Su otro yo

En el salón principal de la mansión, esta Sasuke, sentado, teniendo la pierna derecha flexionada, usando su rodilla de apoyo para su brazo derecho y está afilando su espada. Viste como todo Yakuza, su mirada se ve espeluznante y algo desquiciada. No va a perder el control, no lo puede perder, las va a salvar, aunque le cueste la vida y si quiere hacerlo tiene que estar lo más cuerdo posible.

La puerta corrediza se abre dejando ver a Juugo que sostiene en su mano derecha una laptop. Se acerca a Sasuke, hincándose a su lado, colocando el pc frente al pelinegro. Como el pelinegro se lo pidió consiguió las grabaciones de todo el centro comercial, las reviso detenidamente y solo tomo las importantes.

La mirada sombría de Sasuke esta puesta en la cámara, entonces Juugo puso pause donde se ve perfectamente el enfoque de la mujer que secuestro a Sakura, y Juugo hizo zoom. El aura espeluznante de Sasuke se intensifico.

- Karin. – murmura sombrío. – dejarte viva fue un error que no pienso cometer de nuevo.

- Alguien la ayudo a salir cuando estaba internada, antes de que los policías lograran encerrarla. – explica Juugo que ya había investigado.

La puerta corrediza se abre, dejando ver a Ran y Ken que sostienen a un muy golpeado hombre que viste el traje de Yakuza como ellos, se le ve la mirada algo perturbada. Como Itachi se los ordeno ellos estarán a las órdenes de Sasuke en esta investigación y hasta que encuentren a Sakura.

- Esta es la rata. – informa con desprecio Ran y junto su compañero, aventaron al hombre haciéndolo caer de rodillas y este mira con absoluto pavor a Sasuke y tembló más cuando se posó su mirada en él.

- ¡Dijeron que si hablaba no me traerían con él! – exclama asustado, abrazando de las piernas a Ken a quien mira suplicante.

- Itachi-sama tenía razón, había alguna rata en la casa, solo así sabrían que justo hoy saldrían y como lo harían. – relata tranquilo Ken, ignorando al hombre que no deja de suplicar clemencia. – al parecer conoció a Karin cuando era su prometida, ella lo sedujo y lo tenía bajo sus órdenes para que te espiara, la cosa no cambio cuando te fuiste… no sabe nada más, él le daba información y ella no le decía nada, le pagaba el favor con sexo.

- Ah- ah. – Sasuke se pone de pie, tensando al hombre que lloro y se abrazó más fuerte a Ken, mientras Sasuke con toda la tranquilidad del mundo mueve su cuello de un lado a otro, tronándolo. – ahora notas que no era tan buena cogiendo como para ponerte en esta situación. – comenta con algo de burla y el hombre lo mira asustado, su tono de voz no concuerda con el desquicio en su mirada. – estoy por perder el control, serás de gran ayuda para descargarme un poco y poder controlarme. – el pelinegro se relamió los labios dándole un aire de depredador. – continúen con su trabajo. – ordena sin mirarlos, su vista de depredador está en la presa que piensa torturar la cual ya se ha orinado del miedo en los pantalones.

Los tres guardaespaldas asintieron, y salieron del salón. Nada más Juugo cerró la puerta y comenzaron a oírse gritos desgarradores.


Tobi está en el sillón, leyendo tranquilamente un libro con dibujitos infantiles y se sobresalta cuando la puerta fue abierta, estampándose con las paredes, viendo a una muy furiosa Karin, entrar.

- ¡Prometiste que si te ayudaba me dejarías hacer con ella lo que quiero! – exclama furiosa, se disponía a ir a torturar esa zorra y los hombres de ese imbécil no la dejaron.

- Pero Sakura-chan está dormida, no podrás jugar con ella y dudo se despierte hasta mañana. – comenta confuso e infantil.

- ¡Dámela, prometiste dármela! – exclama furiosa, dándole un manotazo para mandar a volar el libro y el enmascarado sigue con la mirada su cuento, deteniéndola donde callo.

- ¡Ya no quiero dártela! – exclama emberrinchado, volteándola a ver.

- Maldito traidor, me la darás. – ordena soltándole una bofetada, pero su mano no logro tocar al hombre que le sostuvo de la muñeca y la jalo hacia él.

- Ya no eres divertida, ya no eres de utilidad, sigue provocándome y te mato. – su voz infantil cambio, ahora suena espeluznante y sombría, que estremecimiento a Karin. – tu papi murió, ya no tienes nada, ni siquiera hombres, todos te dejaron y se fueron con otras familias al ver lo ineficiente que eres como líder, estas sola y yo te acogí, pero ya no me sirves ahora, lárgate o sino olvidare que me hiciste un favor y te lanzare a los perros.

Karin se estremeció, en el tiempo ahí sabe que ese hombre es un sádico, por mera diversión lanza sus víctimas a perros hambrientos para que los devoren, otros con menos suerte son torturados por él.

Cuando él la soltó salió corriendo, llorando de frustración y enojo, desde que su padre murió todo le ha ido de mal en peor, odia que se haya muerto, odia que la haya dejado sola, odia que no le haya enseñado a ser más lista y saber cómo mandar a su propio clan, que sin contemplación la abandono al ver lo débil que es, al ver que con ella no tenían posibilidades de ser más fuertes, más poderosos, odia que su padre no haya echo de su clan uno leal, que solo estuvieran con él por mera conveniencia, y otros hayan estado ahí por miedo, miedo que sin duda no le tienen a ella, nadie le teme, todos la desprecian y le tienen lastima, lo odia, pero no se da por vencida, se vengara.


Aimi está recargada en la pared alado de la puerta, lamiendo una paleta, con una cara de inocencia, como si no estuviera escuchando gemidos y gritos desgarradores en la otra habitación, gritos los cuales cada vez son más bajos, hasta convertirse en nulos.

En momentos como estos, odia no poder hacer mucho, Suigetsu, Juugo, Ken, Ran e incluso Neji están en chinga investigando aquí y haya, dando con cualquier cosa que los lleve con Sakura, y ella sino estuviera embarazada estaría ahí, ciertamente extraña eso, pero ni modo, ama a Neji y quiere hacerlo feliz.

