Antes que nada NO PERMITO LA ADAPTACIÓN DE NINGUNO DE MIS FIC'S ASÍ COMO SEAN SUBIDOS EN OTRAS PAGINAS ETC... ETC. PARA ELLO PRIMERO CONSÚLTENLO CONMIGO!

COMUNICADO:

Años en actualizar, sorry... prometo esta vez y es muy en serio actualizar como es debido, como bien saben, entre a esta plataforma siendo una escritora SasuSaku, actualmente soy como una Sakura x Todos literalmente, me encanta el contraste de este personaje y la quimica que se juega con los demas, y lo comento porque ultimamente unas lectoras se pusieron un poco pesadas conmigo por la manera en que he ido guiando las historias, antes que nada este es un Fic SasuSaku.

Otro punto, estoy trabajando en otros fic's de Sakura con otros personajes no solamente Sasuke, debido a ya una mala experiencia y que me insultaron por la forma en que lleve la adaptación de una pelicula y el final que tuvo, me vi obligada a poner que de seguir los insultos eliminaría todas mis historias de la plataforma lo cual hasta la fecha espero no suceda, espero puedan entender mi parte de que quiero hacer historias que a ustedes les guste y que como siempre les digo tengan esa confianza de decirme que les parecio, pero tampoco sin ofender, por favor.

ustedes valen mucho para mí, nunca lo olviden. sin más que agregar...

Enjoy~!

Esta vez tanto como Sakura y Sasuke serán los narradores.

ACLARACIONES: Kishimoto-sama es el dueño de Naruto y sus personajes. Yo solo hice con mi "grata imaginación" xDD la historia usando los personajes.

ADVERTENCIAS: escenas 18+, lenguaje obsceno, violencia.

¡Gracias por leer!

~INMORAL~

Las manos de Sasuke me recorrían lentamente y con tortura, el sentirlo sobre mi piel, su calor, y lo estimulante de la situación estaba acabándome en más de una forma, si había seducido a Sasuke desde el momento en que lo vi con esa rubia, la manera en que había ignorado todo ese tiempo, y los rumores que habían llegado a mí de ellos me estaban matando, suprimí mis pensamientos en cuanto sentí sus manos en mis piernas, y su erección sobre mi entrada estaba estimulando demasiado mi centro, estaba húmeda, ansiosa por tenerlo dentro de mí, había pasado un maldito mes desde que nos habíamos encontrado y ahora estábamos haciendo una vez más lo prohibido, algo que estaba mal y que ambos de antemano sabíamos, pero que simplemente estábamos dejando de lado, embriagándonos en un mar de emociones, dejándonos llevar por nuestros deseos carnales más bajos, ambos sentíamos arder el maldito cuerpo del otro que nos causaba un exquisito placer, sus labios me iban demandando cada vez más, sentí como exploraba mi boca y yo hacia exactamente lo mismo con la suya, acariciaba su rostro con lentitud e incluso yo me repegaba y lo abrazaba con la necesidad de sentirlo, de que me hiciera suya, el moreno fue deshaciendo los nudos de mi vestuario, de manera que poco a poco sentí como la tela iba desapareciendo de mi dorso, hasta quedarse sobre encima de mi pecho, gemí involuntariamente cuando una de sus ásperas manos iba sobre mi seno derecho masajeándolo y estirando el pezón mientras abandonaba mi boca y ahora miraba extasiado como rogaba involuntariamente por más. —Sasuke… —me arquee sobre la mesa, mientras este deslizaba sus manos por mis caderas y lo observaba respirar pesado, y deslizaba el corsé lentamente a los costados de mis costillas dejando a la vista mi pecho desnudo, sus fosas nasales se abrieron, y bajo a besar mi abdomen mientras suspiraba con el tacto que estaba teniendo, una de sus manos fueron en medio de mis senos y tocaba mi cuello deslizándola con firmeza, acariciando la piel expuesta, mientras la otra acariciaba con delicadeza mis muslos, mirándome como mis mejillas se sonrojaban y apretaba mis labios tratando de no gemir tan fuerte.

— ¿dime que quieres que haga? —el hijo de puta sonrió de lado al encontrarme lista y húmeda para él en cuanto deslizo su mano por mi entrepierna, masajeándome, tentándome, mi pecho ya subía y bajaba con tenacidad, mis pezones estaban rígidos y no paraba de moverme cada vez más contra la mano de Sasuke, sentí como pequeñas lagrimillas salían de mis ojos, cada vez que los cerraban ante el tacto del Uchiha, deseaba esto más que nada, pero no de lo dejaría saber, en su lugar me incorpore lentamente guiando mis manos a su entrepierna mirándome curioso, con su sonrisa ladina, retándome, saboreando cada paso que daba al abrir su bragueta buscando su miembro erecto, me mordí los labios al tomarlo relamiéndomelos, Sasuke no dejaba de mirarme, su ojos me acariciaban y sus ojos parecían obscurecidos bajo un solo sentimiento.

— ¿Puedo hacerte la misma pregunta… no te parece? —susurre cerca de su oreja terminándola de morder e involuntariamente sentí su aliento caliente sobre mi cuello, sus manos detuvieron mi labor y ahora él me jalaba de las piernas acercándome a él, hizo a un lado mis bragas, colocando su miembro en mi entrada, primero lo restregó un poco cosa que me hizo vibrar— aaaah… —gemí acercándome más a él, incitándolo a penetrarme de una sola estocada, lo mire hacer de lado el cuello y casi jurar una maldición cuando…

— ¡Maldita sea! ¡Es tu hermana la que está ahí! ¿Cómo carajos no te importa que…? —De repente entro mi hermano, seguido de un pelirrojo abriendo la puerta salvajemente encontrándonos a Sasuke y a mí a una prudente distancia, él se mostraba como siempre, calmado y sereno, bien vestido y con una ceja levantada por el alboroto al igual que una sonrisa de lado que parecía indicar que estábamos tratando de hacer, miro al moreno por unos segundo antes de acercarse a él finalmente—, ¿Qué mierdas haces aquí Uchiha? —reto Gaara, moviendo la cabeza divertido el moreno.

— ¿a qué crees que vine? —me reí un poco de su actitud con mi primo, era obvio que lo estaba provocando.

—Vino a felicitarme por mi actuación, Gaara, ¿puedes dejarlo de molestar? —dije haciendo que se fijara en mí, usaba una bata blanca y había escondido bien el corsé a manera de que no sospecharan que estaba semi desnuda.

—ya lo creo, después de que te fueras encima de él y…

—Gaara, basta, has bebido demasiado —intercedió esta vez mi hermano, pero por alguna razón parecía un poco molesto, lo podía notar por cómo me miraba.

—Nos da gusto que te haya gustado el espectáculo Sasuke —esta vez hablo Temari, acercándose a mí, poniéndose en medio de ambos—, pero te agradecería que cuando felicites a alguna de mis chicas, lo hagas afuera, y no es un lugar, donde…

— ¿… se podrían malinterpretar las cosas? —Completo divertido—, no te preocupes, Sakura no es de esas chicas, ella es más del tipo serio, ¿no es cierto? —asentí un poco nerviosa al sentir la mirada de todos sobre mí. —, como sea, felicidades, creo que fue algo que nadie en esta sala, podrá olvidar. —empezó a caminar a la salida haciéndolo perezosamente mientras suspiraba un poco más calmada ante la situación, mucho antes de que Sasuke pudiera penetrarme, habíamos escuchado ruidos afuera bastante escandalosos, sino hubiera sido porque lo pare en seco nos habrían encontrado en plena acción, claro que cuando nos separamos Sasuke me susurro un dejaremos esto para más tarde, me sonroje en cuanto lo escuche de él e incluso ahora estaba un poco sonrojada, por el tono que había usado.

— ¿se puede saber que mierda sucedió allá afuera? —pregunto Gaara sacándome de mi trance.

— ¿de qué hablas? —dije sacándome las zapatillas sentándome sobre la mesa donde Sasuke me había colocado hacía apenas nada.

—No te hagas la tonta… dejaste que Sasuke te tocara, te fuiste encima de él y lo que es peor… te dejaste ver con toda la escuela con ese…

—alto ahí Gaara… ¿Qué acaso no era el plan que Sasuke viniera a mí o es que estoy mal Suigetsu? —mi hermano me miro con mala cara, tampoco le había gustado mucho mi acción, pero de igual manera suspiro derrotado, sabía que yo tenía razón en todo esto. —hice solamente lo que me pidieron, sino te gusta el resultado simplemente hazte el desentendido.

