Derechos reservados Masashi Kishimoto

Serie Anime-Manga: Naruto

Universo alterno: Tipo Colegial

Basado en el Manga "la Niñera del Demonio"

Disculpen por haber tardado demasiado en subir continuación, todo ha sido en contra de mis planes y un poco de falta de inspiración para saber cómo lograr la comedia que se me ha ido de mi vida..

Por favor disfruten del capitulo

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Mi Pequeño Naruto

Camino tan lento este día que me cuesta tanto mover un pie tras otro, las personas a mi lado parecen no importarles; me siento demasiado triste pero no sé si fue por las palabras de Naruto o el hecho de que no le he visto por dos semanas.

Sé que debido a eso mis días han vuelto a la normalidad, no más gritos ni amenazas; no más rumores de mi liderazgo con pandillas; no más cabellos rubios ni mirada celeste.

— ¿No es lo que querías Hinata? — me detengo al hacerme esa pregunta con el rostro agachado hundido bajo mis cabellos, mi mano se aferra a mi pecho con fuerza; no sé si seré algún tipo de chica masoquista pero no me negare que lo extraño demasiado.

Pienso detenidamente los últimos acontecimientos; soy cobarde eso lo sé perfectamente; sé que Naruto me gusta por mucho que he querido negarlo; quizás no lo aceptaba porque deseaba que fuera alguien más; tal vez mi miedo a estar al lado de un pandillero o el hecho de no saber que significo para el chico peleonero.

La maña es muy agradable, el sentimiento de culpa no me abandona; también el de sentirme abandonada a falta de esa atención tan peculiar que el tenia hacia mí.

—Creo que debería solo seguir…para ello es necesario enfrentarlo—suspiro muy fuerte, la sola idea me aterra; cambio de dirección sin pensarlo ya que seguramente mi cordura terminara ganándole a mi pobre corazón.

Y ahí estoy de nuevo, escondida desde la esquina de la calle; sé que el haberme saltado las clases es un gran avance aun sin que Naruto me hubiera obligado; pero no logro caminar más de ese límite hasta su casa; no sé por dónde empezar o que decirle.

No sé si soportaría algún comentario por parte suya diciéndome "¿Qué haces aquí?" así que trato de moldear mi agitada respiración; sé que algún día debo salir de mi escondite pero creo que no estoy preparada para ese terrible momento.

De pronto me quedo congelada, veo que sale y se sienta afuera de su casa; sonrió y mi corazón se llena de júbilo pero al mismo tiempo parece romperse al verla; una chica que a los pocos minutos sale de su casa.

La observo detenidamente; es alta y esbelta con un peinado largo disparejo de un lado; su cabello es rojo y su piel muy blanca; se acomoda sus lentes en repetidas ocasiones. Sus ropas me parecen lindas; esas blusas largas con adornos y los shorts cortos con medias largas siempre me han atraído la atención.

Me siento culpable por haberme distraído por un concepto tan trivial de moda, me siento morir cuando veo que acaricia sus rubios cabellos y el no hace nada; parece gustarle y me entristece. Como una cobarde que soy estoy a punto de retroceder, salir huyendo y ponerme a llorar pero me quedo helada al sentir una mano sobre mi hombro.

— ¿Espiando?

—Ku…Ku…Kushina-San—ahora sé que estoy en graves problemas.

De pronto siento que alguien me abraza hundiendo su cabeza contra mi pecho, como si de un gato se tratara, arremolinándose y apretándolos; mi rostro se torna muy rojo lo último que veo son sus rubios cabellos.

¿Cuánto ha pasado desde que me desmaye? no tengo la menor idea, abro los ojos muy lento; supongo que fue demasiado para mí; siento que el lugar es conocido y lo reconozco como la habitación de Naruto, es cuando me levanto con rapidez por la impresión.

—Hinata despertaste— el fuerte abrazo me deja ahogada, de nuevo se arremolina contra mis pechos; lo único que logro hacer es sostenerme con mis manos para evitar caernos.

— ¿Naruto…Kun?

Lo veo detenidamente, hay algo diferente en su mirada; es más…infantil y es cuando me doy cuenta de todo.

— ¡Hinata! ¡Hinata! ¡Hinata! ¡Hinata ya no te vayas!

— ¿Qué ocurrió?

—Así que tú eres su Hinata — la chica que vi antes está sentada a un costado, acomoda sus lentes de nuevo mirándome perspicazmente.

—No molestes a Hinata, Karin mala —Naruto le saca la lengua como chiquillo y ella comienza a gritarle; el verlos es tan infantil que no puedo evitar reírme de ambos.

— ¿Que es tan gracioso?

—Lo siento, no pude evitarlo

—Karin no molestes a mi linda Nuera— La voz de Kushina me hace ponerme en alerta

— ¡¿Nuera?! — Ambas gritamos, no creo que ninguna haya esperado esa declaración,

— ¡Si! Hinata es la novia de Naruto

—Espere…yo

—Me estás diciendo que mi hijo no es lo suficiente bueno para ti

—No…yo no quise decirlo de ese modo

— ¡Hinata es mi novia! ¡Hinata es mi novia! —Naruto corría en círculos por toda la habitación, estaba perpleja ya que sentía que me había perdido en algún punto importante.

—Tía Kushina pensé que no te gustaban las raritas

—Mi hijo es tan bien portado cuando esta con Hinata, mira que bien se comporta para sus siete años

Todo era tan confuso, pero me sentía ahora muy tranquila; ahora sabía que esa chica llamada Karin era prima de Naruto además Kushina estaba siendo muy amable conmigo; creo que no me estaba importando los detalles de la situación; salvo uno.

