Bueno… estoy con varios fanfics a la vez y esta es la primera vez que escribo una historia sobre esta pareja… pero en verdad me encanta jejeje, son tan lindas… y además Kyoko es mi favorita de la serie. Espero que lo disfruten y no tardare en subir el próximo capitulo, prometido, como máximo 1 semana… dejando eso de lado, espero que lo disfruten.

Una cosa lo que este así… –" Lo que este dentro de estas indicaciones es lo que piensa el personaje"-

Aviso: Esta serie no me pertenece ni los personajes, solo los uso para esta historia y tal vez otras que haga.

….

Al fin todo acabo, había tenido tantos problemas, tantas tristezas y torpezas, pero al final un ángel de la guardia consiguió salvarme, le estoy mil veces agradecida pero no lo e expresado. ¿El porque? ni si quiera yo lo se… Oh, no me e presentado, me llamo Miki Sayaka, y soy una chica de dieciséis años, tengo el pelo corto azulado, mas o menos me llega por los hombros, unos ojos azulados los cuales gente describe como pequeños zafiros, no soy muy alta para mi edad aunque tenga una buena figura, soy delgada y si hablamos de caracteres… el mío es fuerte, me gusta proteger lo propio o lo que me importa. Si hablásemos de mi pasado posiblemente se podría hacer un libro, e tenido tantos problemas… tantos romances que al final no llegaron a nada… tantas tristezas que aun me han llegado a atormentar noches enteras, por suerte… mi mejor amiga Kaname Madoka sobrevivió a una guerra de chicas mágicas, se que resulta sorprendente pero si, yo junto a mas chicas éramos mágicas, por suerte ya no lo somos pero no me malinterpreten porque no me arrepiento de haberlo sido, al contrario, gracias a eso aprendí muchas cosas.

Hablando de Madoka, después de esa insaciable pelea empezó a frecuentar salir con Akemi Homura, esa chica pelinegra la salvo… arriesgando su vida… pero eso es otra historia. Las chicas mágicas nacen de sus deseos, ¿Cual fue el mío?… que la persona mas importante para mi pudiera cumplir su sueño, el tocar el violín… era un chico al que apoye y salve… se podría denominar como que fue mi primer amor… y aun muy dentro de mi queda una pequeña brecha de su recuerdo, pues ya que una antigua amiga gano el corazón del chico, pero poco a poco e conseguido sanar la herida sustituyéndola por un amor que se que es correspondido pero que aun no e recitado de mis labios, hace unos meses escuche una confesión de esa persona, de esa chica llamada Sakura Kyoko.

Kyoko es una chica sí, de pelo rojizo y ojos como rubíes acompañados de un brillo salvaje, a simple vista parece una rebelde y callejera mujercita… pero tiene un corazón que nunca había visto, ni si quiera mi primer amor lo tenia tan bondadoso y radiante… Kyoko me salvo la vida… y yo aun así no le correspondí con mis sentimientos los suyos… ¿Que como me salvo la vida?… Según me entere cuando ya paso todo, se me rompió mi gema que representaba mi alma soltando de mi una especie de bruja, esa no era yo así que ataque sin piedad a Madoka y a Kyoko, las cuales vinieron a intentar salvarme, la cosa acabo así… Kyoko se sacrifico haciendo que nunca estuviera sola y Homura salvo a Madoka.

Tal vez la ultima pregunta que les frecuente la cabeza sea… ¿Como es que ya no tenemos poderes? y ¿Solo éramos 4 chicas mágicas?. Bueno… En la ciudad donde habito conozco a cinco chicas mágicas, la ultima se llama Tomoe Mami, es la mas mayor, rubia y alta, desgraciadamente Mami se fue a vivir con su abuela cuando todo acabo, dejándonos a nosotros aquí, no es que me lo tome a mal ni le tenga rencor por la decisión, pues ya que nos enseño muchas cosas, es solo que… aquí no tenia familiares ni dinero así que… se tuvo que ir.