La puerta se abrió haciéndola ver de reojo a Sasuke que esta todo manchado de sangre, incluso algunos trozos de piel y sesos se le han pegado en la ropa, mira de reojo hacia la habitación que hay salpicaduras de sangre por todos lados, dedos y uñas tirados junto con algunos dientes, extremidades separadas del cuerpo, y la cara de la sucia rata esta sin vida, pero con la expresión de sufrimiento que tuvo.

- ¿Mejor? – pregunta curiosa, pero parpadea confusa cuando Sasuke estampo las manos en la pared, en cada costado de su cara, dejándole ver esa mirada aun desquiciada.

- Seria más fácil. – dice algo ido, tomándole el rostro con una mano, manchándola de sangre, le acuno la mejilla. – que Sasuke se hubiera enamorado de ti, estas igual de rota, y ya nada más te puede romper…

- Perder a Neji lo haría. – responde tranquila, sosteniéndole la mirada, lo sabe, esta es una de las tantas personalidades de Sasuke, esa que solo sale cuando las demás están fuera de control, la analítica.

- Neji. – susurra sombrío en su oído. – si Sasuke pierde a Sakura y a su hija se va a convertir en un monstruo, si eso pasa aléjate y llévate a Neji, o va a querer convertirte en el mismo monstruo.

Aimi frunce el ceño, Sasuke tiene varias personalidades, y solo Sakura logra mantenerlas a control o a raya, y que solo el verdadero Sasuke siempre este presente, es tan celoso que no quiere ni a sus propias personalidades cerca de ella. Pero esta personalidad es tan analítica y fría, pero a la vez es la más sensata.

- Ahora ve por tu Neji y ayúdale a buscar a Karin, la quiero viva, ella sola no pudo haber planeado esto, es tan tonta. Yo mismo le sacare la información que necesito, Sasuke se va a tomar un descanso por ahora.

Sasuke se separó de ella y la peli plata tiene el ceño fruncido, otro aspecto es que cuando Sasuke deja salir esa personalidad es la más aterradora, porque puede torturarte de una forma inimaginable teniendo una expresión tranquila y hasta aburrida. Esa personalidad no parece tener ningún sentimiento más que el de protección hacia los que son especiales para Sasuke.

- Aimi creo haberte dado una orden, ¿cómo es que sigues aquí mirándome? – pregunta tranquilo.

- Ya. – la peli plata se va, alejándose ante la mirada tranquila de Sasuke.


Naruto tuvo una corazonada, su instinto le decía que siguiera a Karin y no la detuviera para regresarla a la cárcel. Y ahora confirma que seguir su corazonada fue la mejor idea que tuvo. Vio como Karin secuestro a Sakura, Sakura, su amiga está viva, la siguió hasta la mansión donde la encerraron, entrar solo a esa mansión será muy complicado, es por eso que siguió a Karin cuando salió de ahí, y es así como ahora se encuentra en el estacionamiento donde ella vive, se ha colocado atrás de ella, apuntándole con el arma en la nuca, necesita respuestas y sabe esa mujer las tiene.

- Hola, Karin. – saluda amigable teniendo esa sonrisa zorruna que lo identifica.

Karin no reconoce la voz, pero el solo hecho de que le apuntan con un arma la puso nerviosa.

- Vamos a tener una larga charla. – el rubio se las ingenió para esposar sus manos tras la espalda de ella.

- ¿Quién eres? – pregunta nerviosa.

- Oww… me has olvidado. – comenta con falso dolor, volteándola.

- ¡El policía! – exclama sorprendida. – ¡tienes que ayudarme! – exige, necesita protección, si los Uchiha se entera lo que hizo está perdida por eso pensaba salir del país.

- Nos ayudaremos mutuamente. – el rubio sonríe socarrón y Karin tuvo un mal presentimiento.


Neji en el asiento del copiloto mira enfadado a Aimi que conduce, tenía un trato con Sasuke, y ahora lo envía con Aimi a buscar a esa tal Karin. Su esposa no debería estar ahí, pero no pudo ir a reclamarle a Sasuke, joder, si hasta Juugo y Suigetsu lo metieron a fuerza al automóvil, razón por la que va manejando ella y no él.

- No te había dicho esto, pero, deberías saberlo. Seguramente has notado que Sasuke se comporta de repente de formas que te hacen imaginar que no es el mismo. – comienza a hablar Aimi y el castaño frunce el ceño.

- Algo. – de echo si lo ha notado, solo que son momentos cortos, minutos, de pronto vuelve el mismo loco de siempre.

- Esto que te diré Neji no quiero que lo platiquemos nuevamente, mucho menos con nadie. – advierte sin dejar de mirar al frente.

- Sabes que no diré nada que me confíes. – responde serio y aun enfadado.

- Cuando Sasuke era un niño fue secuestrado junto con su madre, no tenía ni seis años cuando fue obligado a ver como violan y torturan a su madre hasta la muerte, unos enemigos de Fugaku.

El castaño ensancha los ojos, realmente horrorizado y asqueado, por mucho que no le agrade Sasuke era solo un niño.

- Súmale que Fugaku después empezó a llevarlo a sus caserías donde hacía lo mismo con otras personas, además Sasuke fue testigo de cómo Fugaku violaba a menores.

- ¡Dios Aimi, ese hombre era un monstruo! – exclama Neji horrorizado porque estuviera cerca de ella.

- El peor, incluso violo al guardaespaldas de Itachi, fue ahí cuando la mato.

- Que te hizo a ti. – Neji jamás agradeció tanto que lo mataran, no quería más tiempo a ese monstruo con la mujer que ama.

- Algo de tortura psicológica, entrenamientos duros, tortura física para hacernos los desarmados que somos.

- ¿Como? – Neji aprieta con fuerza los puños en su ropa y tiene su rostro inclinado hacia abajo.

- ¡No creo que sea necesario…!

- Dímelo Aimi! – grita más enfadado y la peli plata suspiro.

- No me afecta, solo me hizo lo que soy. Solo que si me traumo un poco en el sentido de si alguien me golpea me convierto en una versión loca y más sádica, ya sabes algo sanguinaria, no tanto como Juugo cuando ve sangre, pero si al estilo de Suigetsu cuando se enoja, así que no creo que sea necesario…

- Necesitas decírmelo Aimi, necesito saber porque a veces tienes pesadillas que te hacen llorar.

La peli plata pisa a fondo el freno, lanzándolos hacia adelante que de no ser por el cinturón se estampan con el vidrio y lo voltea a ver sorprendida.

