Ha pasado un tiempo… mucho trabajo y muchas cosas en mi vida… pero las recuerdo con cariño…
Nelly mi Zoe, mi Dra. te quiero millones
Débora mi niña linda estas tan grande… espero que les guste lo que va quedando de historia, creo que en 2 capítulos largos terminamos… un abrazo las adoro.
Igual que otras veces: Nada de esto es mío, los personajes perteneces a S. Meyer, yo solo juego con los personajes en mi retorcida mente XD.
Capítulo 23
¿Cuándo es demasiado?
Jacob POV
Ella había despertado algo en mí que me volvía loco
Bella POV
La propuesta de Jacob me había dejado en blanco, ¿Qué se suponía que haría? Me quitarían mi corona, mis derechos, y los más importante traicionaría la voluntad de mi Carlisle, el palacio estaba lleno de enemigos, las tropas de gobierno no me apoyaban, los generales de ejercito estaban en mi contra. Necesitaba salir de esta burbuja de cristal, sabía dónde podría ir. Tome el teléfono y llame a alguien que podría ayudarme
_Embajada Británica, en que puedo ayudarle.
_ Hola es la Jequesa Isabella Cullen, necesito hablar con Sir Swan- Un momento en mi mente algo me hacía sentido cuando dije su nombre.
_Su alteza la comunico de inmediato- dijo la voz del empleado.
_ ¿Isabella? Dios mío, ¿muchacha eres realmente tú? - dijo la voz cálida de Sir Charles, su voz me reconforto, me sentí tranquila por un momento.
_ Sir Charles, si soy yo, ¿puedo ir a la embajada? Necesito hablar con un amigo y son muy pocas las personas que puedo considerar amigos. Se lo suplico- le dije desesperada.
_ ¿no deseas que yo me acerque a palacio? No es seguro que salgas—necesito salir de aquí—está bien pequeña te esperare.
Me vestí con un simple traje 2 piezas esta era una visita de tipo informal, y llamé a mi amigo.
_ ¿A dónde vas Isabella? - me pregunto Emmett
_Iré a la embaraja Británica. - le dije mientras me calzaba los zapatos.
_ ¿está segura de que quieres salir? - me dijo llegando a mi altura.
_ si amigo necesito salir, te pido que estés tranquilo, estaré bien- le dije
_ claro que estarás bien iré contigo- me dijo el muy testarudo.
_ Necesito que te quedes aquí amigo, alguien debe quedarse aquí y cuidar todo por aquí.
_ No Isabella yo iré contigo se te olvida algo muy importante soy tu guardaespaldas.
_ Uff no saco nada con discutir contigo- pide que preparen mi helicóptero.
_ ok enana yo preparo todo.
Edward POV
Qué demonios estaba mal conmigo esta situación era insostenible, la había lastimado, ella me hechizo y era una maldición con la que debía cargar. Debía hacerme cargo de todo, se lo había advertido, le había dicho que podía tener una salida fácil, pero no quiso ahora debía actuar, aunque el destruirla era destruirme a mí mismo, su muerte seria mi muerte, pero era un precio que debía pagar por amarla, porque al final eso era, la amaba, pero era mi perdición ella nunca seria mía.
_ ¿Edward? - la voz de mi hermosa Nelly me sacaron de mi mente
_ Pequeña mía como estas- le pregunte acercándome a ella y abrazándola, más ella repelía mis caricias.
_ Amor no me aprietes le hace mal a nuestro bebe, estoy bien amor, ya finalizando los preparativos de nuestro matrimonio, tu madre me ha ayudado mucho tiene un hermoso corazon- dijo saliendo de mi agarre.
_ Me alegro que este todo en marcha y que pronto podamos celebrar nuestra boda, pero lo que me preocupa es el nacimiento de nuestro bebe, no quiero que la presión de todo lo que ha pasado, te genere estragos, se acercan momentos difíciles la destitución de un soberano es algo difícil y puede generar mucha presión, especulaciones de los medios de comunicación, estaremos en la mirada de todo el mundo es por eso además que necesito que te vea un especialista, te arreglare una visita para mañana con un especialista, me preocupa sobremanera que esto pueda de alguna forma afectarte.
_ De que estas hablando yo tengo mi doctor de cabecera, tu madree me lo recomendó, deja de preocuparte, estoy bien- dijo visiblemente molesta.
_Amor no se porque te molestas, si solo busco lo mejor para ti y nuestro bebe, tengo derecho a preocuparme.
_Y te digo estoy bien, nuestro bebe nacerá bien y en un hogar lleno de amor, como debe ser, tu solo cumple con tu parte de estoy y dame, danos el lugar que nos corresponde como soberanos de Dubái, realmente estoy aburrida de esta situación, otra mujer en mi lugar te habría abandonado, pero yo no soy así, yo te amo y espero que tus valores los sacrificios que he hecho por ti- dijo saliendo por la puerta.
Debía tomar una decisión de otra forma perdería a toda mi familia, a veces un sacrificio es necesario y por mi familia sacrificaría a Isabella, tome el teléfono, Benjamín comunícame con el coronel Gigandet - dije al teléfono- Isabella tu suerte esta echada.
