Título: Dreaming Of Another World.

Categorías: Drama/FriendShip/Romance

Advertencias: ¿Un Creek muy extraño?

Capítulos: 1/ (¿?)

Todos los personajes de la Serie South Park le pertenecen a Trey Parker/Matt Stone.

®ShinigamiJazzDark89 ®Gabi17


Prólogo

Dreaming Of Another World
'…Someone knows all better than you. Don't go through the door…'

La familia Tweak se dirigía hacia un lúgubre y pequeño departamento llamado 'El Palacio Rosa'
En el asiento trasero del pequeño Chevy Chevrolet, color gris -un gris bastante aburrido- se encontraba el pequeño Tweek de doce años. El pequeño rubio no estaba encantando con la idea de mudarse, el era feliz en su antigua ciudad de Michigan ¿por qué sus padres de repente se les ocurría vivir en un lugar bastante alejado de una sociedad? Simplemente no comprendía a sus padres. Los adultos son muy difíciles de comprender, siempre con sus cambios de humor ¿Quién los entiende? Tweek en todo el trayecto había tenido una mueca de disgusto total. Su madre no ignoro aquella actitud infantil de parte de su único hijo. Le había dicho claramente que este era un cambio que podría ser una mejora para el bien de su familia pero, Tweek no tenía ningún interés en entender esa 'beneficencia' él sólo quería que su padre retornara y se dirigiese nuevamente a su ciudad de antes.

Todo esto era una gran tontería. Sus padres bien sabían que su hijo no era muy social, el pobre apenas con algo de suerte tuvo dos amigos en su antiguo hogar.

Ya estaban muy cerca de aquel "Palacio Rosa" que próximamente sería el nuevo hogar de los Tweak. Detrás de ellos venía el camión de mudanza con todas sus pertenencias. El aburrimiento consumía al hijo de los Tweak. Hastiado de esa penosa situación decidió tener una breve conversación con sus padres.

—Todavía no ¡GAH! entiendo porque tuvimos que mudarnos.

—Tweek —contestó su madre—, ya te he dicho el porqué tu padre y yo decidimos mudarnos a este lugar.

—El simple hecho de que este tonto y aburrido lugar no haya tenido una cafetería en años no significa que ustedes hayan decidido alejarme de mis amigos.

—Sólo guarda silencio, jovencito —sentencio su padre que fruncía el ceño mientras estacionaba el auto a un lado de aquella gigante 'mansión' pintada con un color rosa bastante oxidado.

Tweek observó con sus orbes verdes aquél espantoso lugar ¿cómo era que alguien pudiese vivir en ESO? Su ojos se fijaron en hombre que ¿trepaba como un mono? en las viejas escaleras que en cualquier momento se romperían por toda la oxidación que habían ganado con el pasar de los años ¿desde cuándo alguien había visitado ese 'palacio' para mínimo arreglarlo un poco?

—Baja del auto y ayuda un poco a los señores a llevar las cajas adentro.

—Me habían dicho que me venderían como un esclavo pero, no pensaba que lo decían en serio.

—No discutas, Tweek. Sólo obedece a tu padre.

Con desgana, Tweek se bajó del automóvil y se acercó hacia los hombres que comenzaban a bajar todas las pertenencias de él y sus padres. Lo mejor sería preguntar si pudiese ayudar -después de todo hay que tener modales en esta vida-

— ¿Puedo ayudarles?

Los dos hombres se le quedan mirando como si de un bicho raro se tratase. Bueno, Tweek ya era tachado como un fenómeno ante la sociedad. Aquél cabello rubio sin peinar, esa camisa verde vieja y mal abotonado y esos jeans negros que ya no daban para más, cualquier persona cuerda pensaría que se había escapado de un manicomio.

—Sólo apártate y no molestes, niño —habla el hombre de anteojos. El otro hombre comienza a carcajearse por la cara de tonto que había puesto el rubio. Tweek se molesta y prefiere inspeccionar su nuevo hogar. Lo mejor sería no pedirles permiso a sus padres o estos se negarían y comenzarían a molestarlo con órdenes y demás.

Comenzó a caminar hacia dónde se encontraba el bosque y una vez estando en la entrada, dirigió su vista hacia atrás en dónde se podía ver aquél nuevo hogar, los hombres de la mudanza y sus padres adentrándose al "Palacio Rosa"

Su vida era tan aburrida…

Se adentró cada vez más al bosque, pateaba una pequeña piedra en su trayecto. ¿Qué haría en los próximos días? sus padres seguramente se irían al pequeño pueblo y atenderían el pequeño local que habían rentando para la cafetería.

