Hola chicos! Hoy he leído mi fic, y sinceramente me avergüenza tanto la manera en que está escrito, como el no haberlo continuado. Voy a editarlo, intentaré ir corrigiendo un capítulo por día, y cuando acabe con eso actualizaré. Lo siento muchísimo. He cambiado algunas cosas, intentando mantener la esencia. Espero que os guste.

CAPÍTULO I. Recordando

Mi nombre es Katniss Everdeen, y tengo dieciséis años. Mis padres murieron hace dos en un accidente de tráfico, dejando un vacío enorme en mí. Solo tenía catorce años cuando sucedió, y me vi sola, teniendo que hacerme cargo de mi pequeña hermanita. Tan desesperada era nuestra situación, que tuvimos que recurrir al único familiar con vida que teníamos, Haymitch.

Haymitch es nuestro tío, hermano de nuestra madre. Nunca tuvimos un vínculo cercano con él, ya que mi madre y él no tenían una buena relación. Solo sé que discutieron hace muchos años, y que desde ese momento no volvieron a hablar. Entiendo a mi madre, pues mi tío es un hombre muy complicado. Tiene problemas con la bebida y un carácter hosco y frío. Además, tiene una facilidad increíble para hacerme perder los nervios, nunca me llama por mi nombre, sino Preciosa, como si eso fuese un nombre, y el tono sarcástico que siempre usa me casa de mis casillas. La verdad es que consigue ponerme muy furiosa, pero no tengo más opción que soportarlo, por mucho que me desagrade.

De pequeñas, antes del accidente, mi hermana y yo vivíamos en una casa a las afueras de la ciudad con mis padres. La casa estaba rodeada de árboles, y cerca había un pequeño lago donde mi padre me enseñó a nadar. Guardo muy buenos recuerdos de aquel lugar y es por eso que tener que mudarme a casa de mi tío fue bastante duro para mí. Echo mucho de menos a mis padres, pero he tomado la decisión de dejar de atormentarme por ello. Debo continuar con mi vida y intentar ser feliz.

Cambiarme de instituto a mitad de curso tampoco fue nada fácil. Si tenemos en cuenta que a esas alturas todos los grupos de amigos ya están formados, que la mayoría de ellos se conocían desde hace años y además mis pocas habilidades para relacionarme con la gente, pues os podéis imaginar el resultado.

Aun así unas semanas después de llegar, durante uno de los recreos pasó algo que aún hoy recuerdo con una sonrisa. Estaba sentada en un banco del patio del instituto, como siempre sola, cuando se acercó a mi un chico de último curso llamado Gale Hawthorne. Era muy alto, moreno, y con unos ojos color gris que al principio me intimidaron mucho. Comenzamos a hablar cada día, siempre viéndonos en el mismo sitio, y poco a poco nos hicimos amigos.

Él también es huérfano, pero solo por parte de padre. Supongo que eso hizo que nos entendiéramos mejor. Gale vive con su madre y sus tres hermanos pequeños; Rory, Vick y Posy, y al igual que yo, sabe lo que es tener que sacar a una familia adelante. A día de hoy puedo decir que es mi mejor amigo, o mejor dicho, el único amigo verdadero que tengo.

Han pasado ya dos años desde que llegué aquí, y no muchas cosas han cambiado. Estamos en Junio, y quedan tan solo dos semanas para que acaben las clases, lo que me hace pensar que el verano está a la vuelta de la esquina. Espero poder tener más tiempo libre entonces, salir a pasear, ir a la playa a nadar y pasar mucho tiempo con Prim y Gale.

Como cada día, me levanto a las siete y media de la mañana. Voy al baño y me ducho antes de ir al instituto. Me visto con mi uniforme, una camisa blanca y una falda azul de cuadros, que queda justo encima de mis rodillas. Me peino haciéndome una trenza al lado como siempre la llevo y voy a la habitación de Prim para despertarla.

Después de llamarla tres veces logro hacer que se despierte, la ayudo a vestirse y le recojo su largo pelo dorado en dos trenzas, como sé que a ella le gusta. Bajamos juntas a la cocina a desayunar. Por suerte Haymitch nos ignora. Casi nunca desayuna, ni come, ni cena con nosotras, y es algo que agradezco, pues no me gusta que Prim le vea borracho. Nos tomamos el desayuno tranquilamente, un vaso de leche y un sándwich y cogiendo las mochilas salimos hacia el colegio.

Acompaño a Prim hasta su clase como cada día y yo me dirijo a la mía. Al llegar me siento en mi pupitre al lado de Madge, la hija del alcalde. El profesor aún no ha llegado así que me limito a mirar por la ventana.

Hoy es un día muy importante para muchos, aunque a mi realmente no me importa demasiado el tema sobre el que tratara la actividad final antes del verano. Cada año al director se le ocurre hacer algún trabajo estúpido sobre el consumo responsable o algo parecido. Recuerdo que el año pasado nos mandaron hacer una excursión por toda la ciudad y después hacer ese trabajo, al que llaman crédito de síntesis. La verdad es que es un horror, sobretodo por el hecho de tener que hacer equipo con gente con la que prácticamente no hablo.

Cuando el profesor llega, nos da los buenos días y comienza con la clase.

—Buenos días, en la clase de hoy, como ya sabéis, hablaremos sobre el crédito de síntesis. Este año tratará sobre educación familiar. Será un trabajo a realizar en parejas que yo asignaré, un chico y una chica.

Todos empiezan a mirar disimuladamente a la pareja con la que desean estar, las chicas con sonrojos en sus mejillas y miradas soñadoras, yo me limitó a poner los ojos en blanco. Esto no me está gustando nada.

—En lugar de una excursión como en cursos anteriores, en esta ocasión haremos un viaje. — Continúa el profesor—Iremos a una casa de colonias. La idea es que el proyecto sea más dinámico y para eso, como primera actividad las chicas tendréis que poneros esta barriga artificial. Así fingiréis vuestro embarazo, y cuando pasen 9 días, la barriga se abrirá y saldrá vuestro precioso bebé.

Mi corazón se para durante un segundo mientras veo al hombre haciendo maniobras extrañas con un armatoste de metal, que parece ser una barriga. Yo Katniss Everdeen…. ¡¿Embarazada?! Solo espero, por el bien de mi pareja de proyecto, que sea alguien con mucha paciencia, porque definitivamente la va a necesitar. Y por si esta noticia no fuese suficiente, el profesor continúa hablando.

—Bien, en el tablón está colgada la lista de parejas con las que tendréis que realizar el trabajo, miradlo con calma y sentaos por parejas. El objetivo es que podáis conoceros un poco mejor antes de empezar a trabajar.

Todos mis compañeros de aula se levantan corriendo, haciendo chirriar sus sillas al arrastrarlas por el suelo, y se pegan a la pared, empujándose para poder tener una mejor vista del tablón dónde están los nombres. Cuando la mayoría de ellos comienza a dispersarse me acerco yo y comienzo a buscarme en la lista.

Johnson, Grable

Roberts, Byington

Mellark, Everdeen

Cuando leo mi nombre y el de mi pareja dejo de leer. Por si la cosa no pudiese ir a peor, me tenía que tocar con Peeta.

Gracias por leer! Volveré mañana con el siguiente capítulo editado. Un review siempre me hace feliz (^-^) Chaoo!

Cristina97