POV Bella

Tiempo

El tiempo seguía transcurriendo, los segundos, minutos, horas, días, meses; todo pasaba en un parpadeo, pronto será mi cumpleaños, pedí pasarlo con los Cullen por lo que mis socios se harán cargo de todo en mi ausencia, Jacob y Leath aun estaban en Forks pero la editorial estaba en manos muy competentes en mi ausencia.

Ha pasado dos meses desde que conocí al pequeño Benjamín, el niño que nació prematuro y el cual me hizo darme cuenta de lo que realmente quería en mi vida, el lujo, el dinero o poder quedaba en segundo plano cuando venía a mi mente el tener un bebe, llevar en mi vientre un pequeño ser pero no cualquier bebito, si no uno que llevara en su pequeño y delicado cuerpecito la sangre de Edward, yo quería ser madre pero con el amor de mi vida, con ese hombre que creció a mi lado y del cual me enamore sin darme cuenta, sin planearlo.

Mi mejor amigo convertido en el amor de mi vida, es algo cliché pero no lo pude evitar, además no es que se me pueda culpar, digo después de todo estamos hablando de Edward Cullen Platt, el más dulce, caballeroso y bueno, el hombre casi perfecto porque como todo humano comete errores como el que ambos cometimos hace unos años atrás.

-¿Por qué tan pensativa?- Unos brazos que yo conocía muy bien y unos labios que también conocía bien me abrazaron por la espalda dejando un beso en mi cuello, sonreí sin poder evitarlo.

-Solo pensando en cosas, ¿Cómo estuvo el trabajo?- Gire un poco el rostro para darle un beso rápido en los labios.

-Agotador, no veía la hora de poder regresar y estar contigo- Se sentó a mi lado en la banca del jardín de Esme donde desde hace unas dos horas me había sentado a ver el cielo.

-Yo también quería verte, fueron las 48 horas más largas de mi corta vida- hice un puchero estilo Alice Cullen.

-Lo sé, pero ahora estaré de vacaciones por un mes y medio por lo que pasare tanto tiempo juntos que te cansaras de mi-

-No creo que eso sea posible- le dije abrasándome a su cintura y poniendo mi cabeza en su pecho- más bien creo que tu eres el que se cansara de mi.

-¿Cómo podría cansarme de la mujer más hermosa del mundo?- Se acerco a mí para darme un beso en los labios, pero un carraspeo nos hizo separarnos.

-Bueno, bueno- Esme se encontraba mirándonos con una ceja alzada y una sonrisa burlona en sus labios, como la que Emmett acostumbra a dedicarme- es bueno saber que me hijo considera que otra mujer es más hermosa q su propia madre- ahora tenía un Alice, ya sé de donde lo aprendió, me guiño un ojo antes de regresar la mirada a su hijo.

-Mamá, este…. Yo…. Este- Edward se vía nervioso y un suave rubor cubría sus mejillas se veía tan tierno.

-No trates de arreglarlo jovencito, ya no hay forma-

-Mamá- Edward se veía desesperado.

-Tranquilo hijo- ahora la buena Esme Cullen se reía de la cara de asombro de su hijo y yo no dejaba de ver la interacción entre madre e hijo- se que lo dices porque estas enamorado de Bella, eso es normal el que veas a tu novia como la mujer más hermosa del mundo, además estamos hablando de Bella por lo que es completamente normal.

Ahora la sonrojada era yo. Cuando Esme regreso a la casa para preparar una merienda Edward volvió a verme con una ceja alzada.

-¿Qué?- Pregunte con mi mejor mirada de inocente.

-Eres mala ¿lo sabías?- Me dijo dándome un beso en la nariz- mi madre haciéndome sonrojar y tu solo disfrutas de la escena.

-No puedes culparme, no todo el tiempo se tiene la oportunidad de verte sonrojado.- Le respondí tratando de aguantar las ganas de volver a reír- además si mal no recuerdo cuando me lo hacían a mí, ustedes se burlaban.

-Yo nunca lo hice- me dijo con tono ofendido.

