Notas Traductora: lloré como no tienen idea T_T

~ Capítulo 16 ~

"Algo placentero, mi rey." Heimdallpuso suespada en elojo de la cerradurasin girar, algo queactivaba elBifrost. Se aferró ala espadacon sus manosmientras concentrabala miradaen la distanciaentre los reinosque se revelaban.

La luz del Bifrost brilló antes de formar una imagen de Midgard. Se acercó hasta que mostró las llanuras con hierba y árboles que describen un bosque a la distancia. En el mar infinito de verde había una sola casa. Pequeña y hecha de madera con un prado con caballos cerca.

La vista cambió una vez más y se centró a la distancia, donde un jinete se aproximaba a las colinas en un caballo marrón.

Parecía más joven, más vivo, pero no había forma de negar quién era.

"¿Loki?" susurró Thor.

"Así es, mi Rey." Heimdall confirmó. "Renació en Midgard como un ser humano".

Thor sabía que su amigo estaba hablando, pero sus oídos no captaban el sonido. Sus ojos se centraron en la imagen ante él mientras su corazón latía en su pecho. El pelo más corto de lo que recordaba - rizado - pero los ojos eran los mismos. Su piel era ligeramente más morena por estar al sol, pero todavía era pálida en comparación con algunos de los experimentados guerreros que tenían siglos bajo el sol.

Todavía se movía con la misma gracia que tenía en Asgard, la misma chispa en sus ojos. Montaba el caballo con tal facilidad que parecía que nació en la silla la cual demostraba estar en armonía con el animal.

El viento levantó algunos de sus cortos rizos y jugó con ellos.

"Estoy muy feliz." susurró Thor. "Parece tan feliz."

"Lo es. Por lo que he visto, no tiene ningún recuerdo de su vida como Dios y vive en paz".

"Ya veo. Eso es bueno." Entonces un pensamiento lo golpeó. "¿Alguien más sabe sobre Loki?" miró a Heimdall, temiendo ligeramente la respuesta.

"No. Nadie lo sabe." Heimdall dijo con calma.

Thor dejó escapar un suspiro de alivio. "Mantenlo así." volvió sus ojos a la imagen, Loki cabalgó hasta un establo. "No quiero que su antigua vida arruine la nueva. Merece tener paz".

Sin él.

Heimdall miró a su Rey, una larga mirada que lo examinó "¿No irás por él?"

Thor negó. "Soy el último que debería entrar en su vida de nuevo. Lo que hice con él fue más allá de lo cruel y despiadado. Este es mi castigo".

"Si me permite el atrevimiento, mi rey, creo que se castigó a sí mismo lo suficiente."

Una vez más Thor movió la cabeza, negando. "No, nunca será suficiente. Incluso si me hace un mártir".

"Pero la búsqueda de la paz es diferente a la búsqueda de la felicidad." Heimdall se volvió hacia Thor. "Usted se culpa demasiado por lo que pasó. De nada, usted es tan víctima como Loki. Asgard fue colmada por mentiras durante tanto tiempo que se convirtió en una enfermedad. Usted fue criado por aquellos que le concedían sus caprichos, nunca le enseñaron sobre el bien o el mal. Te has convertido en una víctima de tu propio corazón, porque no había nadie allí para enseñarte a escuchar lo que tu corazón te decía. El amor por tu hermano se volvió retorcido y confuso. Trataste de encontrar una salida para ello y cometiste errores. A su vez, fuiste tomando ventaja de los demás en sus momentos de debilidad. Te enseñaron a nunca dudar de ti mismo, y cuando lo hiciste, una persona se aprovechó de su debilidad y difundió más mentiras, al igual que el fuego, hasta que nadie pudo detenerlo.

"Lo que pasó con Loki en las mazmorras no fue obra tuya, fueron las acciones de otros que pensaron tenían derecho a tomar justicia por su propia mano. Su arrogancia y violencia abusaron de Loki hasta el punto en que todo se salió de control. Fueron esas acciones las que trajeron el Ragnarok. Durante los últimos 50 años usted ha sufrido más que nadie. Llega un momento para que todos puedan encontrar la paz".

"¿Cómo puedo ser rey si dejo que mi corazón me gobierne una vez más?" Thor sonaba dudoso. "Al final, todo lo que le pasó a Loki, fue mi culpa. Es más, podría haber sido yo quien lo violase. Hel, casi lo hice."

"Pero no lo hiciste" Heimdall dijo enérgicamente. "Incluso en tu búsqueda de la paz, Asgard te perdonará. Todos vieron tus pecados en el salón de Hela y todos ellos vieron tu sufrimiento. ¿Recuerdas la mirada en tu rostro ese fatídico día? Era el rostro de alguien que sufrían por sus propias acciones. Fue porque su amor era tan fuerte que perdido el control, pero te detuviste. No le hiciste daño a Loki, en cualquier caso. Todos somos culpables del destino de Loki, pero eso no significa que tengas que cargar todo sobre tus hombros".