Isabella POV
Tomamos mi helicóptero privado en dirección a la embajada Británica, ya en la azotea me esperaba Sir Charles, al bajad del helicóptero me arrojé a sus brazos y por primera vez en mucho tiempo me sentí segura.
_ Pequeña que ha pasado contigo estas tan delgada? - le dijo abrazándome
_ Han pasado tantas cosas y necesito su ayuda- le dije saliendo de su abrazo, el me miraba de pies a cabeza, pero lejos de sentirme intimidada o incomoda, sentía como si un "padre".
_ Pequeña le prometí a tu difunto esposo que cuidaría de ti y lo hare, vamos a dentro y conversemos con calma, puedes dejar a tus escoltas afuera- dijo mirando a mi comitiva encabezada por Emmett.
_ Él puede entrar- dije apuntando a Emmett- él es mi amigo.
_ Oh está bien vamos a dentro- dijo guiándome al interior de la embajada, estaba tan cual como la recordaba, entramos a su despacho donde había una fotografía de una pareja al acercarme vi que se trataba de él y una mujer muy hermosa que se me hacía vagamente familiar- es mi difunta esposa Renne, ahí estaba embarazada de nuestro bebe, se veía realmente hermosa ¿verdad? - me dijo llegando junto a mí.
_ Se ven muy felices en esa fotografía- le dije evidenciando lo real.
_ Ella era mi vida, siempre estará en mi corazón y en mi mente, quizás en una próxima vida podamos estar los 3 juntos- dijo limpiando una solitaria lagrima de su mejilla- bueno pero estamos aquí para hablar de ti pequeña, dime que te sucede, estas muy diferente ya no hay luz en tu mirada- dijo guiándome a uno de los sillones y sentándose junto a mí, Emmett permanecía de pie junto a mi- joven tome asiento, aquí está entre amigos nadie dañara a su reina- dijo sir charles con un dejo de diversión en su voz
_ Gracias su excelencia- dijo mi fortachón amigo sentándose frente a mí.
_ Lamento la intromisión Sir Charles, pero necesitaba hablar con Ud. Necesito que me ayude- le dije mirándolo extrañamente el me reconfortaba, era una sensación similar a la que me brindaba Carlisle, salvo que era diferente, como un amigo de verdad, no había nada romántico… era extraño.
_ Isabella tu dirás en que te puedo ayudar- dijo brindándome su apoyo
_ El príncipe Edward quiere invalidar mi matrimonio con Carlisle, me acusara de adulterio, lo cual en Dubái está penado con la muerte, necesito tu ayuda, no sé qué hacer- le dije apenada me dolía que precisamente Edward me hiciera esto.
_ Pequeña esos son cargos muy serios, debe tener pruebas de aquello- las tiene—le interrumpí- ¿de qué hablas Isabella? - me pregunto.
_ Le fui infiel a mi esposo con Edward- le dije bajando la mirada me sentía avergonzada, escuche como a mi amigo se le cortaba la respiración- ¿es verdad pequeña? - pregunto Emmett.
_ Si amigo, cuando falleció la prometida de Edward me acosté con él, fue un error y me arrepiento profundamente, no pasa un día en el que no me arrepienta de eso- le dije llorando, finalmente estaba expiando mis pecados.
_ Isabella, ¿fue la única vez que dormiste con él? - me pregunto Sir Charles
_ No- dije rotundamente- ha habido otras ocasiones después de que falleció Carlisle.
_ Ósea esa vez que te encontramos en tu baño- dejo la frase inconclusa.
_ Si
_ Oh pequeña te has hecho tanto daño a ti misma, las leyes son claras Isabella nada podrá salvarte- dijo Emmett llegando a mi lado y abrazándome.
_ Estoy condenada, pero si he de morir sé que me reuniré con mi madre, mi esposo y mi hija- le dije levantando la vista me encontré con los ojos conmocionados de mi amigo, sabia que no habría redención. En ese momento llamaron a la puerta de la oficina. Sir charles quien se mantenía en silencio.
_ Sir Charles disculpe que lo moleste, pero es urgente el general Gigandet se encuentra con la armada en las puertas de la embaraja- dijo Dimitri el asistente.
_ ¿Y que quieren? - pregunto con cautela.
_ Vienen por su majestad la Jequesa Isabella, dicen que deben detenerla.
En ese momento sentí que el mundo a mi alrededor dejaba de girar y el aire se escapaba de mi cuerpo, el momento había llegado y estaba perdida.
Edward POV
_ Su alteza en que puedo ayudarle- dijo el general.
_ Tengo motivos para culpar a su majestad por adulterio, necesito que se emita una orden de captura, me informaron que salió a la embajada británica necesito que concurra a ese lugar y la traiga, debe enfrentar la justicia, procedo a tomar el poder de Dubái—le dije sintiendo como me traicionaba a mí mismo, su suerte estaba echada y su verdugo era yo.
_ Su majestad no sabe lo feliz que me hace escuchar que toma el poder de Dubái, iré personalmente a por ella- lo acompañare- le dije.
_ Enviare a mis agentes a por Ud.- me dijo mientras cortaba la comunicación.
_ Benjamín llama a mis escoltas partimos a la embajada Británica- le ladre.