-Claro que si, o no recuerdas la fiesta de 16 años de los hermanos Jale cuando Emmett me puso sobre sus hombros y se lanzo con migo a la piscina, tu reías encantado.-

-Pero te ayude a levantarte luego-

-Si, después de que te dije que no te volvería a hablar.-

-Está bien, está bien lo siento, ¿me perdonas?- hizo el puchero marca Alice Cullen y me dio un rápido beso en los labios.

-Claro que te perdono, pero ahora dime, ¿cómo esta Shenna?- esa niña había robado mi corazón junto con el pequeño Benjamín, esos dos eran unos angelitos.

-Mucho mejor, ya en una semana se le dará el alta, y me pidió que te dijera que te estará esperando para poder despedirse, ella ama verte, aunque yo la comprendo completamente, eres adorable.-

-Edward- dije completamente roja como un tomate, a veces odiaba sonrojarme tan fácilmente y más cuando es en presencia de él.

-Es la verdad no me mires así.-

Nos quedamos conversando un poco más en el jardín hasta que Esme nos llamo para comer algo, Alice había salido con Jasper y Emmett tuvo que asistir a una reunión con Rose de no sé que, relacionado con el trabajo de ella, según se él solo iba para evitar que todos esos adolecentes sin remedio miraran más del tiempo adecuado a su Osita, palabras de él no mías.

-¿Bella como van las cosas con tus compañías?- Esme se encontraba sentada junto a nosotros en la isla de la cocina.

-Bien, Jacob siempre me pasa reportes de la editorial, Alec de la inversionista y de la constructora, ya que decidimos fusionarlas.

-¿No te asusto todo esto que te pasó de pronto?-

-La verdad es que si Esme, fue un cambio tan rápido que no sabía qué hacer, como actuar, pero lo que si sabía es que no podía dejar de lado la responsabilidad que mi abuelo me entrego, él lucho por años por esas empresas, y yo no podía dejarlas a la deriva.-

-Maduraste muy pronto Bella- Esme tomo mi mano para darle un cariñoso apretón—no me imagino lo difícil que fue para ti cambiar todos tus planes.

-A decir verdad no debí cambiar mucho, yo deseaba estudiar literatura, por lo que me encanto la idea de tener una editorial para crearla a mi gusto, claro respetando lo que mi abuelo me dio, creo que lo más difícil de todo era estudiar más de una carrera a la vez.

-Nunca te interesaron las matemáticas, el dibujo pero aun así tenias que hacerte cargo de una empresa de inversiones y de una constructora. No me imagino que haría estando en tu posición.-

-Si fue difícil Esme pero la verdad después de que me adapte al hecho de que mi poca vida social seria a hora menos existente, me gusto lo que hice.-

-Eres asombrosa- El comentario de Edward hizo que me sonrojara- y no me mires así sabes que digo la verdad.

Esme nos hizo compañía un poco más hasta que se marcho para cenar con Carlise, era una de sus salidas románticas.

Según lo que me conto Alice, desde hace mucho tiempo ellos decidieron salir juntos a cenar al menos una vez por semana, o de viaje por el fin de semana si su trabajo en ese momento se los permitía. Me parecía maravilloso que a pesar de los años de casados, ellos sigan buscando la manera de pasar tiempo juntos.

-¿Vemos una película amor?- Me senté en el sofá junto a Edward q desde hace unos minutos estaba leyendo un libro.

-¿Qué te gustaría que viéramos?- Dejo en libro en la mesita de café y se giro para mirarme.

-No lo sé, la última vez yo fui la que pensó en una, ahora es tu turno, pero te advierto que si es una de terror me enfadare contigo-

Generalmente Edward no escogía esa clase de películas cuando las veía con migo, pero Emmett si lo hacía y era mejor prevenir desde ahora antes de que pasara la noche despierta reviviendo las peores escenas que vi.

