Hola! se que tengo que actualizar "Okey, te amo casa de Clyde", pero estaba con ganas de finalizar esto...

Supuestamente era un ONE-SHOT... pero algunas PERVERTIDAS, y no lo digo señalando a nadie xD, me pidieron la conti.

No se en que momento comenzó a llover, pero golpeaste a mi puerta y te veías empapado. Mire a la ventana y efectivamente, estaba podía creerlo, tenerte allí, mirándome con tus verdes ojos, pequeñas gotas, como perlas, caían por tu sedoso cabello rubio. Tu piel era mas pálida y se veía mas suave que cuando te observaba por la ventana. En ese momento me quedé estático, tanto tiempo anhelando poder por primera vez tocarte, ser el primero, y ahora nada en mi reaccionaba.

Cerca, estabas demasiado cerca, podía sentir tu aliento frío mezclarse con el mío -Ho-Hola Craig...- Pronunciaste algo tímidamente, era la primera vez que te escuchaba pronunciar mi nombre, sinceramente se oía bien, muy bien, era una de las cosas que me gustaría oír toda las mañanas.

-Hola Tweek- Mi voz sonaba ronca. Observé tus ojos, en ese momento deseé profundamente poder leer tus ojos. Una vez oí a una mujer hablar sobre eso, que los ojos son la ventana del alma, que desde ellos se pueden leer los sentimientos. Habría algo allí?

No pude resistirlo al ver esa sonrisa que se dibujo en tu rostro al escuchar mi voz. Posé mi mano en tu nuca y acorte la distancia entre nuestros labios así comenzando un beso apasionado.

Un señuelo
hay algo oculto en cada sensación
ella parece sospechar
parece descubrir
en mi debilidad
los vestigios de una hoguera

Al separarnos observo como tiemblas fuertemente, tus ojos están llorosos. -Que te pasa?- Pregunto algo asustado, tal vez todo lo que estaba haciendo en ese momento no estaba bien.

Te dejas caer en mi cama, aprietas los ojos con fuerza. -Me gustas, Craig...- Me dijiste desviando la mirada -Eres mas lindo en persona- Agregaste. No pude evitar sonreír al notar la dulzura en tu voz, movías las piernas infantilmente, se te veía tan inocente... Miraste al techo. -Me gusta tu departamento...- Eres increíblemente cautivador.

-Tu madre sabe que te fuiste?- Pregunte cortando al instante ese ambiente. Un gesto de incomodidad se informó en tu cara, te paraste, caminaste de un lado a otro de la habitación y llevaste una mano a tu mentón. Dirigiste tus, ahora, entrecerrados ojos hacia mi, una mirada un tanto lasciva? -No creía que mi madre hubiera aprobado lo que yo quería hacer- Me respondiste acercándote peligrosamente a mi.

Te diría que en ese momento no quería arruinar toda tu inocencia, pero estaría mintiendo, quería hacerte el amor como nadie en el mundo, que gimieras mi nombre a los cuatro vientos.

Oh mi corazon se vuelve delator
traicionandome
por descuido
fui victima de todo alguna vez
ella lo pouede percibir
ya nada puede impedir
en mi fragilidad
es el curso de las cosas

Esta vez yo me encamino hacia tu persona, te tomo de la cintura atrayéndote a mi. Sin pedirte permiso, porque se que lo deseas, te quito la camisa rápidamente, tu piel brillaba, estaba húmeda, pequeñas gotas caían.

Tus finos dedos se posaron en los botones de mi camisa, al ver que te concentrabas demasiado en tu labor sonreí. Torpemente te deshiciste de mi camisa, depositaste un suave beso en mi pecho que hizo que inconscientemente soltara un leve gemido, una leve carcajada salió de entre tus labios.

¿Me querías volver loco?

-Te deseo- Abro los ojos de golpe al oirte decir eso. Mas no me había preparado para lo siguiente. -Me enamore de ti... Espero que te hagas cargo de lo que provocas en mi.-

Definitivamente me lo hacías a propósito.

oh mi corazon se vuelve delator
se abren mis esposas
Un suave latigo
una premonicion
evocan llagas en las manos
un dulce palpito
la clave intima
se van cayendo de mis labios
Como un mantra
de mis labios.