—Sakura tiene razón Gaara, Sasuke debía venir por ella y lo hemos conseguido, aunque concuerdo que no me gusta que te haya tocado por ese imbécil, sabemos que es primordial que ganes su confianza, creo que no hubo mejor respuesta de él que la de ahorita. —Temari asintió de igual forma mientras que el pelirrojo salía hecho una furia, cosa que me hizo molestar bastante. Él no tenía derecho a ponerse de esa manera, no compartíamos ninguna relación de sangre o de deber para que estuviera enojado de esa magnitud pero de cierta forma lo podía entender, era como yo a veces me sentía con respecto a Sara-san y Sasori, hice una mueca ante el pensamiento, no quería ser de esa forma, suspire de mala gana, Temari se quedó conmigo para ayudarme a quitarme el corsé, el cual alegue que podría quitármelo sola sin problemas, la rubia intento ayudarme pero finalmente le convencí de no hacerlo, iba a ponerme mi ropa de vago, cuando Karin entro entregándome un vestido de seda rojo, lo cual llamo mi atención demasiado, pero tanto ella como Temari me ordenaron de ponérmelo, en cuanto lo tuve puesto me mire al espejo sorprendida de los resultados, si antes tenía una cintura definida ahora se pronunciaba con mayor atención al igual que mis caderas, mis senos sobresalían esa tela de una forma llamativa, se unía la parte del pecho con la del cuello dejando mi espalda descubierta y parte de mis senos, era corto el vestido por lo cual mis piernas se llamaban la atención, ahora tenían un mejor tono muscular e incluso acentuaba mi trasero de tal manera que me sorprendía la forma en la que la tela hacia magia sobre mi cuerpo, habían predispuesto unas zapatillas del mismo color haciendo el coordinado perfecto, salí del cambiador donde Suigetsu, Karin y Temari sonriendo al verme al inmediato.

—te dije que era buena opción el vestido rojo —dijo Karin acomodándose los lentes viéndome orgullosa de mi atuendo.

—creo que adelgace un poco

—es lógico, estuviste en una estricta dieta, es parte de los resultados del entrenamiento, Gay-sensei podrá ser un desquiciado, pero te aseguro que es uno de los mejores en el negocio —menciono la rubia.

—te ves preciosa hermana —comento Suigetsu mientras Temari me tomaba de la muñeca.

—Bien, ahora que estas dentro de nuestra hermandad, podemos pasar a la mejor parte de la noche.

—¿y cuál es esa? —dije con molestia, realmente quería irme de allí, tenía pensando llegar a casa y darme un baño de agua caliente de manera que pudiera descansar pero al parecer tanto mis hermanos como mi cuñada no estaban del todo interesados.

—hay una fiesta muy exclusiva, solo pocos pueden entrar

— ¿y eso tiene que ver conmigo por qué…?

—Sakura, no seas tonta, Sasuke estará ahí, me encargue yo mismo que Uchiha recibiera una invitación —hice una mueca, ¿era en serio?

—ni siquiera he podido quitarme este color de mi cabello

—eso es mejor, ahora que estas de esta manera, puedes ir a coquetear directamente con él sin que haya problemas, tengo entendido que el otro día Sasuke se puso un poco enojado por haberse enfrentado a Gaara y a Ino —¿Ino? Gire mi rostro a Temari quien se mostraba un poco recia ante lo recién dicho.

—¿Qué tiene que ver Ino en esto?

—Bueno, Ino… ella…

—Ella es muy amiga de Sasuke, cuando fue el problema con los Uchiha tomo partido con ellos, escuche que tuvo un leve enamoramiento de él, pero termino en el momento en que se metio con una amiga de ella —dijo Temari cruzándose de brazos, Karin por su parte asintió ante aquello, mi hermano y mi casi hermana salieron alegando que irían por el auto para irnos a la fiesta, mientras que mi cuñada se quedaba conmigo de tal manera que no pudiera escapar, me sentí un poco abrumada por la información reciente, Ino había estado enamorada de Sasuke… pero ¿Sasuke de había enamorado de ella? No me gustó nada aquello, una cosa era que lo sedujera y otra saber que estaba metiéndome con alguien con el mi mejor amiga había tenido una especie de historia, suspire de mala gana, esto no ayudaba mucho. Mire a Karin detenidamente, Matsuri había insinuado que la pelirroja había tenido algo que ver con el Uchiha también, lo cual llamaba mucho mi atención, ¿mi hermano se había interpuesto entre ambos o ella había interactuado con Suigetsu después de aquello? Supongo que le mire demasiado tiempo.

— ¿sucede algo Sakura?

— ¿Te enredaste también con Sasuke? —se sonrojo un poco bajando el rostro. —, lo siento yo no quise…

—está bien, de todos modos creo que es bueno que lo sepas, a Suigetsu le molesta mucho cuando se toca el tema, pero si eres tu está bien —asentí ante su respuesta—, Sasuke y yo estuvimos saliendo meramente por fines políticos de nuestros padres, sus padres intentaban ganar terreno dentro del sector turístico, mi familia tiene una cadena de hoteles, poco a poco fui desarrollando sentimientos por él hasta que… —se detuvo suspirando con profundidad cosa que hizo que mi curiosidad creciera—, se estaba metiendo con otra chica, su familia tiene un importante banco en Estados Unidos, salía con ambas, la otra chica sabia de mi pero yo no, poco a poco todos se enteraron, hasta que en una fiesta los encontré a los dos juntos, le pedí una explicación pero se limitó a decir que se había terminado todo, dijo que no era un buen negocio lo que estaba desarrollando y debía agradecer que alguien se hubiera fijado en mí…

—Lo siento mucho… —me sincere, la vi secándose disimuladamente una lágrima, cosa que me hizo sentir terrible—, ¿tú y mi hermano salieron después de eso?

—no, paso un tiempo antes de que pudiera salir en público de nuevo, conocí a Suigetsu por Temari, empezamos a conocernos, y pasar tiempo junto, cuando menos lo espere, ya estaba enamora de él —hizo una gran sonrisa de oreja a oreja e incluso vi como acariciaba su anillo con amor—, después no sé cómo se dio que estaba ya con él y desde entonces supe que quería estar con él el resto de mi vida.

—¿no te molesta un poco todo lo que está pasando? Digo… ¿lo que mi hermano está haciendo con respecto a su familia?

—Si te soy sincera, la verdad quiero que sufra —me quede en blanco después de lo que escuche—, él no solo ha jugado conmigo Sakura, lo ha hecho con varias, incluso su familia desestabilizo a la mía, ellos no estaba haciendo negocios con la mía, estaba planeando robar accionistas y contratos, afortunadamente no lo lograron, pero incluso de haberlo hecho…

—Habrían estado en la ruina —asintió Karin mirándome fijamente, desvié la mirada ante esa verdad, si bien era cierto que nuestra familia había peligrado ante la amenaza de los Uchiha, jamás supe el por qué querían acabar con nosotros, había sido un misterio incluso cuando me contactaron mis padres para avisarme de lo que había sucedido y lo seguía siendo, Sasori no me había aun enviado la información con todo el caso de lo que habían hecho, mi curiosidad estaba creciendo debía averiguar que estaba pasando y con urgencia.

—Creo que tenemos una buena ventaja sobre ellos Sakura —dijo ahora mirándome fijamente— a Sasuke le gustas —reí nerviosa sobre aquello.

—Soy la nueva, la chica misteriosa que regreso porque consiguió un contrato millonario y respaldo de varias compañías…—pause un poco al darme cuenta de lo que decía— es eso lo que le interesa no yo, le interesa conocer a la Sakura que tiene contactos… —dije casi para mí misma, cosa que la pelirroja noto de inmediato.

—no dudaría que le interese más esa Sakura a su hermano mayor o a Fugaku…—menciono a sus hermano y su padre— pero hablando en concreto, le interesa la Sakura la persona, no la Haruno que representas —dijo con una leve sonrisa—, durante el tiempo en que no lo viste, estuvo con otra.

—Sí, me entere de ello —dije tratando de no mostrar ninguna emoción, restándole importancia.

—Lo hizo porque no pudo verte en todo este mes, ella fue tu reemplazo—no respondí, me quede observando las reacciones de Karin—, perdió los estribos con Gaara esta noche, y vino a buscarte incluso, aun sabiendo que podría encontrarse con Suigetsu…

—¿Cuál es tu punto Karin? —dije ahora analizando a la pelirroja, si bien era cierto todas aquellas cosas que me había dicho, ahora parecía que ella estaba enterada de algo que me estaba perdiendo, Karin podría parecer bastante frágil e incluso podría dar pena por sí misma, pero una cosa era claro, era una depredadora cuando tenía que hacerlo, y justo ahora estaba enseñando sus colmillos, cosa que intuyo de prisa.

