Los Siete Dragones
Por Marce-chan
Capítulo 60
FINAL
El sitio donde estaban parecía un cráter, de poca profundidad pero de extraño aspecto, como si el suelo hubiera sido corroído por un potente ácido. De un momento a otro Maki se desmoronó, Natsu intentó sostenerla, pero estaba muy débil y cayó de rodillas, Maki cayó boca abajo y no se movió más.
-¡Natsu!-grité asustada.
-¡Maki!-gritó Gray.
Echamos a correr al mismo tiempo pero al llegar al borde del cráter los dos rebotamos contra una especie de barrera invisible y caímos de espaldas al suelo. Gray se incorporó de inmediato pero volvió a rebotar.
-¿Qué rayos es esto?-gritó.
Entonces me percaté que Wendy se hallaba al interior del cráter, a muy corta distancia de nosotros y mantenía las manos estiradas, era ella quien había generado la barrera que nos impedía entrar.
-¿Qué estás haciendo, Wendy?-pregunté exasperada.
-Aléjense, por favor-dijo ella-Es muy peligroso.
-Pero…-replicamos Gray y yo a la vez.
Gray golpeó con el puño la barrera pero de repente unas gruesas varas de metal comenzaron a surgir de la nada, formando un domo alrededor del cráter, encerrándolos en una especie de cerca circular.
-¡Gazille!-exclamé al verlo a mi lado.
-¿Por qué hiciste eso?-se quejó Gray.
-Wendy tiene razón-dijo Gazille-No pueden entrar, es muy arriesgado, aún quedan rastros del demonio, es un poder que sólo nosotros podemos soportar.
-¿Nosotros quiénes?-preguntó Gray exasperado.
-Los Dragón Slayers-respondió Gazille.
-Pero…-replicamos Gray y yo al unísono.
-Ellos tienen razón-intervino el Maestro haciendo su aparición.
-Maestro…-exclamamos varios a coro.
-En definitiva el poder de los Dragón Slayers no es un poder ordinario-respondió Makarov-Hay cosas que sólo ellos pueden enfrentar. Al parecer su misión en este mundo es contrarrestar a los demonios del libro de Zeref.
-A eso se refería Ma-chan con lo de los roles-comentó Levy comprendiendo.
-Sí, creo que lo más recomendable es mantenerlos en cuarentena por ahora-dijo el Maestro.
Gray suspiró con resignación.
-¿Cómo se encuentran, Wendy?-grité aferrándome a la cerca que nos separaba.
-Los examinaré-respondió ella.
Wendy acomodó a Maki y a Natsu uno al lado del otro, Natsu estaba consciente pero por lo visto no podía hablar ni moverse, Maki estaba inconsciente y se veía realmente mal.
-Están intoxicados, esto es serio…-murmuró asustada.
-¿Puedes ayudarlos?-preguntó Gray a mi lado.
-Lo intentaré-respondió ella.
Comenzó a usar su poder curativo, tarea que le llevó largo tiempo y esfuerzo. Todos nos reunimos alrededor del domo, Kinana fue llevada donde Porlyusica.
-Es inútil-se quejó Wendy con tristeza-Mi poder no es suficiente, sólo puedo darles un alivio momentáneo, pero cada vez dura menos.
-No te sobre esfuerces Wendy-la regañó Charlotte.
-Wendy-la llamó Gray.
Ella se giró.
-Necesitas a Tora Kamui ¿Verdad?-preguntó Gray.
Wendy lo miró sobresaltada y asintió con la cabeza. Cuando nos volvimos hacia Gray ya se había marchado.
• • •
Una vez enterados todos en el gremio sobre el estado de cuarentena de Natsu y Makinami se montó un campamento a su alrededor, suministrándoles medicinas, alimentos y mantas, pero entre más se esforzaba Wendy por aliviar sus síntomas más pronto desaparecía el efecto. Maki seguía inconsciente pero deliraba por la fiebre y de vez en cuando convulsionaba por el dolor, el veneno estaba dañando su cuerpo desde el interior, Natsu estaba consciente, pero seguía sin poder hablar ni moverse, su poder y sus energías habían sido absorbidas por completo. Pasé la noche en vela a su lado, junto a Levy, Gazille, Lissana y Juvia. Tuvimos que obligar a Wendy a tomar un descanso, pues había usado todo su poder intentando curarlos, pero su esfuerzo no fue en vano, había logrado estabilizar a Maki.
