Soul Eater y personajes creados por Atsushi Okubo.
Historia escrita por mí.

Epílogo

Era de mañana. Esta vez me había despertado antes de que la alarma lo hiciera.

Me levanté cuidosamente de la cama. No quería interrumpir el sueño de mi amada.

Me estiré y bostecé un par de veces, después me dirigí al baño para tomar una tranquila ducha.

Abrí las llaves y el agua deslizó por mi cuerpo, dándome tranquilidad.

De repente, sentí unos labios conocidos recorrer mi espalda.

-Así que también estabas despierta.

-Algo así. Buenos días, Kid.

-Buenos días, Crona.

Volteé en dirección a Crona para abrazarla y besar sus suaves labios.

Después de la ducha, nos vestimos y Crona se adelantó para preparar el desayuno.

Ninguno de los dos teníamos prisa, puesto que era fin de semana.

Miré el calendario.

No pude evitar recordar lo que había pasado hace 5 años. Los buenos y los malos momentos.

Sobretodo, la manera en la que me había relacionado con Crona cuando desapareció y su espíritu me ayudó a encontrarla.

Me acerqué a la ventana. El día era perfecto para salir… y para hacer lo que tenía pensado desde hace algún tiempo.

Tomé un bocado de aire para liberarlo en un suspiro. Esta vez e armaría de valor para decírselo a Crona.

Llevábamos ya 5 años de relación, y 1 año de vivir juntos. Era momento de dar el siguiente paso.

Mis pensamientos se vieron interrumpidos cuando Crona me llamó para desayunar.

Yo bajé inmediatamente, no sin antes tomar aquella caja y guardarla a la perfección.

-Siéntate y come antes de que se enfríe.

-Muchas gracias, Crona. Acompáñame.

-En seguida voy.

Cuando estaba a punto de probar el desayuno, un maullido familiar se escuchó debajo de la mesa.

Me asomé y pude ver a Ragnarok.

-¿Pasa algo malo, Ragnarok?

El gato se acercó a mí, ronroneando y maullando.

-Seguramente tiene hambre. Iré por su comida.- Respondió Crona.

Ragnarok, al escuchar el sonido de su plato, corrió tras su dueña.

Momentos después, Crona regresó a mi lado, para poder desayunar.

El lugar había sido invadido por el silencio. Hasta que decidí hablar.

-¿Tienes preparado lo que llevarás?- Pregunté.

-Desde ayer. ¿Y tú?

-Sabes cómo soy.

-Perfecto. Entonces estamos listos, ¿cierto?

-Supongo.

Me acerqué a Crona para besar sus dulces y suaves labios.

Ella rodeó mi cuello con sus brazos y me acercó más a ella.

Yo rodeé con mis brazos su cintura, y me acerqué a ella hasta que no había más distancia por romper.

Ella mordía suavemente mis labios. Yo le permitía hacerlo. La sensación era agradable, ya que nunca me lastimaba.

Después, con mi lengua, busqué la suya, y una "pacífica guerra" por saber quién tenía el control comenzó.

Aunque normalmente ella era la ganadora.

Besé una última vez sus labios, después me separé un poco de ella.

Junté mi frente con la suya, y admiré aquellos ojos azules como el hielo que me habían enamorado.

Ella hacía lo mismo.

-Te amo, Crona.

-Y yo te amo, Kid.

-Bien, es momento de irnos.- Dije, separándome de Crona.

Ambos tomamos nuestras cosas y partimos.

**************/

Después de caminar un no muy largo recorrido, nos detuvimos al encontrarnos frente a la entrada del bosque.

Tomamos un poco de aire para continuar.

Nos adentramos poco a poco al bosque, hasta perder de vista la entrada.

Continuamos caminando, y cuando escuchamos el río, apresuramos nuestros pasos.

Finalmente, llegamos.

Pero no bajamos hacia donde se encontraba el río. Simplemente guié a Crona un poco más adelante, siguiendo la corriente del río.

Lo que quería mostrarle era una sorpresa.

Finalmente llegamos a nuestro destino.

Tomé la mano de Crona y la invité a que me siguiera.

Ella aceptó.

Dimos un par de pasos más, y la expresión de Crona cambió. Estaba sorprendida.