Por ultimo… como ya dije no somos chicas mágicas ni seremos nunca mas, Madoka pidió un deseo… fue la ultima que lo pidió… su deseo fue "Querer borrar a cada bruja antes de que nazca, cada bruja de cada mundo, del pasado y del futuro, con sus propias manos", el incubador nombrado Kyubey lo cumplió, pero por razones desconocidas también perdimos nuestros poderes, aunque en verdad mas que perderlos logramos nuestra alma, le estaré eternamente agradecida por habernos salvado a todas dando su vida, aunque al final Homura logro salvarla, no se el como, no nos lo quiso decir…

-Sayaka, Madoka ya esta en la puerta. ¿Estas arreglada?- Esa era mi madre dándome la orden de salida a mi instituto, Madoka venia todos los días a recogerme para irnos las dos y claro, este día no iba a ser una excepción, por desgracia, estaba tan consumida en mis pensamientos que olvide ponerme mi uniforme de suéter blanco con un lazo rojo acompañado de una falda negra con rayas blanca y medias claras.

Fui corriendo a mi armario y abrí la primera puerta… mi único uniforme no se encontraba hay, –"o vaya… ahora que… ¿Ha jugar con el uniforme al escondite?"- juraría haberlo dejado hay tras plancharlo yo misma, tampoco podía decirle a mi madre si sabia de su posición porque seguramente me echaría la bronca y llegaría mas tarde aun, así que como pude lo acabe encontrando en el perchero de detrás de la puerta, me tire casi una hora planchándolo y encima se me arrugo un poco… pero aun así sin mas problemas me lo puse rápido y salí en busca de mi amiga.

-Que pasa Sayaka ¿Volviste a perder la cartera?- Me decía preocupada, la había echo esperar diez minutos o incluso puede que quince y aun así no dejaba de sonreír, sin duda una chica sorprendente… nunca me cansare de afirmarlo.

-No, esta vez… fue el uniforme…- Me sentía un poco avergonzada y creo que Madoka lo noto, porque dio una pequeña risita, haciendo que me avergonzara aun mas.

-Estos días estas muy olvidadiza y despistada, ¿Paso algo nuevo en tu vida y yo no lo sabia?- Se a lo que se refería, entre sus palabras escuchaba el nombre de "Kyoko", al fin y al cabo, con mas de doce años de amistad una sabe leerse a la otra.

-Me parece raro que no estés con Homura ahora.- Cambie de tema, hablando en un tono juguetón, como recién dije… se leerla como un libro abierto tras años de practica.

-Em… Eso… Eso es porque… em bueno… hoy no se sentía bien… y esta en su casa descansando, me llamo ayer…- Tartamudeo… le había dado justo en el clavo, sabia que era algo como eso, pues ya que normalmente Homura nos había acompañado durante estos días.

-¿Y no vas a ir a ver si esta bien? Seguramente ahora mismo te este echando de menos.- Volví al ataque, era agradable ver sonrojada a Madoka, no es que sea mala persona, no por favor, es solo que ella me lo a estado haciendo durante un largo tiempo y ahora que tengo una oportunidad… seria bueno aprovecharla.

-…..- Silencio, creo que no sabia que decir o estaba pensando las palabras adecuadas para contraatacarme, espero que sea la primera opción… aunque igualmente no podrá hacer mucho, pues ya que estamos delante de nuestro instituto.

Unos minutos después toco la sirena, dándonos la bienvenida para que entráramos en nuestras clases, cosa que hicimos sin rechistar como de costumbre, me despedí de Madoka ya que ella iba a la ultima fila y yo a la primera, me senté y vino el profesor Nuyiro, era el único y mas agradable del centro. La clase ya comenzó.