—solo recordarte que tu familia te necesita, Suigetsu y los demás lo pasaron muy mal cuando intentaron dejarlos de lado… sé que eres lo suficientemente lista por Suigetsu y sé que eres la adoración de tus padres.

—Adoración no es el concepto que yo usaría para hablar de mi relación con ellos, al menos con mi madre —dije cruzándome de brazos.

—Sakura, no te enamores de él —concluyo sorprendiéndome de sus palabras. —y no lo digo como una ex de Sasuke, lo digo como tu futura hermana y porque a pesar del corto tiempo que tenemos de conocernos, te quiero y no quisiera que él te lastimará. —tarde un poco en procesar aquello, ¿Qué mierdas estaba pasando?

—¿Perdón? —Levante una ceja de modo de cuestión—, ¿Crees que me enamoraré del miembro de la familia que arruino mi familia? ¿Tan poco confiable me veo?

—no quise decir eso…

—Escucha Karin, sé que cometí errores en el pasado, pero te puedo asegurar una cosa, los Uchiha son una mierda y no dejare que nadie absolutamente nadie juegue con nuestro orgullo, haré que Sasuke y sus familia se hunda en la miseria y no dejaré que nadie vuelva a dudar de mí, ¿quedo claro? —unos aplausos empezaron a sonar en la habitación, volteamos a ver de donde provenían, era Temari quien había regresado justo en esos momentos, no estaba segura que tanto había escuchado, pero lo visto parecía satisfecha con mi respuesta.

—Me alegra tu actitud Sakura —dijo llegando hasta nosotras—, porque el siguiente paso será una clave bastante grande en el plan, una con el que podremos asegurar la victoria.

— ¿de qué se trata?

—te daré los detalles mañana, hoy solo dedícate a disfrutar considéralo como una pequeña recompensa por el esfuerzo de esta noche y del mes entero practicando —Temari nos llevó al estacionamiento, donde nos metimos inmediatamente al auto deportivo de mi hermano, a medida que íbamos avanzando me di cuenta de lo frágil de la situación, si bien era cierto que Sasuke, me atraía de un forma tan poco convincente, que lograba hacerme sucumbir y no pensar coherentemente cada vez que estábamos juntos en plena acción, el simple hecho de estar piel contra piel hacia qué no pudiera pensar en nada más y olvidara que era un Uchiha y yo una Haruno, de repente me sentí increíblemente frustrada, no podía dejarme llevar por mis emociones, antes lo había hecho en un momento de rebeldía con mi madre y había sufrió varios años en el olvido por parte de mi familia, no te enamores, escuche la voz de Karin en mi cabeza, ¿Amor? Reí de lado ante el pensamiento, jamás me había considerado a mí misma en una relación hasta que conocí a Sasori y la idea había muerto en el instante que me había enterado de su compromiso, suspire de lleno, sabía que era observada por mi hermano, Temari y Karin, sabia también que había llamado la atención de Sasuke de una manera que no les agradaba nada pero… yo no había pedido ser arrastrada ese lio de problemas, mis pensamientos fueron cortados de llenos en cuanto paro el auto en seco, mi hermano nos indicó que bajáramos, eso hicimos al tiempo en que miraba el establecimiento, se veía bastante bien el lugar, amplio y con buena iluminación, en cuanto entramos el ambiente estaba en su máximo esplendor, se veían parejas bailando, unos grupos más en las mesas bebiendo, y otro más en asuntos íntimos, tan pronto como entramos sentí una mirada sobre mí, encontrándome con la rubia que había llevado Sasuke al evento, me sonrió de lado de un forma tan engreía como si jactara victoriosa en alguna competencia, levante una ceja de modo de cuestión y solo hasta que unos tipos se movieron supe el por qué reía de esa manera.

Sasuke la tenía sentada en sus piernas nuevamente, y ella se restregaba contra su entrepierna dejándome en claro que él la había elegido, cosa que me hizo cabrearme, realmente el hijo de puta estaba como si nada con su grupo de amigos, presumiendo de tener a la rubia en su poder, como me había tenido a mi hasta hace unas horas atrás, me sonroje al recordar cómo le había invitado a penetrarme, reaccione devolviéndole la sonrisa a la rubia, me sentí como una idiota por haberme creído importante para Sasuke, mire a un costado a mi hermano quien se me acerco para que fuéramos a nuestra mesa, en vez de llevarme se quedó conmigo mirando la escena consternado.

—te dije que Sasuke no te sería fiel, él es este tipo de personas —me volví hacia él y trague mis sentimientos poniendo la misma cara que le pondría a mi madre cuando quería que me dejara en paz.

—Solo estaba teniendo una magnífica idea Sui-chan —dije dulcificando mi voz, levanto una ceja a modo de cuestión, se me había ocurrido una idea perfecta para hacerle caer todo su numerito.

— ¿Cuál es? —dijo curioso ante mi idea.

—¿te puedo apostar que esta noche, haré que Sasuke caiga rendido a mis pies y no solo eso… entrare dentro de las instalaciones Uchiha—dijo mostrando una helada sonrisa, su rostro se endureció.

—¿entrar dentro de las instalaciones Uchiha? —Asentí—, no lo sé Sakura, una cosa es que tengas que seducirlo como parte de un juego, pero hacer como eso… si nuestros padres se enteran…

—la persona que me puso a cargo y me enseño todo lo que sé de negocios siempre ha dicho que en la guerra todo se vale, pero te estoy ofreciendo no solamente hacer que paguen por todas sus fechorías… Solo piénsalo, nuestro regreso triunfal y la caída del imperio Uchiha, estoy segura que mamá apoyara la noción. —hizo una mueca no muy bien convencido, miro al frente de nuevo observando como la rubia subía sus manos alrededor de Sasuke y este sonreía gustoso ante aquello, la chica se levantó un momento, quitándose de sus piernas, giro su rostro de lado, sus ojos se encontraron con los míos, por alguna razón se ensombrecieron y supe en ese momento que deseaba tenerme entre sus brazos, sonreí de lado y me acerque a mi hermano para susurrarle algo.

—Solo míralo ahora —dije muy cerca de su oído—, ¿no crees que sucumba ante mí? —no respondió, pero le miro con mala cara al moreno, para ese entonces, ya podía sentir otra mirada sobre mí, gire brevemente mi rostro encontrándome con un moreno alto de piel aperlada, estaba solo y no dejaba de inspeccionar a detalle cada parte de mí, esto era demasiado fácil, si bien había observado antes a Sasuke, era alguien que le gustaba dejar en claro quién era de él— ¿conoces a ese chico? —cambie de tema y observe como mi hermano se giraba y fruncía el entrejo al ver al moreno que levantaba su cerveza.

—De ninguna manera te voy a presentarlo —levante una ceja a modo de cuestión— es un vil mujeriego, solo serías una cogida de una noche —me burle de su comentario—, Sakura es en serio.

—Te puedo conseguir otro contrato esta noche, uno más jugoso del te di hace un mes —mire la ambición en sus ojos, habíamos detenido uno de los más grandes contratos que habían hecho los Uchiha y había sido designado a otra familia, cosa que hasta donde tenía entendido había los frustrado por haber estado meses peleando por él…

—Si veo que quiere hacerte algo lo detendré —asentí y me fui alejando de él, sentí la mirada de Sasuke y la de Suigetsu sobre mi mientras iba avanzando hacia el moreno quien sonrió ladinamente, moví mis caderas más de lo necesario atrayendo la atención de varios hombres, solo hasta que estuve frente a él coloque mis manos sobre la mesa y le deje ver el fino escote de mis pechos sintiendo como su mirada se iba directamente sobre esa región. Subí mi mano hasta mi cabello acomodándolo detrás de mi oreja, mire de reojo a Sasuke quien parecía tenso ante mi osadía reí internamente, eso era bueno.

—Creo que no he tenido el placer de conocerte… aun… —suavice mi voz más de lo normal y vi como el hombre se movía un poco para dejarme suficientemente espacio, me senté y sus ojos fueron directamente a los míos.

—eso se puede arreglar, soy Saiken Utakata —dijo mientras se inclinaba un poco más de la cuenta, sin duda este hombre sería un blanco sencillo—, estoy en último año de mi carrera de medicina.

—entonces eres mi sempai, acabo de entrar a la escuela… Soy Haruno Sakura…

—¿Haruno Sakura? He escuchado mucho de ti, sin duda alguna eres más hermosa de lo que dicen los rumores

—¿Rumores? —levante una ceja divertida. —¿Qué clase de rumores?

—de toda clase… —dijo ahora mirando mis labios, sentí como uno de sus brazos bajaban lentamente por mi espalda dejando suaves caricias a su paso, fingí estremecerme.

