Y ahora es un MUCHAS GRACIAS LECTORES POR SU CONTINUO SOPORTE. Sin ustedes esta historia no hubiera sido posible. Por eso mismo se los agradezco de todo corazón. Y quienes tienen todo mi más sincero agradecimiento y cariño son: A Crystal Violeta, pauoromarsh , VanessaLaUnicorn, mikemasters, dragonazabache, Rose Black Dragon , Haoyoh Asakura, Guest, Naomi de Aldebaran, ANGELMAU, The Saku, Iukarey, Feels the music y a quienes leyeron mi historia a lo largo de las semanas. Y por supuesto no puedo creer que llegue a los casi ¡CIENTO QUINCE REVIEWS! Casi me caigo de espalda con esta noticia Muchas gracias. Y espero que les guste este último capítulo en el cual me esmere harto en escribir. Intente poner los sentimientos de nuestras queridas tortugas y al final una cosa que podría llevar a una secuela. Si es que ustedes lo quieren por supuesto. Ojala este último capítulo sea de su total agrado. Y ahora las invito a seguir. Disfruten de la lectura

Disclaimer: Ninguno de los personajes de las tortugas ninjas me pertenece, pero desearía que fuera asi. Al menos me gustaría que me regalaran a Leonardo. Mi amor…

Chapter 13: Epilogo "Unión"

Raphael miro a su hermano mayor quien había caído dormido tras el milagro ocurrido. Donnie y su hermano menor Mikey se habían asustados cuando Leo no respondió a una pregunta realizada por April y al verlo y percatarse que tenía los ojos cerrados todos creyeron lo peor. Pero cuando Leo movió la cabeza levemente al costado se dieron cuenta que se había quedado dormido. Donnie soltó el aire que retuvo durante el corto lapso de tiempo y Mikey suspiro mientras cerraba los ojos agotado tras todo lo ocurrido.

Media hora antes…

April grito asustada creyendo que lo que estaba viendo era un sueño. Casey a su lado la abrazo mientras la protegía de lo que fuera lo que estaba acostado en la cama con la forma de Leonardo. Pero Donnie salió al rescate de la situación.

-Cálmense…es Leo…de alguna manera Leo regreso-Donnie miro a sus otros dos hermanos-Les contare lo que sucedió-Se sentó en su asiento, el mismo asiento que había usado varias veces mientras intentaba encontrar una solución para la toxina que estaba matando de a poco a su hermano mayor-Todos nosotros soñamos con…no sé cómo decirlo, pero…lo único que pudimos sentir fue su voz diciendo que teníamos que darle un poco de nuestra energía a Leo-Sonrió-Energía vital por lo que pude notar…asi que vinimos aquí e hicimos lo que nos dijo esa voz, no fue coincidencia que los tres soñáramos lo mismo-Leo lo miraba con rostro agotado, parecía listo para dormir-Hicimos lo que nos dijo esa voz y fue la segunda oportunidad de nuestra familia, solo eso…al menos es lo que creo-Donnie miro a su hermano mayor. Le alegraba mucho el tenerlo de regreso con ellos.

Leo con los ojos entrecerrados los miro-E-era la muerte…fue él…él decidió darnos…esta segunda oportunidad…debemos agradecerle…por esto…-Leo bostezo. Se sentía agotado y su cuerpo muy pesado. Le estaba costando mantenerse despierto.

-Pero ¿Por qué la muerte haría algo asi? ¿Qué le hizo cambiar de parecer?-Pregunto April viendo a Leo y los chicos ahora que estaba más calmada.

-No…no lo sé…solo estaba sorprendido…por el amor…que nos tenemos…dijo que…le di pena…-Leo respondió en un susurro la pregunta. Suponía que era debido a eso. Dado que tras ver las despedidas y el encontrarlo de regreso en el llamado purgatorio la muerte se había mostrado distinto.

-Es impresionante lo que ustedes pueden lograr, incluso con la misma muerte-Casey dijo mientras bostezaba. Leo se dio cuenta que todos tenían rostros agotados. Después de todo no era de sorprender que no durmieran como deberían hacerlo tras los acontecimientos sucedidos las ultimas veinticuatro horas.

