación, siempre has sabido que no le has sido indiferente y además estoy segura que aceptaría ser tu esposa con gusto – lo miró con interrogación – Sasuke, ella es la mejor candidata!

- Dijo que podía escoger a la chica que quisiera... – la enfrentó volviéndola a mirar – o es que acaso necesariamente tiene que ser Sakura? O es qué esto es un plan para amarrarme con ella? – preguntó con duda

- No, claro que no! pero yo pensé que de entre todas la escogerías a ella sin ni siquiera dudarlo – suspiró con desconcierto la hokage

- Pues ya ve que no! – dirigió su mirada hacia ella – Sakura es muy molestosa, no creo soportar tener que vivir con alguien así... – respondió fríamente haciendo que sea ahora Tsunade la que se sorprenda al escucharlo

- Está bien, no insistiré más... – dijo con resignación y se sentó – pero dime a quien quieres como tu esposa? Que yo encontraré la forma de darte gusto en tu elección

- Yo he estado mucho tiempo alejado de aquí, así que no conozco a nadie... – sonrió de medio lado – entonces pienso que sería mejor que UD. la escoja – al terminar de escuchar esto la hokage se quedo todavía más sorprendida, ya que le era difícil asimilar que el Uchiha le daba esa opción a ella

- Espera... – dijo apuntándole con el dedo – me estás diciendo que yo escoja a la mujer con la que te casarás? –preguntó incrédula y Sasuke asintió con la cabeza – Sasuke! El matrimonio no es juego y tú lo estás tomando como si fuera algo sin importancia, como si te diera igual estar casado con cualquiera y como si fuera un negocio más o un contrato... – finalizó mirándolo con seriedad.

- El punto es que me voy a casar y yo ya sabré como tomo mi matrimonio – respondió defendiéndose de la mujer – o es que me va a enseñar cómo hacerlo?

- No, pero... – suspiró resignada al ver que él seguía siendo el mismo – como quieras, yo escogeré a tu esposa! – sonrió con melancolía – tienes algunos requerimientos? – preguntó ella cogiendo un lápiz y papel para anotar

- Que sea digna de mi apellido, que no sea bulliciosa y lo demás lo dejo a su criterio – respondió inclinándose a la mesa

- De acuerdo, yo me encargo de eso – escribió sobre el papel – te mandaré a llamar cuando tenga novedades... eso es todo lo que tenemos hablar con respecto al matrimonio – guardo el papel en un folder – ahora tenemos que tratar otro asuntos importes también

- Ud. dirá... – contestó simplemente

- Quiero ofrecerte una disculpa por todo lo que has tenido que pasar a causa de las malas decisiones que tomaron mis predecesores y el consejo que ordenó la destrucción de tu clan – dijo ella bajando la mirada con sinceridad, vergüenza y tristeza en sus palabras – lamento tanto lo ocurrido...

- Preferiría no hablar más del tema... – dijo mirándola

- Entiendo, sin embargo quiero que sepas que contigo repararemos nuestros errores... – lo miró – y empezaremos por darte lo que te corresponde

- No entiendo – hiso un ademán con las manos

- Los anteriores miembros del consejo siempre exigieron que se diera todas las comodidades posibles y yo supuse que lo hacías por empatía – suspiró – pero ahora comprendo que lo hacían porque sabían que lo merecías y que era lo justo – tomó su taza de té – entonces es preciso darte a ti esto... – sacó un papel y se lo dio

- Esto es...? – decía él mirando el papel

- La herencia de tu familia, como veras es una enorme cantidad de dinero! – sonrió – pero también debes saber que actualmente no tengo la capacidad económica para dártelo, sin embargo después de revisar mis cuentas he concluido que puedo cumplir dándote una suma importante mensualmente, para que en unos cuantos años te dé el total! – suspiró – estás de acuerdo, verdad? – preguntó viéndolo y él respondió:

- Así será! – ella sonrió gratamente al escucharlo

- Muy bien! entonces toma esto... – sacó una gran cantidad de dinero de una de las cajuelas de su escritorio – este es el primer pago – dijo y se lo dio a él – solo tienes que firma este papel donde dice que lo recibiste – saco otro papel, se lo dio y después de leerlo él firmó el papel y se devolvió – dentro de un mes te daré el segundo pago

- De acuerdo – respondió viéndola sonreir

- Ahora nos queda hablar de tu puesto aquí – se frotó las manos – que puesto deseas tener? En de jounin de élite o el de ambu? – preguntó

- El primero... – decía después de pensarlo por algunos segundos

- Me parece bien, pero sabes que puedes tener el otro si tú quieres solo tienes que decírmelo – se tomó de la quijada – ahora que serás un hombre casado no crees que sería conveniente retornar al barrio Uchiha? – Preguntó ella – claro que si es lo que quieres y si no yo te daré otra casa, qué dices?

Él escuchó sus palabras y se puso a pensar, regresar y vivir en la casa de sus padres ¿sería una buena idea? Pese a que han pasado años desde su muerte aún le sería difícil adecuarse a ese lugar, pero también es consciente que tiene que superar por completo esa etapa de su vida... tiene que dejar el pasado atrás y empezar de nuevo, porque su familia y su hermano quisieran que fuera dichoso en su vida y que ya no existiera ninguna sombra que estropee su tranquilidad.

- Está bien, volveré a casa una vez casado... - levantó la mirada y la enfrentó

- Estupendo, si es que lo crees conveniente voy a mandar que la limpien y la ordenen para que esté lista para cuando te instales allí! – enfatizó

- Sí, estoy de acuerdo – dijo sin más y ella se le quedo sonriendo

- No imaginé que podríamos tener una plática tan holgada y satisfactoria – se puso de pie y estiró las manos con mucha alegría.

- Si eso es todo me retiro... – dijo él poniéndose de pie también

- Sí! eso es todo – respondió satisfecha por la plática – te mandaré a llamar ante cualquier novedad – dijo acompañándolo a la salida y cuando él ya se iba dijo – Sasuke, me da mucho gusto que hayas vuelto!

- Hmp – respondió y empezó a andar con pasiguedad, en tanto su secretaria se acercaba a ella con el objetivo de saber en que terminó la conversación.

- Hokage-sama todo salió bien? – preguntó su aprendiz Shizune

- Más que bien - sonrió – ese chico es muy razonable! – respondió viendo caminar al pelinegro y suspirando por toda la conversación.

En otro lugar:

Karin y los demás caminaban rumbo hacia el departamento de Sasuke, pero sentir aquel chakra de esa mujer la alteró un poco...

- Qué le estará diciendo esa mujer a Sasuke? – preguntaba con malestar – presiento que no es nada bueno, no sé que es pero algo me dice que no es nada bueno...

- Si tú lo dices debe ser cierto – sonrió – ya que las brujas como tú son muy perceptivas a cuanto el futuro... – decía moviendo la cabeza de arriba-abajo

- ANIMALLLL! – le dio una patada – estoy hablando en serio! – cerró los ojos – qué es que nunca sabes tomar las cosas en serio? – preguntó ella, pero el acuático no dijo nada y Jugo solo se dedicó a contemplar a algunas aves que revoloteaban por el cielo de Konoha.

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