¡SORPRESA! No podía cerrar esta historia sin un epílogo, que lo disfruten
Epílogo
Dicen que cuando eres feliz el tiempo pasa rápido.
Yo pienso que es cierto.
Ahora en la tranquilidad de la sala, después de una larga jornada de trabajo estoy relajándome.
La casa está en absoluto silencio. Recostado en el mueble contemplo las fotos que adornan la pared cada una de ellas tan valiosas como únicas.
Un ruido atrae no solo mi atención, sino también la de Max, quien pasa corriendo mientras sus ladridos se escuchan por toda la casa, cuando intenta rasgar la puerta de la entrada. Lo cual solo significa una cosa, él, al igual que yo está ansioso por ver a las dueñas de su corazón.
Mientras Bella entra por la puerta Max va directo a Zoe, tan rápido la tiene a su alcance y pasa su lengua por su cara haciéndola carcajear.
—Papi—grita mi nombre con gusto al verme, sus pequeños pasitos avanzan tan rápido como sus pies se lo permiten.
—Hola princesa— me levanto y la cargo para llenarla de besos por doquier, ella adora esto.
—No papi— sus chillidos se hacen más fuertes a medida que mis besos le causan cosquillas— ayua—grita tan fuerte que me duele el oído.
Unas manitas empiezan hacerme cosquillas en mi punto débil, a un costado de mi estómago—deja a mi hermanita—como buena hermana mayor, ella llega a su rescate.
—Oh Zoe—me quejo— para pequeña tramposa—le advierto—solo son un montón de besos para esta conejita ¿siii? —pongo mi mejor cara. Ella niega con la cabeza mientras que con sus manos amenaza con volver atacarme.
Bella esta cruzada de brazo viendo todo el espectáculo que tiene ante sus ojos, una sonrisa adorna su rostro. —bueno, ¿ya acabaron? Porque yo muero de hambre y hemos traído pizza—
—siii ica papi, baja, baja— resignado la bajó con cuidado, tan pronto toca el suelo corre a darle la mano a su madre y juntas se van a la cocina.
Alzo a Ojitos haciéndola reír— ¿y usted jovencita? ¿No va saludar a su papá? — pregunto tristemente.
—claro que si papi— truena un beso en mi mejilla, mientras sus bracitos me envuelven fuertemente.
— ¿Cómo estuvo tu día? —pregunto. Ella está en último año de kínder, unos meses más y pasa al colegio. Es tan difícil verla crecer. ¡No habrá alguna medicina que pueda hacerlas permanecer pequeñas por siempre!
—Divertido, Ian y yo hicimos dibujos, jugamos en los toboganes, comimos el lonche, me convido de sus galletas—una de las cosas que extraño a horrores es que Ojitos ha dejado de hablar como bebita, ahora habla claro y a eso agreguemos a ese mentado Ian, apenas está en el kínder y ya crispa mi mente al oírla mencionandome con gusto a su compañero todos los días.
Yo por eso le insistí a Bella con darles educación en casa lo cual fue un rotundo no, basto su cara para no volver a insistir en ello por mucho que lo deseara. Y ahora mi niñita anda jugando con niños llamados Ian.
Tengo que trazar un buen plan con argumento convincente para que vayan al colegio de señoritas, algo se me debe ocurrir aún tengo tiempo de lograrlo.
—Tierra llamando a papi— Zoe aprieta mis mejillas con sus manos—mami dice que vayamos a comer—
—Claro que sí Ojitos, no hagamos esperar a mami, ¡a lavarse las manos! A que te gano— apenas íbamos a empezar a correr cuando un grito nos frenó.
—No vayan a correr porque Max se alborota y siempre terminan rompiendo algo— nos acusa.
Zoe y yo nos miramos antes de reír— ella tiene razón— le digo cargándola para mejor caminar hasta el baño. Siempre que corremos Max enloquece y parece corredor de autos y termina tirando algo en el camino y destrozándolo. De haber sabido que iba hacer así de grande hubiéramos adoptado uno más pequeño sin embargo él fue quien nos eligió.