-"Kyoko… ¿Donde estarás…?, lo único que se es que compartes piso con Homura gracias a las ganancias que tu padre te heredo pero… desde que te confesaste y yo salí corriendo… no e sabido nada de ti… y encima tonta de mi no e ido a visitarte…- Pensaba para mi misma, en parte me culpaba de mis acciones, pero ya había pasado factura en esas noches que no podía dormir al imaginarte protegiéndome… me gustaba tanto aunque lo negara… aunque te digiera que te odiaba te apreciaba tanto…

-Me llamo Sakura Kyoko, tengo dieciséis años, encantada de conocerlos, espero llevarme bien con todos vosotros.- Escuche tras algunos gritos de admiración y pequeñitos silbidos. ¿Había escuchado bien? Tu nombre dicho por otra persona… levante el rostro que tenia anteriormente mirando la mesa y vi tu rostro… ese con el cual me arrepentí de abofetear meses atrás al escucharte confesarte… al parecer al pensar en ti no me di cuenta de que la directora abrió la puerta y te acompaño a entrar, el profesor también te debió saludar… mire la pizarra… estaba tu nombre escrito un poco rápido pero si… era tu nombre… y esa chica eras tu Kyoko…

Busque tu mirada, ilusionándome de que me hayas visto, pero al encontrarla no vi que me correspondiera, intente carraspear muy ligeramente llamándote la atención, pero para mi mala suerte no lo logre, te seguí mirando y percibí que mirabas a alguien… pero solo era a Madoka a la cual con un gesto de la cabeza saludaste. Poco después escuche tu nombre de unos chicos que se sientan detrás de mi, al imaginar que hablaban de ti agudice el oído.

-Sakura-San es muy atractiva, ¿Crees que lograría invitarla a tomar algo? Tal vez con el tiempo lograse algo con ella- Escuche susurrar a los compañeros de atrás haciendo que me entraran celos. ¡Ni si quieran la conocía y ya quería intentar algo! ¿Pero quien se creía?, yo se que no la trate tanto como ella se merecía, pero aun así… si que quería estar con ella. ¡Pero es que yo la conocía, yo sabia lo buena que era, su enorme bondad y envidiosa alegría!, incluso su pasión por los pokis.

-Bueno chicos, espero que nos llevemos bien con la señorita Sakura, por favor siéntese en la tercera fila y intente atender en lo que queda de clase.- La seguí con la mirada, sin duda me moría por ella, lo podía sentir, lo podía notar, mi corazón saltaba de alegría al ver que la podría contemplar tanto como quisiera, el ver como usaba un uniforme y no sus viejas ropas, las cuales también amaba… Me tuve que tranquilizar, si seguía así mi corazón iría corriendo a por ella dejando a mi cuerpo sin emociones en la mesa… solo espero poder estar con ella en el recreo…

-"¿Podre hablarte? ¿Podre observarte? ¿Podre confesarme? ¿Me abras perdonado?"- Tantas preguntas quería hacerte, tantas acciones ansiaba representar delante de ti…-" No hay suficiente dinero en el mundo como para comprarte un abrazo"- Se que soy una enamoradiza… pero dios… me volvía loca… de verdad la amaba… tanto tiempo haciendo que estos sentimientos estuvieran en mi interior sin sacarlos que te herí… me castigue y castigare con ese recuerdo hasta el fin de mis días, estoy segura… pero aun así… no te puedo sacar de mi cabeza Kyoko…

/Flas Back/

Recuerdo este lugar, es la antigua catedral de tu difunto padre donde una vez me trajiste, esta en ruinas y corre peligro de derrumbarse, pero aun así es preciosa, las cristaleras destruidas le dan colores con ayuda del sol, incluso los grafitis decoran el lugar, también es verdad que llevo varios días viéndolo todo perfecto, incluso aunque perdí mi primer amor, aun así me siento tan bien…

-Sayaka…- Me llamas, al escuchar que al fin hablas te observo, me trajiste a este lugar pero la verdad es que no se para que, no me había fijado, pero te ves adorable cuando el sol te enfoca. –Yo… quería decirte… bueno… se que esto no esta bien, las dos somos chicas pero yo… de verdad… de verdad que me gustas… creo… no, se… que te amo…- Me petrifique, ¿Eras tu Kyoko?, ¿Como podías decirme algo así? ¿Y nuestra amistad?… aunque claro… tampoco soy la mas indicada para pensar eso, después de todo yo también te amo en un sentido de no solo amigas.

