Vaya, si que ha sido bastante tiempo desde la ultima vez que publiqué algo .-. En fin, vuelvo con otro capitulo de esta serie que no he olvidado. Sigo trabajando en ella - y en las otras historias- pero la vida es dura y los dias cortos -maldito trabajo que me da de comer y me paga los vicios (?)-

Como recordaran -o tal vez no- estoy basándome en citas y/o escenas de Bleach y utilizando el Devilverse y/o 2!P, todo ambientado en el mundo del Cardverse. Podria decirse que mis versiones son MUY "OCC" pero lo que trato de hacer acá es, o maximizar los defectos del personaje o transformar sus cualidades en algo negativo :3 Motivo? Ninguno en especial xD Las diferencias físicas con los personajes originales -al menos con los 2!P "no oficiales"- serán elegidas arbitrariamente por mua~

Disclaimer: Hidekaz es dueño de Hetalia... No, no importa cuantas veces lo lea/escriba, no me resigno ;_; Contiene referencias al manganime de Bleach, que pertenece al Sr Kubo. Una parte de la narración -cursivas- es la adaptación de un pequeño cuento de Naoki Urusawa.

Advertencias: Nada de cuidado. Podrán encontrar en cada capitulo tramas y estilos de narración sumamente cambiantes. Las historias -salvo dos- no estarán relacionadas entre sí.

Gracias por leer ~


Aquéllos que crean hermosas metáforas del amor no conocen su verdadera forma. Los privilegiados que han podido hacerlo hablan cruelmente del mismo.

(End of Hypnosis – Bleach Tomo 20)


El barullo de la reunión que se estaba llevando a cabo en la habitación contigua a donde se hallaban hizo que "la reina" Arthur cerrara la puerta de un fuerte golpe, provocando que la pequeña Lily diera un respingo por la sorpresa a lo que el pidió disculpas por su acción. Ese gesto fue la prueba de que comenzaba a perder la paciencia, como generalmente le sucedía en esta clase de situaciones.

El rey Iván presidían la estación en curso así que hacía fresco aquella noche, el viento cada vez más fuerte azotaba las ahora desnudas ramas de los arboles y nubes de tormenta ocultaban la luna. Era la primera nevada del año, daba comienzo el invierno.

Ahora las cuatro "reinas" se encontraban alrededor de la chimenea, cada quien con una bebida entre sus manos. Kiku y Arthur, las "reinas" de Hearts y Spades respectivamente, tomaban una taza de té, mientras que Lily de Diamonds bebía una copa de licor dulce a pequeños sorbos. La primera vez que la vieron hacerlo se sorprendieron bastante, tomando en cuenta la exagerada severidad de el sota, su hermano mayor, además de descubrir la GRAN tolerancia al alcohol de la joven reina (siendo envidiada secretamente por Arthur) A lo que ella aclaró que el rey Francis le había educado concienzudamente al respecto y que por lo general lo hacia para complacerle, pues él solía decirle que verla sostener una copa de licor resaltaba más su belleza. Comentario típico de Francis.

Elizabeta, reina de Clover y a quien el severo clima no afectaba en lo mas mínimo, permanecía impasible en el gran sofá que le correspondía como regente en turno, un asiento tallado en madera de roble con incrustaciones de fresno, cedro y cerezo, arboles provenientes de cada uno de los cuatro reinos.

Un intento de sonrisa se esbozó en su rostro al ver a Arthur frotarse las sienes mientras musitaba un par de improperios dirigidos a su homólogo de Spades, el rey Alfred. Intenso como el calor de verano que representaba, el tono agudo y alto de su voz se distinguía claramente desde la otra habitación. Parecía siempre dispuesto a entablar una discusión con el propio rey de Clover, pues era de todos sabido que si algo detestaba el joven monarca era el frio que el otro traía consigo.

Uno, dos, tres minutos.

La potente voz del rey Ludwig resonó por todo el lugar pidiendo orden. De gesto duro y mirada intimidante, algunos se cuestionaban como fue que terminó dirigiendo el transcurso de la alegre primavera. La indulgencia de "la reina" Kiku y el candor de su sota, Feliciano, sin duda alguna eran indispensables para que el estoico rey de Hearts cumpliese debidamente con sus obligaciones.

