Hola, soy cerezoendemoniado y vengo con otra historia, esta historia trata sobre una de nuestras gerentes de IE, Haruna Otonashi, y si queréis saber algo más de la historia empezad a leer.

El Espíritu Libre de Haruna Otonashi.

CAP. 1

Era la madrugada del día 7 de mayo, en Inazuma Town todos estaban dormidos, todos excepto una joven de pelo azul y lentes rojos, su nombre era Haruna Otonashi, llevaba puesto su pijama rosa con petalos verdes y sus gafas puestas para leer el libro del cual tenía que presentar en la mañana, se había pasado pensando en los partidos, el equipo de fútbol, en los demás pero no en ella y sus notas de clase.

Solo faltaba un capitulo para terminarlo pero se estaba quedando dormida, había estado todo el día anterior leyendo el dichoso libro y tomando notas para después poder representarlo, terminó el capitulo con ojos cansados, y comenzó a pasar a limpio todo el trabajo.

Cuando por fin terminó eran las 05:30, su madre la llamaria en horma y media para levantarse así que se quedó dormida.

Había pasado ya la hora y media y como cada mañana la madre de Haruna entró en su habitación, pero al ver la tarea en el suelo y su hija dormida en el suelo se enfadó, desde hacia ya tiempo solo encontraba ese paronama, y la fue a despertar:

-Haruna hija, despierta- acaricio su pelo y le beso la sien-.

-Mmmm, ¿mamá?- Haruna se empezó a despertar- Tengo sueño- bostezando-.

-Si quieres te puedes quedar en casa se ve que estas muy cansada, yo llamare al instituto- la madre empezó a retirarse-.

-¡No!, Mamá estoy bien, solo un poco cansada nada más-Haruna empezó a levantarse pero a mitad de camino se quedó quieta al ver todo borroso pero inmediatamente se le pasó-.

-¿De verdad solo es eso Haruna? Preferiria que descansaras en casa antes de que vallas al instituto-dijo la madre preocupa-.

-No tranquila estoy bien, ya vears que con los desayuns que tu me haces y el descanso que tengo antes de tener la primera clase, estaré mejor- dijo Haruna poniendo una sonrisa fingida-.

-De acuerdo, pero cualquier malestar y me avisas ¿de acuerdo?-.

-Si mamá, ¿si no te importa me dejas cambiarme?-.

-Claro- la madre de Haruna sale de la habitacion-.

Haruna se sento en su cama, estaba realmente cansada pero tenía que entregar su trabajo, así que se puso el uniforme, tomó sus cosas y bajó para desayunar.

-Buenos días papá, buenos días mamá- dijo Haruna bajando las escaleras-.

-Hola Haru-chan ¿que tal estás el día de hoy?- preguntó su padre-.

-Muy bien papá, ¿y el tuyo?- dijo Haruna sentandose en la silla-.

-Muy bien hija-.

La madre de Haruna, sacó unas tortitas recien sacadas del fuego que hizo que Haruna se relamiera los labios, cogió el chocolate fundido y lo tiró por encima de las tortitas.

Empezó a comer lentamente disfrutando de ese sabroso sabor, hasta que las terminó, al hacerlo se levantó cogió la merienda y el zumo, lo puso en la maleta cuidadosamente y les dió un beso a sus padres para después irse corriendo al Instituto Raimon.

Al llegar se encontró al integrante Kazemaru Ichirouta del equipo de fútbol al que saludó:

-Hola, ¿que tal estás?- preguntó Haruna-.

-Hola Haruna, bien ¿y tu?- pregunto un peliazul-.

-Muy...- Haruna no pudo terminar la frase porque la vista se le nublo tanto que se tuvo que apoyar en algo y eso era Kazemaru Ichirouta- bien-.

-¿De verdad?- preguntó el ojimiel-.

-Claro- sonrió-.

-Dejame acompañarte a clases, se ve que muy bien no estas- dijo el ojimiel con una pequeña sonrisa-.

-De acuerdo-.

Empezaron a adentrarse dentro de los territorios del instituto ante la atenta mirada de todos los alumnos, ya que era extraño ver a Haruna Otonashi, la pequeña hermana del mejor estratega del país con un chico, la noticia pasó muy rápido y todo el clegio ya se había enterado entre ellos Yuuto Kidou, que al leer el mensaje que le había enviado Goenji salió corriendo al encuentro con su hermana.

Cuando la encontró los ojos de Kidou se agrandaron al ver como Haruna dormía plácidamente en las piernas del ex-velocista, mientras este acariciaba su pelo.

A Kidou se lo comía la rábia por dentro, su pequeña hermanita estaba con un chico y eso no lo podía permitir, se acercó más y cuando lo hizo pudo escuchar la voz de su hermana:

-Lo se, pero si estoy en el club es porque me gusta-.

-Pero acambio ¿que recibes?-.

-Yo...-.

-Por lo que me has contado llevas ya dos semanas casi sin dormir por hacer la tare en la madrguda ¿no es así?-.

Kidou se quedó petrificado, su hermanita querida no dormía porque hacía la tarea en la madrugada, y eso era algo que no podía permitir.

-Así es pero, me encanta el fútbol, veros jugar me emociona, pero me ocupa tanto tiempo que he de hacer la tarea muy entrada la noche-.

-Deberiáis de repartiros la tarea de gerentes todas, así podrías dormir-.

-Me encantaría- Haruna ve el reloj y se levanta- Oh! Se me ha hecho tarde, te dejo he de irme a clase, adios Kazemaru-san- Haruna se retira-.

Estaba a punto de llegar tarde, pero entró justamente antes de que la profesora llegara, se sentó en su pupitre y sacó la tarea, todo estaba perfectamente ordenado y la presentación resultaría un éxito, ella fue la siguiente en presentar, se levantó y empezó a representar su trabajo de la Antigua Grecia, El Cuattrocento y el Cinquicentoo.

-El Cinquicento es el período de maduraci...- en ese momento Haruna se desmayó-.

Hola, a todos se podría decir que este es el prólogo, el inicio de la historia vendrá en el siguiente capitulo.

Espero que les haya gustado tanto como a mí.

Un beso a todas/os.

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cerezoendemoniado