El viaje a la embajada se me hizo eterno, sabía que la estaba condenando, pero debía hacerlo por su traición, traiciono a mi padre con cuantos más, yo era una víctima de una bruja que había hecho muy bien su papel, honraría la memoria de mi padre con su muerte y la mía, pues verla morir seria mi muerte también.
Cuando llegamos el general ya estaba en la entrada, rápidamente me baje y la busque con la mirada, pero no la vi, me acerque al general para saber que estaba pasando.
_ ¿Dígame cual es la situación general?
_ Estamos esperando la autorización del embajador ya que este es suelo británico y no podemos ingresar a no ser que él nos autorice- me explico.
_ Y ¿Por qué se demora tanto? - le pregunte inquieto.
_ Porque yo no lo autorizo- dijo el embajador, su rostro me era familiar, se parecía a alguien que conocía.
_ Señor embajador son Edward Cullen Jeque de Dubái- le dije presentándome.
_ Un gusto príncipe, disculpe mi osadía, pero hasta donde yo sabía la Jequesa era la señora Isabella de Cullen- dijo serio.
_ La jequesa ha sido destituida por cargos de traición hacia Dubái por lo que el poder de duba reside en mí, solicito que autorice la entrada de las tropas por ella, ya que debe ser juzgada, no queremos entrar a la fuerza- le dije desafiante.
_ Su Alteza la Jequesa esta en este momento en suelo Británica, por lo cual no pueden ingresar, entrar por la fuerza sería una grave afrenta a Inglaterra, por lo que no le aconsejo esa vía, en cuanto a la Jequesa ella está bajo el asilo político de Inglaterra, por lo que pierde su tiempo no saldrá.
_ No puede hacer eso- le dije.
_ Si puedo, como representante de su Majestad la Reina puedo hacerlo, ella está a salvo en suelo británico, no creo que quiera iniciar una guerra o que nuestras naciones tengan una disputa verdad- me dijo fríamente.
_ Por supuesto que no, pero lo que sí puedo hacer es dejar apostado en las entradas a mi ejercito- le dije desafiante.
_ Por su puesto, además sabe que no pueden tocar ni detener ningún vehículo que salga de esta embajada ¿verdad? - me dijo
_ Por supuesto, no queremos iniciar rencillas internacionales, pero necesito solicitarle por favor si me deja hablar con ella- le pedí.
_ No será posible, ella no se encuentra bien, debe descansar, buenas noches- dijo dando media vuelta e ingresando nuevamente a la embajada.
_ Su majestad si entramos por la fuerza y lo hacemos antes de que reaccionen ella sería nuestra- dijo el general.
_ General no iniciare una disputa política, creo que no dimensiona la gravedad de ello, en algún momento saldrá, volvamos a palacio.
En el camino a palacio pensaba en cómo se encontraría, me vio la cara de imbécil, ahora era intocable. Pero no por mucho.
Isabella POV
Estaba en paz, todo era blanco, ¿dónde estaba?
Isabella- me llamo una voz.
_ Madre- pregunte ahí estaba ella, mi madre tal como la recordaba cuando llevaba en sus brazos a Helena.
_ Hola pequeña, mi niña lo has pasado tan mal, pero ya todo se solucionará- me dijo abrazándome.
_ Oh madre todo esta tan jodido, ya no hay nada que pueda hacer, ¿Por qué no me llevas? ¿Por qué Carlisle no viene por mí? Todo sería más simple. - le dije llorando.
_ Mi bebe nadie dijo que sería simple o fácil, pero tendrás grandes recompensas, las cosas en nuestras vidas suceden por una razón, piensa en eso. Siempre nos tendrás, siempre estaré contigo, hay alguien quien vino por unos momentos a verte- dijo criptica
_ Nunca te olvidare mi amor- dijo una voz a mis espaldas.
_ ¿Carlisle? - no podía creerlo ahí estaba el tan gallardo y hermoso, mis recuerdos no le hacían justicia. Vestía su traje de gala, su cabello refulgía como el sol, mi gran amor.
_ Oh mi pequeña- dijo abriendo sus brazos no dude un segundo en lanzarme a sus brazos.
_ Mi amor te he extrañado tano, ¿Por qué me dejaste?, no debías hacerlo, yo debería haber muerto en tu lugar- le dije aferrándome a sus brazos, no podía soltarlo, sentía que si lo hacía no lo soportaría.
_ Mi pequeña, no puedo hacerlo, tu mereces vivir, no mentí cuando dije que viví una vida robada contigo, fui feliz y siempre lo recordare, trajiste a mi vida alegrías que nunca imagine, te amo Isabella- dijo besando mis labios.
_ Carlisle no me queda nada por que vivir, llévame contigo o lo hare yo- le dije entre lágrimas- no quiero vivir, te lo suplico no me queda nada más mi amor- escúchame bien Isabella, se lo que estás pasando- no había critica en su voz- me aleje un poco de él.
_ ¿Lo sabes? - le pregunte.
_ Si mi amor, lo sé, se lo que hay entre tú y Edward- dijo con un brillo pícaro en sus ojos.
_Perdóname amor, fui una estúpida, no merezco tu perdón, le dije saliéndome de sus brazos, la vergüenza no me permitía verlo a su rostro.
