¡Ya vine, estúpidas! Hahaha, okey, no. ¡Lo siento D:! ¡Espero que no me odien! Ya volví que es lo importante, saben que nunca los abandonaría.

Bueno, como habrán notado, ya el fic cumplió los cuatro años xD y yo me odio cada que pasa un año y sigo sin terminarlo… Pero bueno, a paso seguro.

Disclaimer: Ranma ½ es propiedad de Rumiko Takahashi.


22. Palabras sin acciones.

Entonces… ¿Te irás el viernes por la noche? –Preguntó ella con un deje de tristeza.

Ryoga la miró, guardando silencio. Eso causó un poco de incomodidad en la caminata que llevaban.

Tranquila, Ranko –La abrazó por los hombros –Volveré pronto. Hay muchas cosas que debo resolver y lo sabes.

¿En serio piensas mudarte solo?

Bueno, creo que ya es hora de independizarme. Cuando nazca el bebé, necesitarán más espacio –Explicó –Igual que yo necesitaré algo de privacidad ahora.

La pelirroja se sonrojó notablemente ante la mirada picara que acompañó esas palabras –Pues… supongo.

Él se acercó para darle un beso, pero algo llamó la atención de su novia y la hizo voltear –¿Qué pasa?

Ella lo ignoró y llamó al muchacho que caminaba, distraído, cerca de ellos –¿Ryuu, eres tú?

El chico, que soñaba despierto, reaccionó al reconocer su voz –Oh, Ranko. Que sorpresa.

Es inusual verte fuera de la universidad –Le dijo –Y más por estos lares, ¿Qué no vivías al otro lado?

Estaba… resolviendo un asunto –Dijo con cierto nerviosismo.

Entiendo –Le dirigió la mirada a Ryoga con una sonrisa –Cariño, Ryuu es un amigo de la universidad.

Hola –Saludó.

Ahora, miró al otro chico –Ryuu, Ryoga es mi novio.

¿Novio? –Se sorprendió –No sabía que tenías novio.

Empezamos hace poco –Respondió, abrazándose al brazo del muchacho.

Vaya, felicidades –Le sonrió a Ryoga –Ranko es una gran chica.

Los ojos del muchacho se iluminaron mientras observaba a su novia –Lo sé.

Bueno, no quiero hacer mal tercio –Bromeó –Regresaré a la universidad que tengo clases en una hora, ¡nos vemos, Ranko!

Cuídate, Ryuu –Se despidió ella. Cuando estuvieron solos de nuevo, le dijo a su novio –Que raro, él no es tan… misterioso.

Bueno, cada persona oculta lo suyo –La abrazo y siguieron su camino –¿Vamos por algo de comer?


En Furinkan había llegado la hora del almuerzo, por lo que los alumnos se reunían con sus amigos para compartir la comida y pasar el rato luego de las primeras estresantes horas de clases.

Akane le dio otro bocado a su verdura picada, despreocupada, mientras sus amigos comían y la miraban de reojo, pues les asustaba el aura de odio tras ella.

Ranma estaba sentado dos mesas más atrás que ella y sus amigos, y no le quitaba el ojo de encima.

Akane, querida –Kuno afinco el codo en la mesa y posó la barbilla en su muñeca –¿Nos cuentas que sucedió ahora?

¿Qué sucedió de qué? –Preguntó, masticando una salchicha en forma de pulpo.

¿No se suponía que Ranma y tú habían hecho las paces? –Ukyo le clavó la mirada al chico de trenza –¿Por qué te mira de esa forma?

Ella rodó los ojos –Y yo que sé.

Por cierto –El castaño puso expresión picara –¿Quién era ese muchacho tan apuesto que vino a buscarte?

Es solo un muchacho que nos atendió ayer cuando fuimos a la Universidad Experimental de Nerima –Respondió –Me trajo algo que olvidé por accidente.

¿Y las clases de artes marciales qué? –Mousse, sentado a su lado, lanzó esa pregunta mientras se llevaba el arroz a la boca.

¿Te dará clases de artes marciales? –La cocinera pestañeó repetidamente.

¡Vayaaaa! –Kuno acunó sus propias mejillas –¿Tendrán actividad física tan pronto?

¿Por qué son tan mal pensados? –Akane frunció el ceño –Se ofreció a ayudarme a retomar las artes marciales pues el también las practica, ¿Qué hay de malo en eso?