- ¿Hago eso? – pregunta sorprendida.

- Todas las noches, gritas y te remueves, lloras. La única forma de calmarte es cuando te abrazo y beso. – no se sorprende por la sorpresa de ella, ha notado como ella sigue dormida, como en la mañana siguiente se ve tan normal, al inicio pensaba trataba de ignorarlo y él no decía nada por incomodarla.

- ¿Desde cuándo? – pregunta aun sorprendida y avergonzada, por ser vista tan vulnerable que despierta no ha mostrado, de echo dudaba existiera eso en su persona.

- Lo has hecho siempre Aimi. Desde que estábamos en preparatoria paso la primera vez que nos quedamos dormidos en la misma habitación.

La peli plata pega su frente al volante, si se pone a analizar, solo teniendo a Neji a su lado a conseguido dormir profundamente, cuando no, apenas y duerme, no tan profundo, sabe no sucede eso porque cualquier movimiento la despierta, sabe que no pasa eso porque ya Suigetsu, Juugo o Sasuke se lo hubieran dicho, o andarían burlándose o ya de plano la mandaba Sasuke con un psicólogo.

Ella nunca ha necesitado sentirse segura con nadie, aun así, Neji la hace sentir segura, como si el estar con él nada le podría pasar porque él no lo permitiría, tal vez por eso consigue dormir profundamente con él y descansar, y por eso sueña y la parte débil que Fugaku mato sale en sus sueños, sueños que no recuerda y que al parecer Neji calma.

- Aimi. – Neji la endereza e intenta hacer que lo mire, pero ella desvió la mirada, sabe que odia verse débil. – necesito saber qué es lo que te pone así…

- Es ridículo, y esto no es de lo que quería hablar. – le dice enojada, alejándose y encendiendo de nuevo el automóvil, empezaron a pitar los demás autos porque se detuvo de pronto. – Ese tipo no quería que tuviéramos sentimientos Neji, así que hizo lo necesario para matarlos, nos hacía tener una mascota y encariñarnos, para luego hacer que la matáramos, si desobedecíamos nos sacaba desnudos al frio y nevando sin comer, nos hacía ver como tortura personas, nos golpeaba con varas solo por mera diversión, mataba cada sentimiento y no se nos permitía jugar, cosas así Neji, ¿en verdad quiere que te la cuente todas? – pregunta brusca.

- No. – murmura sombrío, también enojado, odia no haber estado ahí para protegerla.

- ¿No? No quieres saber que también me tocaba cuando me desnudaba para golpearme, es bueno no me haya follado aun e Itachi lo haya matado antes de que lo hiciera, pero una que otra mamada si me obligo a hacerle cuando tenía cinco sin mal no recuerdo, también llego a meterme un par de dedos…

- ¡Suficiente! – grita enojado, siente un jodido nudo en la garganta.

- Querías saberlo ¿no? – le pregunta también en un grito. – cada que me hacía desnudarme para golpearme se relamía los labios como el depravado que es, se sentaba y decía que me comería un dulce, ¿sabes cuál era ese dulce?… solo te diré que se bajaba los pantalones al de…

- ¡Basta Aimi! – le grita. – perdón, no debí presionarte, yo solo quería saber que era lo que te torturaba en las noches. – le grita frustrado.

Aimi parpadea al oírle la voz, lo mira de reojo notando que se cubre el rostro. Neji suena como si el haber oído eso lo lastimara más de lo que la lastima a ella. Rápidamente estaciono el vehículo y le tomo el rostro, obligándolo a que quite las manos, él tiene los ojos rojos como si quisiera llorar, se le ve tan dolido.

- No debí presionarte, no pensé fuera tan monstruoso. – le dice serio, se le ve enojado, frustrado y dolido, no entiende como ella le puede sonreír así, como puede sonreír así, ahora entiende lo falsas de sus sonrisas, pero también recuerda que solo a él y a su hijo ella ha mostrado esa sonrisa cálida y sincera, con él empezó a mostrar sonrisas sinceras.

- No vale la pena recordar cosas así, pasaron Neji y él ya no está aquí…

- Es lamentable porque querría hacerlo sufrir por todo lo que te hizo. – el castaño pega su frente a la de ella.

- Lo sé. – responde divertida. – yo también, a la vez lo agradezco, sé que hubiera sido peor si Itachi no lo hubiera matado. Así como también es por algo que te digo que Sasuke teniendo el poder, no ha repetido lo que hizo su padre y ha dejado que Touya tenga una infancia normal a diferencia de nosotros. – el castaño frunce el ceño.

- Él no es su dueño Aimi, no tiene derecho…

- Pero si el poder Neji, tal vez no lo entiendas porque no naciste en este clan, pero aquí las cosas son así, el líder tiene completo control de sus hombres y sus hijos. Prácticamente desde mocosos se te lava el cerebro, tu creciste donde eres libre yo no, pero eso no importa ahora, no es el tema en este momento, ya resolveremos esa clase de cosas después. Ahora lo que importa es encontrar a Sakura, pero para eso debes entender muchas cosas. Sasuke, Suigetsu y Juugo también fueron obligados a ver cuándo Fugaku hacia esas cochinadas conmigo, las hacía con Juugo y Suigetsu también, Sasuke se salvó por ser su hijo, aun así te das cuenta el nivel de depravación que hubo en nuestra infancia y la mente de Sasuke siempre fue débil, demasiado, es por eso, por todo lo que vivió es que estuvo levantando defensas en su mete, creando otras personalidades que salen en el momento que la mente de Sasuke está cansada, has visto la del niño indefenso que llora viendo el trauma de su madre, la del desquiciado que Fugaku llevaba a casar, y hay otras más. Pero esta la más peligrosa, la analítica y sin sentimientos, la que protege a Sasuke cuando él ya no soporta lo que está sintiendo, salió ahora. Esa personalidad de Sasuke es muy protectora, me protege a mí, a Suigetsu, a Juugo, a Itachi, incluso a protegido a Touya, y en especial protege a Sakura, pero a ti no te protegerá, si haces o dices algo que no le parece no dudara en matarte, esa personalidad no duda, actuó sin más, no piensa consecuencias, solo elimina los estorbos, parece no sentir nada, ni furia, ni comparación, solo protege y analiza lo que le conviene a Sasuke. Esa personalidad salió cuando salvo a Sakura cuando fue secuestrada y esa personalidad termino con ella, es por eso que Sakura sintió que a Sasuke no le importaba, es la más compleja. Esa personalidad nació cuando no pudo proteger a su madre, su necesidad de querer protegernos a todos los que le importan la hizo nacer. Puede, tal vez que no te haga nada, pero no es inteligente tentar la suerte, esa personalidad es peligrosa y es por eso que Juugo con ayuda de Suigetsu te metieron al auto y no te dejaron reprochar. Esa misma personalidad me ordeno te ayude a buscar a Karin, y sé que ibas a reclamarle por eso, si eso le hubiera parecido un estorbo porque atrasas lo que él quiere que hagas te pudo haber matado sin pesar, las personas son solo peones, y si estorban en la protección de los que quiere, elimina esos peones, y no puedes actuar sin más ante esa personalidad... sin saber si eres o no importante para Sasuke, que aunque sea un hijo de puta en el momento que te considera importante o especial en su vida, esa personalidad no te hará nada. No sé si fui clara, trato de decírtelo para que lo entiendas.