-Mmmm déjame ver, ¿Qué te parece una de comedia? Así los dos estaremos a gusto.-

-Lo dices para no tener que ver las películas románticas que Alice y yo tenemos guardadas.-

-Claro que no es por eso-

Por más que lo negara yo sabía que si era cierto, Edward no veía ninguna de esas películas cursis como en ocasiones las llamaba, pero cuando yo me empeñaba en verlas y Alice y Rose me apoyaban no le quedaba de otra, pero lo dejare pasar por hoy.

Me dirigí a la cocina para preparar las palomitas y los refrescos mientras Edward buscaba la película que variamos. En la puerta del refrigerador Esme tenía una fotografía de la fiesta de cumpleaños número 17 de los mellizos Cullen, en ella nos veíamos Edward y yo riendo mientras Alice nos saca la lengua y su cara está cubierta de pastel, recuerdo ese día, fue muy especial.

Flashback

-Bueno es hora de cantar feliz cumpleaños, vengan todos- La voz de Esme se escucho desde el jardín donde el enorme (y no exagero eran unas siete capas) pastel de cumpleaños de los mellizos Cullen nos esperaba junto a la piscina.

Alice había escogido un pastel color rosa, pero tomando en cuenta que también era el cumpleaños de Edward, lo dejo en uno de color blanco con diseños en negro, pero eso si exigió que el tamaño fuera este que tenemos aquí.

Yo me encontraba sentada en las escaleras junto a Rosalie quien me consolaba por el hecho de que acababa de ver a Lauren Mallory abrazada al brazo de Edward, Rose me aseguro que él no estaba cómodo con eso, pero yo estaba muy molesta aún cuando podía ver en el rostro de mi mejor amigo que lo que decía ella era verdad, pero aún así mi enfado no disminuía.

-Vamos Bella, sabes de sobra que Edward no soporta a ninguna de esas niñas huecas que siempre lo siguen, además escuche que ella está casi saliendo con Tyler (el casi era lo que me preocupaba) así que solo lo debe de estar felicitando o aprovechando el momento.

-Es que ella siempre es tan afectiva por decirlo poco, desde que entramos a secundaria ella y muchas otras chicas siempre lo están persiguiendo, al principio no era así solo se limitaban a mirarlo de lejos, pero después de un mes las cosas empeoraron.-

-Sí recuerdo eso, y la razón por la cual no se le acercaban al inicio de las clases era tu- al ver mi cara de confusión ella continuo –y no me mires así, esa es la verdad, yo ya estaba en segundo de secundaria y tenia algunos contactos por lo que la información me llegaba al momento. La mayoría de las personas que los conocían a los veían en los pasillos creían que ustedes dos eran pareja, es decir no era extraño que pensaran eso, siempre estaban juntos, comían juntos, se sentaban uno al lado del otro en la clase que compartieran y cuando no era así él te iba a buscar al salón donde estabas.

''Bella ustedes eran como la pareja perfecta, pero como al mes de iniciar las clases no mostraban ningún otro comportamiento afectuoso más que Edward te tomara la mano, te abrazara te besara en la mejilla o en la frente o pasara su brazo por tus hombros mientras caminaban por los pasillos, las chicas comenzaron a averiguar y comprobaron que no eran novios y fue cuando todo cambio en ellas''.

-Así que fue por eso, la verdad nunca note ese comportamiento, para mí era tan común que Edward tuviera esas muestras de cariño con migo que nunca imagine que las personas lo vieran de otra forma, pero la verdad Rose es que me enferma que ella siempre estén sobre él, y como Edward es tan caballeroso nunca les dice nada solo trata de alejarse sin que se note tanto. ¿Sabías que cuando Edward ingreso al equipo de futbol Lauren se ofreció a ser su animadora personal o su chica con espíritu? eso es tan frustrante.-

-Bella lo que pasa es que estas celosa, eso es todo-

-No digas tonterías Rose- sentía como me comenzaba a poner roja.

-Lo que tú digas Bella.-

-Chicas vamos están por cantar cumpleaños- Carlise se nos acerco y nos acompaño al jardín donde ya todos estaban reunidos, Alice se encontraba frente al enorme pastel con Jasper a su izquierda y Edward a su derecha, por suerte Lauren no estaba con ellos porque este era un momento de familia.