Pues –Shinnosuke, sentado silenciosamente entre Kuno y Ukyo, habló –Es demasiada amabilidad de parte de un sujeto que apenas conociste ayer.

Con razón Ranma está tan enojado –Murmuró Tatewaki.

Mira que librarse de Ryoga pero sacar competencia de otro lado –Bromeó la castaña.

Ranma aún es novio de Shampoo, chicos –La vena en su frente creció.

Eso no va a impedirle que se enoje –Comentó Mousse.

Somos simplemente amigos –Alegó la chica –Y mientras sea novio de Shampoo, no puede quejarse. Ademas, se equivocan con respecto a Ryuu. Él sólo es amable.

Una gota corrió por las sienes de sus cuatro acompañantes. Akane era muy inocente.

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Amor, ¿estar bien? –Preguntó Shampoo a su novio.

El rostro de Ranma irradiaba rabia absoluta, y no pasaba desapercibido para nadie.

Asami giró el rostro para observar lo que Ranma veía –Oigan, ¿entonces Mousse y Akane no son novios? –Cuestionó al notar que eran ellos a quienes miraba.

No, ellos tener una linda amistad –Respondió la china con una amplia sonrisa –¿Verdad, Ranma?

Él apretó las cejas –Claro.

¿Y quién es el novio de ella entonces? –Preguntó Yuka.

Oh, contarme que ella y su novio romper el fin de semana –Su sonrisa se curvó hacia abajo –Ser muy triste, ¿verdad, Ranma?

El chico tronó los dientes –Sí.

Bueno –Kodachi mordió un trozo de salmón –Ese chico que vino a buscarla hoy es muy atractivo.

¿El que dijo que venía de la universidad? –Hiroko juntó las manos con ilusión –¡Es tan guapo!

Ranma apretó los puños al oír la mención de aquel chico que le había traído a Akane su pañuelo.

Deberíamos considerar ir a esa universidad también –Bromeó Yuka –Sí todos los chicos son así de guapos.

Hiroko y Asami rieron ante el comentario, mientras Sayuri observaba detenidamente cada movimiento de Shampoo, sabía que no tramaba nada bueno.

Akane –Shampoo hizo una pausa antes de terminar la oración –Parecer muy popular entre los chicos, ¿verdad, Ranma?

Su respiración se volvió mas pesada ante el "inocente" comentario de su novia –Ajá.

¿Tendo? –Kodachi torció los ojos –Por favor.

Ranma seguía sin quitarle los ojos de encima a Akane. No podía sacarse de la cabeza la escenita de hace un rato con el chico universitario, además, aunque ya sabía que Mousse era inocente, le incomodaba enormemente que anduvieran juntos.

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La campana sonó, anunciando el final de las clases, por lo que los alumnos evacuaban la escuela apresurados.

¡Akane! –Ranma la detuvo en la entrada al sujetarla de la mano –Espera.

¿Qué ocurre? –Lo miró algo aburrida.

Tenemos que hablar.

¿Otra vez? –Puso los brazos en jarra –¿Qué no hablamos suficiente ya?

La gente no deja de hablar de tu amiguito que vino a buscarte hoy –Reclamó.

Abrió los ojos con sorpresa –¿Qué gente?

La gente con ojos –Respondió tosco –¿Sales de tu noviazgo con Ryoga y Mousse para involucrarte con otro?

Oye, oye –Frunció el ceño –Lo de Mousse fue invento tuyo. Además, Ryuu es solo un chico que conocí ayer.

Pues no parece.

¿Y tú con qué derecho me reclamas? ¿No se supone que tienes algo que hacer?

Eso no…

¡Ranma! –La voz de Shampoo interrumpió –¡Estar haciendo tarde! –Sujetó a su novio del brazo.

El aura de Akane comenzó a aparecer –¿Tarde para qué?

¡Ranma invitarme al parque de diversiones! –Contestó con una hermosa sonrisa –¿No ser lindo?

El muchacho tragó en seco al sentir el aire denso proveniente de Akane. Al parecer, ella estaba malinterpretando su "brillante" plan de ruptura con Shampoo.

Según Ranma, si vas a terminar con alguien debe ser en un lugar bonito como el parque o el cine para apaciguar el dolor de la otra persona.