Ese enorme perro es un golden retriever, nos encontró una noche de lluvia en la que Zoe y yo salíamos de la tienda, el felpudo de unos tres meses siguió a Ojitos hasta el estacionamiento, cuando me di cuenta Zoe lo tenía cargado mirándome con esos enormes ojos que me tienen hechizado —esta solito papi—lo levantó para que lo observará—podemos quédanoslo— pidió con un tierno puchero.
Bella me va matar, habíamos hablado de que un conejo era más que suficiente por ahora.
Odiaba tener que romperle el corazón— hmmm Ojitos, el bebé aún no nace y mami va estar muy ocupada cuando lo haga, no podemos tener un cachorro por ahora— le explique.
—Po favo—sus ojos se cristalizaron y una pequeña gotita empezó a escurrir de su ojo ¡OH no! —esta solito papi, po favo— imploró mostrando al peludo que también tenía la mirada triste.
¡Ay Bella va a matarme! Suspiré— de acuerdo Zoe, puede ir a casa pero boletearemos para ver si es de alguien, y si ese alguien aparece tendrá que irse con él. De seguro alguien más lo extraña— ella asintió mientras le susurraba quien sabe que al cachorro.
Después de una reprimenda de Bella por el trabajo extra que traje a casa Max como Zoe le llamo paso de estar de huésped a permanente.
Nadie lo reclamó, así que con el pasar de los días perteneció a la familia.
Sigue a Zoe a todas partes, a escondidas lo cuela a su habitación donde duerme a sus pies, es su mejor amigo se adoran.
Nos hemos encariñado mucho con él, es un buen chico la mayoría del tiempo.
Una vez sentados en la mesa, mientras Bella ayuda a Sofi a comer su pizza en trocitos. Yo limpio la cara de Zoe la cual está cubierta de salsa de tomate.
Estos momentos eran únicos y estaba tan agradecido, después de que por poco las pierdo…
Aún recuerdo ese amargo día, el cual pudo quedar en una tragedia.
A una semana de cumplir los ocho meses de embarazo, le ayude a mi padre con unos pendientes en el hospital, pero desde que avise a Bella que me quedaría un tiempo más estuve inquieto e intranquilo lo cual lo relacione a que era la primera noche en que Zoe se quedaría a dormir en casa de Lilian, aparte de nuestra casa, la única casa en donde había ido a dormir era la de mis padres, pero ambas vibronas habían insistido tanto que no nos quedó más que acceder, así que mi hija se fue feliz hacer una pijamada con su prima.
Tan pronto acabe los pendientes me despedí de papá y emprendí camino a casa, antes de subir al coche le marque a Bella pero no contesto, trate de tranquilizarme pero la espinita seguía inquietándome.
Cuando llegue a casa escuche los aullidos inquietantes de Max, suena loco pero estoy seguro de que trataba de decirme algo, aunque era pequeño se oía desesperado, así que no perdí más el tiempo. Atravesé como rayo los metros que me separaban de la puerta, busqué mi llave y abrí la puerta entrando a la vez que llamaba a Bella por su nombre.
Max tan pronto me vio salió corriendo y lo seguí, pasamos la cocina y se detuvo en el cuarto de lavado. —Bella—llame entrando al cuarto— Jesucristo amor— me arrodille a su lado.
Estaba sentada sobre el cesto de ropa, su cuerpo recargado sobre la lavadora, su frente perlada de sudor. Mi mano fue a su frente estaba ardiendo en fiebre—Bella, ¿me escuchas? —
Sus ojos se abrieron un poco— ¿Edward? —pregunto.
—Si amor soy yo— respondí preocupado.
—No me siento bien—consiguió decir antes de volver a cerrar sus ojos.
—Lo se cariño, vamos a ir al doctor—con cuidado la tome en brazos yendo a la camioneta. Max caminaba a mi lado —estarán bien chico, quédate aquí, cuida la casa—le dije antes de cerrar.
Una vez en el auto, marque a mi padre poniendo el altavoz. Cuando le dije como encontré a Bella, le informe que iba camino al hospital…que les avisara a sus padres y a mamá.