_ Lo se amor- dijo levantando mi rostro- lo sé y no me debes perdón alguno, tú y el estaban destinados, ahora sé que fue mi ambición y arrogancia la que no me permitió ver más allá e inmiscuirme en sus caminos, ambos están destinados a estar juntos, no te guardo rencor alguno, es más pido tu perdón por el daño que te he causado- dijo serio.
_ Amor me enjuiciaran y me condenaran a muerte- le dije con miedo- pero prefiero morir luego y estar contigo- no Isabella tú no te rendirás, prométemelo pequeña, lucharas para salir adelante, no puedo prometerte que todo será fácil o que no sufrirás, pero lo que sí puedo prometerte es que todo saldrá bien- dijo besando mi frente- ahora debo partir- no amor por favor- si mi pequeña debo volver, aquí estoy cuidando de mi princesita, por cierto ella es igual de hermosa que tú, Esme te manda saludos- Carlisle no me dejes- sentía como mi agarre sobre él se aflojaba- nos volveremos a ver amor, ahora un beso de hasta pronto- No Carlisle no me dejes te lo suplico- es momento de que vuelvas, vuelve Isabella despierta…
_ Isabella despierta, Vamos enana despierta- Emmett?
_ Pequeña no sabes lo preocupado que me tenías, tuviste una baja de presión pequeña, estas en una habitación de la embajada- me dijo evidenciando lo obvio, estaba acostada en una cama.
_ Veo que por fin despertaste- dijo una voz desde la puerta, era sir Charles.
_ Sir Charles, discúlpeme todo este alboroto, nos iremos de inmediato.
_ Creo que eso no será posible Isabella, ni u ni tu amigo pueden salir de la embajada- dijo acercándose a mi lugar.
_ ¿Por qué? ¿Qué ocurrió? —le pregunte desorientada.
_ Pequeña se ha dictado una orden de captura en tu contra, el príncipe Edward te ha acusado de adulterio, por lo cual la embajada te ha dado asilo político- me explico.
_ ¿Edward? - le pregunte
_ Si mi niña, no pueden salir, tu amigo es cómplice y será acusado de traición si sale, ya lo hablé con él y entiende lo que arriesga, lo que haremos es que tomaras mi jet privado a Inglaterra, donde podre protegerte, si el príncipe pide una audiencia con la reina pueden invalidar tu asilo, debes llegar antes que él, partirás hoy en la noche.
_ No me iré- le dije
_ ¿Pero pequeña te juzgaran y no puedes ganar- dijo triste
_ No me iré, Emmett partirá a la brevedad, no me discutas amigo, tienes a tu esposa y no te hare pagar por algo que no has tenido parte alguna, yo no iré, mi nación me necesita, mi gente, si he de ser juzgada no me iré sola, s yo pago el también- le dije mi corazon estaba destrozado, pero las palabras de Carlisle me reconfortaron, daría frente a todo, podría con todo. - me permitiré abusar de tu hospitalidad un poco, pero yo no partiré, puedo usar su teléfono- le pregunte.
_ Si pequeña, te dejaremos sola para que hables.
_ Gracias.
_ Palacio de Dubái ¿en qué puedo ayudarle?
_Necesito hablar con su alteza el príncipe Edward.
_ El príncipe no acepta llamadas de ningún tipo- dijo la secretaria.
_ La mía la aceptara, dígale que es Isabella Cullen- le dije
_ Enseguida Majestad.
_ Isabella?
Edward POV
Llegue a palacio hecho una furia, no deje que nadie me molestara fui directamente a las habitaciones de Isabella, todo olía a ella, tome un cuadro de fotos donde salía ella y mi padre y lo lance, comencé a beber, estaba como un loco, todo olía a ella, su maldito aroma estaba en cada parte de su cuarto, tome una camisola de ella y como un enfermo la olí, era ella, su aroma me embriago, lance cosas, todo lo que estuvo a mi alcance fue destruido, vi que mi padre tenía un retrato de ella, era hermoso como una ninfa.
_ ¿Qué me has hecho mujer? ¿Por qué Isabella? Mi amor te amo, te amo tanto que tu muerte será la mía- le dije a su cuadro, en ese momento sonó el teléfono de la habitación.
_ Su majestad tiene una llamada- dije que no me molestaran. - es la señora Isabella Cullen—pásamela- Isabella?
_ Necesito verte Edward- me dijo, veía su rostro ene l cuadro.
_ Ven a palacio Isabella, haces todo más difícil
_ No Edward sé muy bien que si salgo de aquí me mataran, ven por favor te entregare mi rendición.
_ ¿Estas segura?, no será otra treta tuya
_ Ven ya ganaste.
_ Voy para allá- le dije cortando el teléfono
Salí lo más rápido posible de la habitación de Isabella, fui a mi habitación y busqué ropa limpia, - ya te vas otra vez, me dejas para ir a sus brazos ¿verdad? - dijo mi amada Nelly.
_ No estoy para tus pataletas Nelly, debo salir, eso es todo.
_ ¿Vas donde ella?
_ A ti eso no te interesa- le dije quitándome la camisa
_ Si me interesa eres mi prometido, dime ¿dónde vas?- me exigió parándose frente a mí, podía ver su abdomen abultado.