Condescendiente como siempre, el rey de Diamonds trataba de aligerar el ambiente con alguna broma, pero solo provocaba que Ludwig se enfadara más ante lo que él llamaba "falta de seriedad".

Francis era cortesano y romántico por naturaleza, quizá un poco sensiblero; por sobre todo amante del buen gusto y de todo lo bello, su reino portaba galantemente los colores del otoño.

Solo los ánimos del rey de Clover parecían no haber cambiado en todo el transcurso de la reunión. De facciones finas, de gesto amable y voz suave que rara vez se perturbaban, pero aun así alto e imponente; parecía imposible determinar si se trataba de un hombre joven o de alguien increíblemente viejo pues incluso con sus ropas verde brillante y su eterna sonrisa, no podía sacudir de su persona el triste y frio hálito del invierno que le había acompañado desde siempre, aun antes de convertirse en rey.

—Él es muy extraño… y sospechoso — solía decir el rey de Spades receloso, pero nadie prestaba demasiada atención a sus ideas de conspiración.

Aunque era destacable el hecho de que Iván fuera el único monarca que no poseyese cabello rubio ni ojos azules, símbolo común de nobleza entre los soberanos. No así con el anterior rey Berwald y su "reina" Tino quien era primo del propio Iván, razón por la cual fue quien sucedió al trono de Clover después de los misteriosos hechos que provocaron sus muertes y la desaparición de su protegido Peter a quien según las historias, se le puede ver rondar cerca de las fronteras del reino convertido en un espectro, un Jocker.

En un principio se especuló mucho sobre lo afortunados que habían resultado los acontecimientos para el entonces príncipe Iván pero desde eso han pasado ocho años y ya nadie habla al respecto, al menos no en público, ni en otros reinos ni mucho menos en Clover. Los conflictos internos podrían ser vistos como seña de debilidad y los nuevos reyes han sabido mantener la estabilidad del país, no había que reprocharles; aunque todos estuvieran silenciosamente de acuerdo en que sus inviernos han sido los más crudos desde que tienen memoria.

Así que simplemente en los libros de historia del reino se ha llamado a este periodo de transición como "El año vacío"

—Bien, alguien tiene algo que compartir? — preguntó Elizabeta de pronto con voz calma, sacando al resto de su ensimismamiento.

Era costumbre entre "las reinas" que luego de concluir con los asuntos oficiales alguien contase una historia interesante proveniente de sus tierras.

- Como esta vez riges la reunión creo que debes comenzar tú - dijo Arthur y los demás asintieron dándole la razón.

Al igual que el rey Iván, Elizabeta provocaba cierta sensación de inquietud en el resto de los monarcas, a excepción, irónicamente, de la "reina" Arthur, quien decía sentir una extraña afinidad con ella que no sabría explicar, lo que le ha valido un par de bromas de parte del rey de Diamonds al respecto. Comentarios que obviamente le valieron un puñetazo en su perfecta quijada.

Lo cierto es que nadie conoce nada sobre ella salvo que fue la doncella particular de Iván desde su infancia y por ende, la persona a quien este le tiene más confianza, incluso podría decirse que a la única. Después de todo no quedaba nadie más a quien pudiera llamar familia.

Había una vez un niño—comenzó la mujer— que se sentía infeliz en su casa, aunque nadie lo maltrataba. No encajaba bien en su familia, ni en su pueblo, ni en su vida en general.

Le gustaba internarse en el bosque y perderse por horas, hasta que sus hermanas salían preocupadas en su busca.

Gomba, gomba!— llamaba en voz alta, echando a correr al divisar entre la espesura la silueta de una joven, a veces con un manojo de ramas secas atado a la espalda otras con un cántaro de agua sobre la cabeza.

En la aldea había una cueva tapada con una piedra muy grande. La chica le contó que dentro había un monstruo dormido.

El niño más infeliz de la aldea habría dado lo que fuera para dominar el mundo.

El niño le preguntó a la joven: "Cómo puedo despertar al monstruo?"

Ella le contestó: "Tienes que llamarlo por el nombre de la persona más amada en el mundo"

Precisamente ese día había una boda en el pueblo, era su hermana mayor. Todos cantaban y bailaban felices.

El niño vio a los novios y pensó: "Ahora sé quién es la persona más amada en el mundo!"

El niño fue a la cueva y gritó: "Yekaterina! Eduard!", pero ellos murieron y aquello no despertó al monstruo.