Tan pronto estacione una camilla estaba esperándonos junto con el doctor Amun— tu padre me ha notificado lo que está pasando, la habitación ya está preparada— condujo a Bella a una habitación.
—Termómetro—pidió a la enfermera, cuando el termómetro pito yo me acerque a su lado—38.5 conecten el monitor cardiaco, traigan el ultrasonido vamos a checar al bebé—indico—apliquen mantos húmedos.
—Edward, ¿Bella ha estado sintiéndose mal?, ¿algún síntoma, molestia? — repase una y otra vez en mi mente, pero no ella había estado bien.
—Ninguno, todo estaba bien cuando la deje en casa bien antes de irme—el asintió.
—Ella debe de ser una de doscientas mujeres que presentan un cuadro en el último trimestre donde la fiebre surge de la nada, vamos hacer análisis, regreso en un momento— salió seguido por una enfermeras.
Mientras otra enfermera tomaba las muestras de sangre, atreves del monitor se escuchaban los latidos de nuestro bebito o bebita.
—Edward, ¿Cómo esta Bella? —pregunto papá entrando a la habitación.
—Le van hacer análisis, dice Amun que son pocos casos los que se han su citado pero ya se ha visto con anterioridad, todo tiene que salir bien papá— estaba nervioso y asustado.
—Claro que si Edward, todo estará bien— su mano fue a mi hombro en señal de apoyo.
Un quejido de Bella nos hizo girar a verla— amor, ¿Cómo te sientes? —pregunte tomando su mano entre las mías.
—Me duele—se quejó frunciendo su cara.
—Necesitaban tomarte muestras, pasara en unos minutos el dolor por el piquete—le comente.
—No—apretó su boca—me duele el vientre, ¡auch! —se quejó. Y fue cuando lo vi el monitor lanzaba una alteración, ¡Mierda! ¡Una contracción!
—Papá—llame con preocupación.
—Señorita busque inmediatamente al doctor Amun, dígale que es urgente que se presente— la enfermera apenas asintió antes de salir corriendo.
— ¡Me duele Edward! ¿Qué está pasando? — Bella empezaba a tener conciencia, a pesar de la fiebre ella estaba más lucida. Apretó fuerte mi mano cuando otra contracción la empujo a ello— Aun no es tiempo— lloriqueo.
¡Oh Jesús! , los bebes prematuros a los ocho meses son más delicados que los que nacen a los siete, ellos tienen menos probabilidades de sobrevivir…
¿Porque a mí?
Por favor, por favor ¡No!, el solo pensarlo me destrozaba.
Amun entro a la habitación— es lo que me temía Edward sus análisis muestran una pequeña infección en las vías urinarias, la fiebre es parte de ello y esta produce a su vez las contracciones, vamos a tratar de detener las contracciones—
— ¡Me duele, por favor! —grito desgarrando mis oídos.
—Isabella voy a revisarte—Amun se posiciono entre sus piernas para revisarla—Zafrina que tengan listo el quirófano, preparen a Isabella—grito diciéndome con eso solo una cosa, al tiempo que veía el líquido traslucido escurrir por la camilla, había roto aguas— nuestra hija o hijo iba a nacer en algunas horas— Ha roto aguas, ha dilatado muy rápido, no podemos frenar el proceso. Su bebé va a nacer hoy. Necesito que te prepares si vas a entrar con nosotros, prometo hacer todo lo que este a mi alcance para que ambos estén bien, sin embargo sabes el protocolo— me miro detenidamente—si se complica necesito que elijas a quien debo salvar—
Mis ojos se llenaron de lágrimas, qué hacer cuando la vida de los que amas está en peligro.
¿Cómo elegir a alguien? Es imposible, es difícil y egoísta.
Sin embargo sabia sin quien no podría vivir, no solo era yo… si no Zoe.
—Sálvala a ella—
—No, Edward—protesto ella—a nuestro hijo, tienen que salvar a nuestro hijo—imploro buscando mi mirada.
—A ella Amun, salven a Isabella—sin voltear a verla salí a cambiarme porque si me quedaba y la veía, iba hacer lo que ella quisiera, y yo no podía existir sin ella en mi vida.