_Voy a ver a Isabella- le dije rindiéndome
_ Si sales por esa puerta puedes olvidarte de mí- dijo entre lágrimas.
_ Nelly no estoy para juegos he hecho todo lo que has querido, voy por la rendición de Isabella, estas feliz, ¿Qué más quieres de mí?
_ ¿Estás seguro que vas a eso? No llegaras con su aroma en t cuerpo- dijo entre lágrimas y ahí fue que comprendí todo ella sabía de mis engaños.
_ Oh mi amor tanto te he dañado, iré para verla rendirse, que pagué por lo que ha hecho y que podamos ser felices de una vez por todas- le dije abrazándola, mas esta vez no me aparto.
_ Edward vuelve a mi amor, pero vuelve libre de ella- me dijo besando mis labios.
_ Lo hare mi amor- le dije besando su frente.
Salí de la habitación rumbo al helipuerto, ahí me esperaba mi helicóptero, el cual me llevaría rumbo mi nuevo destino.
Llegue a la embajada 2 horas después, esta vez fui solo, el piloto y yo sin escoltas, no quería que se sintiera intimidada, cuando baje de la nave vi a sir charles de pie esperándome.
_ Sir Charles, disculpe la visita Isabella me mando a buscar.
_ Lo se ella me lo dijo, pero te diré una cosa, lastímala y no saldrás vivo de aquí, recuerda que estás en suelo británico, siempre puede parecer un accidente, no me interesa quien seas ella no está bien y tú y tus mentiras la han lastimado lo suficiente, ella no merece esto, ella quiere morir, por ti, solo por ti- me dijo hincando un dedo en mi pecho.
_ Veo que u también cayó en sus embrujos- le dije quizás este era otro de sus amantes.
_ Cuidado muchacho como me hablas, muy príncipe serás, pero estas en mis dominios- dijo empujándome.
_ ¿Ya se la follo?, es buena ¿verdad?, dígame ¿qué se siente follar a una reina?- le dije sin poder evitarlo- ahí sentí un arma en mi pecho.
_ No imbécil no lo he hecho y no lo haría, ella es una dama merece respeto, no hagas que se me olvide que ella te mando a buscar y te pegue un tiro por invasión de propiedad privada- dijo apuntándome.
_ Baje el arma, lo siento- no volverá a pasar.
_ Muy bien muchacho, pero lo diré una vez más lastímala y no saldrás vivo de aquí- me dijo bajando el arma- acompáñame.
Lo seguí por una escalera hasta un pasillo, luego frente a unas grandes puertas estaba Emmett el guardaespaldas de Isabella, al verme me apunto con su arma.
_ Tranquilo muchacho, él no la dañara- dijo sir Charles, él se hizo a un lado dejándome entrar.
Al entrar estaba ella en un albornoz negro, que resaltaba la belleza de su cuerpo, l verla casi pierdo la poca cordura que me quedaba.
_ Isabella aquí estoy dime que querías.
_ Edward, aquí estoy, lista para entregarme a la justicia de mi pueblo, pero no me iré sola, tú también serás juzgado por traición y la planificación del asesinato de Carlisle.
_ ¿De que hablas mujer?—le pregunte acercándome a ella.
_ Por mis averiguaciones fuentes cercanas al ejercito planearon la muerte de Carlisle, el atentando no era hacia él era hacia mí y mi madre, tu general lo planifico todo junto con tu madre. Así que yo seré juzgada, pero tú también, y me llevare a tu madre conmigo- dijo la muy perra.
_ ¿quien te crees que eres maldita mujer'- le dije tomándola por la cara- Isabella- dije oliendo su aroma- te necesito mi vida, no puedo más- le dije rindiéndome a su aroma- Edward aléjate, no me toques- ¿dime que no lo deseas?- le dije girándola y metiendo mis manos bajo su albornoz, podía sentir su lencería, su piel se estremecía ante mi toque- dios Edward te deseo- dijo rindiéndose a mis manos, puso su cabeza en mi hombro, seguí tocándola, hambriento de sentir su piel. La sensación era sublime, ¿sería capaz de condenarla sabiendo que su muerte seria la mía?, la deseaba, así como un hombre perdido en el desierto necesita el agua.
_ Isabella déjame ayudarte, amor no puedo verte morir- le dije sobre su hombro metiendo mis manos en sus pantaletas, sus suaves rizos me invitaban a pecar, se estremecía bajo mi toque.
_ Tu no me amas, tu no me amas- repetía como mantra, podía sentir como se resistía a mí.
_ Oh pequeña mía ¿no lo ves? - le dije girándola y tomando su rostro- eres mi todo, pídeme que deje todo por ti y lo hare, pídemelo y serás por siempre mía.
_ Edward que puedo pedirte, me condenaste- me dijo mientras las lágrimas corrían por su rostro, aun así, susurraba junto a mis labios, podía sentir su aliento.
_ Condenarte fue condenarme mi amor- le dije mientras la abrazaba. Es verdad nuestra suerte estaba echada.
_ Lo único que te pido es esta noche- me dijo y no pude evitar concederlo, Moria por ella.
