Por la ventana.
Zoro'Pov
Hace más de media hora que intento concentrarme, necesito calmar tanto mi conciencia como mi cuerpo, pero se me es imposible, no se que me ocurre, luego de estos dos años he vuelto a sentir...cosas extrañas...por esa mujer, cosas que creí enterradas. Odio que ella ocupe la mayor parte de mis pensamientos cuando estoy despierto y odio el hecho de que ni en sueños su fantasma me deje en paz, porque hasta en sueños puedo verla sonreír.
Me recreo en esa pequeña imagen, en su sonrisa limpia en un rostro ecuanime mientras miro por la ventana.
Disfruto de la tranquilidad del ambiente, la cual no dura mucho, puedo escuchar la voz del cejas rizadas regañando a Luffy, as canciones de Brook y la risa de Usopp... Hay veces en las que lamento que no pueda haber un momento de silencio en este lugar, y creo que aunque lo hubiese sentiría que algo falta... Aun así debo decir que me sorprende que pueda escuchar tanto barullo desde tal altura, digo... siempre me ha gustado este lugar porque aquí puedo encontrar algo de tranquilidad, puedo entrenar libremente y dedicarme a observarla por la ventana.
Aparto aburrido la mirada del mar, para luego mirar lentamente el lugar en el que estoy y para reparar en los detalles a los que comúnmente no pongo suficiente atención, como en la pesa que he dejado apoyada en un sillón, en la botella con agua y la toalla...o incluso en la única mosca que vuela recelosa por los cielos en rededor.
Me dio cuenta de que hoy tampoco puedo entrenar, que no tengo más pensamientos que para ella y concentración para sus manos y las flores que cuida con especial esmero, en cierta medida siento envidia de aquellas flores; Tan concentrado estoy en fulminarlas con la mirada que no veo cuando Robin levanta la vista y tras parpadear varias veces, me dedica una de sus sonrisas y yo aparto la vista casi al instante después de ello. Sintiéndome como un niño pequeño siendo sorprendido por un mayor haciendo lo que no debe...
No tengo miedo alguno de blandir mi espada con mil hombres a la vez, ello no me preocupa ni me sorprende siquiera, pero no se porque me siento...tan diferente a mi mismo cuando la veo, no se, ni entiendo lo que me pasa cuando la tengo cerca, y ¡no! No es miedo lo que siento en este preciso instante, es solo...solo que no quiero volver mi vista hacia ella, y ver como su sonrisa se ha enanchado, no quiero verle a los ojos y descubrir que ella sabe lo que me pasa, porque de cierto modo no quiero que lo sepa y al mismo tiempo es lo que más deseo.
Mientras pueda estar aquí, observándola a la distancia en completo silencio y tranquilidad sin que ella se de cuenta siquiera todo estará bien...
Por el momento...