¡Con que tienen una cita! –Exclamó la de cabello azul, con un tic en el ojo.

¡Sí! –La china se abrazó más al chico.

Él comenzó a sudar –No lo entiendes.

Quien no entiende eres tú –Dijo Akane seriamente –Espero que se diviertan –Se dio la vuelta y se marchó.

¡Adiós, Akane! –Se despidió la muchacha mientras agitaba la mano.

Ranma no dijo nada, tenía que esperar a que su plan pudiese concretarse para demostrarle a Akane que no mentía.


Qué idiota es Ranma –Gruñó Akane entre dientes mientras ingresaba el local de su mejor amiga.

El ángel Kasumi y la diablilla Nabiki intercambiaron miradas. No estaban escuchando nada nuevo.

Akane, pensé que ya no vendrías –Dijo Ukyo mientras barría el suelo.

Hoy le había prometido a la castaña que le ayudaría en el restaurante al salir de clases, pero Ukyo se adelantó mientras ella iba al baño y después se topaba con Ranma.

Lo siento.

¿Ocurrió algo? –Preguntó al notar la expresión en su cara.

Lo de siempre –Respondió, poniéndose un delantal.

Claro, Ranma –Torció los ojos –Debí suponerlo.

Ya no importa, Ukyo.

Bueno, ¿Puedes ayudar a Shinnosuke a lavar los platos?

Claro –Arrastró los pies hasta la puerta que separaba la parte de la parrilla con el lugar donde estaban los utensilios y demás.

Llegaste, Tendo –Saludó el muchacho, mientras frotaba con jabón un vaso de vidrio.

–Musitó distraída.

¿Te sucede algo? –Cuestionó al igual que su novia.

Lo de siempre –Respondió sin percatarse que hablaba con alguien que (según ella) no sabía del asunto.

¿Saotome, no?

Pues sí –Cuando finalmente se dio cuenta, dio un respingo –¡Espera! ¿Por qué piensas que Ranma tiene algo que ver?

Él siguió con su labor tranquilamente –He notado que últimamente te ha estado molestando bastante.

Es verdad que ahora pasas más tiempo con nosotros –Lo miró fijo –No me lo tomes a mal, pero sigue siendo un poco sorpresivo para mí que tú y Ukyo estén saliendo.

Se rió –¿Por qué?

Es que, estuvimos en el mismo salón durante cinco años y nunca se notaron el uno al otro.

Bueno, algo así les pasó a ti y a Mousse –Explicó –No se volvieron amigos hasta ahora.

Cierto –Se llevó un dedo a la barbilla –Pero son otras circunstancias.

Pues –Le puso una mano en el hombro –Las cosas ocurren en el momento preciso, ¿no te parece?

Una gota corrió por su sien –Para mí es todo lo contrario.

Akane, quiero pedirte un favor.

¿De qué se trata?

Veras, sé que Mousse te aprecia mucho, y por ello quiero que le ayudes.

Pestañeó, confundida –No entiendo.

Mousse es bueno fingiendo, por ello nadie nota lo mucho que le duele lo que Shampoo está haciendo.

Bueno, imagino que es así.

No tienes ni idea –Cruzó los brazos –No ha dejado de arrepentirse ni un solo momento de lo que dijo aquel día, pero ya estaba aguantando demasiado. Estar con Shampoo nunca ha sido fácil.

Ahora que lo recuerdo… esa discusión fue bastante fuerte –Akane hizo memoria de la ruptura entre ambos chinos allí mismo en el U'chans.

Sinceramente, no entiendo como Ranma ha logrado estar con ella hasta ahora. Créelo, solo Mousse sabe cómo es en realidad.

Pobrecito –Se encogió de hombros –Supongo que en realidad la ama.

Intenta ayudarle de alguna forma. Ustedes se han vuelto cercanos y sé que la intuición de una chica no falla –Sonrío amablemente –Por favor, Akane.

Le devolvió la sonrisa –No te preocupes. Se la debo, de todas formas.


Parece ser un día de semana, el parque de diversiones estaba bastante lleno, especialmente de parejas y niños.

¡Vamos, Ranma! –Gritaba Shampoo mientras lo jalaba del brazo.

¡Cuidado! –Advirtió, llevando dos algodones de azúcar en cada mano.

Ambos se sentaron en una banca y el chico le dio el dulce a su novia. Ya se habían subido a tres atracciones distintas y ahora necesitaban descansar un poco.