Leo cerró los ojos, lo único que quería era dormir. Solo dormir y descansar sin ninguna molestia por primera vez en varios días. Mientras los demás seguían hablando, la tortuga de azul se dejo llevar por el mundo del sueño.

Raphael tomo la mano de su hermano mayor. Todos se habían ido a acostar tras el largo y duro dia que tuvieron con todo lo ocurrido. Una leve sonrisa se dibujo en su rostro mientras se recostaba al lado de su hermano mayor y apoyando la cabeza en el hombro de Leo cerró los ojos. Deslizo una mano hacia el pecho de la tortuga de azul y sintiendo el débil pero existente latido se quedo dormido.

Plano astral.

"Leo se encontró en lo que parecía ser una jungla. La recordaba bien, había pasado por terribles momentos en ese lugar por los dos años que permaneció en ese sitio. Tuvo que hacer cosas que jamás creyó tener que hacer. Su cuerpo y alma habían sido heridos en esa jungla más de una vez. Había visto su sangre fluir libremente de las heridas que sufrió por tener que luchar por sobrevivir. Sus ojos se apagaron. Esas cosas no las quería recordar. Era los peores momentos de su vida. Momentos que nadie nunca conocería y que si por alguna razón su padre o sus hermanos se enteraran causaría una herida inmensa y profunda en la familia.

-Leonardo…te acuerdas que fue aquí donde nos vimos una vez…hace un tiempo atrás-Leo reconoció la voz. Era la voz de la muerte-Te acuerdas…de las vidas que tomaste…de la vida que casi perdiste…te acuerdas que vine por ti…pero peleaste tu camino de regreso…te deje ir…como lo hice ahora…pero por motivos distintos…-La muerte apareció frente a Leo-Tu familia…es algo que jamás he visto…tanto amor y ser…capaz de dar la vida por uno de ustedes…de forma desinteresadas es impresionante…me demuestran que no…no todos los seres que habitan el mundo…son malos…por eso te mande de regreso…ustedes son la excepción a las reglas…son los que algún dia mostraran a los humanos…que todos son iguales…no importa como luzcan…sus discapacidades…sus enfermedades…sus ideas políticas o religiosas…su clase social…todos están hechos de lo mismo…quiero que el mundo se dé cuenta de eso…he tenido que recoger almas de niños pequeños…jóvenes inocentes…almas puras…y bondadosas…ustedes tienes cualidades que ellos no poseen…por eso te mande de regreso…tus hermanos te necesitan…tu padre te necesita…tu familia no es nada si uno de ustedes falta…es mi regalo por ser como son…por ser tan puros…-La muerte le puso una mano sobre el hombro de Leo-Pero…a pesar de todo…tu cuerpo jamás será como antes…lamento que sea asi…pero rompí una regla al mandarte de vuelta…para que no hagan nada en contra tuya o de tu familia…no elimine por completo el daño…que la toxina causo en tu cuerpo…-Leo frunció el ceño-No te preocupes…no morirás…pero no serás el de siempre…tu fuerza disminuirá…no podrás pelear por mucho tiempo…te agotaras…tu corazón está débil…y tu cuerpo igual…es el precio que debes pagar…por el regalo que les di…-Leo lo quedo mirando-Y además…serás necesario para…lo que se acerca…tú y tus hermanos…son la última esperanza de…que las pérdidas humanas no sean extremas…por eso te envié…pero no puedes hablar de esto…con ninguno de tus hermanos…amigos o padre…es el precio que tienes que pagar por lo…que te di…serás un emisario mío en la tierra…serás un guía para los moribundos…y al mismo tiempo una luz para lo que…se acerca…Shredder y Karai…ellos lo están viendo ahora…esa amenaza…llegara pronto…prepárate…-La muerte comenzó a desvanecerse.