- Algo. – Neji le sonríe levemente.

- Yo solo no quiero perderte Neji, no hagas nada que me haga perderte, yo no podría.

Ahí está, esa mirada que pone ella cuando teme que él desaparezca, ha conocido más de esa mujer en este tiempo de lo que conoció en la preparatoria y la ama más que nunca.

- ¿Y crees que te dejaría viuda y sola con esa panda de psicópatas? – pregunta tranquilo. – te amo Aimi, y todo estará bien, me encargare de ello.

- No sé porque te creo. – responde divertida y el castaño le dio un suave beso que ella respondió de la misma forma.


Naruto se siente que se acerca a la verdad, necesita solo saber lo que realmente pasa, con eso le ayudara la mujer que tiene amarrada en la cajuela la cual lleva con Shikamaru para que la interrogue, luego ira con Kakashi que es bueno en los planes y salvaran a Sakura. Él tenía razón, su amiga está viva y a poco de salvarla de las manos de los Yakuza. Sabía que ese Uchiha la tenía, vio todo lo del centro comercial, y ahora otro Yakuza se los robo a ellos, muchas dudas, pronto se resolverán.

Pero su felicidad se rompió cuando en un semáforo se detuvo y volteo al automóvil de alado, como si estuvieran coordinados el hombre que va como copiloto en ese automóvil también volteo y ambos ensancharon los ojos.

Ahí está ese imbécil que los traiciono, el culpable de que secuestraran a Sakura, pero en especial el culpable de que Hinata esté sufriendo por no saber nada de él, por estar siempre preocupada, buscándolo por todos lados, tratando de localizarlo, al instante la expresión del rubio se tornó sombría.


- ¡Acelera Aimi! – ordena Neji haciéndola voltear y ver al rubio. – ¡Hazlo, es policía y me reconoció!

La peli-plata ensancha los ojos, y acelero, no importándole siga en rojo, esquivando fácilmente los vehículos, no es la primera vez que huye en vehículo, aunque si, Juugo es mejor en esto, por eso siempre conduce.

Pero el rubio también acelero, entonces se atravesó evitando que continúen, está por dar reversa, pero un automóvil choco con ellos golpeándolos atrás, aturdiéndolos. Cuando alzaron la mirada el rubio ya está con un arma apuntándolos desde afuera.

- ¿Cómo estás? – Neji se muestra serio y no quita su mirada del rubio que no deja de apuntarlos.

- ¡Sal bastardo traidor, sal de una vez que meteré mi pie en tu culo! – grita Naruto furioso.

- Todo bien. – Aimi inconscientemente lleva una mano a su vientre, todo bien, no se golpeó.

- ¡Sal puto Hyuga! – Naruto golpeo el cofre del vehículo.

- ¿Y Eimi? ¿No te golpeaste?

- ¡Que salgas bastardo, te pateare el culo antes de meter una bala en tu cabeza! – el rubio sigue golpeando el cofre.

- No. – la peli plata quita su mirada seria del rubio para ver su vientre al sentir la mano del castaño.

- Espera aquí, no hagas nada impulsivo. Yo lo arreglo. – el castaño está por salir, pero voltea hacia Aimi que le sostuvo el brazo.

- Neji ten cuidado. – le dice mirando suplicante, mostrando miedo por él.

- No te preocupes Aimi, es un cabeza hueca, podremos controlarlo. – Neji le sonríe intentándola tranquilizar. – confía en mí.

Con pesar lo soltó permitiendo que salga.

- ¡Al fin sales imbécil traidor! – grita el rubio sin dejar de apuntarlo con el arma. - ¡todo es tu jodida culpa, nada, absolutamente nada va a emendar lo que hiciste!… ¡di algo bastardo! ¡¿Sabes cómo has tenido preocupados a tu familia, a Hinata-chan?! ¡¿Sabes que por tu culpa Sakura-chan fue secuestrada por los Uchiha?! ¡Joder nos hicieron creer que la habían matado!

- Naruto estas llamando mucho la atención, larguémonos a otro lado a hablar o vendrá la policía. – le dice tranquilo, no tarda en venir la policía y solo quiere alejar a Aimi del peligro.

- ¡Eso quiero imbécil, mereces pudrirte en la cárcel!

- Cierra la boca rubio tonto. – le dice amenazante Aimi estando atrás de él apuntándole la nuca con el arma.

- ¡Mierda Aimi, te dije no seas impulsiva! – le grita enojado Neji, no vio en qué momento se colocó atrás del rubio, aunque su atención estaba en él y posiblemente ella aprovecho que la del rubio estaba en Neji para deslizarse.

- Vi un punto ciego y lo aproveché. – la peli-plata le guiña un ojo. – ahora tu suelta el arma. – ordena quitando el seguro.

Naruto gruñe maldiciones se distrajo, estaba tan cerca, siempre por impulsivo la caga y ahora no estaba con él para que le cubran la espalda y limpiar las cagadas que hace por impulsivo.

- Suéltala. – ordena y Naruto maldiciendo la suelta. – cariño podrías por favor abrir la cajuela del carro del rubio. – le pide a Neji que gruñe maldiciones, pero igual hace lo que le pide.

Cuando abrió la cajuela Neji ensancha los ojos, y Aimi que fue atrás de él empujando al rubio también ensancha los ojos.