Oh, Ranma –Le dio un beso en la mejilla al chico –Ésta cita hacerme muy feliz.

Él mordió el algodón, nervioso, pues sabía que ese era el momento en el cual debía decirle a Shampoo que su relación no podía continuar.

Emm, linda –Las palmas le empezaron a sudar –¿Hace cuanto estamos juntos?

Ella alzó la mirada con una sonrisa, pensando por un momento, luego lo miró de regreso –Dos meses y medio.

¿Qué? ¿De verdad? –Se sorprendió notablemente, pues nunca se percató de que había pasado tanto tiempo.

Sí, ¿Rápido, cierto?

No lo había notado.

Una sonrisa picara se pintó en sus labios. Sigilosamente, se acercó al odio de su novio y le lamió el lóbulo –Mucho tiempo para no haberlo hecho nada todavía.

Los colores se le subieron al rostro y el algodón de azúcar cayó al suelo –Es… espera.

Ranma –La fina mano femenina acariciaba provocativamente la rodilla del joven –¿Tú amarme, cierto?

Ahora sí, sentía que el mundo se le venía encima. Ese era el mejor momento para decirle "no, no te amo y lo mejor es que terminemos", pero ese sería demasiado cruel. Además, le costaba articular palabra en ese momento.

Digo, haber otras mujeres importantes en tu vida –Ella no paró con la caricia.

¿Có… cómo cuales?

Pues, tu madre –Su mano subió más por la pierna –Tu prima –Se detuvo –Incuso Akane.

¡Akane! –Chilló asustado ante el leve apretón que ella dio en su muslo.

Claro, Akane ser tu mejor amiga –Sonrió falsamente –Nada ser más importante que amigos.

Emm… eso dicen.

Amigos… que ocultan tus secretos, o hasta los comparten.

¿Secretos? –La presión se le disparó por los cielos.

¿Akane y tu tener algún secreto, amor mío? –Cuestionó peligrosamente cerca de sus labios.

Ranma sentía que estaba frente al mismísimo demonio, algo en ella le daba pánico total. Lo único que se ocurrió para cortar la tensión, fue lanzarse a su boca y besarla apasionadamente.

Un grupo de bailarines pasaba por allí despreocupadamente al terminar su ensayo. El parque de diversiones tenía una tarima donde presentaban espectáculos diferentes cada mes, y ellos tendrían el suyo ese fin de semana.

Bueno, parece que estamos listos –Dijo un muchacho delgado.

¡Sí! –Exclamó feliz una chica de baja estatura –¡Todos quedaran asombrados!

Ya quiero que llegue el día –Dijo otra chica.

¿Qué les parece si vamos por una pizza? –Preguntó el primer chico –¿Estás de acuerdo, Mikado?

El mencionado sonrió, encantado –Es una excelente idea.

¡Vamos! –Corearon las chicas mientras apresuraban el paso.

Sanzenin se detuvo al observar a la pareja, algo le resultaba familiar en ellos. Finalmente, los reconoció eran el idiota del que Akane estaba enamorada y su novia loca que quiso atacarla.

Con que iba a dejarla –Frunció el ceño –Pobrecita Akane, no se merece eso.

Ranma, que tenía los ojos cerrados hasta entonces, los abrió al sentir una pesada mirada sobre ellos. Sin cortar el beso, hizo contacto visual con el muchacho, al que tardo unos segundos en reconocer.

¡No puede ser! ¡Es el novio de Kuno!

El bailarín estaba dispuesto a irse, pero en un abrir y cerrar de ojos, el chico de trenza lo tenía sujetado firmemente por la muñeca –¡Oye!

¡Espera! ¿Tú eres el novio de Kuno, cierto? Escucha, no es lo que crees.

Discúlpame, pero no es a mí a quien debes darle explicaciones.

Yo no mentí, de verdad voy a dejar a mi novia.

Una gota corrió por su sien –Pues esa no es la manera.

Las cosas se me complicaron un poco –Juntó las manos en suplica –Por favor, no les digas nada ni a Kuno ni a Akane.

Escucha, muchachito, les he tomado mucho cariño a las amigas de Tatewaki, y créeme que por nada del mundo me gustaría verlas sufriendo por idiotas como tú –Encaró.