El amanecer trajo consigo a la nave Cristina con Gray, Hibiki, Eve y Tora en ella, aterrizaron justo junto al domo que mantenía aislados a los Dragón Slayers, Tora ni siquiera saludó, fue directo al domo, Gazille retorció su propio metal para abrirle una entrada y él atravesó la barrera mágica de Wendy como si no existiera.
-Tora-san-exclamó Wendy despertando al sentirlo atravesar su magia.
-Buenos días Wendy-chan-saludó él sonriente como siempre aunque notablemente preocupado-Gray-kun me ha puesto al tanto de la situación, yo me haré cargo desde aquí.
-Gracias-murmuró Wendy apesadumbrada.
-No te sientas mal-replicó él-Has hecho lo que debías, están estables gracias a ti, que no se te olvide, eres un gran apoyo para todos nosotros, ese es tu rol.
Wendy asintió en silencio, Tora se agachó junto a Maki.
-Maki-nee-sonrió-Soy Tora, estoy aquí.
Posó una mano a un palmo de distancia del rostro de Maki que comenzó a brillar, la movía alrededor del cuerpo de ella, como si estuviera rastreando algo al interior de su cuerpo.
-Lo suponía…
-¿Qué sucede?-preguntó Gray a mi lado desde fuera del domo.
-No ha sido capaz de sacar todo el veneno de su organismo, aún queda algo en su sistema, es eso lo que le hace daño…-dijo Tora.
-¿Puedes sacarlo?-preguntó Levy.
-Claro que puedo-respondió Tora-Pero necesito a Salamander-kun para destruirlo, nadie más puede.
-Entonces ¿Qué hacemos…?-murmuró Eve junto a Gray.
-Wendy-chan-sonrió Tora mirándola-Necesito que mantengas estable a Maki-nee todo el tiempo que puedas, mientras yo regenero a Salamander-kun ¿Puedes hacerlo?
-Lo haré-respondió Wendy muy decidida.
Wendy se apresuró a desplegar su campo de fuerza curativo alrededor de Maki que parecía volver a sentir dolor. Tora se inclinó sobre Natsu.
-¿Cómo te sientes, Salamander-kun?
Natsu le devolvió la mirada.
-Ya veo…-suspiró Tora-No puedes moverte… Se ha consumido tu energía y tu poder… Ese demonio ha debido ser muy fuerte…
-¿Estará bien, Tora?-pregunté sin poder contenerme.
Tora me miró y me guiñó un ojo.
-Por supuesto que sí. Regeneración, ese es mi rol.
Alzó las manos que soltaron un potente resplandor dorado y juntó las palmas, pronunciando en voz baja un largo conjuro y comenzó a sobreponer las manos alrededor del cuerpo de Natsu, haciendo figuras de luz, que se iban introduciendo en el cuerpo de Natsu. Pasado un rato, Natsu exhaló muy fuerte, como si hubiera pasado largo tiempo sin respirar e intentó levantarse, Tora lo sostuvo.
-Aún no, espera.
Suspiré aliviada, al borde de las lágrimas.
-Gracias a Dios…
Hibiki me rodeó con el brazo en señal de apoyo y Happy me abrazó. Natsu giró la cabeza hacia mí.
-Estoy en casa, Lucy…
-Bienvenido-sonreí conmovida.
El poder de Tora era sublime e impresionante, un rato después Natsu se incorporó, regenerado del todo.
-¡Gracias, Tora!-sonrió-Dime lo que tengo que hacer.
Tora le hizo un gesto afirmativo con el pulgar y se giró hacia Wendy que sudaba y jadeaba en su esfuerzo por mantener estable a Maki.
-Lo has hecho bien, Wendy-chan-sonrió Tora-Ya es suficiente.
Wendy se dejó caer sentada en el suelo, estaba agotada.
-¿Estás bien?-le preguntó Natsu de inmediato.
-Sólo estoy cansada…
-Salamander-kun haremos lo siguiente-dijo Tora-Sacaré el veneno y lo encapsularé con mi poder, en cuanto te diga usa un ataque explosivo potente y destrúyelo.
