ÚLTIMO CAPÍTULO


iCarly y ninguno de sus personajes me pertenecen, esta historia tampoco es de mi autoría, yo hice la adaptación a SEDDIE. Y espero que la hayan disfrutado.


Siento haber tardado tanto en actualizar, pero este capitulo en particular fue muy difícil de adaptar.


Capítulo 10: Nunca Está Dicha La Última Palabra

–Sam, Freddie se hizo los estudios premaritales antes de pedirte que te casarás con él y ahí se enteró de que no podía tener hijos.

– ¿Y qué... que importa eso? ¿Acaso pensó que me importaría o qué?

–Pensó que primero te casarías con él por amor y por compasión, pero luego el tiempo iba a pasar y no podrían tener ese hijo que tanto soñabas… Él pensó que tú lo dejarías…

– ¿Que...? –Y la furia se empezó a apoderar de mí. –Lo voy a matar Chad, juro que esta vez lo mato de verdad.

– ¿Verdad que a ti no te importa?

– ¡Por supuesto que me importa! ¿Qué clase de mujer piensa que soy? Además todas las idioteces que hizo, que me llevó a hacer... Todas las cosas horribles que dijo, ahora entiendo eso de que nuestra relación era algo condenado a terminar... Chad, ahora lo asesino, esta vez juro que lo asesino.

–Sí, sí. –Dijo Chad ansioso sin creer en mis palabras. – Pero luego de eso Sam. –Me miró con temor. – ¿Lo vas a perdonar?

–No lo sé...


'O'


– ¿Dónde está? –Le pregunté a la mujer pelirroja, asistente de producción.

– ¿Dónde está quién señorita Puckett?

–Ya sabe quién, Freddie, el director y productor de este programa.

–Pues dejó todo en manos de su ayudante y regresó a Los Ángeles.

– ¿A Los Ángeles? ¿Cuándo?

–Ayer. –Respondió. – ¿Oiga dónde va? –Preguntó cuándo me vio girar y caminar hacia la salida.

– ¿Cómo que a dónde? a Los Angeles.


O.o


Freddie puso la llave en la cerradura. De regreso en casa.

En el fondo se sentía como un idiota por dejar a la mujer que amaba servida en bandeja a Brad... pero él le podía dar algo que para Freddie era imposible, esa era la triste verdad.

Estaba a punto de cerrar la puerta cuando unos pasos furiosos en el pasillo lo hicieron voltearse y algo rubio y veloz impactó contra él y comenzó a golpearlo.

– ¡Tú grandísimo imbécil! ¿Tienes idea lo que estuve pasando? ¿Cómo puedes creerme tan insensible? Y además ¿Cómo pudiste dejarme hacer todas esas cosas? Y también me dejaste abandonada en medio de la nada ¿Qué crees que sentí? Y luego me llevaste en ese coche horrible y yo muriéndome de las ganas de hacer pis y no te importó... Y me dijiste que nunca habías pensado en nada serio ¿Entiendes lo que me hiciste sentir? ¡No, no lo sabes, no lo entiendes, todo lo que lloré en este último tiempo Freddie! Te mataría sin que me temblara la mano, lo juro, y ahora tienes que arreglarlo, todo lo que hiciste ¡Me lo vas a compensar con creces!

– ¿Sam? ¿Sam eres tú?

– Claro que soy yo ¿Conoces a alguna otra idiota capaz de cruzar el océano solo por seguir a un zopenco como tú? ¿No verdad?

– ¿Qué haces aquí?

– ¿Que no me pones atención cuando hablo? Te dije que vas a pagar todo lo que me hiciste.

– ¿Que te hice?

Me tragué los mocos y me aparté de él.

–Hice una lista para no olvidarme de nada.

– ¿Otra lista? –Arqueó una ceja.

–Sí, otra lista. –La desplegué y comencé a leer.