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Tan pronto entre al quirófano todo estaba listo, fui a un lado de Bella y tome una de sus manos entre las mías.
—Quiero que salven al bebé Edward—imploro mirándome fijamente—si algo pasa, quiero que mi bebé viva, por favor—
—Todo va estar bien Bella, ambos van a estar bien, Dios nos va ayudar—tenía que ser positivo, habíamos tenido un embarazo tan normal para que al último todo se complicara.
—Isabella, estas lista—hablo Amun—vamos a empezar, cuando sientas la contracción puja—ella asintió.
—Estoy aquí amor, sé que puedes hacerlo porque has vencido tantas cosas, te amo cariño—bese su frente.
Apretó mi mano cuando la primera contracción llego a ella, mientras Amun y yo la alentábamos a seguir a cada contracción, ella no se dejaba vencer y seguía las indicaciones.
Hubo un momento en el que su ritmo cardiaco subió lo cual empezó a preocuparnos, pero ella seguía consiente y luchando fuertemente.
Después de varios empujones más su cabecita por fin salió— tenemos su cabecita, una más Bella— la alentó Amun.
Y ella así lo hizo, empujo una vez más y su cuerpecito salió— es una niña— nos dijo el doctor Amun.
—Gracias amor, gracias, fuiste muy valiente ¡Una niña Bella!— bese su frente—es una niña—
Un pequeño llorido salió de ella— vamos con tus padres unos segundos—
—Edward es ella, es una niña—lloro mi esposa—es perfecta, tan pequeñita— las lágrimas habían tomado el control de ambos. Se acurruco en su pecho reconociéndola.
—Crecerá señores, y ya veré a su padre ahuyentándole a los pretendientes— se burló Amun— despídanse de su bebita la verán más tarde—
Un grupo de pediatras la esperaban tan pronto la tuvieron en sus manos empezaron a checarla.
Mis ojos fueron a ella, como si al perderla de vista fuera a desaparecer.
—Apgar de 8, a pesar de haber nacido de 32 semanas está sana y sus pulmones se han desarrollado bien pesa 2.100 gramos y mide 46 centímetros—hablo un pediatra— pero vamos a dejarla en la incubadora para vigilarla las primeras veinticuatro horas, es lo mejor—asentimos de acuerdo.
—te amo Bella, gracias por este maravilloso regalo, descansa amor yo cuidare a ambas— ella asintió dejándose envolver por los brazos de Morfeo.
Cuando salí del quirófano agotado pero feliz, me sorprendí de ver a casi todos esperando en la sala. Tan pronto me vieron se levantaron acercándose.
— ¿Cómo esta Bella? —mi madre fue la primera en preguntar.
Sonreí—ambas están bien— sonrisas plasmaron rostros— a pesar de que nació de 32 semanas todo ha salido bien, Bella será llevada a su habitación cuando terminen de limpiarla y nuestra hija pasara unas horas en la incubadora por seguridad, pero todo marcha bien— tan pronto termine de decir cuando gritos llenaron la sala.
—Shhhh— nos silenció papá—recuerden que estamos en un hospital.
— ¿Zoe? —pregunte al ver a Emmett.
—Ella se ha quedado con Rosalie y los niños, no le hemos dicho nada, supusimos que tu querrías decírselo—asentí.
—gracias, iré por la mañana ahora ya es tarde— casi iba hacer media noche.
—Oh cariño, mi bebé ahora tiene a su bebé y es otra niña— mamá me abrazo fuertemente—felicidades hijo—
—gracias mamá a pesar de que fue inesperado y estaba aterrado, todo ha salido bien. Iré a la sala de neonatos quiero ver a mi bebita—
—Vez hijo, nosotros vamos a descansar para volver mañana. Y como iras por Zoe tu madre y yo vendremos temprano para que así puedas irte sin pendiente—me aviso.
—Gracias papá se los agradezco— así podría pasarme a bañarme y cambiarme antes de ir por Ojitos.
Después de un par de abrazos y despedidas me dirigí a la sala.
Llegue buscándola y la localice de lado derecho en la incubadora como "Bebé Cullen" estaba moviendo sus manitas y tenía el oxígeno puesto para ayudarla a respirar.