En la aldea había un hombre muy inteligente al que todos admiraban.

El niño pensó: "Ahora ya sé quién es la persona más amada del mundo!"

El niño fue a la cueva y gritó el nombre del hombre: "Toris!". Pero el sucumbió, aquello tampoco despertó al monstruo.

En la aldea había una muchacha que cantaba muy bien y hechizaba a todos con su voz. Era su hermana menor.

El niño pensó: "Ahora ya sé quién es la persona más amada del mundo!"

El niño fue a la cueva y gritó el nombre de la muchacha: "Natasha!", pero ella se perdió para siempre. Tampoco así despertó al monstruo.

Al ver tantas personas amadas el niño sintió como si dominara el mundo y se olvidó de la cueva.

Pero un día encontró a dos personas que lloraban en un lugar apartado de la aldea: "Nuestro hijo se ha perdido! Se lo ha llevado la hechicera!"

El hombre de cabello rubio y ojos violetas le contó llorando cuanto amaba a su hijo y le dijo su nombre. Los dos se adentraron en el bosque. Nadie nunca los volvió a ver.

El niño quedó asombrado: "Ya sé quién es la persona más amada en el mundo!"

El niño se fue a la cueva y gritó bien fuerte su nombre. Pero nada pasó.

Ya se había dado la vuelta para irse cuando le pareció oír un ruido procedente del interior. Parecía ser de alguien que caminara arrastrando los pies. O dando pisadas muy fuertes. Era difícil decirlo.

La piedra se movió lentamente. Así que volvió sobre sus pasos y luego de unos instantes de duda finalmente se decidió a entrar.

Terminando de hablar, Elizabeta alisó con aparente interés los pliegues de su vestido color olivo. El fru-fru de la tela era el único sonido en la habitación.

—Ésa sí que es una buena historia — comentó al fin Arthur sinceramente emocionado, rompiendo sin proponérselo el ambiente tenso que se formó en torno a los presentes— Realmente buena—

—Y qué ocurrió después? — Preguntó inquieta Lily — Qué fue lo que vio el niño cuando entró en la cueva?—

Kiku, sentado a su lado, colocó su mano en el antebrazo de la joven reina.

—Es mejor no pensar en ello —le dijo con una sonrisa amable

— Alguien más quiere intervenir? —inquirió Elizabeta. Todos permanecieron callados pudiendo notar así que los monarcas comenzaban a salir de la habitación contigua— En ese caso, creo que podemos dar por terminada la reunión -

Todos se pusieron de pie, con excepción de la misma Elizabeta, y luego de intercambiar cordiales despedidas salieron al encuentro de sus compañeros.

La reina de Clover fue la última en abandonar la sala y no lo hizo sino hasta que las voces de todos los demás se desvanecieron por completo. Fuera, recargado contra la pared le esperaba el rey Iván, con su cabello de plata y sus bonitos ojos violeta refulgiendo como joyas a la luz de los candeleros.

— Nos vamos a casa, gomba? — le preguntó tendiéndole la mano

La mujer se sacudió un poco los cabellos rubísimos, casi blancos como nieve y posando en él sus profundos ojos azul de hielo le dedicó la primera sonrisa de la noche.

Las velas se apagaron de golpe.

Y ella entrelazó sus dedos con los de aquel niño tan grande, guiándose el uno al otro a través de la obscuridad del pasillo.

La flor que llevaba prendada en su cabello se marchitó al instante con el toque, cayendo silenciosamente al suelo. El silbido del viento a través de las ventanas podía ser confundido con sollozos lejanos.

Afuera, comenzó a nevar.


Si vas a convertirte en una serpiente el día de mañana… Aunque digas que vas a comenzar a devorar a otros, aún ahora tu boca que ha devorado personas clama que me ama ¿Podré permanecer igual que hoy y así decirte que te amo?

(End Of The Chrysalis Age – Bleach tomo 47)


Gomba: Literal, significa setas o champiñones, pero el caso es que es un apodo cariñoso. A las chicas en Hungría les gusta que las llamen "setas". Llegado este punto solo puedo decir que tengan cuidado con las húngaras venenosas kolkolkol

No se, reflexionando un poco sobre esto creo que Elizabeta me quedó como una especie de General Invierno en versión femenina xP

Teorias? Reviews? :D