-No te preocupes, con tal de estar de regreso con mis hermanos, mi padre y mis amigos, todo eso valdrá la pena-La muerte sonrió. Leo cerró los ojos al ver como se iluminaba intensamente el lugar. Sabía que tendría que pagar un precio, algo en su interior se lo había dicho. Pero eso ahora era lo de menos.

-Te estaré observando…a ti…y tus hermanos…-La voz de la muerte se escucho mientras se desvanecía de a poco."

Leonardo abrió los ojos lentamente. Su cuerpo no lo sentía tan pesado como antes y no se sentía tan mal como cuando despertó la vez anterior. Miro alrededor, estaba en su habitación. No recordaba llegado allí. Lo último que recordaba era que estaba hablando con sus hermanos, padre y amigos cuando supuso se quedo dormido, tras eso solo se acordaba de haber hablado con la muerte y nada más. Se incorporo lentamente. Su cabeza le dolía un poco. Corriendo las mantas a un lado se levanto con cuidado. Sus piernas estaban débiles como el resto de su cuerpo. No era de extrañar considerando todo lo que tuvo que pasar para estar vivo. Tanto él como sus hermanos y familia completa.

-¡Leo!-Escucho que gritaban desde la puerta de su habitación. El de azul giro un poco la cabeza. Su hermano menor Mikey se encontraba allí sonriendo alegremente.

-Hola Mikey-Saludo sin saber porque su hermano se veía tan contento.

-Me alegro de que despertaras. Donnie pensó que habías entrado en un coma de nuevo-Dijo aproximándose a su hermano mayor. Sin decir más lo abrazo.

Leo no entendía muy bien que ocurría-¿Cuánto ha pasado desde que desperté tras el ataque que recibí al ir al cuartel de Shredder?-Pregunto un poco cansado. Su voz no sonaba como siempre. Sonaba algo ronca y desusada.

-Una semana completa. Después de que despertaras y habláramos un poco te quedaste dormido, pero no despertabas con nada. Donnie te reviso y dijo que tenía unas cosas que decirte sobre tu salud…pero con el paso de los días creímos que el daño que tu cuerpo recibió tras la toxina y el ataque hizo que te hundieras en un coma…-Mikey abrazo a su hermano mayor-Pero al menos estas despierto y con más energía que antes-Leo sonrió su hermano menor lloraba en su hombro. Rodeándolo con los brazos sonrió.

-Estoy bien, algo débil pero bien-Susurro al oído de Mikey quien sin soltarlo le abrazo mas fuerte-Vamos quiero hablar con ustedes…-Leo comenzó a caminar hacia la puerta de su habitación seguido de cerca por Mikey quien iba casi pegado a su caparazón. Saliendo de la habitación se encontró con un Donnie ojeroso pero que de todas maneras sonrió al verlo de pie-Hola Donnie-Dijo el de azul mientras su hermano de morado se le acercaba y le tomaba la mano para comprobar su pulso-Estoy bien Donnie…vamos que quiero verlos y hablar un asunto con ustedes-Su hermano lo quedo mirando.

-Creo que sería mejor que te acostaras de nuevo…hay…hay algo…-Donnie tomo aire, no sabía cómo decirle a su hermano sobre las consecuencias que dejo la toxina sobre su cuerpo. Pero Leo le tapo la boca con su mano.

-Vamos quiero ver a Raph-Interrumpió mientras seguía su camino hacia el primer piso. Escuchaba ruidos en el dojo, supuso que debía ser Raphael considerando que el ruido provenía de golpes dados sobre un saco. Sus otros dos hermanos lo seguían de cerca.