Era una guerrera igual que su madre y que su hermana.
Tan pequeña pero fuerte. Tan hermosa.
Me quede por un tiempo observándola hasta que una enfermera me saco de mi ensoñación— Señor Cullen— voltee a ver a Soledad quien me miraba amablemente.
—Somos colegas Soledad, aun cuando no esté en horario sigo siendo Edward—corregí.
Sonrió mientras sus ojos rodaban—está bien Edward, quieres entrar a ver a tu hija— mi sonrisa creció mientras asentía.
—Ya sabes el protocolo, acompáñame—la seguí para ponerme una bata y cubre bocas. Cuando estuve listo traspase la puerta donde ella estaba esperándome.
—Bueno Edward pues ve a ver a esa pequeña princesa, esta hermosa por cierto—
—Gracias— sin más avance hasta llegar a donde se encontraba, un pañal y un gorrito rosa era su atuendo. Podía apreciar la nariz y labios de Bella, unos rulos sobresalían sobre el gorrito.
Mientras sus manitas seguían en movimiento cole mi mano por el orificio de la incubadora acariciando con mi dedo su manita—Hola bebita— sus manitas pararon y con sus pequeños dedos apretó el mío manteniéndolo con ella.
—Oh me reconoces princesa, soy papá y estoy tan feliz de que estés con nosotros, a pesar del susto que nos han dado tú y mamá están bien porque son unas guerreras— su carita giraba tratando de buscar el sonido de mi voz—es hora de dormir bebita—empecé tarareando hasta que sus respiración acompasada me indico que se había dormido.
Con cuidado retire mi dedo, y me despedí de ella— hasta más de rato mi niña— aunque quise quedarme en vela toda la noche, tenía otra personita a quien visitar: mi esposa.
Así llego nuestra bebita al mundo: Sophie Cullen Swan, a los cinco meses de edad le salieron dos dientitos se veía tan linda que empecé a decirle: conejito.
Saber que nuestra niña se ha desarrollado bien a pesar de a ver sido prematura nos tiene tranquilos y agradecidos. Es una revolución de energía, nunca para ni para tomar una siesta por voluntad propia, siempre es su madre la que se encarga de hacer que descanse.
Tiene casi dos años y es una belleza, hago hijas lindas. Tiene casi todo de Bella, sus ojos claros como el cielo, su cabello mi herencia, es perfecta, es cariñosa, juguetona, adora a su hermana y al igual que Ojitos soy su favorito.
Ambas me tienen en su poder, hacen y deshacen conmigo, nos encanta verlas jugar, Ojitos le tiene mucha paciencia y comprensión. La cuida y ayuda, juega con ella, le enseña, es tan maravillosa su relación que mi corazón se llena de alegría cada que las veo interactuar.
—Edward, regresa de donde quiera que estés—su mano estaba obstruyendo mi cara me hizo reaccionar— ¿A dónde te fuiste amor? —pregunto con una sonrisilla.
—lo siento estaba recordando como nació Sophie y el susto que ambas me dieron—
— ¡Cómo olvidarlo!—miro a nuestra niña con amor—por cierto ha mandado un mensaje Alice, que como madrina de Sophie se le ha excedido la mano en los planes de la fiesta, que no vayas a ponerte como energúmeno—rio.
— ¡Dios está en su segundo embarazo y esta tiene una energía impresionante!— con cada embarazo… ¿ganaba más fuera o que rayos?—Dile que haga lo que se le antoje, pero ella va mandar a limpiar el día siguiente— bufe—
—Todos estamos ansiosos, mis padres han rentado una mini feria— me platico Bella— y tus papás un brincolin enorme— ¡Ay dios! Con la loca de mi hermana teníamos, era increíble pero con el embarazo de Sophie, Bella empezó amar las fiestas y yo termine aborreciéndolas. Claro que era el cumpleaños de mi conejita y que hicieran lo que quisieran mientras ellos sean los que limpiaran el desastre.
La relación con los padres de Bella se puede decir que esta reconstruida, mi esposa los adora y ellos a ella, son unos excelentes abuelos. Y Charlie al igual que yo es un blandengue cuando se trata de ellas.