Tus pantalones, unos viejos joggings, ya se encontraban abajo, solo tus boxers que exhibían una evidente ereccion, los míos, también. Tus manos se apoyaron en mi pecho, despacio, me empujaste, dejándome sentado en mi cama. Un beso en la boca, y uno en el cuello, y en el pecho, luego en el abdomen. Se me erizo la piel de todo el cuerpo al sentir como posabas tus labios en "esa" zona tan sensible en mi. Se sentía tan bien.

Mi mano agarró tu cabello rubio, era tan suave. Gemí fuertemente y volviste a reírte estrepitosamente, de seguro mi cara se puso como un tomate en ese momento. Ahora, un cálido y húmedo tacto recorre mi hombría. Ya no pensaba en lo mal que estaba eso, no me importaba, lo importante en ese instante eramos solo tu y yo.

-Po-por favor... M-me vengo- Dije entre jadeos, no estaba dispuesto a manchar tu perfecto y palido rostro con mi esencia.

-Es lo que quiero- Me dijiste con tu sonrisa infantil.

Sin poder evitarlo me corrí en tu boca y también manché tu cara. Como lo lamente, pero te veías tan bien, te veías demasiado bien. Te lo tragaste, te relamiste, siempre mirándome con tus verdes ojos felinos.

Deshiciste el camino de besos, pasando por mi abdomen, escalando por mi pecho y subiendo hasta mis labios. Tus manos fueron a mi cara, las mías a tus caderas. Decididamente bajé mi mano hasta tu miembro, pude palparlo, estaba necesitado. Mi cara no podía demostrar mas satisfacción al notar como te ruborizaste.

Me levanté, ya no lo podía aguantar mas, te recosté con cuidado en mi colchón, te miré a los ojos y solo asentiste. Era ahora o nunca, pero antes debía hacer algo... junte todo el valor que tenía -Te amo- Dije sintiendome aliviado por poder hacerlo. Tu me miraste una vez mas con tus ojos verdes, sonreías radiante y con la piel perlada por el sudor.

Coloqué tus piernas sobre mis hombros, lamí tres de mis dedos y posé el primero en tu virginal entrada. Lo hice tan lento como pude. Un fuerte gemido se te escapó. Proseguí con mi tarea, otro dedo, y a ese le siguió otro, me sentía feliz de saber que solo yo te podía ver así en ese momento, retorciéndote de placer debajo mio.

-Te quiero, Craig...- Me recordaste -Ya puedes comenzar-

Me acomode entre tus piernas y entré sin mas ceremonias, lo ansiaba con toda mi alma. Gemiste fuertemente, de manera tan aguda que casi parecías mujer, mis gemidos eran mas roncos.

Moviste tus caderas dejándome en claro que podía comenzar a moverme. Todo mi ser se lleno de placer al notar tu estreches, eras tan perfecto, besé tu delgado abdomen para calmarte, se veía que dolía.

Cada gemido por tu parte me hacía mas feliz, se notaba que poco a poco comenzabas a disfrutarlo mas. Una embestida mas profunda bastó para que ambos llegáramos extasiados al orgasmo, me corrí en tu interior y tu en mi vientre, fue un instante perfecto.

Me desmorone sobre tu pecho.

-Te amo- Me dijiste en un instante.

Con mis ultimas fuerzas te respondí. -Te amo, Tweek-

Un señuelo
hay algo oculto en cada sensación.

No pudimos dormir demasiado, solo una hora, debías volver a tu casa antes que tu madre. Te vestiste y te marchaste prometiéndome que volverías.

Cuando cumpliste la mayoría de edad pudimos blanquear nuestra relación. Ahora llevamos 2 años juntos.

FIN! xD Bueno, cuanto será mi amor por ustedes. porque esto iba a ser un one-shot jajajaja

Gracias por leerlo, espero les haya gustado... y que comenten... si quieren.

BESOS LAS AMO!