1. Me mentiste sobre no quererme.
2. Me mentiste sobre haberme engañado.
3. Me dejaste llorar y sentirme mal.
4. Me dejaste comer bombones y aumentar dos quilos en tres días.
5. Me hiciste consumir pastillas que no sabía ni que existían.
6. Me hiciste cruzar el mundo para alejarme de ti.
7. Volviste y me enloqueciste.
8. Me hiciste hacer planes ridículos en los que incluí a mis amigos.
9. Me hiciste el amor y te escapaste.
10. Me dijiste gorda y que olía mal.
11.…

–Sam, Sam espera. ¿De verdad estas aquí para reclamarme todas esas cosas? Mira yo... Siento lo de la posada y todo lo que pasó, pero creo que lo mejor es que regreses a Inglaterra, a tu vida...

– ¿Quieres callarte? Déjame seguir…

11. Tomaste tú solo decisiones que nos correspondían a los dos.
12. Me escondiste información importante.
13. Decidiste y para variar lo hiciste mal.
14. Me explotaste en el trabajo.

–Para ahí ¿De qué decisiones hablas? ¿Cuáles decisiones tomé por los dos?

–Oh no lo sé… ¡Quizás tenga que ver con suponer que me iba a alejar de ti porque no podías darme un hijo!

– ¿Lo sabes?

–Claro que lo sé.

– ¿Chad te lo dijo?

–Bajo presión. –Aclaré.

–Entonces no sé qué haces aquí, ya lo sabes así que vete…

–Fredward Benson ¿Qué clase de desalmada sin corazón te crees que soy?

–Ninguna Sam, pero tú te mereces una familia y yo no puedo dártela.

– ¿Qué familia? ¿Crees que podría tener tiempo de casarme, de tener hijos y de llevar un hogar cuando me la paso pensando todo el día en ti?

–Sam con el tiempo lo olvidarás... Me olvidarás.

– Si claro. –Rodeé los ojos. – "El tiempo y la distancia". –Me burlé. – ¡Estoy del otro lado del mundo y pasaron más de seis meses! ¿Cuánto tiempo necesitas, eh Freddie? ¿Un año, dos...? ¡Pero no quiero que cuando nos volvamos a ver este tan vieja que tenga que traer una fotografía para que me reconozcas!

–Sam, formar una familia era tu mayor sueño.

–Solo porque la iba a formar contigo, solo por eso, sin ti no me importa tener hijos...

– ¿Que no entiendes? –Explotó. – ¡No puedo tener hijos!

–Gran cosa, compramos un gato, un perro, un loro, y también hoy esta esa técnica tan moderna conocida como la adopción.

–Pero no sería tu hijo Sam...

–Claro que sería mi hijo, desde el momento en que lo llevara en brazos, lo cuidara y me preocupara por él ¡Seria mi hijo!

–Sam ¿No recuerdas cuanto querías tener un hijo de ambos?

– ¿Y sabes por qué? –Musité. –Porque nada me hubiera gustado más que llevar un hijo tuyo en el vientre... porque sería tuyo, porque cada vez que lo viera no podría evitar ver algo de ti en él, porque cuando hablara escucharía tu voz o tus palabras... Te amo tanto Freddie que quería tener un hijo tuyo solo para tener un poquito más de ti... Pero ahora ya no me importa. –Sollocé. –Solo te quiero a ti, y que me des paz de nuevo ¿Es eso mucho pedir? –Él negó con la cabeza. –Bien, porque de verdad estoy cansada y no hablo solo de tanto vuelo que vengo haciendo...

–Sam ¿De verdad no te importa?

– ¿A ti te importaría si fuera yo la que no pudiera darte un hijo?

–No.

–Ahí tienes tu respuesta.

–Pero yo soy hombre...

–Sí creo que antenoche quedó demostrado. –Tomé sus rostro entre mis manos, dispuesta a besarlo pero…

–Sam... ¿Me perdonas?

–Sí, sí, lo que sea. Solo bésame de una vez.