—¿Qué raro? —Dije ahora separándome un poco de él, dije haciéndome la desentendida— espero nada malo.

—ninguno del que tengas que preocuparte —me regalo una linda sonrisa, fue hasta ese momento en que me fije detenidamente en el moreno, tenía ojos de color miel claro, sus mechones de su cabello eran largos y tapaba parcialmente su rostro, además de que se veía que mantenía un buen cuerpo, era el típico seductor que lograba llevarse una o dos chicas al mismo tiempo a la cama, era atractivo, no lo negaba, por un momento me olvide de Sasuke y permanecí con Utakata por mero gusto, al principio había actuado como un típico mujeriego pero después de estar ahí con él al menos una hora, me había comenzado a caerme bien, era alguien con criterio y decidido a hacer lo que era necesario por obtener lo que quería. De cuando en cuando sentía su manos en algún lugar indecoroso como mi muslo o mi espalda, cuidando de no ir mas allá, habíamos bebido demasiado además de esa conversación que estábamos teniendo, sentí mis mejillas rojas, pero aun así todavía me encontraba en mis cinco sentidos, de repente empezaron a tocar una canción bastante ambientada, era una de mis favoritas, creo que sempai se dio cuenta de ello porque me pidió que bailara con él, me llevo de la mano hasta el centro de la pista e íbamos dejando llevar por la música.

Empecé a mover mis brazos, y cintura mientras él hacía lo mismo con su cuerpo, la música lentamente empezó a sonar un poco más sensual de mi gusto, pero seguía moviéndome sin importarme nada, sabía que mi hermano estaba cerca así que no habría algún problema si Utakata quería propasarse un poco, sonreí ante el pensamiento y por una vaga fracción de segundos mire a Sasuke muy cerca de nosotros, deje de reí, y me di la vuelta ahora dejando que Utakata mirara mi espalada y mi trasero, me fui echando hacia atrás hasta sentir su cuerpo contra el mío, mis caderas se hacían de un lado a otro, hasta que sentí algo duro entre mis glúteos, sentí como las manos de sempai, empezaban a viajar por mi cuerpo, desde mi espalda hasta mis hombros desnudos y ahora por mi cintura paso estratégicamente por mi cintura, y siendo recelosa e imaginando a la rubia con Sasuke, me volví a girar al sentir como dejaba húmedos besos sobre mi nuca, Utakata se veía ya estaba demasiado borracho, lo suficiente como para que hiciera movimientos torpes y lentos, pero una cosa era clara, me deseaba, me incline más hacia él y deje que sus manos fueran hasta el límite de mi espalda con mis glúteos, subí mi manos sobre su cuello, bajo su rostro, roce mis labios contra los de él, sonreí ante el contacto tan íntimo, yo tenía el control sobre él, iba marcando el paso entre ambos, Utakata fue cerrando lentamente el espacio entre ambos, ya no estábamos bailando, ahora habíamos parado, y aunque sabía que solo lo estaba usando para llegar a Sasuke, había sido realmente muy apreciable su compañía, sentí como sus labios fueron rozando lentamente los míos, ahora solo esperaba aquel beso…

—¿Qué mierdas estás haciendo Uchiha? —abrí los ojos de golpe y vi como Utakata estaba en el piso con una mejilla roja, trate de arrodillarme para socorrerlo pero antes de poder lograr mi cometido sentí como unas manos me tomaban del antebrazo y me iba arrastrando mientras escuchaba como Utakata iba gritando mi nombre, gire mi rostro encontrándome con Suigetsu y Temari quienes parecían bastante satisfechos con mi trabajo, haciendo que riera de lado, ahora solo sería una cuestión de tiempo para hacer que Sasuke cayera, seguimos caminando a través de la gente sin un rumbo fijo, fue hasta que paramos me di cuenta que estábamos en las escaleras de emergencia del lugar, Sasuke me había arrinconado contra la pared y ahora ponía ambos brazos por arriba de mi cabeza haciendo que fuera imposible escapar, su ceño estaba fruncido y sus ojos demostraban un hilo de posesividad que antes no había visto, la manera en que me miraba sabía que estaba enojado por lo había tratado de hacer con Utakata, sonreí a lo bajo. Era obvio que lo estaba provocando, y que por su mirada sobre mi cuerpo, deseaba tenerme bajo su cuerpo, mordí mi inferior debatiéndome en hacer un movimiento. Pero no hice nada en su lugar intenta quitármelo de encima.

—¿Qué mierdas fue eso? —escupió agriamente lo que hizo que levantara una ceja a modo de cuestión.

—¿disculpa? ¿No sé qué estás hablando? —me hice la desentendida.

—no te hagas Sakura… ¿Por qué. Coño. Dejaste. Que. Ese. Tipo. ? —dijo entre dientes, mire entre divertida y consternada a Sasuke, de verdad que era un caso.

—no tengo que darte explicaciones Sasuke —intente salir de su alcance pero me volvió a tomar entre sus brazos y me empujo contra la pared, restregándome su miembro semierecto, gemí involuntariamente ante aquello, y de pronto sentí como sus manos se iban a mi cintura, alejo de mi espalda el cabello como lo había hecho Utakata, depositando húmedos besos, me empuje un poco contra él y lo escuche gruñir. Por alguna razón me volteo y quedamos cara a cara, sus ojos recorrieron mi cuerpo con deseo, con necesidad de mí.

—te equivocas —menciono excitado—, me la debes —sus manos fueron a mi pierna la cual subió a su cadera y fue subiendo con lentitud intente detenerlo, pero en el momento en que llego a la unión de mis piernas y paso su manos estratégicamente sobre la tela me hizo temblar un poco.

—Si es así… ¿entonces tu explícame que hacías con esa rubia postiza? —dije entre susurros, solo cuando se detuvo en seco me di cuenta de mi error, sentí que el alcohol abandono mi sistema de golpe haciendo que me volviera a la realidad. Sasuke me miraba entre asombrado mi respuesta y deseoso del saber el origen de mi comentario, sentí como mis mejillas se tornaban rojizas, había bajado la guardia. Fruncí el entrejo con fuerza, me sentí como una idiota mientras el moreno ahora sonreía de lado ladinamente. Mierda…

Sakura me había provocado desde el primer momento que la había visto, desde ese momento en la fiesta, en la junta del banco con los Yamanaka, en la escuela e incluso en el evento reciente, la manera en que destacaba, su inteligencia y lo hermosa que era me había llegado a abrumar, en un maldito mes no la había visto, no la había tocado, había olvidado lo jodidamente bien que se sentí en cada caricia, cada estocada, el solo recordar como subía y baja de mi hacia que me pusiera duro y listo para ella. Si bien era cierto que la manera en que había bailado aquella noche había reforzado el hecho de desearla a tal punto, que me hizo olvidarme por completo en donde estaba e ir por ella, había dejado a Yuuki entre gritos y molestia en su voz, hasta llegar a la pelirrosa —morena en aquella ocasión—, la había tocado y en una cuestión absurda de tiempo ambos nos encontrábamos preparados para hacernos uno, era estúpido el solo pensarlo, pero en cuanto nos besamos no existía nada más, justo como en ese momento, tuve que dejarla porque su familia entro de inmediato, no me sorprendía mucho la verdad, ella era algo así como una princesa en su familia, o al menos eso decía la información que me había proporcionado Konan, justo estaba llegando con el resto del grupo cuando Yuuki apareció molesta por haberle dejado, no hizo mucho escandalo cuando se dio cuenta de que de seguir en esa actitud no sería un problema para mí el dejarla plantada ahí, pase de largo de ella mientras se tragaba la bilis por haber sido humillada delante de muchos, por mi parte, mis amigos y yo nos habíamos trasladado a la fiesta de la hermanad de las Kunichi's donde seguiría el evento.

Mis amigos habían preguntado sin cesar el por qué había ido detrás de la chica, incluso uno que otro preguntaba por su identidad, reí divertido por aquello, Sakura me había hecho más popular de lo normal, había logrado que la mayoría de los hombres preguntara por ella y su identidad. Y en el caso de las mujeres estuvieran celosas de que esa chica pudiera ser algo serio para mí, aunque ambos no teníamos nada, ella sabía que si su familia se enteraba de… me removí incomodo en donde me encontraba, ¿Qué carajos estábamos haciendo? ¿Cuál era nuestra relación? Se sentí un poco abrumado, por un lado tenía que sacarle información a Sakura, lo cual no había logrado hasta ese momento pero encontraría la forma de hacerlo, y por otro, ella me atraía como si fuera una polilla a un fuego donde sabría que podría quedarme, Sakura era el tipo de mujer que hacía que todo hombre se enamorara de ella, no sería mi caso, me quede demasiado tiempo en mis pensamientos que perdí el hilo de la conversación, me gire un poco encontrándome con Naruto, quien había estado a un costado mío cuando se subió la pelirrosa miro sus ojos con detenimiento y ahora se mostraba un poco recio a todo aquello, aunque la mayoría estuviéramos divirtiéndonos él seguía mirándome con seriedad. Al parecer había reconocido a la chica.