- Vaya, vaya, no fue tan mala suerte toparnos con el rubio, nos trajo hacia quien buscábamos. – comenta sorprendida viendo a Karin amordazada que al ver a Aimi ensancha los ojos con horror, e intenta removerse tratando de soltarse.

Naruto aprovecho la distracción y le dio un golpe a Aimi en el brazo haciéndola tirar el arma y la empujo tumbándola. La intención era golpear a Neji, pero se sorprendió al verle la barriga a la mujer.

- ¡Aimi! – Neji esta alado de ella. – ¿estás bien? ¿Dónde te golpeo? Te dije que no seas impulsiva... ¿El bebé? ¿Cómo están?

- Solo me pegue en las pompas y me golpeo el brazo, no es nada. – le responde.

- Si necesitamos hablar. – Naruto se soba el puente de la nariz. – ¿segura que estas bien? – Naruto mira preocupado a Aimi. – en verdad lo siento, no era mi intensión, yo solo no sabía. – el rubio muestra culpabilidad y preocupación haciendo que Aimi lo mira como el tonto que es, pudo aprovechar esto para joderlos a los dos.

-Más te vale no la hayas lastimado imbécil. – le dice enojado Neji, quiere golpearlo, pero más quiere sacar a ella de ahí, ya se oyen las ambulancias. – salgamos de aquí.

– ¡Rayos mi cabeza está llena de dudas! – exclama removiéndose el cabello, para después cerrar la cajuela y ayudar a Neji a ponerla de pie.

- ¿Segura que estas bien? – pregunta pasándole un brazo por la cintura mientras camina hacia el vehículo.

- Vamos a un hospital a que la revisen. – sugiere el rubio abriéndole la puerta de atrás de su vehículo-

- ¡Que estoy bien, salgamos de aquí que la policía se acerca! – grita histérica Aimi.

- Soy la policía. – responde Naruto. – pero si, vámonos. – responde nervioso al tener la mirada de Aimi.


Es así como los tres terminaron en el vehículo del rubio que arranco ante la mirada de los curiosos, dejando el otro vehículo ahí.

Naruto observa por el espejo retrovisor como Neji abraza a la mujer, tiene su mano en el vientre de ella y le está diciendo quien sabe que, en el oído, de vez en cuando le rosa la nariz con la mejilla y se la besa, le sorprende ver a Neji siendo tierno con alguien, verlo con una mujer, nunca lo vio con alguna, según Hinata porque siempre fue discreto, aun así, sabe que el castaño no es de demostraciones públicas, y ahora a pesar de estar él no deja de estar de cariñoso.

Le puso más atención a la mujer, es demasiado hermosa, no lo había notado, de echo parece sub real y con su barriguita se ve muy tierna. Entiende porque lo tiene tan colado, porque lo conoce bien, sabe que está muerto de la preocupación y muy enamorado, solo por ello transformara a ese amargado en esa cosita tierna.

- Ya no te preocupes, estoy bien. – le dice Aimi solo para que él la oiga, poniendo una mano encima de la que él tiene en la barriga. – me preocupa otra cosa. – la peli plata apunta con la mirada al rubio que los observa a través del retrovisor.

Neji pego su frente en la mejilla de Aimi y mira de reojo a Naruto, sí, eso también le preocupa, aunque el rubio no tiene intenciones de entregarlos, sospecha eso, quiere respuestas.

Entonces Naruto hace una exagerada exclamación a la vez que ensancha los ojos.

- ¡Ya la recuerdo, es una de las guardianes de Sasuke! – exclama cayendo en cuenta de eso.

- ¿A dónde vamos Naruto? – lo corta Neji.

- A un hospital. – responde con obviedad, entonces se tensa porque Aimi ya lo apunta con un arma.

- Ni se te ocurra rubio, iras a donde te diga.

- Oh vamos, Neji dile a tu mujer que no me apunte con eso, me pone nervioso. – Naruto suspira con pesadez. – somos primos, aunque te apunte no te iba a matar solo patearte el culo y exigirte explicaciones.

- Aun así, la golpeaste imbécil. Si no te mata ella lo hago yo. Si algo le pasa a mi hija…

- ¿Hija? ¿Sera niña? – pregunta emocionado. – cuando se lo cuente a Hinata-chan seguro grita de la emoción, adora los niños.

Neji suspira con pesadez, nunca entenderá a Naruto, no reacciona como alguien normal debería hacerlo.

- Tengo muchas dudas, y vale, no iremos al hospital aun así me preocupas…

El rubio los mira impaciente porque le diga su nombre y Aimi mira a Neji sin entender ni una mierda.

- Aimi. – le dice Neji.

- ¡Aimi, es verdad! – Naruto sonríe amigable. – un gusto, soy novio de Hinata-chan, supongo somos ya familia. – Aimi pone una mirada de no tener puta idea de qué hacer con ese rubio y Neji se encoge de hombros. – y como decía deberían revisarte Aimi, sé que no te golpee fuerte solo te empuje, pero caíste, además pudiste haberte asustado y…

- ¡Ja! – exclama ante la idea de asustarse. – estoy bien. – responde cortante, dejando de apuntarlo y apoyándose en el respaldo, pero sin guardar su arma. – ahora aléjate y llévanos a un lugar seguro, después me darás a la mujer que tienes en la cajuela. – ordena.

- Claro que no. – Naruto sonríe socarrón. – tengo muchas dudas, algunas las aclararan ustedes otras Karin, pero si iremos a un lugar seguro. – Neji tuvo un muy mal presentimiento


- ¡Es una puta broma! – exclama el castaño al ver que estaciono el vehículo en el departamento donde vive con su prima.

- ¿Quién pensaría que estarías aquí? – pregunta divertido el rubio. – además Hinata-chan está muerta de la preocupación, le debes explicaciones a ella también.

- ¡Eres un imbécil Naruto, hay testigos, te vieron en tu show de hoy y seguro te buscan aquí, además involucraras a Hinata!

- Rayos, no pensé en eso. – comenta cayendo en cuenta y Neji le golpeo la nuca.

- No es tan mala idea. – comenta Aimi haciendo que su esposo la mire como la loca que es. – sí, lo buscaran a él, pero no a nosotros, si vienen por él, Hinata puede mentirle mientras nos esconden.

- Se involucrará Hinata. – le dice entre dientes.