_ Si mi amor- le dije rindiéndonos, nos besamos como si nuestra vida dependiera de eso, y era verdad era nuestro adiós, mis manos avarientas fueron bajo su albornoz quitándolo de su cuerpo, ella no merecía estar cubierta ella nació para estar desnuda y esta noche me embebería de ella, baje los tirantes de su corpiño, dejando a l avista sus hermosos pechos, ni muy grandes ni muy pequeños, sino del tamaño justo de mis manos, sus pantaletas fueron lo siguiente en salir de su cuerpo, mi ninfa mi diosa estaba en todo su esplendor. la bese con más fuerza mientras ella quitaba mi camisa, los botones saltaban de mi camisa, pero no importaban sus manos temblorosas fueron a mi pantalón y con urgencia lo desabrocho, le ayude a quitármelos junto con mi ropa interior, estaba desnudo frente a ella y ella frente a mí, no había pudor ni vergüenzas ella era todo lo que necesitaba para sentirme completo.
La tome por sus caderas ella inmediatamente se subió a mí, enredando sus piernas en mis caderas, conectándonos enseguida, la lleve a la cama que había en la habitación y me posicione sobre ella, entre de una sola estocada en ella, era como sentirse en casa, ella era mi hogar su cuerpo era mi templo, mis estocadas no eran suaves la veía retorcerse bajo mi- más amor, Edward dame más- me pedía y yo la complacería, teníamos solo esta noche, el resto de nuestras vidas sería un infierno, breve pero un infierno, no falto mucho para que ella tocara el nirvana, yo aún no lo hacía, nos gire dejándola a ella que me cabalgara, mientras sus senos danzaban al compás de sus movimientos, era hipnotizante como se veía libre y sin ataduras- amor estoy tan cerca le dije subiendo mis caderas, fue poco un poco más y ambos acabamos tocando l cielo, aun conectados ella se acurruco en mi pecho.
_ Te amo Edward, siempre lo he hecho y siempre lo hare- me dijo besando mi pecho donde estaba mi corazon.
_Te amo Habib- le dije abrazándola, esa noche la hice mía, la hice mía en todas las formas en las que se le puede hacer el amor a una mujer, fuimos uno por interminables horas, en las cuales ella me besaba y me acariciaba.
Cerca de las 5 de la madrugada sonó mi celular, lo había escuchado con anterioridad, pero no quería romper este hermoso momento, me levante y me calce mi ropa interior, pensando que podría ser algo importante y vi que era Nelly, no conteste, la culpa cayó ante mi como un balde de agua fría, la hacía vuelto a traicionar, quizás ella aún estaba esperando a que yo llegara, lidiaría con eso después, me voltee a ver a mi amor y ella estaba de pie dándome la espalda. Me acerque a ella y la abrace por su cintura.
_ ¿En qué piensas Isabella? - le pregunte besando su nuca
_ En que si he de morir lo hare sabiendo que fui feliz- dijo dejándome perplejo, la separé un poco de mí y vi una de sus manos, no me había percatado tenía un pequeño puñal.
_ Isabella suelta eso-. le dije viendo que este estaba cerca de su abdomen
_ Hasta siempre mi amor, porque pese a todo si te amé, y te amare, sé que donde este tu padre ya me perdono, te dejo en libertad de acción, mi despedida es esta Edward, no viviré para ser sometida- dijo enterrando el puñal en su abdomen- noooooo mi amor- le grite, la sangre corría como un caudal por su abdomen cuando retiro el puñal. Solo reaccione a tomarla mientras se desvanecía, sentía que mi corazon se destruía al verla caer como una muñeca.
Mi grito altero a los guardias quienes ingresaron enseguida encabezándolos el guarda de Isabella.
_ ¿Qué demonios le has hecho? - dijo viéndola desmadejada en mis brazos, me aparto de un golpe.
_ Llamen a un médico- solo acerté a decir, rápidamente entro sir charles mientras Emmett cubría su desnudez.
_ ¿Qué le has hecho? - me grito golpeando mi rostro con un golpe certero.
_ Un médico, un médico- repetía como loco, los médicos de la embajada aparecieron en seguida, colocaron en una camilla a Isabella y se la llevaron, la había perdido.
_ Guardias- grito sir Charles- arresten al príncipe- dijo mientras los guardias se acercaban a mí- y denle ropa a este infeliz.
Fue en ese momento en el que reaccione, seria culpado por el asesinato de Isabella.
Isabella POV
Fue irracional mi actuar por supuesto, no debería haber hecho eso, pero el corazón no entiende de razones, no cuando los sentimientos están en juego y tu vida peligra. No genial miedo a morir es más estaba feliz de que quizás este fuera mí momento, me aterraba el pensar que quizás por mi acto de cobardía no volvería a ver a helena y finalmente podría descansar.
Sir Charles POV
Cuando la vi herida en los brazos de ese maldito me sentí morir, ella era como una hija para mí, el dolor de sentir que la podría perder era algo que no estaba dispuesto a soportar.
Les ordene a los guardias que arrestaran al maldito, ya me encargaría de que fuera juzgado, pero antes teníamos que salvar a Isabella, necesitábamos llevarla urgentemente a un hospital, más para poder lograrlo necesitábamos pasar por los guardias aposados a las puertas de la embajada. Necesitaba otra vez a este maldito.