—Sasuke… —llamo.

—¿Qué sucede? —dije al mismo tiempo en que Yuuki miraba al frente con un aire estúpido se sentó en mis piernas removiéndose besándome tratando de llamar la atención, aunque no había logrado mucho reía de la situación una de sus amigas apareció llevándosela por un momento, cosa que agradecí internamente, solo cuando se quitó pude ver a la Haruno con un puto vestido —si es que es posible llamar a eso vestido—, la forma en que lucia sus piernas y sus pechos, hicieron agua mi boca, no se había quitado el color negro de su cabello haciendo que su piel luciera aperlada y sus ojos resaltaran de una forma que me abrumaba, trague grueso en el momento en que desee tenerla para mí, ella a diferencia de mí, parecía molesta al verla, rei de lado, seguramente era porque había visto a Yuki sobre mí, Suigetsu fue por ella para llevarla a su mesa donde estaban Temari y Karin quien no dejaban de mirar mis movimientos, pero solo le mire murmurar algo al peliazul y como ahora se alejaba de él e iba caminando al lado contrario donde estaban las demás, mire a donde se dirigía, la manera en que movía sus caderas, la sensual sonrisa incluso la manera en que movía su cabello, iba por un maldito imbécil, fruncí el entrejo con fuerza, trate con todas mis fuerzas mantenerme calmado, mientras miraba el intercambio de miradas entre ambos.

—Parece que Utakata la pasará bastante bien esta noche —escuche a Shikamaru decir perezosamente, respire profundo ante aquello.

—¿no es la misma chica que bailo el último acto? —cuestiono Neji esta vez haciendo que mi mal humor emergiera.

—¡Que tal Uchiha! —se mofo Kiba—, al parecer el bombón no esta tan interesada en ti…

—¿A qué te refieres? —dijo Naruto esta vez con seriedad reflejada en el rostro, podría casi jurar que lo había dicho con furia en su tono.

—¡Dios!, ¿hermano, donde has estado? ¿Acaso no viste como se subió sobre Sasuke y estaba dispuesta a follarlo enfrente de todos? ¡Incluso de ti Yuuki! —la rubia, quien estaba sentada a mi derecha frunció el entrejo al igual que Naruto, ambos seguían mirándome pero no dijeron nada más, me limite a ver a la chica en cuestión con Utakata, alrededor una hora después de tragos, sonrisas estúpidas y coqueteos, observe como la llevaba al centro de la pista, donde inmediatamente paso a ser el centro de atención por todos los hombres, aunque claro ella los ignoraba bastante bien, la manera en que su cuerpo se movía al compás de la música hacia que mi miembro se pusiera duro, la manera en que sus caderas se movían, seguía el ritmo de la música, haciendo que fuera consciente de cada parte de ella, incluso había cerrado sus ojos, estaba disfrutando de aquello, por una fracción de segundo abrió sus ojos encontrándome con ella, su semblante parecía excitado y exigiéndome que fuera y la reclamara como mía, de pronto corto todo contacto, fruncí mas el entrejo en el momento en que el maldito de Utakata ponía sus manos sobre de ella hicieron que me entrara la necesidad de ir por ella y moler al tipo en golpes, trate de dejar de lado esas ideas dándole un buen trago a mi cerveza, pero justo cuando empezaba a serenarme vi como el hijo de puta giraba a Sakura y lentamente empezaba a besarla, no sé en qué momento fue que deje de lado a todos y llegue donde estaban ambos, tome del hombro a Utakata y lo golpeo lo más fuerte que pude dejándolo en el piso noqueado, la Haruno miro alternamente a mí y al hombre, sentía como cada uno de mis pensamientos me traicionaban y solo cuando reaccione a toda la escena montada, tome de su mano y tire de ella quitándonos de inmediato de ahí, cuando fui consciente de mis actos, estábamos en las escaleras de emergencia, estaba embriagado de su aroma, de su cuerpo y de la manera en que lucía tan tentadoramente hermosa. Le había exigido que me diera una explicación pero se había mostrado fría e incluso furiosa por alguna razón.

—Si es así… ¿entonces tu explícame que hacías con esa rubia postiza? —soltó de repente devolviéndome devolvió a la realidad de la situación.

Estaba celosa. Sonreí por inercia, esto era una mierda, mis instintos más bajos me habían dicho que la reclamara que la hiciera recordar de quien era, que la torturara hasta que entendiera que era mía, pero ahora me quedaba claro de alguna forma que ella había hecho lo mismo que yo, había montado todo el show con Utakata con el único fin de que fuera por ella, maldita sea, había ganado y ahora yo había perdido en el juego, por alguna razón sentí algo en el pecho, no sabía si era satisfacción porque ella se había sentido como yo o era simplemente el deseo de tomarla y hacerla de nuevo mía, ignore todos mis pensamientos y tome a Sakura de su cintura y la repegue contra mí, la mire suspirar, baje mi rostro hasta la unión de sus pechos, deslice mi lengua hasta y subí lentamente hasta llegar a su cuello, había ladeado su cabeza, mis manos pasaron a su cuello donde desate la unión de arriba de su intento de vestido, mire maravillado como caía la tela y dejaba a la vista un par de senos, mis manos la acunaron, estiraron el pezón con mis dedos y con mis dientes mordisqueaban el otro. Le mire sonrojarse y tratar de no gemir, me detuve en seco en cuanto escuche pasos, me miro un poco confundida, sus grandes ojos jade relucían e incluso podría ver un brillo de deseo reflejado en ellos, trataba de no pensar en nada, trataba de mantenerse a raya, pero entre más lo hacia mi deseo de que gimiera mi nombre crecía con necesidad de ella, le tome una mano y la coloque sobre mi creciente erección, por inercia se mordió el labio, baje mi rostro hasta ella mientras iba subiendo sus manos a mi cuello y la distancia iba disminuyendo, comenzamos a besarnos mis manos se fueron directamente a su rostro bajando lentamente por su hombros desnudos llegando a su espalda desnuda, en cada beso, íbamos subiendo el tono, la forma tan demencial en que parecía todo aquello, lentamente sentí como su lengua se abría paso y entraba en mi cavidad bucal así como yo hacía lo propio con la suya, nuestras lenguas jugaban un especie de ritual que iban acompañados de gemidos y gruñidos.

—Sasuke… —gimió en cuanto, baje a su cuello dejando besos y mordisqueando la piel a mi merced, con una de mis manos baje a mi bragueta y lentamente fui sacando mi miembro erecto, Sakura por su parte me empujo suavemente, su mirada estaba obscurecida con deseo, se arrodillo frente a mí y sus manos fueron directamente a tocarlo, contuve el aliento en cuanto sentí su mano, comenzándolo a masajearlo fue llevando un ritmo lento y seguro, subiendo y bajando, tomándolo con fuerza, su manos se fueron acomodando de manera que sus dedos cubrieron la parte baja y con su otra mano acariciaba mis testículos con delicadeza.

—mmm… —deje escapar un gemido lo que hizo que Sakura sonriera altanera, de repente paro y coloco un dedo en la cabeza de mi pene, me sentí como un idiota al darme cuenta de lo increíblemente excitado que estaba, había liquido preseminal, trague grueso al sentir la lengua de Sakura sobre este— mierda… —mis fosas nasales se abrieron de golpe, e hice un esfuerzo mental para no correrme en ese momento, tomo el tronco de mi miembro alzándolo deslizando la lengua desde mis testículos hasta la punta teniendo que detenerme contra la pared, sintiendo cada fibra de mi ser vibrar, cerré mis ojos con fuerza, y sentí como ella se llevaba mi miembro a su boca en un solo movimiento, abrí los ojos de golpe y mire el escenario más jodidamente caliente de mi puta vida, Sakura estaba subiendo y bajando con su boca, sus ojos jade reflejaban el deseo de hacerme correr, con mis manos tome todo su cabello colocándolo en una coleta descansando mi mano sobre su cabello, viéndola con deseo, con ese algo, maldita sea, sí que sabía que estaban haciendo, de pronto se me vino a la cabeza toda la información de Konan, los novios que había tenido, los malditos hijos de puta que se habían acostado con ella antes de mí y que habían experimentado mi misma suerte, con una mierda, me sentí tan enojado que tome a Sakura y la empuje más contra mi miembro, coloco sus manos a los costados de mi cadera apretándome con sus uñas, dejándome pequeñas resacas de éxtasis sin igual. Me empujo y la vi toser un poco con pequeñas lágrimas en los costados de sus mejillas.