- Que se consiga un mejor novio que este ya la involucro. – comenta indiferente bajándose del vehículo y Neji gruñe maldiciones.

- Te tienen bien mangoneado, ¿a qué sí? – Naruto mira juguetón a Neji y este hunde su puño en la cara.

- Pagaras eso imbécil! – grita indignado, pero Neji se bajó del vehículo siguiéndola.


Cuando Hinata recibió a Naruto no pensó que él vendría con su primo Neji, mucho menos con Aimi, embarazada. No la ve desde la preparatoria, pero la reconocería, esa belleza es difícil de olvidar. Muchas dudas y sorpresas la albergaron, pero en especial la felicidad por ver a su primo bien, es por ello que está abrazándolo, llorando de felicidad al verlo bien y Neji responde el abrazo, dándose cuenta que lo extraño.

Aimi que sigue en la entrada chasquea la lengua, le dan celos, aunque sea su prima, pero trata de ser compresiva. Así que se adentró al departamento y fue a donde supone es la cocina, muere de hambre.

- Claro, pásale. – comenta divertido el rubio.

- Oh Neji, ¿porque te fuiste así? ¿Qué paso? – pregunta Hinata al separarse. – ¿está embarazada de ti? – pregunta curiosa, aunque ya sabe la respuesta.

- Si. Tiene cinco meses.

- Vaya, tu primer hijo. – comenta sorprendida.

- De echo. – Neji se rasca la nuca algo incómodo. – el segundo. Nuestro primer hijo tiene ocho años. – los dos ensanchan los ojos sorprendidos.

- Mira, que escondidito te lo tenías. – exclama el rubio palmeándole fuertemente la espalda, casi tumbándolo.

- Tienes muchas explicaciones que dar Neji. – Hinata lo mira seria y el castaño frunce el ceño.

- Cuando me fui hace nueve años estaba embarazada, al rencontrarnos se enteró, conoció a su hijo, y escapo de su aburrida vida para irse con nosotros, fin.

Los tres voltean y el par de Hyuga se muestran incrédulos al verla salir de la cocina con un pastel completo que devora e irse a sentarse a uno de los sillones para comérselo mas cómoda.

- Am… con más detalles. – aclara Hinata y Aimi roda los ojos.


Si, les conto algunas cosas, como del porque los traiciono, fue sincero, la escogió a ella y a su familia. Hinata hasta cierto punto lo entiende, aun así, no puede evitar no estar de acuerdo que su primo se volviera un criminal por culpa de esa mujer, pero ha notado lo muy enamorado que esta, no dirá nada al respecto. Lo que si exigió es conocer al hijo de su primo que le mostro fotografías que tiene en el teléfono.

- Se parece mucho a ti Neji! – exclama sorprendida y maravillada. – ¿y dices será niña el que viene? – pregunta emocionada.

- Si.

- Y con todo mi corazón espero se parezca a Aimi. – comenta Naruto llegando con un par de cervezas dándole una a Neji.

Aimi mira a esos dos, se comportan como si fueran de visita, enserio que son raros. Neji también está algo destanteado con la situación, aunque a la vez cómodo, ver a un miembro de su familia, alguien que dejo atrás y contándole sobre sus hijos, si, le está gustando.

- Aunque me pese estoy de acuerdo contigo. – Neji sonríe de forma torcida.

- Bien, ahora lo importante. Porque ayudaste en el secuestro de Sakura. – Naruto se puso serio al mirar a Neji.

- ¡Ya te dije que Neji no sería capaz Naruto! – le grita Hinata, pero el rubio mantiene su mirada en Neji que se la sostiene.

Aimi roda los ojos.

- ¿Naruto verdad? – comienza a hablar. – mira aquí tu noviecita sabía que Sasuke y Sakura tuvieron algo, en fin, lo retomaron. Sakura no estaba secuestrada. – con eso mintió y Neji la mira con reproche. – se fugó con Sasuke, y está embarazada. Y la mujer que tienes en la cajuela…

- ¡¿Tienes una mujer en la cajuela?! – exclama Hinata sorprendida.

- ¡¿Sakura-chan está embarazada?! – ahora es Naruto.

- Si, de Sasuke, y la mujer que tienes en la cajuela la secuestro, necesito saber dónde la tiene antes de que la lastime. Nosotros huimos y nos escondimos porque tenemos guerras de bandas no queríamos poner en riesgo a Sakura por eso fingimos su muerte, aunque la cabezona se negó, si, al inicio no la llevamos a la fuerza, pero por su bien, ahora estaba felizmente esperando a su hija junto con Sasuke hasta que fue secuestrada. Terminemos con este rollo y entréganos a Karin, el tiempo corre y Sakura esta cada segundo en peligro.

- Con que eso paso.

Hinata y Neji caen estilo anime al ver que Naruto se tragó todo.

- Ahora entiendo porque no se comunicó, estaba escondida para no ser el blanco de los Yakuza, seguramente avergonzada por fugarse con uno. – comenta seguro, conoce a su amiga.

El par de Hyuga se alzan algo incrédulos.

- Amm… Naruto-kun, no es que dude de Aimi, pero esa historia suena extraña. Es verdad que Sasuke y Sakura-chan tuvieron algo, pero ella lo odiaba por como la dejo…

- Aclararon sus problemas, Sakura se enteró que Sasuke lo hizo para protegerla. ¿Verdad Neji? – Aimi le sonríe angelical a su esposo, que puso los ojos en blanco.

- Si. – responde entre dientes.

- Si no nos creen del todo bien pueden preguntárselo a Sakura cuando la rescatemos, ahora nos iremos antes de que venga alguno de tus amigos policías. – Aimi se pone de pie. – nos llevaremos tu automóvil con Karin en él, y cuando salvemos a Sakura le decimos que te llame.

- Oh, genial. Iré con ustedes. – Naruto también se pone de pie. – y ayudare a rescatarla.

- No creo que…

- Insisto, mi secuestrada mi automóvil.

- Es un cabezón, no nos dejara ir sin él. – le dice Neji mirándola.

- Como sea, si Sasuke lo mata no me hago responsable. – comenta caminando hacia la puerta, se terminó el pastel, se va, pero cuando abre la puerta ensancha los ojos cuando un arma la apunta, y dicha arma es sostenida por Kakashi y Shikamaru.

- ¡¿Les llamaste?! – Neji mira al rubio enojado.