-Perfecto-respondió Natsu.
-Wendy-chan-dijo Tora-Ponte detrás de mí.
Wendy obedeció y Tora procedió enfocando su poder en el abdomen de Maki, una esfera dorada apareció justo encima y el ya conocido humo púrpura comenzó a emerger del estomago de ella entrando en la esfera, se movía violentamente intentando fugarse, una vez la esfera estuvo llena de humo Tora miró a Natsu.
-¡Ahora!
-¡Ka Ryû Koên!-gritó Natsu.
La esfera explotó en fuego, el resplandor nos cegó por un instante y a lo lejos se escuchó un chillido de Maki.
-¡Maki!-gritó Alzack a coro con Gray.
Cuando el resplandor cedió pudimos verlos, Maki estaba consciente y respiraba agitadamente, se veía aterrorizada, temblaba descontroladamente como si acabara de despertar de una pesadilla, Natsu y Tora la sostenían.
-Tranquila-susurró Tora-Todo está bien, ya terminó.
-Lo hiciste bien, Maki-sonrió Natsu.
-Te regeneraré ahora-sonrió Tora.
Repitió el proceso realizado con Natsu anteriormente.
-Puedes retirar el domo ahora, Kurogane-kun-dijo Tora al terminar de regenerar a Maki-Ya estamos fuera de riesgo.
Gazille separó las varas de metal, abriendo el domo y todos nos lanzamos adentro inmediatamente.
-¡Natsu!-sollocé abrazándolo.
Él me estrechó sonriendo y atrajo a Happy uniéndolo al abrazo.
-Estoy bien, ya pasó.
Maki se aferró a Gray.
-Tonta…-se quejaba Gray estrechándola con angustia-Siempre tienes que ser tan imprudente…
-¿Estás bien, Maki?-preguntó Alzack a su lado.
Ella asintió tomándole la mano, se veía muy vulnerable.
-¿Qué le pasa?-le preguntó Gazille a Tora al verla así.
-No es una tarea fácil purificar un demonio del libro de Zeref-respondió Tora-Ha sido una experiencia horrible para ella.
-Tora-chan…-dijo ella recuperando poco a poco el aplomo-¿Sabes lo que esto significa, verdad?
Tora la miró y suspiró.
-Si…-suspiró con resignación.
-¿De qué están hablando…?-pregunté.
Tora negó con la cabeza.
-Vamos al gremio, merecemos descansar.
Miré a Natsu desconcertada, él no me devolvió la mirada, quizás era mi imaginación, pero se veía molesto.
• • •
Era muy temprano, de hecho, aún estaba oscuro, desperté sobresaltada al sentir la cama vacía, Natsu no estaba, me incorporé de un brinco y lo vi, se hallaba sentado en la mesa del comedor con los codos sobre la mesa y la cara apoyada en las manos, eso era muy inusual en él, se veía distraído y preocupado.
-¿Natsu?
Él no se inmutó, estaba tan perdido en sus pensamientos que no me escuchó. Me levanté y fui hacia él.
-¿Estás bien?-pregunté posando una mano sobre su hombro.
Dio un respingo de sorpresa.
-Lucy, me asustaste.
-¿Qué ocurre?-le pregunté.
Suspiró y dejó caer la cabeza sobre la mesa.
-No he podido dormir…
-¿Será alguna secuela del veneno?-pregunté preocupada-¿Te sientes mal?
-No es eso-replicó él sin alzar la cabeza-Estoy preocupado…
-¿Por qué?-pregunté.
-Por esos malditos demonios del libro de Zeref…
-¿De qué hablas?-pregunté sin comprender-Kinana está bien, Maki está bien.
-Eso sólo fue el inicio-suspiró Natsu con impaciencia.
-¿Qué quieres decir con eso?-exclamé.
-Es complicado de explicar…-murmuró él.
-Inténtalo-respondí.
-Tengo que hablar con Maki-musitó Natsu y me miró con cierta angustia en la mirada-Le dije cosas horribles…
-Pues búscala y discúlpate-respondí.
Natsu se incorporó.
-Tienes razón, me voy.
-Natsu-repliqué-Aún no amanece…
-No importa-replicó él yendo hacia la puerta.