—¿Qué mierdas intentas hacer? ¡¿Ahogarme?! —grito enojada, pero me importo una maldita mierda, le levante y estampe contra la pared, mientras acuñaba sus nalgas con mis manos. —aaaah —grito, lo acaricie con mis manos, mientras subí su falda y dejaba la vista la ropa interior que había usado en el baile, sentí como mi miembro vibraba, tenía una puta erección que me dolía más de lo que podía decir, acaricie con suavidad sus nalgas dándole pequeños mordiscos haciendo que murmurará incoherencias, le deslice su intento de bragas, y mire su coño dolido, húmedo y rojizo. Mi aliento golpeo su entrada y sentí como se empujaba tratando de tener tacto conmigo, sonreí de lado, abrí con mis dedos un poco más y deslice mi lengua, absorbiendo su humedad, jugando mi lengua cada parte de ella, explorándola. — ¡Saaasukee! —grito con arqueándose—, ¡sí… así! —se siguió empujando y adentre un dedo en su entrada sintiendo como me aprisionaba, fascinándome la manera en que costaba entrar en ella, sume un dedo más siguiendo mi tortura, y ahora era ella quien empujaba con una mano mi rostro para profundizar más mi lengua, su sabor era dulce, mis penetraciones seguras y rápidas, de pronto tuve que parar al darme cuenta que no tardaría en correrse, me incorpore de pronto, Sakura no estaba satisfecha por aquello e intento voltearse, pero se lo impedí con la mano, que coloque en su nuca, con mi otra mano, coloque mi miembro en su entrada y ahora deslizaba mi manos alrededor de su espalda desnuda, hasta sus nalgas las cuales golpeo en cada cado de las mejillas dejándolas rojas.

—mmmm… Sasuke… —giro su rostro, sus mejillas estaban sonrojadas, y empujaba sin duda sus caderas contra de mi pidiéndome más, empecé a entrar en ella, abriendo de golpe los ojos Sakura, tuve que dejar de moverme.

—Mierda… —apreté mis manos en sus caderas—, estas tan apretada… —fui entrando en ella con lentitud, sus manos se hicieron puños, me eche para atrás y con un solo movimiento de caderas la penetre en una estocada.

—¡Aaaaaah! —grito con fuerza, me fui moviendo, primero lento, agarrando ritmo, solo cuando ambos estábamos acostumbrados a las penetraciones fue conforme empecé a embestirla con mayor fuerza y precisión. —mmmm… —gimió, tome del cabello nuevamente jalándolo hacia atrás, y besaba su cuello, giro su rostro y ahora nos estábamos besando, sentía en cada estocada como me envolvía y apretaba con mayor fuerza a cada estocada, baje una mano yendo directamente a su clítoris estimulándolo.

—Joder… estas tan húmeda —dije entre besos, le levante una pierna colocándolo contra con mis caderas haciendo las penetraciones más profundas y como su cuerpo reaccionaba, termine por levantarla de las caderas, haciendo que en automático enredara sus piernas contra mí, con mis manos se fueron ahora su trasero, apretando sus nalgas con fuerzas, mientras subía y bajaba de mí con mayor necesidad.

—Sasuke… estoy por… —susurro contra mis labios. Endurecí mi rostro.

—Di que eres mía… —dije por inercia y su rostro se descompuso.

—yo… —empecé a ir lento y sentí como ella se empezaba a frustrar por aquello.

—Dilo —exigí mientras iba casi parando cosa que ella no accedía nada gustosa.

—soy… yo… —saque y la penetre con fuerza haciéndola con profundidad, me abrazo del cuello cerrando sus ojos— ¡Soy tuya! —gimió con fuerza llegando al orgasmo seguido de mi terminando dentro de ella, permanecimos de esa manera por alrededor de unos minutos, repasando la resaca de mi orgasmo, lentamente ella me empujo, tomando eso como una señal para retirarme de ella, saque mi flácido miembro, y veía con fascinación como parte de mi semen se escurría de su entrada, sentí la necesidad de volver a penetrarla, pero fue imposible, una vez que la coloque en el piso empezó a arreglarse como si nada hubiera pasado, paso una mano entre sus piernas y levanto el rostro mirándome entre enojada y divertida, le pase un pañuelo que guardaba en el pantalón, se limpió con cuidado al tiempo en que se acomodaba la ropa. Mire alrededor asegurándome que nadie hubiera visto nada. Suspire de lleno ante la situación que había hecho, mi buen juicio había regresado a mí y fue solo de esta manera en que me di cuenta que había ido detrás de ella cosa que jamás había permitido con ninguna otra mujer, había hecho a un lado a una de las mujeres más sexys del campus y que podía cogerla cada vez que quería… ¿Qué mierdas estaba haciendo? Me gire a Sakura quien parecía tener el mismo problema que yo, pues solo estaba ahí, mirándome, juzgando la estúpida escena que ambos habíamos montado, sonrió un poco y se fue acercando a mí.

—¿Qué fue eso? —dijo cuando estuvimos frente a frente.

—No lo sé… —me sincere.

—Tengo que volver —dijo comenzando a caminar, una parte de mí no quería que se fuera, pero otra, la parte que seguía abrumado por la forma en que había sido tocada por el imbécil de Utakata estaba furioso, le detuve de la muñeca, se volvió a mirarme y sus ojos parecían indicarme que la soltara pero no lo hice. — Sasuke…

—¿iras a ver a Utakata? —me sorprendí a mí mismo de aquello, no respondió pero se irguió y trato de mantener apagado el deseo de estar conmigo.

—Sí nos ven juntos, podrían hablar —evito mi mirada, pero le volví a tomar contra mí y vi como sucumbía ante mi toque.

—Creí que habías dicho que no te importaba lo que decían los demás… —susurre contra sus labios. Cerró los ojos ante el roce de ambos. Intento empujarme pero solo afiance el como la tenía, mis brazos alrededor de sus caderas, la mire embriagada por el deseo de sentirme de nuevo.

—yo… —comencé a besarla de nueva cuenta, esta vez con lentitud, deleitándome con su dulce sabor y el aroma natural de cerezos que emanaba su persona.

—vámonos de aquí —sugerí entre besos, solo cuando me separe un poco le mire asentir. Le tome de la mano y la fui guiando hacia la salida, caminamos a través de la gente, pero a medida que dábamos un paso, podía ver que todos nos miraban con curiosidad, o al menos a mí, por como llevaba a una mujer de la mano siendo que jamás había hecho eso con ninguna anteriormente. Pasamos por la mesa donde estaban mis amigos, quienes se sorprendieron al verme con la chica, sonreí de lado al ver como entre ellos se codeaban y me sentí como un jodido vencedor entre Utakata y yo, además por nuestras ropas, lo hinchado de nuestros labios y el cabello desacomodado gritaba recién follados, Yuki que estaba ahí se paró y estuvo tentada a darme un golpe pero solo paso de lado empujando con el hombro a Sakura quien le devolvió el golpe tirándole al piso y que un mesero le tirara accidentalmente una bebida, riéndose la pelirrosa ante aquello, gire a ver a Naruto quien estaba increíblemente serio y algo molesto, no entendía su conducta pero me reserve mis comentarios, seguimos caminando y vi como Suigetsu se paraba en seco y venia por mi… o mejor dicho por Sakura, quien se alarmo, me apretó la mano lo cual me indicaba que algo no iba bien, gire a mirarla y con ello fue suficiente para saber que debíamos apurarnos, como si fuéramos unos críos, empezamos a correr a la salida aunque era un poco difícil por el mar de personas allí, afortunadamente llegamos antes de que él pudiera llegar a la pelirrosa busque inmediatamente mi auto y entramos mientras veía como el Haruno trataba de llegar a su hermana, estuvo a nada de hacerlo pero ya había arrancado y vimos como corría atrás de nosotros como un lunático.

—Sakura… ¡Vuelve maldita sea! —ella giro y le sonrió tiernamente dejándolo abrumado pero a la vez calmado, mmm, interesante, al parecer sabia como lidiar con su hermano, a diferencia mía que Itachi podía manipularme a su conveniencia, le mire sin tratando de no distraerme mucho, se veía absolutamente exquisita, la forma de sus pechos, su cuerpo, su cabello, trate de no enfriarme o la haría mía en ese mismo instante, ya podía imaginármela arriba de mí, subiendo y bajando mientras golpeaba sus nalgas con fuerzas y me gritaba lo delicioso que sentía por cada estocada.