- ¿Cómo crees? – Naruto sonríe socarrón. – les mande un mensaje. – Neji lo mira con ganas de matarlo, resulto más listo de lo que pensó

- ¡Naruto! – lo reprime Hinata.

- ¿Tan rápido te quieres ir muñeca? – pregunta Kakashi sonriendo socarrón.

- Es tarde para que la muñeca este sola en casa, venimos por ella. – comenta Suigetsu tranquilo apuntándole en la nuca a Shikamaru mientras Juugo hace lo mismo con Kakashi.

Hinata retiene un grito, su casa se convertirá en un campo de batalla.

- ¡Aimi! – Neji la mira con reproche.

- También mande mi mensaje. – responde encogiéndose de hombros, pero ensancha los ojos cuando Kakashi cae ante una patada que recibió en su costado y tiene a Sasuke con su traje, expresión tranquilo frente a ella, con una mano apuntando a Kakashi.

- ¡¿Lo trajeron?! – les grita con reproche a esos dos les dijo que no les dijera nada.

- Se nos pegó. – Suigetsu sonríe culpable.

Kakashi está por alzarse, pero se queda quieto cuando Sasuke quito el seguro, no lo mira, su mirada está puesta en Aimi. Naruto ya saco su arma, no supo porque, ese Sasuke le resulto peligroso, diferente al que conoció y puso a Hinata atrás suyo mientras Shikamaru esta tenso, no sabe porque su mera presencia lo intimido, algo le dice que no haga nada o podría lamentarlo, como siempre Naruto metiéndolos en problemas.

- Veo que estas bien. – responde Sasuke tranquilo, para luego mirar a Kakashi. – no me gusta que apuntes a mis chicos con armas, menos a mi muñeca. – comenta indiferente.

- ¿Tu muñeca? – pregunta enojado Neji, pero Sasuke sigue mirando a Kakashi.

- Mmm… Sasuke creo no es buena idea, llamaremos más la atención es un condominio. – comenta Aimi y Sasuke la mira a ella, se encoge de hombros, guarda su arma y se adentra al departamento, sentándose en un sillón, cruzando su pierna y encendiendo un puro de lo más tranquilo como si el ambiente no este tenso y Naruto no lo apunte con un arma.

- ¿Donde esta Karin? – pregunta ahora mirando a Neji que tiene el ceño fruncido, ese no es el Sasuke con el que ha convivido, es muy diferente, cuerdo, tranquilo, sombrío y siente lo muy peligroso que es, un mal movimiento y sospecha estarán muertos.

- En la cajuela del automóvil de Naruto. – le responde el castaño serio.

Sasuke solo le dedico una mirada a Juugo y este sin más se fue de ahí, Suigetsu saco otra arma y apunta a Kakashi y Shikamaru para que no se muevan.

- Ahora estoy en un pequeño dilema Hyuga. – comenta mirando al castaño. – trajiste a la muñeca del grupo a la casa de un policía, la pusiste en peligro a ella y a su hija, no sé qué hacer contigo.

- Es mi hija también Uchiha. – Neji lo mira serio.

Sasuke se puso de pie y camino tranquilamente hacia Neji.

- Sasuke por favor, nunca estuve en peligro, sin contar que se cuidarme sola y Neji jamás nos pondría en peligro. – le dice seria Aimi, enserio cuando Sasuke toma esa personalidad es muy impredecible.

Sasuke se detuvo cuando la punta de sus pies toco la de Neji haciendo que su cara quede alado de la de él que se mantuvo inmune.

- ¿Enserio? – comenta Suigetsu sarcástico al ver que Naruto apunta con el arma a Sasuke en el costado contrario al que Neji tiene su rostro.

- Venga Uchiha es mi casa, solo lárgate. – ordena Naruto.

- Pero hiciste un buen trabajo, buen chico… además me agradas. – le dice tranquilamente a Neji en el oído y este entrecierra los ojos, aunque no lo demuestra sospecha se divierte el maldito.

Naruto frunce el ceño porque el desgraciado como sino temiera a la muerte coloco dos dedos en el cañón y alejo su arma.

- Ya perdimos mucho tiempo aquí. – comenta tranquilamente caminando hacia la puerta. – despídete de tus viejos amigos Neji. – comenta sin voltear atrás.

- ¡Si vas a rescatar a Sakura-chan te ayudaremos! – le grita Naruto haciendo que todos, con la novia incluida lo miren como el loco que es.

- Habla por ti Naruto, jamás ayudare a unos Yakuza. – comenta Shikamaru.

- ¿Rescatar? ¿Que no son ellos los que la tienen? – comenta Kakashi serio.

- Al parecer Sakura-chan en verdad solo estaba siendo protegida por ellos, y está embarazada del teme, pero otros Yakuza la secuestraron, o algo así, Neji lo explica mejor. – comenta el rubio.

- Y dicen el cabeza hueca soy yo. – Suigetsu le guiña un ojo a Aimi que roda los ojos.

- Oh, no están mal algunas manos extras, ¿tu que dices Aimi? ¿Son de fiar? Has convivido con ellos. – Sasuke mira curioso a Aimi.

- Apenas los conozco. – comenta con fastidio.

- Neji. – Sasuke mira a Neji haciendo que Suigetsu y Aimi se miren entre ellos, al parecer Sasuke confía mucho en Neji, conociendo a esa personalidad es seguro que toma entre uno de los que debe proteger, cosa que alivio a la peli plata, solo es así cuando la persona le agrada, aunque el verdadero Sasuke no lo admita.

- Si es por Sakura son de fiar, solo que no les enseñaría donde vives si fuera tú. – le responde indiferente.

- Lo escucharon chicos, si quieren ayudar les vende sus ojos, ¿qué dicen? – Sasuke mira especialmente a Naruto.

- ¡Va!

- ¡Naruto-kun! – exclama Hinata con reproche.

- Problemático. Haz lo que quieras Uchiha. – Shikamaru siente que debe salvar a Sakura y saber lo que pasa, lo hace porque es su amiga y por Ino.

- Total. – Kakashi se encoge de hombros y se pone tranquilamente de pie.

- Véndeles los ojos. – ordena a Suigetsu y Neji.

- Naruto-kun…

- Estaré bien Hinata-chan, si Neji y Sakura-chan confía en ellos, yo también. – le dice sonriéndole amigable.