Raphael dio otro golpe más al saco, tras eso dio dos patadas más, otro puñetazo y otra patada, dos golpes de puño, una patada, cuatro golpes de puños…ese era su rutina desde hacía una semana, el mismo tiempo que su hermano mayor permanecía dormido en su habitación. Quería que despertara, quería oírlo hablar, verlo moverse…en otras palabras verlo vivo, igual a como era antes de que lo envenenaran. Pero sabía que eso sería imposible, tenía una sensación de que todo lo sucedido con su hermano mayor traería consecuencias al cuerpo de Leo, al ver a Donnie esa sospecha se hacía más fuerte. La muerte podía haberlo mandado de regreso pero sabía que había un precio a pagar. Y ese precio debía ser pagado por Leo, nadie más, solo aquel que había sido devuelto al mundo de los vivos. Sacudió la cabeza mientras volvía a pegar seis golpes de puños y tres patadas. Cuando escucho que abrían la puerta del dojo. Volteando sus ojos se abrieron de par en par. En la puerta se encontraba su hermano mayor y líder. Una sonrisa se dibujo en su rostro. Dejando de golpear el saco corrió hacia él y lo abrazo fuertemente.

-Maldición Leo…me tenias preocupado-Dijo mientras lo soltaba. Leo lo quedo mirando unos instantes y subiendo su mano a la mejilla de Raph le acaricio. Al sacar su mano le mostro las lagrimas que había limpiado de sus mejillas. El de rojo ladeo la cabeza y lo volvió a abrazar-No importa que me vean llorar…lo único que me alegra es de verte de nuevo de pie-Sollozo mientras dejando sus manos en los hombros de Leo lo miro-Te quiero hermano…te quiero mucho…-Susurro Raph sin dejar de llorar.

Leonardo se sentía un poco sorprendido por la reacción de su hermano Raphael, jamás imagino que lo acontecido lo afectaría tanto-Ven Raph-Murmuro tomándolo del brazo lo llevo al comedor. Sentando en la silla espero a que el agua hirviera para servirse una taza de té. El cual extrañaba mucho. Una vez listo miro a sus tres hermanos quienes lo observaban con detenimiento-Donnie antes que me digas algo, sé que hay algo malo con mi salud-Donnie abrió la boca para decir algo pero Leo prosiguió-Es el precio que debo pagar por estar vivo…la muerte me lo explico. Debido a las reglas que tuvo que romper para hacer que yo regresara a este mundo tuvo que dejarme con algunas secuelas para que no pasara nada malo a ninguno de ustedes o a mi-Sonrió-No moriré eso me lo dejo claro…bueno al menos no luego. Pero sé que mi corazón está débil y mi cuerpo igual, sé que me cansare pronto al pelear pero lo bueno es que sigo vivo y sigo al lado de ustedes-Declaro mientras hacía girar la taza entre sus manos.

Donnie bajo la vista. Si era un precio a pagar por el regalo recibido entonces no tenían que reclamar-De todas maneras Leo, tendrás que comenzar a tomar medicina para tu corazón y tu cuerpo-Leo lo miro-Así tu cuerpo aguantara un poco mas y no estará tan debilitado-Añadió apresuradamente al ver que su hermano mayor abría la boca para decir algo que seguramente iba en contra de lo que a medicina se refería.

-Está bien Donnie, por ustedes lo hare-Leo miro hacia la puerta de la habitación de su padre-¿Dónde está el maestro Splinter?-Pregunto al notar que la habitación estaba vacía. No sentía ninguna energía desde allí.

-Esta con April, todo lo sucedido lo dejo agotado y lo mande con ella a la granja asi podrá descansar adecuadamente-Explico Don viendo a sus otros hermanos quienes lucían tan cansado como él.

-Sera mejor que vayan a descansar…aunque no se qué hora es-Dijo Leo mirando alrededor buscando algún reloj.

Mikey sonrió-Son las ocho de la noche Leo-Aclaro mientras reprimía un bostezo.

-Mejor aun-Sentencio el de azul-Descansen que lo necesitaran cuando comencemos con los entrenamientos. Aunque las cosas están calmadas aun nadie sabe que le paso a Shredder o Karai, asi que pueden regresar por venganza dentro de poco…

-¿Cómo sabes lo de Karai y Shredder si nosotros no te hemos mencionado nada de eso?-Interrumpió Raph con rostro palido. No le agradaba que Leo comenzara a preocuparse por esas cosas cuando recién venia despertando tras estar inconsciente una semana y quedar con secuelas para el resto de su vida.