-Yo quería estar junto a Eddie para cuando pida su deseo- Lauren tenía una cara de tristeza fingida que me provocaba risa.

-Es un momento que solo le pertenece a la familia, nadie más que la familia cercana debería estar a su lado.- Dijo Rose con voz aburrida.

-Muy bien – Esme se hizo oír al terminar de encender la candela con el número 17 en ella, es hora de cantarles feliz cumpleaños a mis bebés.

-Mamáaa- Edward y Alice protestaron al mismo tiempo.-

-Vamos déjenme disfrutar de mis niños.-

Cuando comenzaron a cantar la típica canción de las fiestas Edward levanto la mirada y se fijo en mí, una sonrisa comenzó a asomar en mis labios para igualar a la que se había formado en los de él. Le dijo algo a su madre en el oído y luego camino hasta donde yo me encontraba, me tomo de la mano y me llevo a donde estaba anterior mente, la cara de cólera de Lauren era única, Rose y Alice me guiñaron el ojo y yo me puse mas roja que nunca.

-Edward no es correcto que yo esté aquí al frente con ustedes, es un momento de familia-

-Vamos Bells tú también eres parte de la familia, es lógico que estés con nosotros, además Jasper también está con nosotros.-

-Pero Jasper es el novio de Alice y yo solo…-

-Tú eres mi mejor amiga y quiero que estos a mi lado.-

Vi como los ojos de Edward brillaban mientras me lo decía y como su brazo abrazo mi cintura mientras todos entonaban al mismo tiempo, cuando apago la vela junto con su hermana me sonrió y beso mi frente. De un momento a otro Alice tenía la cara en una de las capas del enorme pastel y una de las grandes manos de Emmett estaba en la parte de atrás de su cabeza.

Alice se veía furiosa, Emmett se reía ruidosamente y Jasper trataba de limpiar el rostro de su pequeña novia. Por más que lo resistí no pude aguantar más las ganas de reír y Edward me siguió, Alice voltio a vernos y nos saco la lengua, fue cuando un Flash nos ilumino y Esme sostenía una cámara entre sus manos.

Fin Flashback

Esa fotografía era una de mis favoritas, y eso que eran muchas las que guardaban nuestros buenos momentos, pero esa foto muestra a una Bella más sonriente y con un brillo especial en los ojos mientras ve a su mejor amigo y ahora todo tiene más sentido.

Cuando termine de preparar las palomitas y los refrescos me dirigí a la sala donde Edward ya me esperaba con la película a punto de iniciar, había cerrado las cortinas de los grandes ventanales colocado unos cojines en el suelo para poder estar más cómodos.

Cuando noto mi presencia se levanto del suelo para ayudarme con la bandeja. Al tener todo listo y estar instalados sobre la alfombra, dio inicio a la película. Estábamos mirando Son como niños dos, no es que sea la primera vez que la miramos, pero como nos gusto a ambos casi siempre es nuestra elección.

-¿Cuánto crees que tarden tus padres en regresar?- Le pregunte mientras recargaba la cabeza en su regazo.

-No estoy seguro, puede que sea hasta pasadas las ocho de la noche, si no es que regresan mañana, pero si te puedo asegurar que Emmett y Alice no regresan hoy, ya los conozco.-

-Bueno es que estaba pensando en pedir una pizza para cenar, ya que es probable que ninguno de ellos regrese no veo razón alguna para tener que preparar una gran cena.-

-Eso me parece bien amor- se inclino un poco para poder darme un casto beso en los labios.

Seguimos viendo la película, mientras nos dábamos a comer palomitas el uno al otro. Cuando esta termino, Edward me ayudo a ordenar la sala y recoger lo que usamos para luego ir a pedir una pizza, como siempre desde que tengo memoria no me pregunto como la quería porque él conocía siempre la respuesta. Estaba limpiando la cocina cuando mi teléfono móvil sonó sobre la encimera.