- Es un bruto, si supiera. – susurra Suigetsu a Aimi que asintió.

Neji roda los ojos, Naruto se pasa de ingenuo.


- Si un día me hubieran dicho que estaría en la casa de unos Yakuza hace unos meses los tachaba de locos. – Shikamaru está sentado fumando en el salón estilo oriental que lo encerraron, está sentado en el pasillo que conecta hacia uno de los patios, mirando el estanque donde saltan algunas carpas, mira de reojo, notando como hay un ejército de Yakuza con ojo de águila en ellos, sin duda el Uchiha no es idiota.

- Tanto año buscando sus guaridas y estamos en una. – comenta Naruto algo nervioso, están desarmados en la boca del lobo, ni locos los dejaron con armas.

- Ya te disté cuenta de que lo que dijiste fue impulsivo, capaz nos trajeron aquí solo para matarnos. – comenta Kakashi. – lo dudo, se tomaron muchas molestias. – se responde a sí mismo.

- No diga cosas que me espantan Kakashi. – le dice con reproche Naruto.

- Pero lo que más me sorprende es que el tío con más moral, aquel que seguía estrictamente el código policía se haya hecho un Yakuza. – comenta Kakashi mirando a Neji que tiene sus brazos cruzados y mira hacia el estanque distraído, es el jefe de ese ejército que los vigila o algo así, o algo así entendió.

- Creo que lo hizo por amor Kakashi, la chica de cabello plata es su esposa y tienen dos hijos. – comenta cotilla Naruto.

- Porque no me sorprende que haya sido por una mujer. – comenta Shikamaru y Neji ya tiene un tic nervioso en la ceja porque hablen de él como si no estuviera ahí.

- Por esa muñeca hasta yo me hago Yakuza, sin importarme este preñada… ha de ser muy buena follando como para que…

Y Kakashi no termina su frase porque Neji ya lo apunta con un arma y todo el ejército Yakuza que están ahí lo imitaron. Naruto chillo como nena y se abrazó a Shikamaru que se le sombreo la frente de azul.

- Cuidado Kakashi, hablas de mi esposa.

- Hai, hai. – Kakashi alza sus manos en rendición, divirtiéndose al ver como Neji al guardar su arma los demás lo hacen como si de espejos se tratara.

- Enserio Kakashi, deja tus imprudentes perversiones harás que nos maten. – exige Shikamaru.

- Si Kakashi, no te pases. – lo reprime el rubio soltando a Shikamaru.

La puerta se abrió y Neji ensancha los ojos porque entra Aimi junto con Touya, seguido de varios sirvientes que traen alimentos.

- ¡Pa! – grita Touya yendo hacia Neji, está listo con su aori para entrenar.

- ¡¿Pa?! – exclaman los tres viendo al niño, se parece mucho a Neji y este cuando se acercó a él le tapo los oídos.

- Aimi ¿porque lo trajiste?

- Insistió en venir, ya le toco entrenamiento y tú lo entrenas, ve, yo los cuido.

- Ve la situación, y no te dejare sola con estos, dos de ellos son unos depravados…

- ¡Oye! – exclaman Kakashi y Naruto indignados.

- Bien saben que hablan de ustedes, menos mal. – comenta Shikamaru.

- Oye Neji, ¿cómo es que tienes un hijo tan crecido? ¿Eras un infiltrado? – Kakashi lo mira serio.

- No Kakashi, lo que pasa es que Neji se comió la torta antes del recreo y la dejo con un hijo. – explica Naruto.

- Y más sorpresas Hyuga. – Shikamaru lo mira como el mal hombre que es.

- No te creía de esos. – Kakashi niega.

- Cállense. – ordena molesto.

- ¡Yey! ¡Rammen! – exclama emocionado el rubio al ver lo que las sexys sirvientas les sirven en la mesa.

- ¿Papá? – Touya alza su rostro aun teniendo los oídos tapados por sus manos. – ¿entrenaremos?

- Hoy no Touya, estoy trabajando. – le dice serio al destaparle los oídos. – Aimi llévatelo de aquí. – exige mirándola.

- No. – exclama firme, cruzándose de brazos mientras los otros tres observan sin dejar de comer. – le prometiste entrenarlo, entrénalo.

- Estoy trabajando. – responde entre dientes mientras Touya mira de uno al otro.

- Puedes entrenarlo en el jardín. – apunta hacia el estanque. – yo te ayudo a vigilarlos.

- Por Dios mujer, estas embarazada deja de querer hacer cosas riesgosas.

- Embarazada, no invalida. Si intentan algo solo les disparo.

- ¿Enfrente del niño? – pregunta incrédulo.

- Touya sabe que cuando saco el arma se tiene que tapar los ojos. – responde con obviedad y Neji alza las manos exigiendo paciencia.

- Ridícula, no me sorprende ya este traumatizado.

- No lo está, es buen niño.

- ¿Son siempre así? – pregunta Naruto hacia Touya que ya está a su lado comiendo algunos camarones empanizados, sino entrenará comerá, se le abrió el apetito.

- Cuando no están acariciándose y besándose. – responde Touya tranquilo.

- ¡¿Hacen esas cosas frente al niño?! – exclama Naruto sorprendido y sonrojado haciéndolos voltear viendo donde esta Touya.

- ¡Touya aléjate de ese idiota! – ordena Neji.

- ¡Oye!

- Si, se te pegara lo estúpido. – exige Aimi.

- ¡Oye! – Naruto los mira indignado.

- Como sea, ven aquí Touya. – ordena Aimi que se colocó alado de Shikamaru llevándose a su hijo consigo y comenzó a comer también.

- ¿Es enserio? – Neji la mira incrédulo.

- Venga Neji, nos conoces no les haríamos nada, menos desarmados. – comenta Kakashi despreocupado.

- Si hombre, tenemos moral a diferencia de la compañía a la que te cambiaste. – le sigue Shikamaru.

- Es verdad, así que únete a nosotros y come. – le sigue Naruto.

Neji roda los ojos, enserio todos son imposibles, ninguno se toma enserio su lugar, en especial esa mujer suya.

Continuara

Despues de mil años XD, mi proposito es terminarla, se lo conseguire dattebayo jajajaja

tengo varios proyectos ya terminados, pero no quiero subirlos hasta que finalice los que ya tengo, espero lograrlo jajaja,

espero les haya gustado

besos