Soltó mi mano y admiró el bello paisaje que se encontraba frente a ella.

-Kid…

-Dime.

-Este lugar… es hermoso.

-Lo sé.

-¿Cómo fue que lo encontraste?

-Fue hace algunos años. Después de lo que pasó cuando te encontramos, un día, simplemente quise venir. Aún no entiendo la razón. Y seguí la corriente del río. Así encontré este lugar. Y simplemente pensé en pasar un día contigo aquí.

-Es muy dulce de tu parte, Kid.

Crona se acercó a mí, para fundir sus labios con los míos.

Después, buscamos un buen lugar para sentarnos y pasar el día.

Estuvimos tomando fotos, admirando las plantas, los árboles, los animales. Admirando todo.

Lamentablemente, el día pasó rápido y la tarde comenzaba a llegar.

Nos encontrábamos admirando el cielo.

Yo estaba recostado sobre el tronco de un árbol, y Crona yacía en mi regazo.

-Creo que es momento de regresar, Kid. Atardecerá pronto.

-Tienes razón.- Dije mientras me levantaba y la ayudaba a levantarse a la vez. –Pero antes, quisiera decirte algo.

-¿De qué se trata?

Suspiré. Era el momento.

-Hace 5 años, regresaste a la vida por segunda ocasión, en este lugar.

-Tú me diste esa oportunidad.

-Y tú luchaste por esa oportunidad, también. Pero también fue aquí donde mis sentimientos por ti se aclararon y volvieron más fuertes.

-Al igual que los míos.

-Así es. Y después, me obsequiaste este collar, ¿recuerdas?

-¿Cómo olvidarlo? No nos los hemos quitado desde entonces.

-Así es. Y también me pediste que me quedara contigo, y yo te pedí lo mismo. ¿Cierto?

-Jamás podría olvidarlo.

-Bueno, ahora es mi turno de pedirte que te quedes a mi lado.

De mi pantalón, saqué una pequeña caja de madera, adornada con pequeñas piedras preciosas.

-…Kid…

-Crona, te amo. Es por eso que… quiero pedirte que te quedes a mi lado, si es posible, el resto de nuestras vidas.

Abrí la caja y extraje un anillo de oro. Su diseño era simple, pero atractivo a la vez.

Tomé la mano de Crona y lo coloqué en su dedo anular.

-K…Kid… yo…

-Tenemos 5 años con esta relación. Y quiero que se haga más fuerte. Que sea para siempre. Así que dime, ¿también te gustaría estar a mi lado el resto de nuestras vidas?

Crona trataba de pronunciar alguna palabra, pero no podía debido a la impresión. Pero finalmente lo logró.

-Kid… yo… esto es… ¿No es muy pronto?

-Je ¿21 años y crees que es muy pronto?

-No, no me refiero a eso, es sólo que…

-Descuida. Sabía que pensarías algo así. Es por eso que no te estoy pidiendo matrimonio en este preciso momento. Es solo un paso más, y como dije, es para que nuestra relación se haga más fuerte. Cuando estés lista para el siguiente paso, házmelo saber. ¿Estás de acuerdo con eso?

Algunas lágrimas recorrían el rostro de Crona. Después me abrazó fuertemente.

-Estoy más que de acuerdo con eso, Kid. Así que, acepto estar a tu lado, si es posible, el resto de nuestras vidas.- Dijo con una leve risa.

Tomé el rostro de Crona entre mis manos, y ella rodeó mi cuello con sus brazos.

-Te amo, Kid.

-Y yo te amo a ti, Crona.

Finalmente, nos fundimos en un beso.

Un beso que sería testigo eterno de las palabras que intercambiamos en ese momento.

Un beso que no olvidaríamos jamás, pasara lo que pasara.

Fin~

De verdad muchísimas gracias a todos los que siguieron conmigo esta historia, gracias por sus bellos reviews que me daban ánimos para continuar. Gracias por todo.
Espero les haya gustado toda la historia tanto como a mí ^^
Y bueno, estaré escribiendo más fanfics y songfics KidxCrona. Espero leerlos en otras historias. ¡Los amo! 3

Sinceramente su amiga: Khryztal Dark~