-¿Hola?- Dije sin reconocer el numero en mi identificador de llamadas.

-¿Bella?, Soy Jane ¿Cómo estás?-

-Jane que sorpresa, ¿estoy muy bien y tú?-

-Bien gracias, mira Bella te llamaba porque ocupamos tu autorización para realizar unos trámites, se que estas tomándote unas vacaciones y que por eso nos dejaste a nosotros a cargo, pero es un negocio importante y tanto Alec como yo consideramos que es mejor que te contactáramos.-

-No te preocupes Jane, pero dime ¿de qué se trata ese negocio tan importante?-

-Mira, nos contacto un empresario de Australia, quiere que la constructora se encargue de crear un centro de artes para personas de bajos recursos, y ya como fusionaste la constructora y la inversionista, quiere que nosotros también nos encarguemos de los fondos destinados a la misma con unas inversiones del extranjero.-

-No veo cual es el problema Jane, si es un gran negocio-

-Sí, lo es Bella, la cosa es que primero tenía el contrato la empresa rival de las compañías Drywer y sabemos que si aceptamos sería crear más problemas entre ambas empresas.-
-Comprendo ahora tu preocupación, pero no te preocupes no será la primera vez que esto pase, hagan los trámites necesarios para que se de ese proyecto, es una gran oportunidad para las personas de bajos recursos.-

-Como tú lo desees jefa ¿ahora dime que tal las cosas con Edward?-

-Todo muy Jane, planeamos salir de viaje por unos días solo nosotros dos, bueno él está planeando todos los detalles y dice que será una sorpresa.-

-Eso es grandioso Bella, será tan romántico que viajen solo ustedes dos solos.-

-Si lo sé, por eso es que él se tomo unas vacaciones en el hospital para poder viajar lo más pronto posible.-

-Siempre tan considerado, por eso cuando nos conocimos y me contaste de tu mejor amigo, supe que él me caería muy bien.-

-¿Por qué lo dices?-

-Porque se nota que es una persona que de verdad te aprecia y que se preocupa por ti, alegra tanto que estén juntos porque hacen una pareja hermosa.-

-Muchas gracias Jane, sabes que eres una de mis mejores amigas y que aprecio todo lo que me dices de verdad.-
-No debes de agradecer nada amiga, y bueno te dejo para que sigas disfrutando de tu hermoso novio.-

-Adiós Jane.-

-La pizza está por llegar- unos brazos conocidos me abrazaron por la espalda y me pegaron a su pecho- ¿con quién hablabas si se puede saber?

-Con Jane, me comentaba de un nuevo proyecto en Australia, ella y Alec querían mi aprobación, pero a partir de ahora las demás decisiones las tomaran ellos dos en conjunto con las personas correspondientes-

-Nunca creí verte así- Me gire entre sus brazos para poder verlo a los ojos.

-¿Así como?

- Como una mujer de negocios, siempre estabas detrás de un libro, y nunca te intereso el mundo empresarial.-

-Lo sé mi amor, pero el tiempo pasa y las personas cambian.-

-Lo sé Bells, el tiempo no espera y las cosas nunca regresan, debemos vivir la vida día a día porque nada es para siempre y las oportunidades nunca vuelven. Por eso es que te propuse la idea del viaje, quiero descansar y quiero hacerlo contigo, quiero que pasemos el día juntos sin interrupciones para así demostrarte cuanto te amo.-

-Yo también te amo Edward, te amado desde que tengo conciencia, solo que era una niña que no aceptaba la verdad, y tu idea de escaparnos me encanta, quiero estar contigo día y noche sin nadie a nuestro alrededor.-

-Te Amo pequeña-

Nuestros rostros se acercaron hasta que nos unimos en un beso donde nos demostrábamos todo el amor que nos teníamos el uno al otro, éramos solo unos niño cuando nos separamos, ahora éramos dos adultos que se amaban con toda el alma, y ni el tiempo ni la distancia nos pueden separar.