"Aún así... como un rey debo dar ejemplo y Asgard es todavía demasiado joven como para permitirme disfrutar de mi corazón " la voz de Thor hormigueó con tristeza mientras desviaba la mirada. "Incluso si paso otros 500 años con mi culpa, no será suficiente para redimir lo que hice".

"¿Y si Loki no se encuentra allí cuando te perdones a ti mismo?"

La mente de Thor se arrebató "¿Qué?"

El guardián miró la imagen de Loki, alimentando a sus caballos. "Parece que él no renacerá en Asgard otra vez. Loki es un humano ahora y como todo humano su vida pasará en un abrir y cerrar de ojos para nosotros los Dioses. En unas pocas décadas morirá y nunca habrá forma de saber cuándo renacerá de nuevo, nunca"

El alma de Thor tembló.

"Usted puede seguir solo otro milenio con su culpa. O puede empezar a dejarla ir y compensar sus errores. Redímase usted mismo con sus acciones y no promesas vacías de un pasado que nunca va a cambiar. De cualquier forma, sepa que Asgard no le condenará, no importa lo que usted elija".

Thor tomó de corazón las delicadas palabras, antes de ceder una mirada dudosa a la imagen que el Bifrost todavía mostraba.

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Era un nuevo día caluroso.

Como siempre se levantaba con la salida del sol para alimentar y cuidar de sus caballos. Ellos eran, después de todo, su medio de subsistencia.

Había crecido con su abuelo, que era dueño de los caballos antes de él. Cuando el mayor murió, asumió el control, ya que no podía pensar en dejarlos o venderlos. Su oficio era el alquiler de caballos y como forma de pago podía recibir dinero o alimentos para poner en su mesa.

Era todo lo que quería.

No le hacía falta ropas finas. No quería ir a la gran ciudad como muchos en el pequeño pueblo, o al pie de las colinas, hablaban. Esta vida le venía bien. Era tranquila y trabajaba con los caballos. Eran criaturas muy honestas y había conocido a muchos de ellos desde que eran potros, los consideraba su familia.

Por otra parte, no muchos poseían numerosos acres de tierra como él poseía.

Se encontraba muy a menudo en el acre, repartiendo golosinas del único manzano detrás de su casa. Era un triste pequeño árbol que nunca dio manzanas más grandes que una pelota de pin-pong, pero era suficiente para los caballos.

Con cuatro de los caballos alrededor suyo recibiendo su bocado, y más acercándose, tenía las manos llenas. Un caballo castaño dio un tope a su mano en busca de la manzana. Otro olfateó su cabello, mientras que el resto se quedó esperando pacientemente su turno.

"Aquí tienes." dijo mientras el caballo cerró sus labios alrededor de la pequeña manzana. Acarició la crin del animal. "Buen chico." dijo alegremente. "El viejo David necesitará nuestro trabajo hoy."

El caballo resopló, como diciendo que ya lo sabía.

Tendió una manzana a un caballo marrón con una gran mancha blanca sobre un ojo y otro en su pata delantera. "Y Christy estará aquí pronto para llevarte a un paseo".

Estaba a punto de continuar con su rutina diaria de decirle a los caballos lo que les esperaba hoy, cuando de repente todos miraron a la valla detrás de él.

"¿Qué pasa?" preguntó confundido, dándose la vuelta.

En la valla había un hombre robusto con pantalones oscuros, una camisa azul oscuro que parecía vieja, el pelo largo y rubio recogido en una coleta.

No tenía idea de donde vino el hombre, pues no se dio cuenta de alguien acercándose, era la primera vez.

"¿Puedo ayudarle?" preguntó sin alejarse de los caballos que estaban en silencio. Incluso los caballos que se acercaban se mantuvieron quietos.

El hombre sonrió "No lo sé. Estaba de paseo cuando vi a los caballos y quise verlos más de cerca. ¿Son tuyos? "

"Sí" dio unas palmaditas a uno de los cuellos largos.

"Son hermosos." El hombre dijo con evidente admiración.

Uno de los caballos se acercó al hombre y se detuvo mientras dejaba que le acariciara el hocico.

"Muy hermoso" felicitó y fue como si un hechizo se hubiese deshecho. El sonido volvió y los caballos comenzaron a moverse de nuevo. Uno de los caballos lo empujó por la espalda, obligándolo a acercarse al hombre extraño.

Cuando se acercó se dio cuenta por primera vez que, los ojos del hombre, eran azules. Azul como el cielo que amaba.

"¿Cómo te llamas?" le preguntó cuando se acercó, colocándose junto al caballo, y lo único que los separaba era la valla.

"Thor" dijo el desconocido, sin poder evitar la sonrisa arrasadora en sus labios. "¿El tuyo?"

"Loki".

FIN

Notas Traductora: ¡Aun queda una pequeña secuela!... pero si, este es el fin… básicamente… ¡A Monkan Todas y Cada una de Sus Quejas!