Disclaimer: Lamentablmente, Harry Potter no me pertenece y no gano nada con esto. Sólo el placer de saber que a alguien le puede gustar lo que escribo.

Este fic participa en el reto "Olores de Amortentia" del foro "La Noble y Ancestral Casa de los Black".

Advierto desde ya que es mi primer intento de lime. Como soy muy respetuosa de las normas, lo he tratado de mantener apto para todo público.

Cuero

Dos golpes en el cristal de la ventana hacen que Victoire levante la vista de la novela romántica que está leyendo. Le da lo mismo que su prima Rosie ruede los ojos cada vez que la ve con una de esas "noveluchas"; a ella le gustan y punto.

Y quien interrumpe su lectura del momento en que Susan se está dando cuenta de su amor por Horacio es, nadie más ni nadie menos, que su novio. Debería haberlo adivinado. Conociéndolo, seguro que al muy idiota le ha dado por aparecerse colgado del techo. Sólo a él se le ocurrían esas tonterías. Y ella que pensaba que el entrenamiento de auror iba a darle algo más de seriedad. O al menos, algo de sentido común.

—Por Merlín, Teddy, ¿es tan difícil tocar la puerta? —bufa mientras abre la ventana y él entra de un salto. Lleva la chaqueta de cuero que según ella lo hace parecer un rufián cualquiera. Bueno, eso dice. En realidad, Vic considera que se ve guapísimo con ella pero que Teddy no necesita que le inflen más el ego. Además, le encanta el olor de esa chaqueta. Pero eso no se lo va a decir.

—Bah, esto es más divertido —contesta, antes de plantarle un beso en los labios. Vic alcanza a pensar en que quiere protestar (más por costumbre que por cualquier otra cosa), pero Teddy es más rápido y, sin dejar de besarla, la arrastra hasta la cama.

—Teddy —logra mascullar ella cuando él empieza a bajar por su cuello mientras juguetea con los botones de su blusa—. Estamos en mi casa.

—¿Y? ¿Tus papás no están de viaje en Francia? —ella asiente mientras él vuelve a depositar un beso en la base del cuello que la hace gemir—. ¿Dom no está con sus amigas? —Vic asiente de nuevo y él abre el primer botón de su blusa antes de besarla nuevamente en el trocito de piel que quedó al descubierto—. ¿Y Louis no está en Hogwarts?

A esas alturas, a Vic le daría lo mismo que estuviera toda su parentela en el piso inferior. Ella necesita a Teddy. Lo necesita tanto como la primera vez, torpe y nerviosa, o como la semana anterior en su departamento con más tiempo y paciencia. Sus manos deslizan la chaqueta negra por los hombros de Teddy y sigue con la camiseta, que le saca por la cabeza. Apenas la tira al suelo, se encuentra con el chico sobre ella besándola casi con hambre.

Su pelo se ha puesto de un azul aún intenso que el habitual y a Vic le parece que incluso sus ojos están cambiando de tonalidad. Pero a ella eso le da igual, porque sabe que el que tiene encima es Teddy y no otro, porque él es el único que puede provocar ese montón de sensaciones casi animales en ella.

Siente como él la besa en el cuello y baja delicadamente al tiempo que termina de desabotonarle la blusa y se la quita casi de un tirón. Vic sabe que es guapa, pero cuando de verdad se siente la mujer más hermosa del mundo es cuando Ted la mira como ahora. Como la primera vez que la vio desnuda y dejó escapar un "eres hermosa" que era casi tímido. Ella se acerca a él y le da un beso como si quisiera dejarlo sin aire.

Porque Teddy es Teddy. El mismo niño que la sacaba de quicio y la defendía cuando era pequeña, el mismo muchacho que le gastaba bromas y la ayudaba a estudiar en Hogwarts y el mismo joven que hacía que ella se enamorara una y otra vez.

Cuando ella está desnuda delante del joven, él repite como la primera vez.

—Eres hermosa.

Y como la primera vez, ella se acerca a él y lo besa. Porque le da lo mismo que todo el mundo le diga que es guapa. Sólo le importa que Teddy piense que es hermosa y que se lo diga con ese tono.

Todo el resto del mundo puede irse a la porra.

FIN


Ya, eso es lo más erótico que alguna vez van a obtener de mí. No me van estas cosas, en serio. En fin, acepto todo tipo de tomatazos y golpes. Sé que los merezco por intentar escribir algo así.

En fin, espero que lo hayan disfrutado. ¡Gracias por leer!

Saludos

Muselina