—Va ser divertidísimo papi, Sophie va tener una corona como la mía—hablo Zoe—mami me ha dado permiso de invitar a unos amigos, mañana le entregare la invitación a Ian— joder con el mocoso.
— ¡Zoe ve a preparar todo para que tomes un baño antes de dormir!— ordeno mi esposa—en un momento estoy contigo, ve que tu papá está por cambiar de color— se burló.
—Dale con el niño, ya hasta en la sopa aparece—rodé los ojos.
—Ay Edward son niños, preocúpate cuando entre a la adolescencia. Pero aquí entre nos— se acercó hasta quedar cerca de mi oído— me preocuparía más por Sophie, que por Zoe— me apunto a donde se encontraba nuestra hija nuevamente desnuda.
—Sophie—grite levantándome rápidamente— que hemos dicho de la ropa, siempre con nosotros, solo para bañar se quita— le recordé.
—Noguta— grito— así feliz— empezó a bailar por toda la sala.
—Bella—me queje.
— ¡Oh no! Yo pedí a Zoe, te toca Sophie— salió corriendo antes que la pudiera detener.
—Conejita vas hacer que papá este pintado de canas antes de tiempo— la tome de la mano—ven vamos a preparar tu ropa para un rico baño junto a tu hermana.
—siiiii— chillo— con paitos—
—Va a ser con patitos si prometes no volver a quitarte la ropa— entrecerré los ojos.
Suspiro teatralmente— eta bien— yo pometo—
Fuimos por su ropa y nos dirigimos al baño donde Zoe nos esperaba.
Después de que ambos termináramos mojados por las salpicadas de nuestras hijas, las bañamos, secamos y preparamos para dormir.
Hace poco habíamos cambiado la cuna de Sophie por una como la de su hermana donde le agregamos un barandal por precaución. Habíamos rediseñado su cuarto y era parecido al de Zoe solo que con personajes diferentes.
Mientras Bella estaba con Sophie yo arropaba a Zoe.
—Papi— me llamo mientras sus ojitos comenzaban a cerrarse.
— ¿si Ojitos? pregunte—
—Eres el mejor papi del mundo, te amo con todo mi corazón—balbuceo lo último.
— ¡oh cariño! Yo también te amo, tú me enseñaste a ser mejor persona y a ser un papá— bese su frente— tú, Sophie y mamá son mis más grandes tesoros, por ustedes soy en lo que me he convertido ahora, duerme… que tengas dulces sueños— una vez más le di un beso mientras una sonrisa adornaba su carita.
Al salir me topé con Bella quien tenía lágrimas en su cara— eres el hombre más bueno y noble que he conocido, eres un excelente padre y te amamos,— la rodee con mis brazos.
—Gracias amor, puedo decir lo mismo de ti, eres la mujer más buena, hermosa, bondadosa, y magnifica que Dios ha creado, — bese sus labios—ahora que te parece si voy a darle un beso de las buenas noches a Sophie y después tu y yo— moví mis cejas tratando de ser gracioso— nos vamos a jugar un ratito antes de que nuestra cama sea invadida a mitad de la noche por monstruos, ruidos extraños, o pesadillas—
—Estoy de acuerdo contigo— se acercó hasta mi oído—vamos aprovechar… —susurro seximente haciéndome estremecer— ve a ver a tu hija, mientras yo entro a darle su beso a Zoe, no tardes— se encamino al cuarto de Zoe.
Oh por supuesto que no iba a tardar.
Mientras nuestras nenas dormían, mi esposa y yo practicaríamos un buen ejercicio, después de todo hay que mantener al cuerpo ejercitado y que mejor forma de hacerlo. Al fin que podía perderme un rato en el confort de mi cama.
Porque vida solo una, así que era mejor aprovecharla.
Bueno no podía irme sin darles un vistazo del nacimiento de Sophie Cullen Swan.
Ahora si es todo por ahora, espero les haya gustado y creo que se la pasaron preguntandose que sería el bebé pero me incline por una niña, Edward tendrá mucho entre las manos con ese par.