—¿A dónde vamos? —cuestiono sacándome de mis pensamientos, mierda… la había alejado de todos sin un plan en concreto.

—no lo sé… —sonrió un poco nerviosa.

—Podríamos ir a mi departamento… —dijo llamando mi atención, vivía sola. Sonreí de lado, eso despertaba inmensamente mi interés. — pero mi hermano se quedó con mis llaves en el auto.

—iremos al mío —sugerí y ella asintió gustosa. Entramos al edificio sin mucha demora, y a medida que íbamos subiendo en el elevador, me pregunte que mierdas estaba pasando conmigo, por lo general nunca había actuado de esta manera, solo jugaba con ellas una o dos veces y después las dejaba en el olvido, con algunas quedaba en buenos términos y al final cada vez que alguno quería teníamos sexo sin compromiso, mi cabeza estaba lleno de pensamientos, principalmente de ella, Sakura empezaba a entrar debajo de mi piel, debía detenerme, debía pensar coherentemente, pero cada vez que alguno de los dos estaba cerca del otro empezábamos a caer en la cuenta que el deseo iba más allá de nuestra fuerza de voluntad, paro el elevador, saliendo de inmediato la chica seguida de mí, entramos, abrí por inercia la puerta y observe como la Haruno se adentraba, giro alrededor de la habitación mientras cerraba la puerta, me volví en cuanto sentí a Sakura acercarse a mi espalda, baje mi rostro encontrándome con ella. Trague grueso al ver sus ojos cargados de algo que no podía explicar, iba a decir algo, pero de repente hizo algo que mis sentidos ardieran ante lo que estaba haciendo, lentamente se había desabrochado el parte de arriba de su vestido, como había hecho hacia nada en la fiesta, bajo el cierre de su falda y la bajo con lentamente que me hizo consciente de la longitud de sus piernas, se quedó con sus bragas y las zapatillas caminando hasta mi colocando sus manos sobre las mías, llevándoselas a sus senos, crispándose ante el acto, y bajando lentamente a su cintura bajando… Mierda… mi pecho subía y bajaba, ella tenía el control de la situación.

Mis manos subieron a su cintura de nuevo, cargándola esta vez, acariciando sus piernas, sin perder el contacto visual, joder, me estaba poniendo de nueva cuenta duro como una piedra, y estaba seguro que si tocaba su entrada la encontraría lista y húmeda para recibirme.

—Sasuke… —murmuro cerca de mi oído crispándome. —Hazme tuya… —fui caminando hasta mi alcoba donde patee la puerta le deje lentamente sobre la cama, me saque la camisa mientras iba subiendo a gatas sobre ella.

—Cuenta con ello —sonreí de lado, comenzándola a besar, profundizando el fuerte deseo de tenerla a mi merced.

Desperté de golpe mirando a mi alrededor, observando la habitación con detenimiento, me lleve una mano a la cabeza, acomode mi cabello gire mi rostro esperando encontrarme a Sakura, pero no estaba conmigo, fruncí el entrejo, suspire frustrado esperaba poder verla y cogerla de nueva cuenta, la noche anterior habíamos tenido sexo de una forma tan descomunal, seis veces había terminado, y las seis veces había terminado dentro de ella, por muy estúpido que sonara me encantaba ver como la marcaba y proclama como…

Me detuve en seco. No, no podía ir por ese camino, Sakura no era nada mío ni yo de ella, si bien le había dicho que era mía, había sido como resultado de un estúpido sentimiento al verla con el imbécil de Utakata, la forma en que se miraron, como la estaba tocando, estaba muy seguro que el idiota pensó en que la follaría esa noche, pedazo de imbécil, ella no estaba su altura, ella juagaba por completo fuera de su línea, me puse una camisa y me quede en boxers, mire en una de mis mesas un documento, me acerque a él, eran unos ejercicios que habíamos hecho en clase para simular como hacer un balance de… sude frio… recordé que había traído trabajo a casa, al menos unos diez contratos, uno con mayor valor que el otro, estaba en una de las habitaciones del departamento… corrí hasta la puerta sino mal recordaba la había cerrado con llave, intente girarla, seguida cerrada. Suspire aliviado, poniéndome en cuclillas. Había olvidado por completo que las tenía ahí, si Sakura hubiera podido habría obtenido información de primera para hundir al menos un poco mi familia, suspire un poco aliviado.

— ¡Vaya, nunca espere verte levantado tan tarde, estúpido hermano menor! —escuche una pequeña risa, mierda, me gire solo para descubrir a Sakura con mi hermano, ella seguía con su cabello negro y una camisa mía, a través de la tela podría observar sus pechos erectos y extasiados, fruncí el entrejo con fuerza

—Itachi… —dije mientras movía la cabeza divertido.

—Sasuke, ¿vienes a desayunar? —pregunto la Haruno con una camisa mía que malamente cubría estrictamente necesario, se acercó a mi agachándose, sonriéndome siendo con inocencia, trague grueso, mientras el imbécil de mi hermano aprovechaba para mirarla de cerca, gruñí molesto. —Tomaré eso como un sí —dijo levantándose con cuidado, moviendo las caderas llamando la atención de ambos.

—¿Qué haces aquí? —me acerque a mi hermano, quien no dejaba de mirarla desnudándola con la mirada mientras Sakura le ignoraba de lleno ajena a como estaba a nada de golpear a mi hermano.

—¿acaso olvidaste que hoy teníamos la comida con nuestro padre? —mierda… lo había olvidado.

—por tu reacción puedo ver que lo olvidaste. —comento divertido.

—Lo siento Itachi-san —se acercó Sakura con un plato de frutillas picadas, pan tostado, café y un jugo de naranja que dejo en la mesa, al parecer se había levantado temprano para preparar todo aquello, me sentí como un idiota. Tal vez ella no era como su familia. Ella seguramente… me detuve en cuanto vi a donde iban mis pensamientos. Le estaba defendiendo. Trague grueso, ¿Qué pasaba conmigo? —Creo que fue mi culpa que lo olvidara —susurro sonrojada, la Haruno. Itachi sonrió divertido ante la situación.

—Te juro querida que aunque estés aquí, aun no me creo que Sasuke haya traído a alguna chica a su departamento. —fulmine con la mirada a Itachi.

— ¿él nunca trae a nadie aquí? —comento divertida

—absolutamente nadie… a menos que sea especial —aseguro tomando el café guiñándole un ojo mientras trataba de ignorar su mirada curiosa.

—Es bueno saberlo… —dijo arrastrando las palabras con dulzura, demasiado para mi gusto.

—Puedes apostar que eres especial, aunque no es para menos, digo, con solo mirarte puedes asegurarte lo mal que me siento por ya estar casado —hijo de puta, mi hermano estaba coqueteando abiertamente con otra mujer que no era Konan, sentí la necesidad de golpearlo y gritarle al imbécil que no pensara que podría meterse con ella.

—¡Itachi-san! —Reprendió ojijade—, no digas algo como eso de nuevo, me alaga, pero… —levanto su mirada hacia a mi mirándome soñadoramente—, ¿Qué podría pensar Sasuke de mí? —menciono mientras tomaba el jugo de naranja.

—mi hermano debe cuidarse que no alguien quiera llevarte de su lado —bromeo, recorriéndole el cuerpo—, no es para menos, eres un mujer, bellísima, apuesto que…

—Iré a la comida —lo corte bruscamente—, puedes irte…—Itachi sonrió de lado mientras ahora Sakura me miraba divertida.

—creo que es hora que me vaya, no quiero ser una molestia —camino hasta mí, me tomo del cuello, baje mi rostro hasta ella, besándome con fiereza, con un sentimiento de necesidad, como si no hubiéramos estado juntos en semanas me separe de ella, me regalo una sonrisa demasiado sensual para mi gusto, se separó de mí y se despidió de mi hermano yendo a mi habitación, tuve que calmarme y enfriarme pues tenía unas tremendas fuerzas de seguirla y tocarla. — Espero poder verte pronto Itachi-san —murmuro ahora cerca de él y veía a mi hermano perder un solo movimiento de Sakura. Ahora entendía un punto de ella en la información que había proporcionado Konan, ella siempre sabía manejar a los hombres mayores que ella de una manera que nadie pensaba que los encaminaba por donde ella deseaba.

— ¿Qué mierdas pretendes, Itachi? —dije una vez que no estuvo cerca.

—Nunca pensé que vería el día que te enamoraras Sasuke. —dijo divertido.

—Estas de coña —dije tomando el jugo que había dejado Sakura.