—Disculpen… ¿Cómo Naruto volvió a ser un niño de nuevo?

—Oh eso fue cosa mía

—La verdad Karin tuvo una excelente idea—Kushina cruzo los brazos con orgullo, creo que en lugar de tranquilizarme hizo que me preocupara mucho más.

—Mi tía Kushina me contó lo sucedido con el golpe, como yo estaba estudiando en el extranjero apenas volví; pero me resulto increíble que Naruto siendo como es se comportara como gatito contigo; así que lo hipnotice para ver si funcionaba y resulto mejor de lo que creí.

— ¿Lo hipnotizaste? Regresaste a Naruto a ser un niño

—No te agrada a idea— Karin me miro molesta, pero sabía bien que a todas nos gustaba ese pequeño y adorable Naruto; pero había un pequeño problema.

—El resto de los chicos no tendrá con él la misma paciencia…

Las dos se miraron entre sí, habían olvidado ese pequeño detalle; el dejarlo como un niño pequeño es alimentar a los lobos en bandeja de plata.

—Karin tú lo protegerás

— ¡No brome tía!

—Entonces hay que buscarle un guardaespaldas.

—Creo que ese no es el punto

—Karin ve con Hinata a la escuela y busca algún chico fuerte para que lo cuide

—Tía no creo que alguien quiera hacerlo

—Creo que ya no estas escuchando— tan solo quedamos ahí sentadas viendo como Kushina abrazaba a Naruto, la verdad estaba siendo muy bien portado; lo que estaba pasando en el fondo no me hacía sentir muy bien.

Así que con la promesa de vernos al otro día en la escuela deje a Naruto, no parecía contento pero al menos acepto la idea; también se veía feliz de ir al colegio conmigo. Me di cuenta de que Naruto estudiaba en mi escuela, no sé porque nadie lo sabía; quizás era por tantas clases que se saltaba que nadie lo reconocía como un estudiante de la misma; también el hecho de que había repetido ya un curso indicándome que era un año mayor que yo.

Todo ese plan era demasiado complicado, por no decir que sentía que Kushina se estaba dejando llevar por el encanto infantil de Naruto; aunque no la culpaba; también a mí me fascinaba esa faceta suya tan inocente y honesta.

Y debo decir que tanto Karin como yo estábamos muy avergonzadas, esa mañana los tres caminábamos hacia la escuela; pero Naruto daba pequeños brincos y la gente no dejaba de observarnos.

—Estoy creyendo que no es tan buena idea…

—Karin-Chan…no sería mejor regresarlo a como era antes

—Tú se lo dirás a mi tía Kushina

—Creo que no…—ambas bajamos la cabeza, el negarse a Kushina era peor que hacerlo con el rubio pandillero.

— ¡No! Déjame ¡Hinata! ¡Hinata!

— ¡Naruto Kun! — corrí en cuanto escuche sus gritos de auxilio, pero me quede petrificada al darme cuenta de quien era la persona que lo tenía colgando contra la pared; las cosas en verdad no podrían ser mucho peor.

Karin paso de largo quizás si se hubiera dado cuenta de quién era la persona lo hubiera pensado dos veces.

—Suéltalo, lo lastimas

— ¿Lastimarlo? La última vez que lo vi salto del último piso con ella en brazos—mientras me señalaba Naruto se había zafado y corrió a mis brazos buscando refugio, Karin no se había movido pero ahora lucia algo diferente.

—Sasuke-Kun no lo lastimes por favor

—Siguen con lo mismo, ese Dobe no necesita ser protegido por el contrario necesita recibir fuertes golpes.

—Hinata chan no dejes que me pegue, Karin Neesan él es malo conmigo

— ¿Qué le pasa a ese Dobe? Seguro es una broma pero…—solo vimos como salió volando, una larga cabellera de fuego se alzaba con el viento, Naruto gritaba feliz por su madre mientras Karin y yo sabíamos que esto solo era el inicio.

Por un momento Sasuke parecía reaccionar, pero el aura de fuego de aquella madre protegiendo a su pequeño vándalo fue suficiente para intimidarlo; ni yo llegue a pensar que el propio Uchiha se intimidaría con Kushina Uzumaki.

—Tranquila tía

—Mi niño está llorando

—Bueno…te presento a su guardaespaldas

El silencio se hizo tan grande aun cuando solo duro menos de un minuto, Naruto llorando que no lo quería, Sasuke reclamando por no saber de qué se trataba; Karin actuaba algo confusa y un ligero rubor en sus mejillas me hizo saber que no estaba pensando con la cabeza.

Al menos yo sigo siendo por el momento la niñera de mi pequeño demonio, el cual es protegido ahora por Sasuke Uchiha en contra de su voluntad; todo se complicó con la llegada de la peculiar prima de mi Naruto, sin duda los Uzumaki no eran personas normales y esto solo fue el inicio del caos.

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Hola, muchas gracias por todos aquellos que a pesar del tiempo siguen esperando mis lentas actualizaciones, sé que no voy tan rápido como quisieran muchos pero me hace falta demasiado tiempo libre así como en algunas ocasiones encontrar el modo de plasmar las ideas en escrito.

Me hace feliz que les guste lo que escribo y espero no defraudarlos con lo que viene, como siempre me gusta escuchar sus opiniones para ir mejorando.

Nos leemos en el siguiente capítulo.

¿Creen que merezco algún Review?