Lo hizo... ¡Y como lo hizo! Como si la vida entera dependiera de ello y creo que fue un poco así. Beso, mordió, chupo... y ciertamente toco... y yo adore todo. Más que nada esa sensación de estar de nuevo entre sus brazos con un "Para Siempre" entre los dos. Creo que ahí pertenecí siempre... Porque ¿saben una cosa? Mi vida anterior fue muy bonita, pero esta, la de ahora, comienza a escribirse en el preciso momento en que conozco a Freddie... Y sé que no hay final sin él, por muy tarado que sea.

Supongo que toda esta experiencia me sirvió para darme cuenta que los hombres en general son así, no preguntan cuándo deben, se callan lo que deberían decir y complican todo sin sentido haciéndola sentir a una miserable, pero al final del día puedes perdonarles que sean unos bobos... ¿Por qué? Porque nosotras somos increíblemente listas, por eso.

Yo no tanto a decir verdad, pero lo que sea que soy funciona bien... Casi siempre... Bien, a veces... Ocasionalmente... Ok, alguna vez acerté ¿O no?

Ahora entiendo que si no hubiéramos pasado por todo esto, si él me hubiera dicho la verdad desde un primer momento, me habría ahorrado mucho dolor, pero también mucha felicidad... La felicidad que provocan las cosas y las personas cuando realmente las valoras, cuando descubres que tan complejo e importante puedo ser lo simple. El valor de una llamada, de un "te quiero", de dos corazones que se extrañan, el valor de los amigos como sostén en la vida...y del amor como motor de todo lo bello que nos puede pasar...

Y aprendí que a veces no estamos dejando pasar la vida. Simplemente sin saberlo estamos esperando encontrar el momento indicado...o que el momento indicado nos encuentre...como sea. Lo importante es que en este universo hecho de fichas de domino todo sucede, y en un punto llegamos a entenderlo todo, o simplemente en ese punto las preguntas ya no son tan importantes.

Un ejemplo: Yo me partí la cabeza pensando porque quería a Freddie buscando razones para no hacerlo... Ahora no me importa porque lo quiero, lo hago y ya. Y no hay realidad más hermosa que esa.

Oh aguarden, si hay una realidad más hermosa que esa... ¿Mencione que tan importante son las cosas simples?

Pues bien, en este preciso momento con solo dos rayitas soy la mujer más feliz del mundo...
¿Saben lo que eso significa?

Que después de todo, en las historias de amor los milagros existen... Nunca está dicha la última palabra...

~FIN~

No hay amores imposibles, hay amantes cobardes.


Holas! Les gusto?

Personalmente esta es una de mis historias favoritas, por que tiene de todo un poco, pero a pesar de todo el drama es muy divertida y eso me encanta. Por eso estoy feliz de haberla compartido con todos ustedes.

Además aproveché de incluir a Chad Dylan Cooper, personaje de otra de mis series favoritas Sonny With a Chance (Sunny entre Estrellas para Latinoamerica) Lamento tanto que esa serie haya acabado era una de las pocas series Disney Channel que valía la pena. En fin. Me encantó la idea de que se mezclara en esta historia.

Un millón de gracias por todo el apoyo, por los reviews, por marcar esta historia entre sus favoritos y seguirla. Gracias!

Espero nos leamos pronto en otra historia, pero por ahora me retiro momentáneamente de FF, probablemente empiece a publicar cuando salga de vacaciones, pero por ahora mi tiempo es muy escaso...

Los quiero muchisimo, se cuidan, sean chicos buenos, no al alcohol, ni a las drogas, cuidemos a los árboles y a las plantitas, no al maltrato animal, no les hagan Bowling a sus amigos o compañeros, no fumen (No tiene ningún sentido) duerman con los ojos cerrados, no hablen con extraños, amen a sus familias, disfruten del día a día. (No se me ocurren más consejos por ahora)

Adiós...

Militha93