-Debe estar dormida, apenas se está recuperando del incidente-insistí.
-No puedo esperar-respondió Natsu.
-Entonces al menos espérame, iré contigo.
-Está bien-respondió él dejándose caer sentado en el sofá-Date prisa.
Me cambié rápidamente y salimos, apenas comenzaba a aclarar, Natsu caminaba muy de prisa y yo no lograba entender el por qué de su inquietud y su impaciencia, mientras pensaba en cómo convencerlo de que no despertara a Maki a esas horas me percaté de que había un par de personas sentadas en una banca del parque, eso era inusual a esas horas de la mañana, me sobresalté al reconocerlas, eran Maki y Tora.
-Maki…-murmuré-Tora…
Natsu me miró sobresaltado y siguió la dirección de mi mirada.
-Son ellos…
Se encaminó decididamente llevándome de la mano. Tora se giró al escuchar los pasos.
-Buenos días-saludó alegremente-Lucy-chan, Salamander-kun.
Maki se dio vuelta sorprendida, pero no dijo nada, se veía un poco pálida pero del resto estaba completamente recuperada, su mirada se ensombreció cuando miró a Natsu, la razón era comprensible, la discusión que tuvieron durante el incidente con Cubelios había sido muy acalorada y ambos habían dicho cosas duras e hirientes.
-Maki-dijo Natsu decididamente.
Ella lo miró en silencio.
-Lo que dije en la batalla…
Maki levantó la mano interrumpiéndolo.
-No es necesario.
-Lo es-replicó Natsu-No lo dije en serio, hablé sin pensar.
-Natsu-replicó ella.
-¡No me trates así!-replicó Natsu-¡Dime Tsu, como siempre!
Maki lo miró sobresaltada y Natsu se inclinó ante ella.
-Perdóname. No debí decir lo que dije, fui cruel.
-No importa-respondió Maki-Ya pasó. Además yo también te dije cosas desagradables.
-Pero ciertas-respondió Natsu asintiendo con la cabeza-Tú tienes más experiencia en estas cosas, yo no tenía derecho a…
-Tsu-replicó Maki sacudiendo las manos-Basta.
Natsu se agachó para quedar a su misma altura y la tomó de las manos.
-¿Me perdonas?
-Claro que sí, Tsu-replicó ella conmovida por su dulce insistencia-Eres mi hermano.
-Precisamente-respondió él-Así que… Déjame ir contigo.
Todos nos sobresaltamos, eso fue completamente inesperado.
-¿Ir adonde?-salté inmediatamente.
-Tsu…-suspiró Maki apenada.
-Sé lo que dirás-replicó él-Pero no tienes que llevar esta carga otra vez, somos hermanos y no te dejaré sola nunca más.
-Así se habla, Salamander-kun-sonrió Tora triunfante-Justo estábamos hablando de eso. Yo también iré y creo que todos deberíamos, es nuestro deber.
-Pero…-replicó Maki dubitativa-Será un largo viaje y muy arriesgado…
-Mayor razón para ir contigo-respondieron Natsu y Tora al unísono.
-Perdón-interrumpí-¿Se puede saber de que están hablando?
Natsu se giró hacia mí, apesadumbrado.
-Lucy… Es mi deber, mi responsabilidad.
-¿Qué cosa?
Maki levantó el medallón de Zeref que llevaba en el cuello.
-Esto no fue gratuito-me explicó-Zeref me ha dejado una última misión, este medallón reacciona como un radar.
-¿Un radar para qué?-pregunté.
-Para ubicar a los demonios del libro de Zeref-respondió Maki-Finalmente he comprendido, tengo que buscarlos y purificarlos o en su defecto eliminarlos.
-Tenemos-replicó Tora-Nos corresponde a todos los Dragón Slayers hacerlo. Es nuestra responsabilidad.
-Lucy-dijo Natsu tomándome las manos-No puedo dejarlos solos, es mi deber, mi rol. Tengo que ir con ellos.
Me quedé callada, no sabía que decir.
-Será un viaje prolongado-repitió Maki-Y muy peligroso.
-Pero, como siempre, no tenemos opción-corroboró Tora.
Suspiré profundamente y besé a Natsu con dulzura.