Tienes razón, pero por favor, no voy a fallarle a Akane.

Sanzenin lo pensó detenidamente y luego accedió aunque le pesara –No le diré nada, pero solo porque no quiero que la linda Akane siga sufriendo más.

¡Te lo agradezco mucho!

Pero te advierto una cosa: Si las cosas continúan así y no haces lo que dices, hablaré con ella y te aseguro que no te perdonará nunca –Le amenazó severo.

El pelinegro se tensó –Bi… bi… bien.

Sin decir más, Mikado se fue con su grupo y dejó al muchacho sintiéndose peor que nunca.


Luego de aquel ajetreado día, Akane se dio un largo baño caliente al llegar a casa. Todavía estaba enojada por el asunto de la cita entre Ranma y Shampoo… Siempre queriendo verle la cara de estúpida.

En serio, a veces pareciera que olvidas como es él –Bufó la diablilla.

La chica, ya en pijama, se arrojó sobre la cama y clavó la mirada en el techo –No debería creer en él hasta que haga lo que dice –Meditó.

Él te pidió ser amigos, Akane, deberías actuar como tal para que no piense que te tiene a su voluntad –Aconsejó el ángel.

Se quedó en silencio, sin despegar los ojos de la lámpara del techo. Esa no era una mala idea, pero controlar sus celos podía ser bastante costoso.

Su celular sonó, indicándole que tenía un nuevo mensaje de texto. Ella extendió el brazo y lo tomó de la mesa de noche, al ver de quien era el mensaje, se sorprendió.

Mensaje de Ryuu: "¡Hola, Akane! Espero que hayas tenido un buen día luego de vernos hoy. Sólo quería desearte buenas noches y dulces sueños. Descansa".

¿Eh? –Levantó la ceja, incrédula.

Vaya, vaya –Nabiki sonrió maliciosamente –Mira que tenemos aquí.

Kasumi suspiró –Qué detallista es el joven Ryuu.

La chica Tendo releyó el mensaje más de diez veces sin saber si debía responder o pasarlo por alto.

Akane y Ranma habían comprendido una cosa ese día: Prometer no valía de nada si no se cumplía, pero a veces, ciertas palabras podían dejarte sin saber que hacer.


Ustedes se preguntaran que por qué hago parecer a Ranma un retrasado mental que no se comporta y hace las cosas, bueno, así es en la serie, le da mil vueltas a todo antes de poder solucionarlo. Pero descuiden, tarde o temprano lo hará.

Como ven, Shampoo se las trae xD hasta que no descubra lo que ocurre, no estará quieta.

Y Ryuu, bueno… No hay que explicar su papel.

Respondiendo Reviews:

Sav21: Holaaaa, de verdad me disculpo u.u pero pues sí, Akane tiene el derecho de estar con otros, pero el corazón quiere lo que quiere xD

BUBU30: ¡Holis! Ay, créeme que yo mas que nadie quisiera decir que las cosas están "mejorando" en mi país, pero todo va de mal en peor /: dejando eso de lado, Akane tuvo que aprender a no sufrir tanto por Ranma para que al final sea él quien sufre por ella xD

NaosanRyA: Que bueno saber que mi historia es de tus favoritas n.n Con respecto a Mousse, creo que es el mejor personaje masculino de toda la historia, aunque su amor lo vuelva débil por dentro.

Lunabsc: Hahaha, creo que Ranma ya aprendió que no debe atacar a los demás chicos y menos por celos xD

Yuchyram: Ryuu tiene lo suyo, seraa bastante interesante ver su participación xD

Mar Snchez: ¡Holi! Volví a revivir xD Pues muchas gracias por pensar asi, ese es mi objetivo :D

Xandryx: De verdad, siento la tardanza. Ojala disfrutes este cap también. Saludos.

AbiTaisho: ¡Hola! Claro, siempre intento mantenerme fiel a las personalidades del maga, pero (y siempre lo digo) al ser un UA las cosas cambian un poco xD y eso lo hace divertido. Mil gracias por leer y espero sigas haciéndolo. ¡Besos! :D

Un fan mas: Perdón de verdad xD aquí estoy de nuevo.

Bueno, mis queridos lectores, estaré esperando sus Reviews (pero no me regañen) y nos leemos en la próxima.

¡Saludos a todos y feliz fin de mes!

Peace out! (: #PrayForVenezuela.