-Muerte me lo dijo, por eso se que ellos no fueron encontrados en las ruinas del edificio-Contesto Leo dejando la taza en la mesa. Le estaba costando un poco concentrarse y su visión se desenfocaba a ratos-Sera mejor ir a descansar-Murmuro poniéndose de pie se tambaleo un poco-Creo que debería irme a mi cama-Musito sacudiendo su cabeza un momento para aclárasela. Raph se le acerco y rodeándolo por los hombros lo sujeto.

-Vamos te llevo a tu habitación-Dijo mientras lo encaminaba hacia su pieza. Detrás de ellos iban Mikey y Donnie, el último con un frasco de medicina y un vaso con agua. Una vez que Leo se acostó ayudado por su hermano de rojo Donnie le entrego el vaso con agua y una pastilla.

Leo miro la mano de su hermano la cual sostenía la pequeña píldora-Es necesario-Susurro con los ojos semi cerrados. Donnie asintió. Tomándola se la coloco en la boca y la trago con el agua del vaso. Recostándose sintió como su hermano Mikey lo arropaba y cerrando los ojos se quedo nuevamente dormido. Los tres hermanos se miraron.

-Dormiré con él por si durante la noche pasa algo-Dijo Raph viendo a sus dos hermanos menores.

-Yo también dormiré aquí-Sentencio Donnie con total seriedad. Mikey sonrió. El no diría nada, asi que saliendo de la habitación dejando a sus hermanos con rostros de duda. Se dirigió a su habitación y tomando su almohada y su cobertor se devolvió a la habitación de Leo dejando a sus otros dos hermanos con una sonrisa en sus labios.

-Yo no me quedo atrás. Me quedare también para cuidar de Leo-Así entre los tres se acomodaron alrededor de su hermano mayor y Mikey acostado al lado derecho de su hermano mayor le tomo la mano, lo mismo hizo Donnie al lado contrario y Raph acostado a los pies de la cama se quedaron dormidos mas tranquilamente ahora que sabían que Leo estaba vivo y con ellos.

Lugar desconocido…

En una habitación pequeña y fría, sin una sola luz que alumbrara el reducido espacio Shredder se encontraba en el suelo sangrando de todos sus poros, heridas enormes cubrían su cuerpo humano y su cuerpo de Ultrom el cual estaba expuesto al exterior y que también sangraba. Su cuerpo humano estaba sujeto por gruesas cadenas luminosas tanto sus manos y piernas, al igual que su cuerpo de Ultrom el cual no podía incluso mover. Al otro lado Karai estaba en las mismas o si no peores condiciones que Shredder. Ambos tan malheridos como nunca antes habían estado.

-Nunca escaparan de aquí…-La voz de un ser masculino se escucho-Así podre apoderarme de lo que más quiero sin tener que lidiar con ustedes-Karai grito al ser herida otra vez. De la nada, enormes heridas aparecían en su cuerpo dejándola sangrando copiosamente. Mientras una sombra los miraba desde la distancia mediante una cámara. Esta figura se dio vuelta dejando ver solos dos ojos rojos brillantes que desaparecieron en la oscuridad.

Guarida de la familia Hamato…

Leonardo se despertó antes que sus hermanos. Mirando alrededor una sonrisa se dibujo en sus labios. Hacía mucho tiempo que alguno de sus hermanos dormía con él. Poniéndose de pie se dirigió al baño. Mojándose el rostro se miro al espejo. Algo había cambiado en su familia con lo sucedido y eso los había acercado aun más que antes. Haciéndolos uno solo. Sonrió se sentía feliz de haber podido regresar con ellos. Pero un sentimiento oscuro no lo dejaba en paz. Sentía que algo malo sucedería pronto pero no podía decir con claridad que cosa era. Saliendo del baño se dirigió a la cocina y colocando la tetera espero a que el agua hirviera. Escucho pasos desde el segundo piso. Por el sonido debía ser Raphael. A los pocos segundos su hermano de rojo apareció en la entrada de la cocina. Sentándose al lado de Leo lo quedo mirando.

-Buenos días-Saludo Leo mientras se levantaba a preparar dos tazas.