Gracias a Sole por ayudarme a terminar esta historia, sin su ayuda no podría haberlo subido tan pronto. Te quiero Sole!
Empezare a actualizar Dos Personas Una Sola Alma, también llegará a su final.
Gracias por seguir el fic!
Gracias por sus RR:
Alexandra Bellamy Pattinson, Rox93, DontEvenFight Cullen, Krisvampire, Twilightica, Ashleyswan, Sara, Rockergirl661, Chicaroberts, Tata XOXO, Robsten-Pattinson, Paola, Shley Lebrn, LicetSalvatore, Brenda-Cullen-lvashcov, Catrina00, Eleaine Haruno de Uchiha, Karla Stew Pattz, BelenxiiiZzz, Janalez, Pao Stewart, MaeCllnWay, Liz PattStew, Dracullen, Nadiia16, Yessi-Cullen93, Jacke94, Yasmin-Cullen, Gretchen Cullen Masen, Yolabertay, SolecitoPucheta, Mvfap18, MiranCullen32, Rosaswan, Mary Cullen, Twilight-love1694, MelisaAZ, Cami fics, Wen liss, Pili, Annie Roberts, Manu Vulturi Lightwood, Camille Frost, Eletwihard, Beastyle, 7355, Maricoles, Karito CullenMasen, Danigoich, SuPattinsondeCullen, Yessenya, Johana Manzanares, Lunha 222, Lurix, Kells PTZ, Magus Cullen Nati Natu, Mel lutz L, Noe Mallen, Sheyla, Princesa Luthien, Laura Carrillo, Vero, Rubi, Connie Stew, Carelymh, Tecupi, BellaJaze, Mari-mery, Thequeenredforever, Dahia, 666spektor, Karla Luna, Saraygarcia08, Ailemotta, Martuu341, Phoenix1993, Zujeyane, Fatima, Mon de Cullen, Garcia888, Roor Cullen, Hellen Masen, Chayley Costa, Caritofornasier, Veronica, Marilyn, Ksts, Vivi85, DaniiHale, Caniqui, Narraly, Crizthal, Doris, ConiDanay, Ro, Patymdn, Zonihviolet, Kjmima, DoriisAriias, JoiitaHlolaquii, Maria. 545, Lady Stew, Marielpr, Pera l.t, Wen liss, Kimjim, Mel, SalyLuna, Stefanny Cullen-Swan, Floriponcio, Belkis Lagos Vasquez, Liz PattStew, Hellen Masen, Cavendano13, Princesitajane, Karenjazz21, Katty A Cruz, Neycel, Lore562, Isa Robsten, Saha Denali, FerHdePattinson, Bella-Jaze, Bellaliz, Luna Piazolla, Albi-yo, Kady Belikov Cullen, Rommyev, Lokaxtv, Rosy Canul, JELEY20, JustBelieveP, Annie Pattinson, Maayraaykalebb, Shinigami Cullen Grey Darcy, JosWeaslyC, Sailor Tierra, EmDreams Hunter, Carla Mikaelson, Sandy56, Choiamberc, Alexhita, Andre102, Monicaviajera1819, CrazyDreamer07, Liduvina, Yessifer Cullen Hale, Mgcb, Paola Michelle Rivas, Jesk, ChicaRobsten, Deisymoon, Adriana Molina, Celina rojas, Zellideth76, Mary, Primcessa, Adriu, Aea7, Shinigame Cullen Grey Darcy, Pili, Karina s g, Adriana Molina, Shamyx, Leonor Angelita, Yoliki, Blankitapia, Cristal82, Veritob, Glow0718, Merce, Evecullengrey, Valeska Cullen, Viivii Alice, Hayna Villanueva, Claudia Venesa, Kathy, LucyGomez, Adriu, Namy33, Aidee Sanchez Salgado, aea7, Prisgpe, Celina Rojas, Kjmima, Bella Cullen Halliwell, Annabolena, Bella-maru, Odi19, Alianna09, LaChicaRoja, ELIZABETH, OnlyRobpatti, Marielpr, Salyluna, Ariyasi,CarolinaYDM, Lamunecaolivo, Caresgar26.