—Por dios, es un milagro que no te la hayas follado delante de mi mientras se besaban —bebió su café, con naturalidad que me dieron unas tremendas ganas de golpearlo. —Aunque me sorprende que haya tenido que pintar su cabello, aunque de morena tengo que decir es tremendamente sexy —sentí que un balde de agua caía sobre mi mientras mi hermano se reía divertido, trate de decir algo, pero no pude emitir nada coherente—, ¡Joder Sasuke! ¿Quién en su sano juicio podría no darse cuenta que la hermosa jovencita que te follaste, es nadie más y menos que la Señorita Haruno? —Trague grueso— veo que no pierdes tu tiempo, dijiste que en menos de lo esperado la tendrías a tus pies... —se levantó acercándose a mí—, pero mucho temo que es al revés hermanito.

— ¿Qué dices? —su sonrisa se desvaneció.

—te tiene comiendo de su lado querido estúpido hermano menor.

—no me jodas Itachi —fruncí el entrejo.

—Es verdad y tú lo sabes, ella solo le basto con besarte para tenerte como un imbécil que hace lo que ella quiere, creo sumamente que ella es una de las mujeres más hermosas que he visto, y después de haber tenido una conversación con ella…

—¿Qué mierdas estas diciendo? ¿Hablaste con ella como es que…?

—mientras tu seguías en cama, entre y me encontré con nuestra hermosa morena, preparándote algo —gire mi rostro en dirección a mi alcoba—, al principio no pude reconocerla pero después de unas cuantas palabras me di cuenta de ella, he de confesar que si no fuera porque amo con el alma a Konan, me hubieras encontrado penetrándola con unas fuerzas y ganas que…

—Cállate… —le corte en seco el solo imaginar a mi hermano con ella me estaba poniendo de un humor de mierda. Mi hermano rio de nuevo.

—será mejor que hagas algo con ese sentimiento hermano, no es bueno para los negocios el que estés enamorado de semejante mujer.

—No estoy enamorado —levanto una ceja a modo de cuestión.

—está bien, diremos que no lo estas, ¿Por qué entonces armaste un escándalo anoche en aquella estúpida fiesta?

— ¿Cómo sabes...?

—Konan —me corto suspirando—, a causa de que has hecho algo estúpido, tendremos que modificar nuestros planes querido hermano. —ahora yo le mire curioso.

—Vas a llevar a esta preciosidad con nuestro padre en la comida —no respondí— el que tenga su cabello asi será una ventaja para nosotros, llévala y preséntala como tu novia, hazle creer que es la chica ideal para ti, buscaré la forma para sacarle información junto a Konan, estoy seguro que podremos obtener más de lo que piensas. —finalizo con una sonrisa.

—Es una locura presentarla como algo serio y tú lo sabes, ni siquiera tiene ropa limpia consigo.

—No hay problema —se recargo en la silla—, acabo de solicitar un vestido de seda que le quedara de maravilla, de acuerdo a los gustos de nuestros padres, se verá como una muñeca, además, acéptalo, el hecho de que este aquí no es solo de porque deseas sacarle información, nunca traes a nadie aquí, ella es especial. —hice una mueca tratando de ignorar aquello, iba a decir algo pero mi hermano se levantó para abrir la puerta en cuanto llego un mensaje, una de sus secretarias traía consigo un hermoso vestido negro y una caja blanca con detalles negros, la falda se veía corta pero nada vulgar, era de tirantes y parecía que se ajustaría a su cuerpo como un guante, trague grueso ante la imagen de verla con él.

—Es una mala idea —dije mirando a mi hermano.

—claro que no y tú lo sabes, ¿quieres demostrarme que no te interesa esa chica? —Asentí.

—Haz lo que te digo… —Justo cuando iba a emitir mi juicio apareció frente a nosotros Sakura, vestida y arreglada lista para irse.

—Qué bonito vestido —dijo acercándose a Itachi, regándome una perfecta vista de su trasero.

—Es tuyo —menciona Itachi llamando su atención.

—no, yo… no podría… Es demasiado Itachi-san.

—para nada, tómalo como un obsequio por hacer que mi hermano esté interesado en algo serio por primera vez en años —maldito sonrió haciendo que girara a verme la morena un poco sonrojada.

—No puedo Itachi-san.

—Insisto después de todo, mi hermano y yo nos gustaría que fueras con nosotros a la comida —soltó, Sakura mostro asombro por un microsegundo y después como si algo le hubiera pasado sonrió ampliamente como si estuviera disfrutando aquello.

—no quiero ser una molestia… —jugo con sus manos—, además, estoy segura que Fugaku-san no le agradará estar con una Haruno en la misma habitación, Itachi-san —mierda, mi hermano se sorprendió por la sutileza que Sakura había soltado aquello y yo por la manera que había reconocido todo el teatro de mi hermano, sin duda alguna tenía carácter Sakura.

—Sakura-san —se acercó Itachi a Sakura más de lo debido—, a pesar de que eres una Haruno, debo decir que me abruma considerablemente el verte con mi hermano, como dices eres de una familia con la que hemos tenido unos roces un tanto fuertes.

—Yo diría que más que fuertes —agrego.

—Puedo hacer dos cosas en estos momentos, llamar a tus padres y explicarles que te lidiaste con mi hermano en su cama —Sakura sonrió—, o ir y tener una charla amena con nuestro padre, estoy seguro que estará encantado de tenerte ahí con nosotros. —se cruzó de brazos levantando sus senos, cosa que ni Itachi ni yo pasamos desapercibidos.

—Un simple, nos encantaría lijar aquellos roces era más que suficiente… Itachi-san —susurro haciendo que mi hermano miraba sus labios con deseo, joder, estaba a nada de golpear a mi hermano.

—entonces no se hable más, mientras se cambian, iré por el auto —mire como dejaba el vestido y una caja adicional a Sakura, se volvió hacia mí pero empezó a caminar de largo, le detuve en seco, mirándome curiosa.

—¿Qué pretendes?

—¿siendo honesta? —asintió la chica—, me gustaría ponerle un fin a esta riña sin sentido, sé que puede parecerte un tanto estúpido pero… creo que si hacemos una alianza tendríamos mejores resultados que simplemente nuestra familia pelee sin sentido —no dije nada aquello parecía tener sentido, algo que a los dos nos conviniera, se acercó un poco llegando a tocar mis labios, sonriendo en el acto.

—Sakura —empezó a besarme de lleno mientras mis manos se iban a ella le cargue una vez más depositándola en la mesa, mientras nuestros labios seguían tocándose con firmeza, con necesidad, de repente no pude pensar en nada coherente, pase una mano por su entrada encontrándola húmeda y lista para recibirme. Gimió en mi oído, y se separó un poco.

—Sasuke… —empezó a decir—, no que mierdas está pasando entre nosotros… no sé si eres alguien en que pueda confiar, pero… —hecho su cabeza hacia atrás, su pecho subía y bajaba con lentitud, estaba excitada y dios yo también lo estaba. — Pero lo hago… —finalizo ella deteniéndome en seco. —Confió en ti… ciegamente… —murmuro rozando mis labios pidiéndome, exigiéndome en silencio hacerlos míos. — ¿Puedo hacerlo? —Murmuro mientras ahora bajaba sus manos a mi erecto miembro mientras trataba de pensar en algo coherente—, ¿Puedo confiar en ti? —trague grueso, aunque aquel trato parecía la solución a nuestro problemas, sin duda alguna, pero no podía ser eso, necesitaba ganar y demostrarle a mi padre de lo que estaba dispuesto a hacer para llegar a la presidencia, sonreí de lado.

—Sakura… —mire sus ojos, lucían demasiado inocentes, demasiado atrayentes, no sabía que decir o hacer, pero una cosa si sabía, y era que necesitaba que se entregara a mí, no como Haruno, no como aquella hija de los enemigos de mi familia, sino como mujer. —Joder… Sí… —murmure abriendo mi cremallera, buscando su alivio y el mío, penetrándola de una sola estocada, ambos gemimos ante el sentimiento que estábamos apostando, y mierda… no podía ya echarme para atrás. Necesitaba de ella. Y no sabía qué hacer para cortarla, solo disfrutaría de esto el tiempo que pudiera… porque no iba a negarme a la venganza que buscaba mi familia, incluso, si eso significaba perderla.

Hasta aqui el capitulo!, Espero que les haya gustado, estare actualizando este fic más seguido dependiendo de su respuesta, adicional actualizare dentro de dos semanas los demas fic's que tengo pendientes SasuSaku, espero que les puedan dar una leida y decirme que espera.

¿Me regalan un review?

Los amo!

Cindy~