-Buenos días-Saludo de vuelta Raph. Mirando a su hermano mayor una sonrisa se dibujo en sus labios, se sentía tan bien el tener de regreso a Leonardo con ellos que no podía evitar sonreír ante eso-¿Cómo te sientes?

Leonardo lo miro-Bien, me siento más despejado que ayer-Respondió apagando la tetera que estaba soñando indicando que el agua ya había hervido.

-Así lo veo-Raph se puso de pie esperando a que Leo dejara la tetera de regreso sobre el quemador de la cocina. Lo tomo por los hombros y lo abrazo fuertemente-Por favor Leo nunca más nos abandones-Murmuro sin soltarlo-Eres muy importante para nosotros…nos sentimos perdidos cuando creímos que estabas muerto-Susurro viendo a los ojos de Leonardo.

-Lo prometo Raph que nunca más pasara lo que paso-Con eso le devolvió al abrazo y se sentaron a beber el té que Leo preparo para él y para él mismo. Todo había vuelto a la normalidad, se podía sentir en el aire de la guarida.

-¡LEOOOO!-Se escucho el grito de Mikey desde el segundo piso-Raph dijo que quería comerse el ultimo pedazo de piza que quedo…-Por lo que se podía escuchar su hermano menor estaba teniendo otro sueño relacionado con comida.

-Dios….hasta cuando aprenderás a no comer pizza en la noche-Se escucho que Donnie se quejaba-Leo creo que sería bueno que prendieras un incienso en tu habitación, Mikey se tiro un gas…-Y Leo con Raph no escucharon mas ya que por lo que se podía apreciar su pequeño hermano menor había despertado y comenzado una guerra de almohada sobre Donatello.

"Si las cosas volverán a ser como eran antes en poco tiempo" Pensó Leo mientras bebía un poco de su te al tiempo que aparecían en el comedor sus dos hermanos riendo a todo lo que daban. Ambos cubiertos de plumas blancas y con rostros tranquilos que no había visto desde que la pesadilla en la cual casi muere ocurrió. La guarida se sentía en paz por primera vez en días. Los cuatro hermanos juntos y sin peligro próximo. Esto era lo mejor que podía ocurrir. Leonardo sonrió y mirando a Raph ambos asintieron satisfechos y tranquilos. La familia Hamato volvía a ser una como era antes y eso ya nadie lo cambiaria. Esa unión que ellos tenían era más poderosa que cualquier cosa y nadie jamás cambiarían eso. Pero lo que la muerte le había dicho le preocupaba. Deseaba decírselo a sus hermanos pero rompería con la promesa que hizo. Ahora lo único que quedaba era esperar a que lo que la muerte le dijo se cumpliera. Esa amenaza no tardaría en aparecer y ellos de nuevo tendrían que enfrentar el peligro. El problema era que ya no podría pelear como antes y sus hermanos correrían grave peligro por su culpa. Suspiro. Tiempo tenían pero no sabía cuánto. Sabía que desde alguna parte ese peligro se estaba aproximando y todo cambiaria si la muerte estaba preocupada por eso.

Espacio exterior. Lugar próximo a Júpiter.

Una brillante y enorme nave se acercaba con dos prisioneros a bordo. Dos juguetes que estaban sangrando y gritando como locos por libertad en sus celdas. Mientras la figura con ojos rojos sonreía al ver a través de una pantalla la imagen del planeta tierra.

Fin.

¿Qué les pareció el final? ¿Les gusto o no? Si quieren una secuela avisen y lo pensare. Ya que si me decido a hacer una secuela tengo que ver bien como colocare la situación y que sucederá con las tortugas. Y esta vez de verdad que podría matar a alguno. Ustedes saben como es. De todas maneras gracias por compartir conmigo esta historia y por estar allí cuando necesitaba soporte. Dejen review y háganme saber lo que piensan sobre una secuela. Pronto subiré una nueva historia que no está relacionada con esta. Pero espero que de todas maneras les guste. Dejen review y nos estaremos leyendo dentro de poco. Y por favor dejen review.