-No le pongan tanto misterio-sonreí-Claro que lo entiendo, hay que prepararnos para partir cuanto antes.
-¿Prepararnos?-murmuró Natsu-Pero Lucy, no puedo pedirte que vengas conmigo, es demasiado peligroso.
-No me importa-repliqué-Iré, quieras o no.
-Lucy-replicó Maki.
-¿Cuándo van a entender?-repliqué impaciente-¡Las cosas siempre son mejores cuando estamos juntos!
-Pero…-replicaron Natsu y Maki a la vez.
-Apoyo eso-dijo alguien.
Todos nos giramos, era Gray, él fue directo hacia Maki.
-Ni creas que te dejaré sola otra vez.
-Gurê…
-Esto será muy divertido-sonrió Tora.
-Tu idea de diversión es bastante retorcida, Tora-replicó otra voz.
Nos giramos hacia el otro lado, David se acercaba por el camino central del parque.
-¡David!-sonrió Maki contenta al verlo.
-Dust reportándose-sonrió él.
-¿Cómo te enteraste?-preguntó Tora.
-No puedo explicarlo-respondió él-Podría decirse que fue instinto, ustedes comprenderán a lo que me refiero.
-Claro que comprendemos-dijo otra persona.
-¡Ga-chan!-exclamó Maki al verlo acercarse.
-Creo que todos sabemos lo que tenemos que hacer-sonrió Wendy caminando junto a él.
-¿También quieren venir?-preguntó Natsu sorprendido.
-Es nuestro deber-dijo David.
-Una tarea para los Dragón Slayers-sonrió Wendy.
-Con un gran poder viene una gran responsabilidad-dijo Gazille-¿Qué esperamos?
-Tenemos que hablar con el Maestro-repliqué.
-Ya ha sido notificado-respondió Gray-Siempre va un paso delante de nosotros, ya se ha comunicado con los Maestros de Blue Pegasus y Lamia Scale, han oficializado la Alianza Gremial nuevamente, es una misión oficial.
-¿Nos vamos entonces?-sonrió David.
-Debemos preparar el equipaje-respondí.
-¿No irán a despedirse de sus amigos del gremio?-preguntó Tora.
-Mejor no-respondió Natsu-Armarán un drama, es mejor que se enteren cuando ya nos hallamos marchado.
-Yo si tengo que ir a ver a mi hermano-dijo Maki-Se enojará mucho si me voy otra vez sin decirle nada.
-Al mal paso darle prisa-sonrió Gray tomándola de la mano.
-¿Les parece si nos vemos en media hora en la puerta norte?-preguntó Gazille-Debo despedirme de Levy de cualquier manera.
-¿No la traerás contigo?-preguntó Gray.
-No, es mejor que se quede-dijo él-Será muy peligroso, estaré más tranquilo si sé que está aquí.
Natsu me miró dicientemente.
-Ni siquiera lo pienses-repliqué tomándolo de la mano y llevándolo de vuelta a mi apartamento-Vamos a hacer el equipaje.
Él suspiró sonriendo. Preparamos nuestro equipaje en tiempo record y nos encontramos con el resto de la nueva alianza gremial en la puerta norte de Magnolia.
Alzack, Levy, Cana, Eve y Hibiki también estaban ahí para despedirnos.
El viaje sería largo y estaría lleno de peligros, pero yo me sentía feliz, estaba al lado de la persona que amaba y de un grupo de buenos amigos, sabía que fuera lo que fuera lo que enfrentaríamos en el futuro lo superaríamos, porque estábamos juntos.
Al partir miré a mi alrededor, Gray llevaba a Maki abrazada por los hombros, Tora y David charlaban animadamente, Gazille caminaba masticando un trozo de metal y Wendy corría alegremente jugando con los seis Exceeds que nos acompañaban, Natsu tomó mi mano llevándome con él, tal como cuando nos conocimos en Hargeon tantos años atrás.
-¡Vamos Lucy!-sonrió-¡Hacia una nueva aventura!
"La felicidad que se vive deriva del Amor que se da"
Isabel Allende.
Muchas gracias a tod s l s que leyeron esta historia. Gracias por sus reviews, sus follows y sus favs. Fue un placer vivir esta aventura con ustedes. Espero iniciar una continuación pronto ;)
Ja ne!