_ Sir Charles su estado es crítico debemos partir de inmediato- dijo el doctor de palacio, quien le había brindado los primeros auxilios a Isabella. - ha perdido mucha sangre.
_Traigan al príncipe- les grite a mis guardias
Cuando lo trajeron era patético, lloraba como si realmente le interesara lo que pasara con Isabella, era un maldito y yo me encargaría de que pagara por sus crímenes.
_Mira idiota no podemos salir pues tu ejercito esta fuera de la embajada, necesito llevar a Isabella a un hospital su vida peligra.
_ Si hare lo que quieras solo sálvala, por favor- dijo el payaso, no perdería mi tiempo con el ahora.
_ Súbanla a la camioneta y vamos que esperan- le dije a los médicos y a mi equipo de seguridad.
Entre los médicos la subieron a la parte trasera de la camioneta blindada de la embajada, en el asiento delantero puse al maldito yo conduciría- vamos no hay tiempo que perder.
Edward POV
Me subieron esposado al asiento delantero de la camioneta, y cubrieron mis manos con una chaqueta. Sir charles se sentó en el asiento del conductor, debíamos pasar inadvertidos, pusieron un sombreo y lentes a Isabella, su guardia de seguridad me apuntaba desde el asiento trasero.
Cuando salimos los guardias del ejercito estaban apostados en la entrada, de inmediato pararon el auto, sir charles bajo mi ventanilla y la de el para hablar con los militares.
_ Déjenme pasar, soy sir charles embajador británico- dijo con voz estruendosa.
_ Su Majestad ¿se encentra ud bien? - dijo el general Gigandet desde la ventanilla.
_ Ya escucho general dejen pasar el vehículo, nos dirigimos a palacio- le dije confiaba en que entendiera.
_ Su majestad ¿se encuentra bien? no volveré a preguntar- dijo con voz amenazadora.
_ Idiota estoy bien déjennos pasar- le dije exasperado la vida de Isabella corría peligro.
_ Déjenlos pasar- dijo el general no confiado- yo lo escoltare- agrego.
_ General Isabella sigue adentro no le he ordenado que deje su puesto- le espete molesto. - vamos sir charles.
Cuando los perdimos de vista acelero a toda velocidad al American Hospital of Dubái, al llegar ya nos esperaba una camilla en la parte traerá del hospital, bajaron a Isabella quien iba inconsciente- ayúdenla les rogué.
_ Guarda silencio principito- dijo Emmett mientras me bajaba del auto, sir charles se perdió de vista junto con Isabella, yo lo único que quería era seguirlos, pero Emmett no le lo permitía.
_ Emmett te lo suplico déjame ir con ella asegurare que le den la mejor atención- le rogué—te lo suplico.
_ Su alteza no cree que al verla y ver quien es no la atendrán como es debido- me cuestión.
_ Emmett se emitió una orden de captura para Isabella apenas entre a un pabellón será detenida, déjame hacer esto por ella- le pedí- creo q has hecho suficiente por ella, ahora su vida peligra por tu culpa, dime ¿porque la odias tanto? ¿Por qué la quieres ver muerta? - me espeto.
_ Emmett déjame hacer esto por favor y después te diré todo lo que se- le rogué.
_ Está bien pero un movimiento en falso y eres hombre muerto- me dijo con una mirada glasear, no pude más que asentir.
Sir Charles POV
Aquí estaba mi niña desangrándose, frente a mis ojos, el principito había anulado la orden de detención contra Isabella, estaba fuera de mi "jurisdicción" el asilo estaba garantizado mientras estuviera en la embajada. Gracias a dios los doctores estaban haciendo lo más que podían por ella, no podía perderla, sería como perder otra vez a ¿Renne? En un momento desesperado tome una de las ropas ensangrentadas que le habían puesto para sacarla de la embajada y me acerque a uno de mis asistentes.
_ Marco, necesito pedirte algo muy importante—le dije
_ Dígame Sir charles en que lo puedo ayudar.
_ Necesito un examen de ADN de esta ropa contrástalo con mi ADN, ahora.
_ Buscare un doctor para que lo realice Sir charles.
_ Hazlo con la mayor discreción.
_ Ud. cree que la Jequesa es su hija perdida?
_ No lo sé, pero hay algo en ella que me recuerda a Renne.
_ Lo hare, cuente conmigo- me dijo Marco, algo en ella me resultaba completamente familiar.
Emmett POV
Lleve al príncipe a una de las salas de espera, se había dispuesto que un ala completa del hospital fuera cerrada para que Isabella pudiera ser atendida en este momento su vida estaba en peligro
_ Y bien ¿Cuál es tu historia? - le espete molesto, quería molerlo a golpes.