-Yo también te amo, eres una buena amiga.- Conteste, quería saber si lo que decías tenia otro sentido o solo me ilusionaba para nada, al ver que te entristecías por mi respuesta me sentí culpable, lo lamento… pero quiero ver como reaccionas.

-¡No!, no Sayaka yo… yo te amo como algo mas… algo mas que amigas…- Venditos sean mis oídos, de verdad me querías, sentía tanta alegría que podría fundirme hay mismo, me flojearon las piernas cayendo de rodillas, daba un poco de lastima por la posición pero de verdad estaba contenta… te vi aproximarte muy rápido, ¿tal vez piensas que doy lastima? no yo se que no, no eres de esas chicas. Los ojos se me nublan un poco, ¿Tanta es la felicidad que se me pueden llegar a escapar lagrimas? al parecer si, porque es lo que paso, me cayeron unas cuantas lagrimas, eran de felicidad, pero por tu cara de culpabilidad, tristeza y dolor entendí que me estabas malinterpretando totalmente, iba a rechistar, a sonreír, cosa que aun no había echo, pero tu hablaste antes. –Lo siento Sayaka… yo… por favor no llores, ¡Sonríe!… por favor…- Me suplicabas mientras te alejabas un poquito con las manos en el peño.- Yo… cambiare esto… me puedo olvidar de ti.. pero por favor no llores…-

¡No!, no quería escuchar eso… ¿Que era un juguete? con que te podías olvidar de mi, eso… eso significaba que no me querías de verdad… eso significaba que solo era algo pasajero… de verdad que me dolió, así que rápidamente me levante escondiendo mis ojos entre el flequillo para que no vieras que esta vez mis lagrimas eran de amargura, al elevarme tu también lo hiciste, me ibas a sujetar de los brazos para hacer que te mirara, pero no lo iba a permitir, con una gran tristeza y culpabilidad eleve la mano y te pegue una bofeteada en la mejilla, distes unos cuantos pasos atrás asustada, no te esperabas esa reacción según supuse, pero… ¡Como podías decir algo así!, me mordí el labio para que esas palabras no salieran de mi boca. No aguantaba mas y salí corriendo.

-Sayaka… ¡Sayaka por favor! ¡SAYAKA!- Te escuche gritar, pero no di vuelta atrás, al fin pude sollozar tranquila, no pare de correr hasta que caí exhausta en un banco apartado de todo, no llore mas… pero desde entonces no te volví a ver, aunque me moría de ganas de disculparme y darte una razón de dicho acto.

/Fin flash back/

Después de noches y charlas con Madoka, supe que lo que dijiste no era verdad, no podías olvidarme, pero no querías perder a una gran amiga y menos si era alguien tan especial… eso me hizo sentir dos sentimientos, felicidad y culpabilidad, los cuales sin se juntan solo te hacen sufrir mas…

Al fin toco la sirena dándonos luz verde para salir al patio y despejarnos, al estar consumida en mis pensamientos otra vez no te pude ver, al parecer saliste la primera acompañada de media clase cotilleándote, como hacían con todas las nuevas, nunca me había importado pero en estos momentos esa costumbre la odiaba. Al final me fui con Madoka a nuestro lugar de almuerzo, la azotea del instituto, ella quería ir a otro lugar pero insistí en ese, así tal vez te pueda ver por alguna parte desde lo alto.

…..

Vaya y yo que estoy acostumbrada a hacerlos cortos los primeros… bueno espero que me digan como estuvo… ¿Que como llegue a esta idea? Pues haber… estaba viendo un doujinshi de esta pareja, el cual me encanto, y al final de el se veía a Kyoko de uniforme y mi creatividad hizo "CLICK", ¡A escribir!, además de que quería hacer algo de ellas desde hace mucho jeje ^^, espero sus respuestas

¡Gracias por leer!