¡Cierto! En todo el día no había bebido ni una sola gota de café ¡cuánta falta le hacía! Suspiro y se abrazó a su mismo ¿por qué de repente comenzó hacer algo de frío? El cielo estaba cubierto por una capa de nubes oscuras, seguramente pronto comenzaría a llover.

Se detuvo cuando llegó hasta una colina. Desde ahí se podían ver todos los pinos que rodeaban su nuevo hogar, todo estaba tan gris que daba pena y tristeza con sólo contemplar aquél paisaje. Se sentó en el frío suelo. No quería todavía volver a casa ¿qué le esperaba ahí? Sólo más aburrimiento y soledad…

—Como los extraño, chicos… ojala el verano llegue pronto y podamos reunirnos nuevamente Pip y Damien.

Un silencio invadió el lugar… pero, el silencio fue interrumpido cuando escuchó el maullido de un gato. Volteó su cabeza y observa cómo está parado a pocos centímetros de el, un chico de cabellos oscuros junto con un gato negro estaba en los brazos de aquél chico.

—Mi abuela no suele hospedar a familias con niños.

— ¿Tu abuela?

—La dueña del Palacio Rosa.

— ¿Y tu quien eres, niño?

—Mi nombre es Craig Tucker. ¿Y tú eres…?

—Tweek Tweak.

—Tweek… ¿sabes que estás sentando ahora mismo sobre un pozo?

— ¡GAH!

Totalmente presa del pánico, Tweek se levanta rápidamente de aquél lugar. Craig simplemente suelta un suspiro, se aproxima hasta dónde está el pozo y con su pie quita algo de tierra que cubría aquel agujero con un pedazo de madera para que el rubio se diese cuenta en dónde pudo haber caído si seguía un minuto más sentando sobre aquella vieja madera.

—Se dice que es tan profundo que si caes puedes llegar a ver un cielo estrellado en pleno día.

— ¡GAH! pero que tonterías me estás diciendo tú.

—Como quieras…

— ¿Qué quieres tu aquí? ¿Acaso me estabas espiando?

—Como si fueses la gran cosa…

Del suéter azul del niño pelinegro se asoma un cobayo, el animal suelta un chillido al ver a Tweek.

— ¿Ese niño feo te asusto, Stripes? —dice Craig.

— ¿Stripes? ¿Qué clase de nombre ridículo es ese? —pregunta con cierta ironía Tweek.

— ¿Estás de bromeando? Stripes es mil veces mejor que Tweek, ni tu nombre ni tu apellido son muy originales, además de que son estúpidos. Stripes es mil veces mejor. —mientras habla, acaricia el lomo del cobayo que no dejaba de observar al rubio y eso logra incomodar a Tweeks.

—Eres un…

— ¿Tonto? ¿Estúpido? ¿Idiota? Tus palabras no me afectan en lo más mínimo, Tweek.

—Tucker…, eres el ser más despreciable que haya conocido en mi vida.

—Gracias por tan hermoso halago, Tweek.

—Ojala tu gato se trague a esa rata…, sería algo divertido ¿sabías?

¡Craig! se escucha a lo lejos. Tucker suelta un 'mierda' y voltea a ver nuevamente al rubio que lo fulminaba con la mirada.

—Me tengo que ir. Mi abuela me llama. Adiós Tweek.

Tucker se da media vuelta y comienza a caminar hacia su hogar. Tweek observa como su 'espía' se alejaba, le saco la lengua infantilmente y dirigió su vista hacia abajo. Ahí se encontraba aquél gato negro.

— ¿Y tú qué quieres?

El gato hizo un movimiento de negación con su cabeza, como si pudiese comprender las palabras del rubio. Este ignoró aquel extraño comportamiento del animal y sintió unas pequeñas gotas caer sobre él.

Genial… su día no pudo haber estado peor. Lo mejor era llegar a casa antes de que sus padres comiencen a castigarlo nuevamente o amenazarlo con cosas de que 'lo venderían' y todas esas cosas tontas…

Continuará…


Historia especialmente dedicada Zoren Zombrio y a Gabi17.

Ahora esta historia al igual que "Sea Lo Que Sea Será" la continuaré cuando terminé "With a Few Good Friends" así que no desesperen o piensen en enviarme pestes en los reviews que sólo faltan cuatro capítulos para terminar W.F.G.F y así tendrán la continuación de este nuevo proyecto. ¿Felices y contentos?

Nos leemos en la próxima actualización.
Shinigami Out.