_ Emmett siempre ame y he amado a Isabella, desde pequeños, la vi como inalcanzable siempre era protegida y custodiada por mi padre y por su madre, vivía solo mi propia madre estaba entre amorío y amorío, cuando se me envió a estudiar fuera de palacio fue un alivio y una tortura, un alivio pues saldría de las garras de mi madre, pero una tortura ya que no podría ver a mi Isabella, pasaron los años se me "formo "para ser el próximo heredero de Dubái, mi madre me forzó a conocer a Tanya, encontré en ella una forma de escape, cada vez que veía a Isabella cada día me enamoraba más, fui cruel con ella pues sabía que nunca sería mía, mi familia se opondría a que ella fuera mi novia o incluso mi amiga, pensé en tomarla como amante, no te mentiré pues esa sería la forma más "correcta" que tendría para estar con ella, estaba al tanto del gran amor que mi padre le profesaba a Esme y que por las malditas clases sociales no pudieron estar juntos. Pero cuál fue mi gran sorpresa al recibir el llamado de mi adre quien me decía que mi padre había tomado otra esposa, retorne a Dubái con la intención de hacer a Isabella mía, mi esposa o mi mujer, pensé que si mi padre podía ser feliz yo también tenía ese derecho, pensé que había tomado por fin a Esme como su esposa, sabía que él la amaba pues nunca oculto sus sentimientos por ella, cuál fue mi sorpresa al entra a las habitaciones de mi padre encontré a ella, mi gran amor, la única mujer que he amado en brazos de otro, peor no cualquier otro, era en brazos de mi padre.
_ ¿Por qué callaste tantos años? - le pregunte helado.
_ Porque soy un puto estudio, un cobarde, cuando murió Tanya nosotros habíamos discutido ella sabía que yo amaba a Isabella, siempre lo supo no podía ocultárselo, me dijo que era un maldito enfermo por amar a la mujer de mi padre y así me sentía como un enfermo. Me amenazó con decirle a mi padre, yo harto de sus amenazas me fui a mi auto, en ese momento estallo la bomba que casi me mata y que cobro la vida de Tanya.
Cuando desperté en el palacio la vi y vi que ella era feliz, me dije: "estúpido la perdiste ahora vive con ello" cuál fue mi sorpresa al enterarme que ella estaba embarazada, odie a mi padre, por primera vez en mi vida sentí asco de mi sangre, pues aun embarazada la deseaba. Es enfermo lo sé, pero es así.
Cuando se accidento fue mi culpa, la lleve al límite pues yo ya la había hecho mía y ella aun así había elegido a mi padre, tenía que herirla y llevarla al límite, cuando ella cae de la escalera fue en parte por mi culpa, la había avisto en los jardines y la moleste, la trate muy mal, me arrepiento de eso también. - tome aire.
Cuando salió del hospital supe que debía alejarme, me refugie en una mujer que me había apoyado y escuchado Nelly, ella me ayudo a salir de mi locura, sabía que si seguía en palacio cometería una locura, pues estaba dispuesto a todo, incluso a morir por ella. Me refugie en sus brazos, pero aun así cada beso y caricia hacia Nelly siempre ha sido pensando en Isabella, lo se soy un maldito enfermo, pero ella es mi luz.
Cuando mi padre me llamo y me dijo que Isabella había perdido a mi hermana sentí una esperanza, pero esa esperanza se desvaneció ya que Nelly estaba embarazada, no puedo y no podía darle la espalda a mi hijo.
Cuando me llamaste y me dijiste que mi padre había muerto y escuche su voz mi mundo se paralizo, debía estar con ella, pero caí en cuenta que ella no era mía y yo ya no podía estar con ella, Nelly está embarazada y debo casarme con ella, mi hijo no puede nacer bastardo.
Desde que llegue lo único que he pedido es que Isabella me autorice a casarme con Nelly, ¿por mí? Claro que no solo por mi hijo.
_ A ver déjame entenderte, ¿la vendiste, la humillaste y la trataste de matar solo por casarte con una mujer que no amas?, realmente estas enfermo- le espete.
_ Emmett créeme que nunca quise dañarla- ¿no? Eres un puto mentiroso- no, Emmett no quise dañarla, lo que pasa es que soy un puto cobarde y un cínico, dime que puedo huir con ella y dejare todo, pero tengo una responsabilidad con mi hijo, hoy fui con la intención de que ella se rindiera, la sacaría del país, para que no fuera juzgada y dormí con ella,- en ese momento lo vi todo rojo lo golpe- defiéndete estúpido, ¿Cómo pudiste?- le grite mientas estrellaba mi puño en su rostro- defiéndete maldito- le gritaba pero él no se movía, lo lance al suelo
_ ¿Qué va mal contigo? - le grite.
_ Nada Emmett solo es que la amo, ella se despido y vi que tenía el puñal en su mano y…- su voz se cortó, cuando lo vi de cerca estaba llorando y pasando sus manos por su rostro.
_ La amo- dijo llorando, no podía creerlo aquí estaba el gran príncipe de Dubái llorando como un niño.
_ Emmett te pediré algo por favor-. dijo tomando mi pantalón. - dime que quieres? - si ella muere mátame te lo suplico- dijo llorando- por favor mátame, no puedo vivir sin ella- dijo se veía patético, pero cumpliría su petición- si ella muere lo hare.
Me sentía mal, pues el sería padre, pero si era su petición lo haría.
Edward POV
_ Si ella muere mátame te lo suplico- le pedí.
_ Si ella muere lo hare- me dijo sin dejar de mirarme.
Era verdad si ella moría yo debía morir.